
Miedo
Venom no entendió qué ocurrió consigo mismo cuando dejó atrás a Anne. La idea era ir a visitar a Eddie, todo estaba planeado, la mujer había hablado con su ex pareja sobre el deseo de Venom de verlo. Eddie aceptó con la condición que los echaría fuera del departamento al menor indicio de amenaza por parte de Venom.
A minutos de la llegada Venom la ansiedad fue en aumento, imaginando los posibles escenarios, ninguno agradable, cuando estaban subiendo las escaleras cada paso de la mujer aproximándose era un tortura, una que lo asfixiaba hasta que al fin no pudo con ello y se desprendió en automático del cuerpo de Anne , quien grito su nombre varias veces, consternada por lo que acaba de ocurrir
Venom estuvo varias semanas vagando por las calles de la ciudad, resguardándose en los cuerpos de las ratas que rondaban en la basura, a las que iba cambiando cuando estas perecían, evitaba tomar cuerpos humanos por temor a ser encontrados .
Venom se avergonzaba de haber escapado de ese modo, pero no se atrevía a regresar, la idea de encontrarse con Eddie y que lo despreciara lo aterraba.
Una noche al vagar por la ciudad con el cuerpo del roedor, Venom pudo detectar con sus agudos sentidos un aroma familiar, era Eddie, pero al escuchar la voz del humano de inmediato se ocultó detrás de un montón de cajas.
Venom contempló al doncel, que estaba deteniéndose en un banco a acomodar la despensa que había comprado, mostraba una faz agotada, lucia agotado, con un mirar caído que denotaba su cansancio acentuándose con aquellas ojeras marcar el rostro de Eddie.
Las orejas del roedor se alzaron en alerta al escuchar unos pasos, un hombre, se acercaba lento hacia Eddie, sacando un arma, Venom emitió un chillido lleno de ira, y corrió en dirección al sujeto, mordiendo con sus colmillos de roedor la pierna de este. El hombre gritó de dolor y se sacudió al animal dándole una patada, a la vez había advertido a Eddie del intruso dándose cuenta del peligro corría más con el arma que el extraño había dejado caer
El doncel tomó sus bolsa de la despensa y le golpeó con ella al sujeto, pero el hombre le devolvió el golpe en el rostro, cayendo en el suelo Eddie que en todo momento protegió su estómago mas cuando el hombre se puso encima suyo y empezó a forcejear intentando taparle la boca evitando que gritara.
Venom se liberó del cuerpo de roedor y se arrastró todo lo que pudo hasta los dos hombres, hasta estar contacto con el cuerpo de Eddie, adhiriéndose una vez más a su anfitrión, en automático su forma humanoide de simbionte emergió del cuerpo de Eddie, el sujeto quiso escapar pero el simbionte lo sujetó del cuello, el alienígena mostró mantenía una expresión severa, apretando cada vez más el cuerpo de este, miró unos momentos cuando el móvil de asaltante callo al suelo mostrándose una foto donde Eddie entraba a su departamento . Venom no necesitaba preguntar que este sujeto ya tenía planeado a atacar a su pareja, los motivos a ala pareja de Eddie no le interesaban, solamente deseaba borrarlo de la existencia así que de un bocado le arranco la cabeza del hombre
El cuerpo de Eddie regresó a la normalidad pero sintió su estómago revolverse por el sabor de ella sangre en su paladar que de inmediato terminó vomitando, ahora estaba sudando y empezaba a tener una respiración agitada.
— Eddie— .Dijo Venom— Ya estas a salvo.
— Sí dijo Eddie— encorvados hacia adelante apoyándose de sus rodillas con las palmas de su mano, mientras intentaba tomar aire.
— Regresaste—.Comento Eddie
Aunque fue una coincidencia el simbionte estaba agradecido de poder proteger a Eddie, pero la culpa no se fue ya que si no hubiera escapado esto no tendría que haberlo vivido su pareja.
Un tentáculo emergió y acarició el rostro de Eddie, luego otro se posó en la espalda del doncel.
— No debí dejarte Eddie.
— No debiste actuar como un idiota— recrimino Eddie— Pero yo fui quien te hecho, llamare a Ann para que nos recoja y te lleve de regreso.
— No nos iremos, te protegeremos
— Eres un riesgo Venom para nosotros— Eddie tomó aire y dijo con tristeza — No los quieres me lo has demostrado mas de una vez
— Pero Eddie, mira, es cierto está en mi naturaleza ver a esas crías como una amenaza, pero lucharé contra ella solamente por ti.
Eddie mostró una pequeña sonrisa, sabia que Venom era sincero, pero temía equivocarse para estarse poniendo en peligro solamente por un momento de flaqueza, pero amaba a Venom.
— Lo pensaré, pero todavía volverás a casa de Ann...— El doncel guardó silencio unos momentos y luego miró a Venom.
— ¿Si Eddie?
— Gracia por protegernos
Un sentimiento de orgullo lleno al simbionte y respondió el gesto depositando un beso en el costado de la cabeza de Eddie
— De nada cariño.