Gemas [IronStrange]

Némesis miro a los presentes...

-- Todo comenzó cuando...

El Que Esta Por Encima De Todo era el ser más poderoso y quien creo a todo lo que vemos. Pero este Ente, a pesar de haber creado Miles de vidas para que vivan en los pocos planetas que acababa de crear, se sentía solo. 

Así que decidí crear pequeños entes y darles una parte de su poder para que no se extingan como aquellas vidas fugaces. El también les dio un propósito.

La primera en ser creada fue Clokwadi, una ente risueña y de gran imaginación que podía crear cualquier cosa gracias a la materia oscura. Todo lo que deseara, lo obtenía aunque pareciera imposible porque para ella era real.

Rúm y Asmer fueron creados casi al mismo tiempo, con segundos de diferencia. Ambos dotados de magia pero con propósitos diferentes. Rúm manejaba el espacio, creando portales entre mundos, y era un ente travieso. Asmer, por su parte, manipulaba el tiempo capaz de ralentizarlo o acelerarlo a su antojo así como viajar a través de el.

Ischys, el cuarto, se le fue otorgado el poder, el cual le daba una fuerza ilimitada capaz de acabar cualquier ser o incluso un planeta. Era un ente relajado y humilde, pero tenía lapsos violentos que se apagaban después de una matanza.

El quinto fue nombrado Verstrand, el ente que no podía entender las emociones pero aceptaba gustoso los afectos que sus nombrados hermanos le daban. Su poder venía de la mente que le daba la capacidad de controlar la mente de otros seres y podía emitir fuertes explosiones.

El sexto y el último en ser creado fue Soul, quien le daría a cada creación un alma aunque también podía quitarla si lo deseara. Sin embargo, Soul era un ente de bondad que creía en segundas oportunidades.

Estos seis Entes fueron los hijos prodigios del Que Esta Por Encima De Todo.

Pero pronto el creador se dio cuenta de algo, el equilibrio no estaba balanceado porque los entes eran más de bondad que de crueldad y decidió crear a otro ser.

Lo nombró Ego, un ente que no necesitaba de los otros entes para actuar.

Porque El Que Esta Por Encima De Todo cometió un error. Le dio más poder y, cuando lo estaba creando, solo tenía pensamientos sobre el equilibrio sin saber que eso ayudaría a que Ego obtuviera una personalidad oscura... cruel y con la bondad oculta detrás de una sonrisa amigable.

Mientras los primeros seis Entes estaban juntos y se querían de manera fraternal, Ego estaba solo vagando por las galaxias que se iban creando.

En soledad, con las sombras susurrando comentarios oscuros y maliciosos.

Preguntándose mas de una vez, ¿Cuál era su propósito?

Era poderoso, no necesitaba a los demás para actuar y tenía instintos destructores... El deseo de destruir todo pero tenía también instintos protectores, de crear pero Ego no deseaba eso.

Porque Ego estaba solo, todos se alejaban de él por su aura a pesar de la sonrisa amigable de su rostro, porque su aura era oscura y corrompida.

Despreciando a su creador, Ego decidió que no debía seguir nombrándose así.

Después de mucho tiempo pensando en un nombre perfecto para él, lo encontró cuando observo como un pueblo fue masacrado en venganza porque habían matado a la adolescente querida de un pueblo con más poder.

Venganza.

Escucho muchas veces aquella palabra, según entendió su significado era un desquite contra entre una persona o un grupo de personas en respuesta a una mala acción percibida. Era un equilibrio.

Ego sonrió, mostrando sus perfectos dientes.

-- Némesis... -- Susurro, le gusto como el nombre se deslizaba fácilmente entre su lengua --.

El nombre Ego estaba ligado a la percepción del yo, el nombre Némesis estaba ligado a la venganza y al equilibrio.

El segundo nombre estaba ligado a lo que tenía en mente El Que Esta Por Encima De Todo, porque había creado a Ego... a Némesis para ser lo contrario a la bondad que habitaba en los otros seis Entes.

Soul era un ente bondadoso, pero la curiosidad era más fuerte en él. Razón por la cual seguía escapándose del planeta en el cual vivía juntos con sus hermanos.

Le gustaba ver como las almas de los seres se iban formando para convertirse en lo que quieran ser. A veces, se entristecía al saber que muchas almas se oscurecían y se llenaban de maldad. La alegría de ver a pequeños niños inocentes era lo que le alejaba de la tristeza que se formaba en su pequeño corazón.

Frunciendo el ceño, Soul sintió una aura oscura y maligna. Se sintió enfermo, débil.

La preocupación se noto en sus ojos tono ámbar cuando sintió algo más en aquella aura.

Soledad.

Tristeza.

Dolor.

Angustia.

Principalmente, Soul solo cerraría los ojos y se alejaría de aquellas almas corruptas porque su corazón dolía pero esta vez no lo hizo, algo le instaba a ir hacia ese ser. A paso lento, tembloroso, se fue acercando al ser que emitía esa aura.

Tarareando para sí, Némesis detuvo su caminar. Admiro con maravilla las plantas que lo rodeaban, tan distintas entre si y tan unidas, encontrando un lugar para llamar suyo.

La sonrisa se convierte en una línea. Se sintió tonto por sentirse celoso de unas simples y patéticas plantas que no tenían emoción alguna.

A punto de irse de aquel planeta, unos pasos llamaron su atención. Girando, sus ojos azul hielo se conectaron con los ámbar de la otra persona. La cual le sonrió antes de caer al suelo...

O lo hubiera hecho, si Némesis lo hubiese permitido.

Moviéndose con rapidez tomo al más pequeño entre sus brazos, sintiéndole temblar.

Némesis se arrepiente de haber cuidado de aquel pequeño de ojos ámbar, era una plaga molesta. Sabía que era un Ente, el sexto para ser preciso y quien daba alma a los seres... aunque pensaba que su don debía ser el de fastidiar.

Porque desde el primer encuentro, Soul lo seguía como un cachorro a pesar de que, notoriamente, él le causaba malestar.

La carita desanimada del Soul era dolorosa de ver para su familia. Nadie, ni siquiera Verstrand que era el favorito o Asmer que era su amor  pesar de que ninguno de los dos se confeso todavía  logro sacarle el porque de su estado.

Hasta que una tarde, después de una semana desaparecido, Soul apareció... dormido, siendo llevado al estilo nupcial por un ser... ente con mala cara y notoriamente furioso.

-- Ten -- Gruño el desconocido prácticamente tirando a Soul a brazos de Asmer --. Dile que me deje en paz.

Más tarde, luego de una larga charla con Soul, entendieron su necesidad de estar al lado de Némesis.

Algunas veces, Némesis se pregunta si esto era un castigo del creador porque no encontraba otra explicación.

O tal vez fue maldito, debería preguntarle a Rúm o a Asmer...

¡Infiernos!

Sin poder evitarlo, Némesis golpeo su frente contra la corteza del frondoso árbol.

¿Por qué simplemente no lo dejaban en paz?

-- ¡Némesis! -- La energética voz de Clokwadi se escucho --. Ya esta listo el- ¿Por qué te estas golpeando la cabeza contra el árbol? -- Pregunto confundida --. ¿Es algo de guerreros?

-- Hum... No lo sé -- Resonó la voz de Verstrand, sonando más confundido que la dama --. Deberíamos preguntarle a Ischys.

-- ¡Buena idea! -- Estuvo de acuerdo Clokwadi, se acerco a Némesis y lo jalo del hombro --. ¡Vamos, Némesis, ya organizamos todo para la comida! ¡Espero que te guste lo que cocine con ayuda de Soul y Verstrand!

-- Déjenme solo -- Rogo, siendo ignorado por los otros dos --.

Al final se termino acostumbro a sus locuras.

Cada uno se metió muy adentro de su piel, arrastrándose lenta y sutilmente que solo se dio cuenta de que los quería cuando se atrevieron a atacar a Rúm y a Soul. Sabía muy bien que los dos podía defenderse, aunque Soul evitaba mayormente los enfrentamiento, pero vio rojo ante la posibilidad de que se lastimaran.

Eran suyos... Sus hermanos para proteger.

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