La muerte de los dioses

Star Wars - All Media Types The Mandalorian (TV) Moon Knight (TV 2022)
F/M
M/M
Other
G
La muerte de los dioses
author
Summary
La pelea por la Tierra ha comenzado y los dioses no parecen encontrar respuestas.Irónicamente, las mismas, están en una Galaxia muy, muy lejana.
Note
Culpo a don Pedro por esto, en ese video falopa en el que se reía porque Oscar había dicho que Moonknigth era más fuerte que Din. No me pude sacar de la cabeza esa idea y aquí está.Como siempre, les recuerdo que no soy una autora de base inglesa, por lo que habrán errores de ortografía y gramática, tampoco soy especialista en Egipto y los personajes le pertenecen a sus propios autores, yo no percibo ingreso por esto y sólo lo escribo para divertirme y entretener a otros.
All Chapters Forward

Al otro lado del portal

Layla inspiró profundamente y usando como punto de apoyo la pared, pateó el costado de la reja.

Este, tal y como había predecido, debido a los años que tenía, se separó de la pared lo suficiente como para dejar una rendija por la que, fácilmente, podría escapar.

_¡Espera! – exclamó el avatar de Horus sujetándole el brazo - ¿Adónde crees que vas?

La mujer bajó su mirada a la mano del tipo sobre su piel y luego volvió a levantarla para fijarla en los ojos ajenos.

No necesitaba demasiada explicación para saber que el hombre que tenía enfrente iba a intentar una tontería, a razón de no estar en sus cabales.

Evidentemente, al ser abandonado por Horus, cuando Ammit cortó la unión de los avatares con la mayoría de los dioses, había afectado el cerebro del rubio. Al principio sólo se había mostrado desorientado y asustado, lo que no le había parecido anormal, pero ahora tenía el rostro desencajado y la mirada de aquellos que están atravesando por una situación de privación de consumo de alguna sustancia.

No le extrañaba.

Marc y Khonshu tenían una relación similar.

Y, aunque nunca lo había dicho, siempre había temido que el día que su esposo dejase de usar el traje, algo similar le pasará.

Negó con la cabeza entonces, no iba a poder razonar con alguien así.

_¡Te estoy preguntando algo! ¡Responde!

Le gritó nuevamente el rubio sacudiendo con fuerza el brazo de Layla. Más, antes de que pudiese intentar algo más, la mujer egipcia cerró su puño sobre la empuñadura de sus dagas – collar y moviendo su mano libre con rapidez, le produjo un corte al otro en la muñeca que hizo que este la soltara, lo que aprovechó para escabullirse por entre la reja y la pared.

_¡Vuelve! ¡Vuelve! ¡Maldita sea!

Exclamaba el ex avatar del dios cabeza de halcón a las espaldas de Layla, mientras se alejaba apresuradamente por el pasillo.

Tenía que encontrar a Marc y Steven.

Tenían que detener a Ammit.

 

-----------------------------------------------------------------------------------------------------

 

Khonshu sintió cuando el cántico comenzó.

Una brisa suave trajo las palabras.

Las voces de los avatares de Hathor y Anubis pedían por su libertad.

El dios sonrió al escuchar que, a la voz de la mujer, se le había unido la de un niño.

Y después le decían desquiciado a él.

Anubis estaba muy mal.

Pero, suponía que, no podía señalar a nadie respecto del tema de la locura, porque toda su existencia había sido un desafío a la sanidad.

Ni tampoco podía criticar al dios cabeza de chacal por haber elegido a un descendiente suyo, porque… él también debería considerar a los propios de ahora en más.

Kebechet.

Agua fresca.

Hathor había sido en extremo audaz.

Le había refregado en la cara a su esposo, hasta el lugar de la concepción de la hija de ambos a través de su propio nombre.

Tebas.

El templo.

Las aguas del Nilo.

Recuerdos de otro tiempo en el que, en pleno debate sobre el destino de los dioses, la mirada de Hathor se había posado en la suya y el resto, como decían los mortales, había sido historia.

Khonshu golpeó entonces con su cayado la arena sobre la que se encontraba uniendo su voz a la del niño y a la de la mujer.

No iba a perder esta oportunidad que le entregaba el destino.

Ni Ammit, ni Harrow, ni Horus, ni Anubis, ni nadie, iban a privarlo de su libertad y de la posibilidad de conocer a su hija.

Nadie.

 

--------------------------------------------------------------------------------------------

 

El dios cabeza de chacal sostuvo sus manos por sobre la cabeza de Grogu y de Yatzil, cantando como ellos, mientras dejaba que estos utilizaran sus poderes para quebrar la prisión de Khonshu.

Era imperativo que el dios de la luna saliese del ushabti.

Ammit había crecido demasiado en poder y, por lo que podía percibir, había logrado encarcelar a los dioses que no estaban aún aprisionados en sus estatuillas por la Ennead, en el vacío, cortando el link que los unía a la tierra mortal.

Sólo se había salvado él, por estar en su Galaxia en el momento del combate y Hathor, porque había logrado huir.

Por lo que no podía contar con refuerzos.

Tenían que lograrlo.

Los ojos de Anubis refulgieron en la oscuridad de la cámara, mientras pequeñas grietas comenzaron a verse en el ushabti de Khonshu y una voz profunda y desafiante salió de sus entrañas.

El dios de la luna se les había unido.

 

-----------------------------------------------------------------------------------------

 

_¿Skywalker?

Escuchó Luke al atravesar el portal y se encontró conque tenía al padre de Grogu a un costado suyo.

_¿Din? – le preguntó asombrado - ¿Qué haces aquí?

_¿Qué haces tú aquí? – le cuestionó como respuesta el Mandaloriano - ¡Este sitio es peligroso!

_¡Con más razón!– volvió a responderle el Jedi colocando sus manos en jarra en su cintura - ¡Sí es peligroso no deberías estar aquí!

_Escucha Jedi…

_No, escúchame tú a mi…

_Ehemmm… Luke, cariño, no es que… no apreciemos este intercambio, pero… ¿estás seguro de qué este es el lugar para discutir con el caballero al que no conocemos y me gustaría que nos presentarás?

Le dijo su hermana y el Maestro Jedi, por primera vez después de cruzará esa puerta a otro mundo, se percató de que estaba muy acalorado medio gritándose con el padre de Grogu, delante de toda una audiencia.

_Este es tu Layla, ¿verdad? – le preguntó un extraño hombre completamente vestido de blanco a Din – Es un lindo chico.

_¿Qué? – le contestó Din moviendo sus manos enfáticamente - ¡No! ¡No es lo que parece! ¡Es el Maestro de mi hijo!

_Lo que le da todo un nuevo significado a ir a buscar al niño a la escuela, eh

_Han…

_Después de lo que acabamos de ver, dime que no tengo razón, Leia

_Si no digo que no, pero tratemos de no espantar a mi nuevo cuñado.

Oh, por la Fuerza, ¿dónde había un pozo profundo cuando se lo necesitaba?

¡Su hermana y su esposo acababan de tratar de cuñado a Din!

¡Al padre de Grogu!

¡De su alumno!

¡Y el… amigo o compañero de este parecía creer algo similar!

_Oigan…

Comenzó a decir Luke sintiendo que las mejillas le ardían, pero Han le ganó de Mano.

_Solo. Han Solo – le dijo el piloto del Halcón Milenario a Din extendiéndole la mano - ¿Y tú eres?

_Din Djarin

Le contestó el Mandaloriano correspondiendo al saludo, lo que hizo que su cuñado sonriese de oreja a oreja.

_Amigo, deja que te presente entonces a mi esposa, la hermana del Maestro Jedi, Leia Organa-Solo

Como era de esperarse, Leia se acomodó el cabello y se adelantó para también estrechar la mano de Din.

_Manda’lor, bic cuyir an ijaat at urcir gar (Manda’lor, es un honor conocerlo)

 

-----------------------------------------------------------------------------------------------

 

“Este es el peor momento para conocer a la familia de tu pareja, definitivamente, pero… no puedo decir que no es entretenido de ver Steven”

Afirmó Marc y el ex vendedor del museo ahogó una risita al ver como el chico rubio encapuchado tenía la tonalidad de un tomate y balbuceaba tratando de detener a quien, si había entendido bien, eran su hermana y su cuñado.

_Princesa – le contestó el guerrero plateado a la mujer inclinando su cabeza - te ijaat cuyir pal'vut

“¿Qué acaba de decir?”

Le preguntó Marc extrañado.

_No estoy seguro porque puedo afirmar que no es un idioma terrestre pero, por contexto, podría casi asegurar que ella le dijo que estaba encantada u honrada de conocerlo y él le contestó que el honor era suyo

Comentó Steven en voz alta, lo que provocó que el rostro de la mujer se girase y que la misma le clavase la mirada fijamente.

El caballero de la luna tragó saliva.

El guerrero plateado le había llamado “Princesa”.

La mujer era una persona de alcurnia y, no hacia falta demasiado, para comprender que, también era alguien muy sagaz.

_¿A qué Dios sirves?

Le preguntó la Princesa a Steven.

_Khonshu, señora

Le contestó apresuradamente el ex vendedor hincando su rodilla en el piso.

“¡Steven! ¡¿Qué demonios estás haciendo?!”

_Cállate – masculló al escuchar a Marc – La mujer es de la realeza y no de la Tierra

“¡Pero no es una princesa del medioevo, Steven! ¡Estás haciendo el ridículo!”

_Ey, amigo – le dijo el esposo de la mujer acercándose e inclinándose hasta verlo a los ojos directamente – Mi nombre es Han. Han Solo. General en la Galaxia. ¿Cuáles son sus nombres?

_Steven… y Marc

Respondió asombrado de que el hombre le preguntase por ambos.

_¿Amigos o enemigos de…? ¿Cómo se llamaba tu abuelo amor?

_Anubis

_Teniendo en cuenta de que son el avatar de Khonshu y de que Anubis está liberándolo en estos momentos, diría que amigos, Alteza

Le explicó a la mujer y a su esposo el Mandaloriano.

Forward
Sign in to leave a review.