sweet sweet cliché

Yoonji se aseguraba de que las cuerdas de su bajo estuvieran afinadas cuando un chillido histérico la hizo desconcentrarse y mirar con extrañeza a la dueña del grito.

Jin miraba su celular con mejillas rojas y pánico en sus ojos.

—¡Está aquí, ya llegó!, ¿Qué hago, qué hago?—

—ve a abrirle primero que todo— la pelimenta respondió obvia.

—¡No puedo ir sola! ¡lo arruinaré! ¡además esta ni siquiera es mi casa!—

—¡Bien! Voy contigo, pero por favor deja de gritar— Junko gruño y se levantó del banco frente a su batería para acompañar a la pelimorada.

Hyeok y Yoonji esperaron ahí tan solo un par de minutos hasta que...

—¿Qué tienes?— la pelirroja preguntó al ver a Junko bajar la escalera con rapidez, sola.

—vino con amigas... Una de sus amigas es Taehee—

—¿Cómo que vino con amigas?— la pelimenta se acercó— espera ¿cómo que vino con Taehee?— se quejó.

Genial, ahora serían dos las bobas enamoradas.

—no sé lo que pasó. Fui con Jin a abrir la puerta y al abrir estaban una castaña de lentes, Taehee y una pelinegra—

—¿Y la saludaste?—

—claro que no, Hyeok, en cuanto la vi salí corriendo—

—¿Saliste corriendo?—

—¿Qué más querías que hiciera?—

—¿actuar como alguien normal?—

—¿¡Cómo esperas que sea normal si...?!—

—aquí es— se escuchó la voz de Seojin y luego cuatro chicas bajando por la escalera.— aquí es donde hacemos... La magia, si podemos decirle así— rió.

—qué hay— Junko murmuró recargándose en la pared más cercana. Yoonji se aguantó una carcajada.

—ellas son mis amigas y compañeras de banda; la pelirroja es Hyeok, nuestra guitarrista, la peliazul es Junko, nuestra baterista y la pelimenta es Yoonji, nuestra bajista—

—es un gusto— Hyeok saludó con una sonrisa.

—chicas, ella es Namyeon— señaló a la castaña— y ellas son sus amigas Taehee y Jimin— apuntó respectivamente a cada una...

Y la vio.

Yoonji vio a la chica más hermosa que pudo ver en toda su vida. Su cabello negro caía hasta su espalda en pequeñas ondas, sus ojos eran pequeños y su maquillaje era de una bonita sombra rosa pálido y un delineado suave, con pequeñas flores de un rosa más oscuro alrededor. Sus labios... Sus labios brillaban, estaban rosas y se veían suaves y apetecibles, jodidamente apetecibles.

Al verla, la pelinegra le sonrió y saludó con la mano, haciendo a Yoonji enrojecer y devolverle el saludo con un tímido asentimiento.

—bueno...— Jin murmuró después del denso silencio que se formó ante las intensas miradas.— creo que es hora de ensayar, ¿no?—

—ensayar...— Yoonji murmuró sin recordar bien qué significaba esa palabra. Cuando Junko golpeó su brazo con sutileza volvió a la realidad— ¡Ensayar! Sí, claro... ¿Cuál quieres cantar?— preguntó a Seojin a sabiendas de que la pelimorada probablemente querría elegir su propia cancion para impresionar a la chica castaña.

—el cover— respondió. Hasta el momento, tenían tres canciones originales y un cover de "crazy", cancion de Aerosmith.

Yoonji se quejó durante toda una semana porque justamente esa era la canción más romántica de Aerosmith y, sí, sus amigas lo hicieron solo para molestarla, pero la verdad es que lo hicieron tan bien la primera vez que decidieron seguir practicándola y presentándola.

Sin duda alguna el cover era el que mejor les salía, así que agradecía la elección.

Se prepararon rapidamente, tomaron sus instrumentos (tres de ellas con nerviosismo) y después de una respiración profunda... Junko comenzó a tocar.

Jin comenzó a murmurar las palabras del inicio con voz profunda, pero delicada. El inglés se le dificultaba al hablar sin duda alguna, pero al momento de cantar todo se volvía mucho más fácil, por eso interpretar esta canción le era sencillo; debían modificar un poco la velocidad y el tono ya que su voz era un poco más aguda que la de Steven Tyler, pero su habilidad vocal era amplia, sobre todo porque se especializaba en el rock, por lo que podía hacer muchas de las tecnicas de la canción original.

—Say you're leaving on a seven thirty train and that you're heading out to Hollywood— cantó mirando directamente a la castaña frente a ella— Girl, you've been givin' me that line so many times it kinda gets like feeling bad looks good, yeah—

Yoonji miró a la bonita pelinegra directamente. Era hermosa, paralizantemente hermosa y... Tierna...

Ella, por lo general, no se inclinaba tanto por las chicas tiernas, le gustaban más aquellas que podían ofrecerle un lío; esas que sabía que jamás se quedarían, las que le mostraban toda una aventura y luego se iban.

Sí, su vida amorosa era un desastre.

—That kinda loving turns a girl to a slave, that kinda loving sends a girl right to her grave—

Su mirada recorrió a Jimin de pies a cabeza y sonrió.

I go crazy, crazy baby, I go crazy
You turn it on
Then you're gone
Yeah, you drive me crazy
Crazy, crazy for you baby

La miró mientras coreaba la palabra "crazy" junto a Junko.

What can I do, honey?
I feel like the color blue
You're packing up your stuff
And talking like it's tough
And trying to tell me that it's time to go, yeah!
But, I know you ain't wearin' nothing underneath that overcoat
And it's all a show, yeah!

Y la miró mientras tocaba los acordes que sabía de memoria.

That kinda loving
Makes me wanna pull down the shade, yeah!
That kinda loving, yeah
Now I'm never, never, never gonna be the same

Yoonji estudió con delicadeza cada expresión avergonzada, cada mirada rápida que le dedicaba antes de bajar la vista.

What can I do, honey?
I feel like the color blue
I'm losing my mind, girl
'Cause I'm going cra...

Y guiñó su ojo a la pelinegra al percibir el sonrojo que crecía en sus mejillas, dejando a Hyeok hacer su solo

I need your love, honey, yeah!
I need your love...

Fue al minuto después que la canción finalmente terminó, dejando a las tres chicas invitadas completamente impresionadas.

—eso fue increíble— Nam fue la primera en halagar con pequeños aplausos— son fantásticas, todas... Sobre todo tú, Jinnie— murmuró lo último con un tierno sonrojo, sabiendo que la mayor había cantado para ella en todo momento. Por supuesto que lo notó.

—no estuvieron mal...— Taehee murmuró— me parte favorita fue la voz, cantas muy lindo, SeoJin— le sonrió amablemente— ustedes también lo hicieron increíble, chicas— dijo mirando a Yoonji y Hyeok, saltándose a Junko a propósito. Cuando recibió un codazo discreto por parte de Jimin suspiró— también tú— soltó mirando al suelo. Junko sonrió.

Eso era algo.

—a mi me encantó también— Jimin sonrió acomodando su cabello, su mirada pegada en la pelimenta— son muy talentosas—

—muchas gracias— Hyeok sonrió notando la tensión entre las seis otras chicas— es nuestro orgullo, cantar "crazy" siempre es divertido—

—¿y tienen otras canciones?—

—sí, tenemos tres originales, aunque aún tenemos que ensayarlas más— la pelirroja respondió cortésmente a Taehee.

Pronto se tomaron un descanso de diez minutos donde Taehee, Hyeok y Junko se enfrascaron en una conversación que Yoonji no estaba escuchando ni le interesaba escuchar (aunque si era divertido ver como la rubia y la peliazul se dirigían únicamente a Hyeok, la cual trataba de responder como si estuviera en una conversacion normal y no en dos distintas), Namyeon y SeoJin se fueron a una esquina más apartada a hablar de quién-sabe-qué y... Las únicas en silencio eran ella y Jimin; la pelinegra miraba su celular mientras ella jugaba un poco con los controles de volumen y tono de su bajo.

 —hola— una repentina voz se escucho cerca de ella y vio algo espantada a Jimin sentada junto a ella con una enorme sonrisa— Yoonji, ¿no?—

—sí, exacto— sonrió— tu eres Jimin—

—lo soy— sonrió— umh... ¿Qué hacías?—

—jugaba un poco con el tono— respondió demostrando su punto, Jimin se vio fascinada.

—¿sabes mucho sobre el bajo eléctrico? ¿lo tocas hace mucho?—

—desde los doce años— sonrió pensando la primera vez que tomó un bajo eléctrico.

Su vida siempre estuvo rodeada de música ya que su padre era un músico, por lo que sabía tocar la guitarra desde niña, al igual que el piano y, luego, el bajo. Tocaba otros instrumentos también, pues para ser tan solo una joven de discisiete años era casi una genio musical.

O al menos eso le decían sus amorosos padres.

—y tienes diecisiete, ¿no?— al ver a Yoonji asentir jadeó— llevas cinco años tocando el bajo—

—exacto— rió— aún estoy aprendiendo de hecho—

—¿cómo es posible? llevas cinco años aprendiendo—

—bueno, siempre hay algo nuevo que aprender— se encogió de hombros— es emocionante ya que jamás puedes asegurar que sabes "de todo", jamás te aburres porque siempre hay algo nuevo que aprender—

—eso suena interesante, yo jamás he tocado un instrumento— dijo tocando nerviosamente sus manos— siempre quise aprender, pero nunca se dio la oportunidad—

—uh ¿por qué no?—

—soy algo timida a decir verdad— sonrió— sobre todo hace un año, así que la idea de meterme a un curso me asustaba. Tampoco tenía demasiado dinero para comprar algún instrumento y aprender por internet y mis padres no estaban... De acuerdo con que yo me enfocara en eso... Así que, sí...—

—a veces pasan esas cosas— Yoonji rió— tengo una guitarra aquí, si te interesa... Puedo prestartela y así te familiarizas un poco y ves si te gusta... Ta-también debe estar mi teclado por ahí, umh... Tambien hay un violin, y-yo...—

—me encantaría— sonrió.

Yoonji asintió y se levantó con prisas, dejando suavemente el bajo en el soporte y trayendo al poco tiempo una bonita guitarra acustica negra con detalles dorados.

—es hermosa...— sonrió al tomarla. Yoonji le ayudó a colgar el instrumento sobre sus hombros.

—lo es— sonrió— mira, esta es una guitarra acustica de seis cuerdas, ¿si? Para tocarla lo primero que debes saber es que así— dijo tomando suavemente su mano y dejando su pulgar sobre las cuerdas, luego hizo una pequeña presión para que la chica bajara su mano— es el rasgado más simple— 

La chica se vio sinceramente alucinada con el sonido.

—y luego debo aprender los acordes, ¿no?— la pelimenta asintió.

—eso es un poco más complicado, pero con práctica continua lo conseguirás... Si quieres puedo ayudarte con...—

—Yoon— la pelirroja llamó con una sonrisa culpable— lamento interrumpir, pero acabó el descanso...—

—claro...— sonrió tensa— umh, debo ir... Pero tu puedes seguir viendo la guitarra y los instrumentos que te plazcan, no hay problemas, la mayoría son míos— 

—gracias— Jimin sonrió tiernamente al ver a la chica ruda tan nerviosa.

Presentía que algo bueno saldría de aquí.

═══════════════════. ❀cinco meses después✿ .═══════════════════

—Ji... ¡Jiminnie!— Yoonji llamó en un grito, jugando con el piercing que se había hecho en la lengua el año pasado para poder esconderlo de sus padres y maestros.

La pelinegra sonrió achicando sus bonitos ojos brillantes y se encaminó con sus amigas siguiéndola confundidas.

Estos cinco meses ambas chicas no habían dejado de verse; hablaban pequeños ratos en los recesos, se juntaban después de clases para que Jimin aprendiera a tocar guitarra y aveces, como hoy, Yoonji le gritaría a Jimin durante el almuerzo para que comieran juntas... Con todas las demás.

—eres una perdedora— Junko se burló al ver a su amiga tan entusiasmada por Jimin. Yoonji la fulminó con los ojos.

—Taehee viene con ellas, idiota—

—¿¡qué?!— preguntó y presa del pánico comenzó a arreglar su cabello con sus manos y a limpiar con cuidado las comisuras de sus labios por si había algún rastro de comida.

Estaban en la cafetería y ella disfrutaba de comer exageradamente; nunca le preocupó como se vería ante los ojos de los demás, pues Taehee la detestaba así que la posibilidad de que se acercara como ahora era nula.

—que lesbianas son— la pelirroja se burló comiendo un trozo de carne. Jin rió.

—uh, ¿ahora eres homofóbica?—

—¡claro que no!—

—lo que dijiste sonó muy lesbofóbico para mí, Hyeok— burló alzando una ceja. La chica gruñó.

—¿cómo podría si a mi también me gustan las...?—

—Yoonji— la voz dulce de Jimin interrumpió la pelea— hola... ¿Podemos sentarnos con ustedes?—

—claro que si— Yoonji sonrió corriendo un poco más su silla para que Jimin pudiera poner otra junto a ella.

Las tres chicas se acomodaron, una a regañadientes, y comenzaron a comer su almuerzo en silencio.

—eso se ve delicioso— dijo mirando el plato de la pelinegra mientras ponía una mano sobre el respaldo de la silla de la menor.

Una ventaja de pasar tanto tiempo juntas es que Yoonji finalmente se sentía ella misma otra vez; No se ponía tan nerviosa junto a la menor (al menos ahora podía disimularlo) y podía coquetear libremente con ella.

—oh, lo está, mi madre lo hizo para mí, ¿quiere probar un poco?— preguntó sonriendo y tomando un poco de su comida para ofrecerla a Yoonji; la pelimenta abrió la boca y Jimin, con un gran sonrojo, alimentó a la mayor.

La pelimenta amaba los sonrojos de Jimin. Procuraba hacerla sonrojar seguido.

—mmmh...— Yoonji saboreó con una sonrisa— está realmente delicioso— halagó mirando a la pelinegra.

—mamá se pondrá muy feliz de saber que te gustó— dijo avergonzada.

Yoonji no pudo desperdiciar la oportunidad— invítame a comer y puedo decirle personalmente a tu madre que tiene unas creaciones divinas— mordió su labio esperando que Jimin captara la indirecta.

Por supuesto que Jimin lo hizo, pues su respuesta inmediata fue bajar la vista y sonrojarse. La mayor sonrió.

—oh, ustedes son las de "heaven's door"— una chica de ropas oscuras interrumpió el intento de coqueteo de ambas chicas— ¿es cierto que se presentarán en un bar la semana que viene?—

—lo es— Yoon sonrió ante el reconocimiento— supongo que irás a vernos, ¿no?—

—¡claro! dicen que se llenará, pero lograré estar en primera fila para verlas— dijo recargándose ligeramente en la mesa, mirando a la pelimenta con especial atención— ¿tendré algún trato especial por estudiar en la misma escuela?—

Yoonji carcajeó— tendré que pensarlo—

—esperaré una respuesta positiva entonces...—

—¡gracias por escucharnos!— Hyeok interrumpió mirando de reojo a la pelinegra encogida en su sitio— es un honor que nos reconozca gente de nuestra escuela, si te vemos en la presentación podemos firmarte algo o invitarte un trago— sonrió esperando que eso sonara lo suficiente a una despedida.

Lo hizo.

—c-claro... Muchas gracias, tocan genial— dijo rápidamente antes de alejarse. Yoonji miró a su amiga con confusión.

—¿por qué la echaste?—

—es que es de mala educación hablar con alguien teniendo la boca llena— sonrió falsamente— y muchas aquí tenemos la boca llena, Yoon, así que mira a tu alrededor antes de hablar de esa manera con posibles fans—

La pelimenta la miró aún sin comprender, sintiéndose mucho más confundida cuando la pelinegra se levantó con algo de agresividad.

—umh, la pasé muy bien comiendo con ustedes, pero me temo que debo irme. Necesito e-estudiar y esas cosas, así que... Adiós— fue una despedida rápida antes de que todas vieran estupefactas la veloz salida de la menor.

—ella tiene razón, debemos ir a estudiar, así que nos vemos luego— la rubia fue la siguiente en levantarse.

—¿qué debemos estudiar? pensé que teníamos el fin de semana libre—

—te equivocaste, debemos estudiar, ¿recuerdas?— miró a su amiga casi con amenaza y luego tomó su bandeja de comida y el plato de la pelinegra— gracias por recibirnos, nosotras nos vamos, ¡adiós!— se despidió haciendo una seña a su amiga y casi corriendo fuera del lugar después.

Yoonji fue consciente (por desgracia) de la rápida mirada de desprecio que Taehee le dedicó antes de salir del lugar.

—¿yo provoqué eso?— preguntó a sus amigas con nerviosismo en su voz.

—por si no fue obvio, sí— fue Junko la que respondió a su pregunta con una risa.

Jimin era complicada. Demasiado complicada.

Para ser tan joven, Yoonji tenía una filosofía de vida bastante marcada; la música era su prioridad, por supuesto, pero si podía gozar de los privilegios de la fama ella era feliz con eso.

Los privilegios de la fama era tener a la chica que quisiera sin compromisos ni emociones tormentosas que podían afectar a su prioridad número uno.

Sí, la fama también atraía hombres, pero ella era abiertamente lesbiana y su atención siempre se iría a las chicas lindas que no esperaban nada serio con ella.

Es por eso que la situación con Jimin a veces le abrumaba; era obvio que la pelinegra quería algo serio con ella y tal vez Yoonji también lo quería así ¡pero no sabía como comportarse! esto era demasiado nuevo para ella.

—no logro entenderlo, Yoon ¿Jimin te gusta o quieres con ella lo mismo que con las otras chicas?— Seojin preguntó genuinamente curiosa.

—uh... ¿No lo sé?— dijo a modo de pregunta. Sus tres amigas bufaron— ¡de verdad no lo sé! esto es muy nuevo para mi, nunca había estado con alguien que en verdad quisiera algo serio...—

—debes tener cuidado con las cosas que haces si quieres mantener a Jimin cerca— Hyeok aconsejó, metiendo una cucharada de comida a su boca antes de seguir— esa chica quiere algo serio contigo y no le debe hacer mucha gracia verte coqueteando con otras en su cara—

—¡eso lo se!— gruñó— solo que... Jimin me agrada bastante ¿de acuerdo? y creo... Solo creo que puedo sentir a esas mierdas... De colores con alas... No recuerdo el nombre...—

—mariposas—

—esas cosas. Creo sentir esas mariposas en mi cada vez que la veo, pero yo jamás había sentido eso y no se cómo actuar—

—¿tal vez no coqueteando con otras chicas frente a ella?— habló ahora la peliazul. Yoonji rodó los ojos.

—gracias, Sherlock... Sé que no debería coquetear con otras, solo no se como hacerlo; estoy demasiado acostumbrada a comportarme así y olvido que Jimin no siente lo mismo que las otras chicas con las que he estado— se quejó poniendo una mano en su frente y cerrando sus ojos.

—siempre puedes hablarlo con ella— la mayor aconsejó— quizás si sabe que quieres intentarlo con ella será más comprensiva... Pero hazlo más tarde, cuando no esté tan enojada contigo—

—tienes razón— y suspiró— trataré de hacerlo...—

═══════════════════. ❀~✿ .═══════════════════

—ugh!— Jimin chilló pateando una piedrita en el suelo. Estaban en el patio, esperando pacientemente a que Jimin se sintiera un poco más calmada luego de la escenita en la cafetería— ¡la odio! ¿en qué me vine a meter? ¡todo es culpa de Namu!—

—¿mía?— la chica entreabrió los labios con indignación— ¿cómo en el mundo podría ser esto mi culpa?—

—¡por tu culpa conocí  a Yoonji!— la apuntó con el dedo— si no nos hubieses pedido ayuda para tu boba cita con Seojin unnie en el sótano de Junko yo no hubiese conocido a Yoonji y nada de esto estaría pasando— se cruzó de brazos y puchereó.

—no es culpa de Namyeon, Minnie— "gracias" respondió la castaña enseguida— ¡es culpa de Junko!—

—¿en qué mundo sería Junko la culpable?— Jimin preguntó con una ceja alzada. Taehee rodó los ojos.

—el sótano era de ella, duh— dijo como si fuera obvio.

—no...— la pelinegra suspiró— se que esto es mi culpa... Nadie me obligó a querer intentar algo serio con una maldita jugadora— murmuró sentándose en una banca. Sus amigas se sentaron junto a ella— es solo que... Me gusta esa maldita jugadora demasiado— se quejó recostando su cabeza en el hombro de la castaña.— estoy triste...— murmuró con un puchero y lágrimas inundando sus ojitos. Sus amigas la abrazaron con fuerza.

—no te preocupes, Jiminnie, seguramente fue un error de Yoonji... Se nota que le gustas, no creo que quiera a otra—

—además, tu eres la irremplazabe Park Jimin, ¿quién podría querer elegir a cualquier otra persona por sobre ti?—

—Yoonji quiere— dijo con un puchero— es tan complicado con ella... Cuando estamos solas parece tener solo ojos para mi, como si fuera lo más bonito a sus ojos y no deja de tomar mis manos o acariciar mi rostro... Luego estamos con otras personas y es como si el hechizo se desvaneciera—

—quizás es una fuckgirl— Namyeon dijo pensativa. Taehee carraspeó.

—o solo no sabe expresarse en público— consoló la rubia— de todas formas, creo que es algo que deberían hablar seriamente—

—tienes razón— accedió levantando su cabeza del hombro de la castaña— eso haré—