Navidad, Espejo y No se porque muerdo
En la víspera de Navidad, los gemelos se fueron a la cama, deseosos de que llegara el día siguiente, emocionados por primera vez por la navidad pensando en toda la diversión y comida que los aguardaban, pero sin esperar ningún regalo incluso cuando ambos mandaron regalos.
Harry parpadeo soñoliento ante el techo de aspecto increíblemente caro su mente dormida tardo en recordar que después de las 22:00 Snape los mando a dormir.
Conteniendo un bostezo recuerda como su hermano se le ocurrió la idea de hacer una pijamada por supuesto esto fue negado por Bèl je y Ron.
Golden siendo el, dijo que siempre quiso hacer una pijamada pero nunca pudo por sus tíos y Harry siendo un increíble hermano mayor, también dijo que su primo siempre le presumía a los dos sobre ser invitado a pijamadas y como ellos son fenómenos no lo merecen.
Hansel también agrego bastante alegre que las únicas pijamada (Si eso se puede contar) fueron entre ellos.
Sus palabras causaron efecto, tanto Bèl je como Ron parecían horrorizados, apto seguido Ron empezó a decir las cosas que se hacen en una pijamada, Bèl je se sumó diciendo que juegos se hace en una pijamada.
Harry suelta un quejido cuando el brazo de su hermano golpea su cara, mientras se acariciar la cara para aliviar el dolor escucha movimientos.
Cuando mira de dónde viene resulta siendo Ron quien cabecea adormilado.
Harry ríe divertido por como el pelirrojo tenía todo el cabello parado—Feliz Navidad —saluda sentándose en la cama.
Ron asiente bostezando —Feliz navidad a ustedes también —Dice con pereza frotando su cara contra la peluda sabana.
Ambos niños habla en voz baja empezando a prepararse para el día, cuando Bèl je y Hansel se levantan 15 minutos después ambos se quedan a esperan hasta que ellos terminan.
Una vez listo los cuatro niños caminan hasta la sala común viendo cómo estaba el árbol lleno de regalos
Ambos gemelos miran asombrados, sentándose en el suelo mirando los regalos—¡Mira esto! ¡Nos han enviado regalos! —Dice Harry agarrando un paquete como si fuera cristal.
Ron frunce el ceño—¿Qué esperabas, nabos? —Dijo volviéndose hacia sus propios paquetes.
Harry abrió el paquete que sostenía estaba envuelto en papel de embalar y tenía escrito: «Para Harry y Hansel de Hagrid».
Contenía una flauta de madera, toscamente trabajada. Era evidente que Hagrid la había hecho.
Sonriendo ampliamente Harry sopló y la flauta emitió un sonido parecido al canto de la lechuza.
Le pasó la flauta a su hermano quien la tomo maravillado para alegremente mostrarla a Bèl je quien sonreía tendiendo un regalo para el
Harry ríe cuando Hansel aborda a Bèl je en un abrazo por su regalo que era dos pulsera de flores, negando divertido ignora la estúpida nota de Vernon y Petunia aunque se queda con el dinero.
Agarrar un regalo con su nombre todavía sintiendo sorpresa "Note como te gustaba este libro así que decidí regálate uno propio de Hermione" El libro resultaba ser Quidditch a través de los tiempos, acariciando la portada del libro Harry desea que su regalo también le gustará a Hermione.
Un fuerte grito sobresalta a los tres niños cuando mira de dónde vino resultó ser Ron quien sostenía una nimbus 2000 con la boca abierta de la sorpresa.
Harry suelta una risa por la expresión de Ron —¿Te gusta? ambos estuvimos de acuerdo que sería un buen regalo—Dice apuntando a su hermano quien estaba abriendo otro regalo que contenía un collar de mariposas.
Ron lo miro como si estuviera loco—¿¡Me gusta!? ME ENCANTA, PERO TAMBIÉN ¿¡QUE DEMONIOS POR REGALAR ALGO ASI!?—grita al borde de pánico.
Ambos gemelos se miraron para luego volver su mirada a Ron—Porque si —responden juntos haciendo que Ron suelte un chillido mientras cubre su rostro, ignorando el drama de Ron ambos vuelven a sus regalos.
Harry abre el regalo de Neville estallando en risa cuando resultó ser pines con frases en su opinión increíble todavía riendo le pasa su regalo a Hansel quien de manera inmediata se lo dan a Bèl je.
Draco abre el regalo encontrando dos bonita pulseras, luchando contra una sonrisa mira a Hansel —Gracias me encanta—Dice riendo cuando Hansel lo abraza.
—¡Que bueno que te encanta, espero que te guste los demás!—Dice Hansel animado para soltar a Draco empezando a buscar varias cajas
Draco se ahoga con la saliva—¿¡Lo demás!?—Pregunta sorprendido mirando a Hansel quien lo ignorar agarrando las cajas.
Harry tararea para pasarle su regalo a Bèl je—Toma este es el mío —Dice tranquilo extendiendo una pequeña caja a Bèl je
Draco siente su rostro enrojecer cuando agarra la caja, al abrirla descubre un hermoso collar—¿Porque? no tenías que hacerlo —Dice mirando confundido a Harry.
Harry rasca su mejilla roja—Ni idea, supongo porque quería—Dice riendo torpemente.
Draco bufa apartando la mirada con las orejas rojas—Bueno supongo que fue bueno que también te regalará algo—Dice aburrido tirándole una caja
Harry parpadea desconcentrado agarrando la caja antes de que lo golpee—¡Gracias!—Sonrie ampliamente a ver su regalo.
Cuando Bèl je también le agradece, se escucha un flash y una risa, quien resultó ser Hansel. Que tiene las cajas en una mano y en la otra uno de los regalos de Harry apuntando a lo dos.
Harry siente su rostro rojo al escuchar la risa de Ron también, Agarrando unos de lo regalo se lo tira a la cabeza.
Bèl je copia su movimiento tirando también un regalo antes que Ron pueda quejarse nota que ambos regaló son para el.
Mirando mal a ambos niños, quienes los ignorar para seguir abriendo regalos, suspirando abre uno de los regalo que resulta una gran caja de chocolate a leer la nota se siente extrañamente conmovido "Mí Madre siempre me regala chocolate pensé que te gustaría de Draco Malfoy"
Mira sorprendido al rubio quien lo ignorar diciéndole a los gemelos que no es necesario regalarle algo a su mamá.
Prueba uno de los chocolates sintiendo extrañamente los ojos rojos "Sabe bien..." Se sienta en el sofá para comer algunos más y guardar el resto para después.
Así los cuatro niños abren sus regalos, los gemelos estallan en risa con los regalos de Flint y Wood que resultó ser un peluche de una gran serpiente y un león con dos pequeñas serpiente y León.
Harry mira alrededor de la sala para su gran sorpresa todavía quedaban regalos sin abrir lo más curioso era que algunos no tenía nombre.
Agarrando uno de los regalos sin nombre notó que era muy ligero. Lo desenvolvió. Algo fluido y de color gris plateado se deslizó hacia el suelo y se quedó brillando.
Ron y Bèl je sueltan un jadeo—Había oído hablar de esto —dijo Ron con voz incrédula, dejando caer la caja de grageas de todos los sabores, regalo de Hermione—. Si es lo que pienso, es algo verdaderamente raro y valioso.—Dice el pelirrojo todavía viendo lo que Harry sostienem
Harry mira curioso a lo dos —¿Qué es?—Pregunta Agarrando la tela brillante y plateado.
El tocarlo producía una sensación extraña, como si fuera agua convertida en tejido.
—Es una capa invisible —Dijo Bèl je, con una expresión de fascinación—. Estoy seguro... Pruébatela.—Dice el rubio entusiasmado
Harry levanta las cejas mira a su hermano quien lo mira igual de curioso suspirando se puso la capa sobre los hombros y Ron lanzó un grito.
Tanto Ron como suelta Bèl je un sonido sorprendidos—¡Lo es! ¡Mira abajo!—Harry se miró los pies, pero ya no estaban.
Se dirigió al la ventana para ver su reflejo Efectivamente: su reflejo lo miraba, pero sólo su cabeza suspendida en el aire, porque su cuerpo era totalmente invisible.
Se puso la capa sobre la cabeza y su imagen desapareció por completo.
Hansel levanta un pedazo de papel—Hay una nota—dijo mirando la capa con curiosidad
Harry se quitó la capa y cogió la nota. La caligrafía, fina y llena de curvas, era desconocida para él.
Decía: Su padre dejó esto en mí poder antes de morir. Ya es tiempo de que se le sea devuelto. Utilízalo bien. Una muy Feliz Navidad para ustedes.
No tenía firma. Harry contempló la nota. mientras que Golden, Ron y Bèl je admiraban la capa.
Ron mira la capa con emoción—Yo daría cualquier cosa por tener una —dijo— Lo que sea. ¿Qué te sucede? —Pregunta preocupado
Harry le sonríe —Nada —Dijo, se sentía muy extraño. ¿Quién había enviado la capa? ¿Realmente había pertenecido a su padre?
Antes de que pudiera decir o pensar algo, la puerta de la sala común se abrió de golpe y Fred y George Weasley entraron.
Harry frunce el ceño escondiendo rápidamente la capa mirando a los otro gemelos con desconfianza.
—¡Feliz Navidad!—Dice lo dos tratando de parece los menos agresivos
Draco se colocó en frente de Hansel quien mirada sonriendo a los otros gemelos—No sabía que ustedes eran serpientes ¿que hacen aquí?—Pregunta sarcástico
Uno de ellos sonríe un poco incómodo—Venimos a darle su regalo a Ron —Dice rascando su mejilla
El otro pelirrojo le extiende un regalo a Ron quien desconfiado se acerca para agarrarlo siendo observando por dos serpientes y un león listo para atacar
Cuando quita el envoltorio siente como sus ojos se ponen llorosos, allí está el suéter color rojo oscuro que pensó que nunca iba a volver a recibir.
Los gemelos pelirrojo se alarmaron cuando el más pequeño soltó un sollozo se miraron con pánico cuando sintieron las malas mirada de los otros niños.
Pasos se escucharon acercarse—¿Qué es todo ese ruido? ¿Que hicieron ahora?—Percy Weasley cruzo por la entrada, mirando a los gemelos con desaprobación a notar como Ron llora.
Era evidente que había ido desenvolviendo sus regalos por el camino, porque también tenía un jersey bajo el brazo, que Fred vio.
Ambos pelirrojo ignoraron sus preguntas—¡P de prefecto! Pruébatelo, Percy, vamos, todos nos lo hemos puesto—Dice sonriendo ampliamente
Percy le dan una mirada exasperada—Yo... no... quiero —Dijo con dificultad, mientras los gemelos le metían el jersey por la cabeza, tirándole las gafas al suelo.
Encontrando una excusa para escapar—Y hoy no te sentarás con los prefectos —dijo George—. La Navidad es para pasarla en familia—Agarraron a Percy y se lo llevaron de la habitación, con los brazos sujetos por el jersey.
Los gemelos se miraron confundidos para luego mirar a Ron para consolarlo, pero el pelirrojo parecía querer estar solo, entonces solo por el momento ambos lo ignoraron empezando a recoger los envoltorio y las cajas vacías limpiando lo que hicieron, ignorando la mirada confusa de Draco.
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Los gemelos no habían celebrado en su vida una comida de Navidad como aquélla. Un centenar de pavos asados, montañas de patatas cocidas y asadas, soperas llenas de guisantes con mantequilla, recipientes de plata con una grasa riquísima y salsa de moras, y muchos huevos sorpresa esparcidos por todas las mesas.
Ambos gemelos comieron tanto que tuvieron que ser detenidos por Ron y Draco quienes de alguna extraña manera se pusieron de acuerdo para regañarlos.
Ambos azabaches se quejaron tanto, que terminaron dejarlos comer el postre, aunque solo una vez.
Después de comer los cuatro vuelven a la sala, los gemelos quejándose y arrastrando los pasos con pereza mientras los otros dos se burlaban de ellos
Una vez en la sala fueron a la habitación torperzando entré ellos empezaron a prepararse para irse a dormir.
Una vez listo se acostaron en la habitación de Draco, los gemelos compartiendo cama y los otros dos en las demás.
Harry parpadeo con pereza hacia el techo escuchando los ronquidos de Ron y como Bèl je se movía entre sueño, suspira con cansancio a pesar que sentía sueño no podía dormir.
Frunciendo el ceño se inclinó a un lado de la cama y sacó la capa. De su padre... Aquello había sido de su padre. Dejó que la tela corriera por sus manos, más suave que la seda, ligero como el aire. «Utilízalo bien»,, decía la nota.
Tenía que probarla. Se deslizó fuera de la cama y se envolvió en la capa. Miró hacia abajo y vio sólo la luz de la luna y las sombras. Era una sensación muy curiosa. «Utilízalo bien.»
De pronto, Harry se sintió muy despierto. Con aquella capa, todo Hogwarts estaba abierto para él. Mientras estaba allí, en la oscuridad y el silencio, la excitación se apoderó de él.
Podía ir a cualquier lado con ella, a cualquier lado, y Filch nunca lo sabría.
Harry se gira a ver a Ron se pregunto si debía despertarlo pero algo lo detuvo. La capa de su padre... Sintió que aquella vez (la primera vez) quería utilizarla solo.
Suspirando decidió no despertarlo, se da la vuelta listo para irse cuando algo agarró la punta de su suéter.
Harry se sobresalta, mira hacia atrás viendo a su hermano sentado en la cama mirándolos con sus ojos apagados y confundidos—¿Green? ¿A dónde vas?—Pregunta soñoliento mientras se aferra al peluche que Ron le regaló
Harry duda al principio pensó en mentir pero su mirada se encontró con la cajita música que era su regalo dicha caja todavía sonaba, la mirada de Harry se detuvo en la frase tallada "Siempre estaremos juntos, no lo olvides" grabado en la caja.
Harry siente la culpa golpearlo como una Bludger —Quiero recorrer el castillo ¿quieres venir conmigo?—Pregunta intentando sonreír
Hansel lo mira fijamente por varios segundos—Esta bien, iré contigo—Dice al final sonriendo levantándose de la cama agarrando la manta que le regalaron.
Harry espera que Hansel se ponga zapatos cubriendo a lo dos con la capa, ambos salieron cautelosamente del dormitorio, bajaron la escalera, cruzaron la sala común para salir rápidamente a fuera.
Anduvieron rápidamente por el pasillo. ¿Adónde iría? pensó Harry sosteniendo la mano de Hansel mientras ambos se seguían alejando de la sala común de los Slytherin.
De pronto se detuvo, ignoró la confusión de Golden por el momento, pensando en la sección Prohibida de la biblioteca. Iba a poder leer todo lo que quisiera, para descubrir quién era Flamel.
Se aseguró de mantener la voz baja—Vamos a la biblioteca, quiero investigar algo —Dice tranquilo a Golden quien asiente de acuerdo, así que ajustando la capa y se dirigieron hacia allí.
La biblioteca estaba oscura y fantasmal. Hansel encendió una lámpara para que pudieran ver la fila de libros, Harry tomo la lámpara acercándolo más a los libros.
La lámpara parecía flotar sola en el aire y hasta el mismo Harry, que sentía su brazo llevándola, tenía miedo.
La Sección Prohibida estaba justo en el fondo de la biblioteca. Pasando con cuidado sobre la soga que separaba aquellos libros de los demás, Harry levantó la lámpara para leer los títulos.
No le decían mucho. Las letras doradas formaban palabras en lenguajes que no conocía. Algunos no tenían títulos.
Un libro tenía una mancha negra que parecía sangre. A Harry se le erizaron los pelos de la nuca, tuvo que detener la mano de Hansel quien quiso tocar el libro.
Tal vez se lo estaba imaginando, tal vez no, pero le pareció que un murmullo salía de los libros, como si supieran que había alguien que no debía estar allí.
Tenían que empezar por algún lado. Dejó la lámpara con cuidado en el suelo y miró en una estantería buscando un libro de aspecto interesante.
—¿Que estás buscando?—El susurro de Hansel lo sobresalta
Está vez Harry no duda—Algo sobre un tal Nicolás Flamel—Dice examinando los libros, de reojo nota como Hansel asiente para también empezar a buscar
De repente a Harry le llamó la atención un volumen grande, negro y plateado. Lo sacó con dificultad, porque era muy pesado y, balanceándose sobre sus rodillas, lo abrió.
Un grito desgarrador; espantoso, cortó el silencio... ¡El libro gritaba! Harry lo cerró de golpe, pero el aullido continuaba, en una nota aguda, ininterrumpida.
Retrocedió y chocó con Hansel quien tropezó con la lámpara, tirándola haciendo que se apagó de inmediato. Aterrados, oyeron pasos que se acercaban por el pasillo, metió el libro en el estante y salieron corriendo.
Ambos pasaron al lado de Filch casi en la puerta, y los ojos del celador; muy abiertos, miraron a través de ellos.
Apretado su agarre en la mano de Golden, Harry hizo que se agachara para pasar con rapidez por debajo del brazo de Filch y siguieron por el pasillo, con los aullidos del libro resonando en sus oídos.
Se detuvieron de pronto frente a unas armaduras. Había estado tan ocupado en escapar de la biblioteca que no había prestado atención al camino.
Tal vez era porque estaba oscuro, pero no reconoció el lugar donde estaba. Había armaduras cerca de la cocina, eso lo sabía, pero debía de estar cinco pisos más arriba.
Una voz repentina asusta a lo dos—Usted me pidió que le avisara directamente, profesor, si alguien andaba dando vueltas durante la noche, y alguien estuvo en la biblioteca, en la Sección Prohibida.—Harry sintió que se le iba la sangre de la cara.
Filch debía de conocer un atajo para llegar a donde ellos estaban, porque el murmullo de su voz se acercaba cada vez más y, para el horror, de ambos el que le contestaba era Snape.
—¿La Sección Prohibida? Bueno, no pueden estar lejos, ya los atraparemos.—Dijo Snape serio
Harry se quedó petrificado sosteniendo con fuerza la mano de Hansel, mientras Filch y Snape se acercaban.
No podían verlos, por supuesto, pero el pasillo era estrecho y, si se acercaban mucho, iban a chocar contra ellos, la capa no ocultaba su materialidad.
Retrocedieron lo más silenciosamente que se pudo a la izquierda había una puerta entreabierta era su única esperanza.
Se deslizaron, conteniendo la respiración y tratando de no hacer ruido. Para el alivio de ambos entraron en una habitación sin que los notaran.
Ambos gemelos se apoyaron en la pared respirando profundamente, mientras escuchaba los pasos que se alejaban.
Habían estado cerca, muy cerca. Transcurrieron unos pocos segundos antes de que se fijara en la habitación que se habían ocultado.
Parecía un aula en desuso. Las sombras de sillas y pupitres amontonados contra las paredes, una papelera invertida y apoyada contra la pared de enfrente... Había algo que parecía no pertenecer allí, como si lo hubieran dejado para quitarlo de en medio.
Era un espejo magnífico, alto hasta el techo, con un marco dorado muy trabajado, apoyado en unos soportes que eran como garras.
Lo más curioso era la inscripción que tenía una grabada en la parte superior: Oesed lenoz aro cut edon isara cut se onotse.
Se relajaron a ya no oir a Filch ni a Snape, con curiosidad ambos se acercaron al espejo, pero no vieron su imagen reflejada.
Ambos niños palidecieron cuando vieron lo que el espejo reflejaba
Habia... mucha gente detrás de ellos pero la habitación está vacía, miraron detrás de ellos, había al menos otros diez
Harry miró por encima del hombro, pero no había nadie allí. ¿Eran todos invisibles? ¿Estaban en una habitación llena de gente invisible y la trampa del espejo era que los reflejaba, invisibles o no?
Miró otra vez al espejo. Una mujer, justo detrás de su reflejo, le sonreía y agitaba la mano. Inconcientemente Harry levantó una mano y sintió el aire que pasaba.
Si ella estaba realmente allí, debía de poder tocarla, sus reflejos estaban tan cerca... Pero sólo sintió aire: ella y los otros existían sólo en el espejo y de alguna manera no poder tocarla dolía...
Examinó más a la mujer queriendo saber si la vio en alguna parte ella era muy guapa. Tenía el cabello rojo oscuro y sus ojos... sus ojos, Harry vio los mismos ojos cuando se mira en el espejo.
Hansel se acerca al espejo para tocarlo con cuidado—Está llorando ¿porque?—Dijo Hansel confundido
Harry inclino la cabeza mirando con atención el espejo. Golden tenía razón, la mujer pelirroja estaba llorando sonriendo y llorando al mismo tiempo.
El hombre a su lado de pelo negro que estaba a su lado le pasó el brazo por los hombros con una expresión triste
Los gemelos examinaron ambas personas con un poco de duda —¿Mamá? —susurró—¿Papá?—Dijeron al mismo tiempo, ambos adultos en el espejo asintieron.
Estaban mirando a su familia por primera vez en su vida. Los Potter sonrieron y agitaron las manos, y Harry como Hansel permanecieron mirándolos anhelante, con las manos tocando el espejo, como si esperarán poder pasar al otro lado y alcanzarlos.
Harry no pudo evitar sentir tanto tristeza como alegría al poder verlos, sentándose en el suelo justo a lado de Hansel ni siquiera notaron de cuánto tiempo estuvieron allí.
Solo miraban y miraban, hasta que un ruido lejano los hizo volver a la realidad. No podían quedarse allí, tenían que encontrar el camino hacia el dormitorio.
Apartaron los ojos de sus padres Volveré dijeron juntos para salir apresuradamente de la habitación.
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Estaba sentado con Ron en la mesa de los leones a petición de los gemelos Weasley, su hermano también fue invitado pero se negó.
Ron lo mira curioso—Podías haberme despertado —dijo frunciendo un poco el ceño.
Harry murmura una disculpa—....Puedes venir esta noche. nosotros vamos a volver; Podemos enseñarle el espejo—Dice apuntando a Hansel quien habla animado con Bèl je.
Ron asiente—Me gustaría ver a tu madre y a tu padre —dijo Ron con interés.
Ron inclina la cabeza pensativo —Que lástima que no hayas encontrado nada de Flamel en la biblioteca —Dice en voz baja — ¿No quieres tocino o alguna otra cosa? ¿Por qué no comes nada? ¿Harry?—Pregunta preocupado
Harry hace una mueca, no podía comer. Habían visto a sus padres y los vería otra vez aquella noche. Casi se había olvidado de Flamel. Ya no le parecía tan importante. ¿A quién le importaba lo que custodiaba el perro de tres cabezas? ¿Y qué más daba si Snape o Quien sea trata de lastimarlos?
—¿Estás bien? —preguntó Ron—Te veo raro...—Dice frunciendo el ceño.
Harry sonríe obligándose agarra una tostada para no preocupar al pelirrojo —Estoy bien, no te preocupes —Dice comiendo lentamente mientras pensaba, lo que más temía era no poder encontrar la habitación del espejo.
Aquella noche, con Ron, Hansel y Bèl je tuvieron que ir todos pegados cubierto por la capa, tuvieron que andar con más lentitud.
Trataron de repetir el camino desde la biblioteca, vagando por oscuros pasillos durante casi una hora.
Ron suspira—Me estoy congelado —se quejó por lo bajo—. Olvidemos esto y volvamos— Bèl je asiente de acuerdo.
Ambos gemelos niega—¡No! —susurró Harry—Sé que está por aquí.—Dice Harry buscando la puerta.
Pasaron al lado del fantasma de una bruja alta, que se deslizaba en dirección opuesta, pero no vieron a nadie más.
Justo cuando Bèl je lose quejaba de que tenía los pies helados, Hansel divisó la pareja de armaduras.
Hansel ríe alegre —¡Es allí!...—Abrieron la puerta. Harry dejó caer la capa de sus hombros y corrió con Hansel hasta el espejo.
Allí estaban. Su madre y su padre sonrieron felices al verlos.
Harry mira a Ron y Bèl je—¿Ves? —murmuró Harry.
Draco frunce el ceño desconfiado—Tal vez sea un objeto oscuro...—Dice manteniéndose alejado del espejo.
Ron se acerca un poco dudoso—No puedo ver nada.—Mira al espejo donde se refleja el y los gemelos.
Harry señala al espejo—¡Mira! Míralos a todos... Son muchos...—Hansel asiente de acuerdo con el.
Ron rasca su mejilla, mira de reojo a Malfoy quien se mantiene al costado cruzado de brazos mirando el espejo con desconfianza—Sólo puedo verlos a ustedes—Dice el pelirrojo frunciendo el ceño.
Ambos gemelos lo mira confundidos—Pero mira bien, vamos, ponte donde estoy yo.—Dice Harry dando un paso a un lado, Hansel también se aparta dejando a Ron solo frente al espejo.
Ron jadeo sorprendido a mirar su imagen—Oh... ¿como?—dijo con los ojos llorosos estirando una mano para tocar el espejo.
Draco frunce el ceño examinando al pelirrojo—¿Que ves?—Pregunta desconfiado
Ron trago saliva —Veo a mí familia.... a mí mamá orgullosa con los colores de Slytherin —Dice con la voz temblando—¿Crees que este espejo muestra el futuro?—Pregunta con esperanza.
Draco negó mirando de reojo a los gemelos —No lo hace...—El señala las palabras talladas— Oesed lenoz aro cut edon isara cut se onotse—El inclina la cabeza leyendo— No muestro tu rostro sino el deseo de tu corazón....Este espejo muestra lo que más deseas tu corazón—Dice frunciendo el ceño preocupado.
Los tres niños se quedaron en silencio, eso explicaba bastante la cosas, pero incluso sabiendo esto, los gemelos deseaban seguir viendo el espejo.
Harry da un paso al frente —..Yo quiero... déjame mirar de nuevo...—Ron y Bèl je lo miran con tristeza mientras Hansel solo miraba el espejo con seriedad
Ron no retrocede—No creo que sea una buena idea Harry/Potter—Dicen en unísono Ron y Draco.
Harry mira al espejo—Solo será un momento joder...—Dice apretado la mandíbula molesto.
Ron niega—No voy a moverme—Dice serio cruzado de brazos
Harry frunce el ceño se acerca para mirar el espejo apartando a Ron, Hansel también da un paso en frente preocupado pero el agarre de Draco lo detiene de avanzar.
Ron hace una mueca—No me voy alejar—Dice con dificultad para no ser apartando del espejo
Las discusión de ambos sube de tono en un momento Draco se acerco para detenerlos, Hansel rascaba su cuello preocupado por la pelea.
Un súbito ruido en el pasillo puso fin a la disputa No se habían dado cuenta de que hablaban en voz alta.
Hansel rápidamente agarró la capa—¡Rápido!—tiró la capa sobre ellos justo cuando los luminosos ojos de la Señora Norris aparecieron en la puerta.
Los cuatro permanecieron inmóviles, todos pensando lo mismo: ¿la capa funcionaba con los gatos? Después de lo que pareció una eternidad, la gata dio la vuelta y se marchó.
Ron suspira de alivio—No estamos seguros... Puede haber ido a buscar a Filch, seguro que nos ha oído. Vamonos—Dice Ron empujado levemente a Harry para que salieran de la habitación.
Draco asiente jalando de la mano a Hansel quien miraba el espejo.
A diferencia de antes los cuatro caminaban en un total silencio, una vez llegando a la puerta de la sala común de los Slytherin, Harry se separó, Hansel le siguió después de despedirse de Draco y Ron.
Por primera vez desde que empezó las vacaciones y desde que llegaron a Hogwarts Harry y Hansel no durmieron en las habitacion de los Slytherin.
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La nieve todavía no se había derretido a la mañana siguiente. Harry decidió sentarse en la mesa de Gryffindor, era la primera vez desde que empezó la vacaciones que se sienta ahí.
Le había dicho a Hansel que podía sentarse con Malfoy y Ron que no era necesario estar con el pero su hermano se había negado a irse
Uno de los gemelos Weasley decidió romper el silencio que había en la mesa—¿Estás bien Harry? ¿Acaso pelearon con Ron y Malfoy —Pregunto Fred manteniendo la voz baja.
Harry le sonrío cansado y agradecido a los gemelos pelirrojos que mantenía la voz baja a ver como Hansel dormía apoyado en su hombro.
Hansel no había dormido en toda la noche cuando le pregunto dijo con algo de miedo que caras borrosas no querían que el estuviera ahi.
Harry estaba confundido pero rápidamente llego a la conclusión que es un nuevo miedo de su hermano, como el miedo que desarrollo a los triángulos (Especialmente amarillos) después de escuchar sobre conspiraciones de sus hermanos mayores.
Harry mira la deliciosa comida sin ganas de probar un bocado—Estamos bien...no paso nada—Dice en voz baja
George frunce el ceño dejando un vaso de jugo frente suyo—¿Quieres que te acompañemos a visitar a Hagrid?—pregunta a su lado Fred asiente
Harry niega levemente—No es necesario, vayan ustedes —Dice obligándose a tomar el jugo Ignorando las miradas de Ron y Malfoy.
Los gemelos pelirrojos se miraron con dudas para luego mirar sobre su hombro, notando como Ron comía con una expresión triste mientras Malfoy solo tocaba su comida inexpresivo.
Por primera Fred hablo con seriedad—Sea lo que sea que piensas hacer no lo hagas Filch, Snape y la Señora Norris andan vigilando por ahí—George a su lado asiente con seriedad.
El día paso lentamente para Harry quien no le hablaba a Ron ni a Malfoy, al llegar la noche Harry estaba listo para ir de nuevo hasta la habitación con Golden.
Pero Malfoy de algún modo entró a la sala común de Gryffindor para agarrar a su hermano sin dejar que vaya con el, diciendo sobre no permitir que una serpiente se acerca a un probable objeto oscuro.
Ron también trato de convencerlo de no ir pero fue inútil no funcionó, Harry demasiado enojado con todos se fue sin querer discutir con nadie.
Encontro el camino más rápidamente que las veces anteriores. Andaba más rápido de lo que habría sido prudente, porque sabía que estaba haciendo ruido, pero no se encontró con nadie. Y allí estaban su madre, su padre y su hermano sonriéndole otra vez con ojos brillantes, y el suponía que era uno de sus abuelos quien lo saludaba muy contento.
También estaban Hermione, Ron Neville y Malfoy....Harry se dejó caer al suelo para sentarse frente al espejo mirando con atención y anhelo.
Nadie iba a impedir que pasara la noche con su familia. Nadie. Excepto...—Entonces de vuelta otra vez, ¿no, Harry? aunque está vez estás sin tu hermano —Dice una repentina voz sonando por todo el salón
Harry sintió como si se le helaran las entrañas. Miró para atrás. Sentado en un pupitre, contra la pared, estaba nada menos que Albus Dumbledore.
Harry hizo una mueca, debió de haber pasado justo por su lado, estando tan desesperado por llegar hasta el espejo que no había notado su presencia.
¿De vuelta? ¿acaso el viejo sabía que ellos estuvieron acá? piensa desconfiado—No... no lo había visto, señor.—Dice manteniendo la voz tranquila.
Dumbledore lo mira sereno—Es curioso lo miope que se puede volver uno al ser invisible —dijo Dumbledore, y Harry no se sintió aliviado al ver que le sonreía—. Entonces —continuó Dumbledore, bajando del pupitre para pararse a lado donde Harry estaba sentado en el suelo.
—Tú, como cientos antes que tú, has descubierto las delicias del espejo de Oesed.—Dice como si tuviera tratando una lección.
Harry frunce el ceño—No sabía que se llamaba así, señor.—Mira de reojo al anciano ligeramente aliviado de que Hansel no viniera con el.
—Pero espero que te habrás dado cuenta de lo que hace, ¿no?— Dumbledore pregunto mirando con atención al espejo
Harry hizo una mueca—Bueno... me mostró a mi familia y...—No pudo terminar de hablar cuando es interrumpido por el viejo.
Dumbledore asiente levemente—Y a tu amigo Ron lo reflejó aceptado por su madre—Dice en un tono compresivo
Harry miro de reojo desconfiado por anciano ¿esto fue planeado por el?—¿Cómo lo sabe...?—Pregunta sintiendo alivio de que su hermano ni los chicos estén con el.
—No necesito una capa para ser invisible —dijo amablemente Dumbledore—. Y ahora ¿puedes pensar qué es lo que nos muestra el espejo de Oesed a todos nosotros?—Pregunto el mirando a Harry quien negó con la cabeza.
El anciano sonrío compresivo—Déjame explicarte. El hombre más feliz de la tierra puede utilizar el espejo de Oesed como un espejo normal, es decir, se mirará y se verá exactamente como es. ¿Eso te ayuda?—Dice mirando el espejo con un extraño brillos en sus ojos.
Harry pensó. Luego dijo lentamente—Nos muestra lo que queremos... lo que sea que queramos...—Dice frunciendo el ceño.
—Sí y no —dijo con calma Dumbledore—. Nos muestra ni más ni menos que el más profundo y desesperado deseo de nuestro corazón. Para ustedes, que nunca conocieron a su familia, verlos rodeándolos.—El anciano tarareo pensativo.
— Ronald Weasley, que tuvo una disputa con su madre por su casa, se ve siendo aceptado por ella—Dice sonriendo tranquilo.
De repente el tono de voz del viejo se torna serio—Sin embargo, este espejo no nos dará conocimiento o verdad. Hay hombres que se han consumido ante esto, fascinados por lo que han visto. O han enloquecido, al no saber si lo que muestra es real o siquiera posible—Dice mirando el espejo con seriedad.
Dumbledore dejo de mirar al espejo para mirarlo—El espejo será llevado a una nueva casa mañana, Harry, y te pido que no lo busques otra vez. Y si alguna vez te cruzas con él, deberás estar preparado.—Dice en un tono compresivo de abuelo.
—No es bueno dejarse arrastrar por los sueños y olvidarse de vivir, recuérdalo. Ahora ¿por que no te pones de nuevo esa magnífica capa y te vas a la cama?—Pregunta sonriendo amable
Harry se puso de pie, se pregunto brevemente como sabía de la capa.—Señor... profesor Dumbledore... ¿Puedo preguntarle algo?—Dice dejando de ver el espejo para mirarlo
—Es evidente que ya lo has hecho —sonrió Dumbledore—. Sin embargo, puedes hacerme una pregunta más.—Dice en un tono alegre.
Harry mira con atención al anciano—¿Qué es lo que ve, cuando se mira en el espejo?—Pregunta curioso.
Dumbledore suelta una risita—¿Yo? Me veo sosteniendo un par de gruesos calcetines de lana.—Dice sonriendo ante la mirada asombrada de Harry.
—Uno nunca tiene suficientes calcetines —explicó Dumbledore—. Ha pasado otra Navidad y no me han regalado ni un solo par. La gente sigue insistiendo en regalarme libros.—Dice en un tono triste, Harry no pudo evitar soltar un bufido.
Dumbledore soltó una risa el tuvo la amabilidad de acompañarlo hasta la sala común en caso de encontrarse con algún maestro o Filch.
Al entrar en la sala se encontró con la extraña vista de su hermano llorando mientras Ron y Malf.... Bèl je intentanban consolarlo.
Su hermano quien a verlo se lanza contra el para abrazarlo terminando lo dos en el suelo soltando una ligera risa Harry da palmaditas al cabello de Hansel con cuidado de no tirar ninguna flores.
Harry intenta entender los balbuceos de Hansel sobre el espejo y que lo lamenta por no darse cuenta de cómo hace daño porque le gusta verse completo.
Murmurando palabras tranquilizadora levanta la vista al escuchar paso viendo a Bèl je y Ron acercarse a el mirándolo con cuidado.
Harry sonríe culpable y triste —Lo siento Bèl je y Ron, ustedes estaban preocupados, y yo no debí comportarme así, fui cruel y un mal amigo...yo no se porque muerdo—Dice con arrepiento mientras tararea una melodía tranquila para su hermano que lo sigue abrazando.
Draco se relaja a ver como Harry volvió a la normalidad — Está bien, sabemos lo lamentas y que te comportabas así por el espejo—Dice sonriendo aliviado al escuchar el apodo de nuevo.
Ron asiente de acuerdo jalando de la mano de Draco para abrazar a los gemelos—Draco tiene razón, no te culpamos Harry sabemos que no querías comportarte asi—Dice riendo a notar las orejas rojas de Draco cuando ambos gemelos le devolvieron el abrazo.
Harry sonrió aliviado abrazando con fuerza a Bèl je, riendo cuando Hansel aprieta demasiado su brazos alrededor de Ron haciendo que se ponga azul.
Casi todos estuvieron de acuerdo en hacer una pijamada aunque Draco se quejo sobre estar en la guarida de los leones.
Así los cuatro niños trajeron mantas y almohadones para dormir contado historia, después de media hora Fred, George y Percy siendo arrastrando por los gemelos pelirrojos se unieron a ellos.
Atraída por la risas y gritos la profesora McGonagall llego a la sala común, ella no dijo nada a ver a las serpientes, solo regaño a todos ordenando que vayan a dormir.
En cuanto Harry estuvo acurrucado con Hansel en unas de las tantas mantas y almohadones se le ocurrió pensar que tal vez Dumbledore no había sido sincero y si de algún modo el planeo que encontrará el espejo para darle una lección.