Capítulo 8
Pov Harry
Despertarse en una habitación ajena ya era raro, más si tenemos en cuenta que uno había sido secuestrado en medio de un lugar público junto a su amiga.
Malditos idiotas, al menos léanse el libro del buen secuestrador y metan a los rehenes en una mazmorra o algo, eso lo haría más interesante.
Después, ¿que mierda es esto?, no era una habitación cualquiera, era una puta habitación más grande que toda la casa de los Dursley entera, pero eso no era lo importante, lo importante era; ¿porque mierdas tenía puesto un traje de gatito sexy -con orejas y cola incluidas- y Yui que estaba al otro lado de la cama iba vestida de enfermera(?) sexy medio puton?, puto/s pervertidos quienes nos hayan secuestrado, decidiendo que y un cojon como un camión iba a quedarme así vestido o al menos quedarme en este sitio, (porque seamos francos para torturar a los 12 imbeciles que tenían que estar buscándonos era un traje divino) busque pistas que me dijeran quien podía ser nuestro o nuestros secuestradores porque dudo mucho que ese gran cartel que pone " esta es la mansión del fabuloso y magnífico Kino" fuera de verdad, quien narices secuestra a alguien, los deja solos y encima dice su nombre en una gran pared para que puedas identificarlo, naaah no creo que sean tan estupidos.
La habitación estaba llena de videojuegos y consolas, konpeitos (?) por todas partes en tarros y ropa tirada como si esto fuera una pocilga, puag.
Desperté a mi más mejor amiga de la forma más linda del mundo, tirándola de la cama de un empujón, nunca dije que fuera delicado, cuando despertó y vio a nuestro alrededor no paro de gemir y lamentarse por su suerte.
-¿Tienes alguna idea de donde estamos?- si sus gemidos lastimeros dijeran algo yo diría que lo sabe demasiado bien.
-En la mansión de Kino Sakamaki, el idiota me secuestró una vez pero como que no funciono, tú sabes no soy buena teniendo síndrome de Estocolmo y gracias a los chicos logré salir de aquí, ahora; el porque también te ha secuestrado a ti, es un misterio- respondió con simpleza la muy hija de su madre.
-Espera, ¿me estás queriendo decir que en realidad si hay alguien tan egocentrico como para tener su nombre en una pared?, ¡¿Enserio?!- estaba alterandome de tanta estupidez junta.
-Sep.
-Ya... bueno, ¿nos vamos?- sin más tire de su brazo y la acerque a mi mientras nos aparecía en medio de la mansión Sakamaki, donde unos 12 vampiros muuuuy alterados se nos quedaron viendo con asombro y algunos incluso con una hemorragia nasal cuando me vieron con dicho traje.
-Me puedes dar una explicación de ¡por que mierdas estás vestido así!. Con los únicos que deberías hacerlo es con nosotros, donde está el puto que te ha vestido de esta manera, voy a despellejarlo y hacerle tragarse sus huevos y pene de golpe- como puedes imaginar esos eran un Reiji, Subaru y Carla muy alterados y celosos, bueno el resto no estaba mejor.
Antes siquiera que pudiera decirle que mierda paso me encontraba en una habitación con 12 vampiros celosos y cachondos a punto de hacerme el sin respeto hasta el desmayo....
Espera, ¡NO!.
¡MI VENGANZA!.
¡JURO QUE ME LAS PAGARÁS KINO SAKAMAKI!.