
Dentro del corazon
El primer sentimiento que tuvo Sakura al ver a Sarada en la puerta de casa, fue preocupación. Su hija se veia triste, sus ojos estaban rojos y su sonrisa forzada.
-¿Estas bien, Sarada?.
-Si mamá.- asintió pasando a casa de sus padres.- Kawaki no fue a cenar y no queria hacerlo sola.
Fueron hasta el comedor, donde se encontraba Sasuke, que al verla compartió miradas con su esposa; el tambien se percató.
Le dio la misma excusa a su padre. Sasuke decidio no insistir.
Cenaron juntos, en un silencio extraño para ellos.
Los padres Uchiha le echaban vistazos cada tanto preocupados.
Sarada comia por obligacion, porque asi como tenia un nudo en la garganta, tambien lo tenia en el estomago.
"¿Como pude lastimarlo asi?"
No esperaba que Boruto, su mejor amigo y compañero, estuviera enamorado de ella. Debió ser muy doloroso verla con alguien más, le debia doler cada vez que la veia con su hermano.
¿Por que no se dio cuenta? Ella sabia y se sentia especial para el, pero siempre creyó que era un amor de amigo, al fin y al cabo se conocian desde su nacimiento. Nunca se le pasó por la cabeza ser amada por el.
-¿Quieres quedarte esta noche?.- preguntó Sakura.- Puedes usar tu antigua habitacion.
-Claro. ¿Te ayudo con el lavado?
-No te preocupes, ve a descansar.
De igual manera lo iba a proponer, no tenia cabeza para ver a Kawaki.
¿Deberia contarle sobre la aventura que tuvo con Boruto?
Entró en su antigua habitación, sintiendo calidez en su pecho. Estaba todo como lo habia dejado.
Se sentó en la cama y abrazó sus piernas. Dirigió la vista hasta la foto que tenia en su ventana.
El equipo 7.
La sonrisa de Boruto se llevó toda la atención.
¿En esos años el ya la amaba?.
Se sintio nostálgica, se sintio niña de nuevo, y la Sarada niña cuando pensaba en Boruto, se sonrojaba.
Ella si le correspondia.
-¿Sarada?.- Sasuke tocó la puerta.- ¿Puedo pasar?.
-Adelante.
Sasukeentró y cerró la puerta tras el. Se sentó al final de la cama, a los pies de Sarada.
-Sabes que puedes hablar conmigo de lo que sea. Puedes confiar en mi.
Sarada lentamente se movió hasta acostarse y apoyar la cabeza en el regazo de Sasuke.
-Hice llorar a Boruto.- ella misma dejo salir sus primeras lagrimas.
Sasuke acaricio el cabello de su hija.-Lamentablemente todos lastimamos alguna vez a las personas que queremos, es inevitable, muchas veces lo hacemos sin intención.
-Odio lastimarlo y tengo miedo de que me odie por ello.
Ese miedo era inmenso, con solo pensarlo la invadía una tristeza paralizante. ¿Cómo podría vivir sabiendo que Boruto la odiaba?
-Eso es absurdo, Sarada. Boruto jamás te odiaría.
-Es que lo conozco, papa. Si Boruto lloro es porque le dolió mucho, el no llora tan fácilmente y si lo hizo...
-Es porque lo hiciste tu; una persona importante para el. Por ese mismo motivo el no te odiara. Por eso tranquilízate y descansa, mañana o cuando estés lista, iras hablar con el.
-No se si sea correcto hablar con el.- bufo ahora preocupada.- Kawaki... a el también lo lastime, aunque no lo sepa. Si yo veo a Boruto, seguiré fallando a mi novio.
-Sarada.- Sasuke la ayudo a levantarse lentamente, para mirarla.- ¿Quieres contarme que esta pasando?.
Ella inmediatamente desvió sus ojos a su regazo, apretó sus puños. Le avergonzaban sus acciones, ahora viendo las cosas desde otra perspectiva, se daba cuenta de lo mal que había actuado. Traiciono a su novio con su hermano, le fue infiel incontables veces y solo no sintió ningún tipo de arrepentimiento hasta ese momento. Por otro lado, aunque sin saberlo hirió a Boruto que la amaba y lo arrastro a también traicionar a su hermano.
Había sido deshonesta, mentirosa, infiel, desconsiderada y egoísta. Aun así, a quien tenia frente de ella, era su padre y el la escucharía sin juzgarla.
Se lo conto con pocos detalles, el seguía siendo su padre y no quería que se enterase de su vida sexual. Sin embargo el no parecía sorprendido.
-¿Amas a Kawaki?
-Claro que si.- dijo como si fuera obvio.
-¿Amas a Boruto?
Sarada frunció el ceño y asintió.
-Si, es mi mejor amigo.
-Ahora piensa y siente aqui.- toco su propio pecho, justo donde esta el corazón- Sin pensar en lo que dirán los demás, sácate de encima lo que puedan causar tus sentimientos y el peso de a quien lastimaras. Quita de ti todo eso y respóndete que tipo de amor tienes hacia Kawaki, que tipo de amor sientes hacia Boruto, que es lo que realmente quieres tu. Solo allí esta la respuesta a todo esto.
Sasuke se puso de pie y acaricio la cabeza de su hija.
-Hagas lo que hagas, siempre tendrás mi apoyo y tambin el de tu madre.
-Gracias papá.
Al quedarse sola, Sarada cerro sus ojos y llevo ambas manos a su pecho. Lo primero que vio fue a Boruto sonriéndole.
El y su radiante sonrisa.
Intento que su imagen estuviera acompañada de la amistad que tenían, el los momentos que compartieron juntos , en esos preciados recuerdos que comparten desde que nacieron, pero estos hicieron latir su corazón un poco mas rápido. Sarada apretó los ojos, con esfuerzo para que su novio apareciera.
"Kawaki"
Ella tenia planes con el, como el casarse, tener hijos, vivir en una casa mas grande que sea de ambos y no solo de el; una que tenga el emblema Uchiha en todas partes. Sin embargo estos pensamientos no la emocionaban, no la llenaban de ilusión ni hacían sonreír. Parecían sueños vacíos, ajenos.
Como si se tratara de una broma Boruto ocupo su mente otra vez. Sarada si tenia un sueño que cumplir con el. Ella quería ser Hokage y el día que asumiera, quería que el la observara desde atrás, como la sombra del Hokage, pero sabia perfectamente que ella se daría la vuelta y miraría esos ojos azules llenos de orgullo. De repente se imagino a Boruto dando pasos hacia adelante hasta ponerse a su lado y tomarle la mano.
"Te amo Sarada"
"Y yo te amo a ti, Boruto"
Abrió los ojos y se puso de pie rápidamente. El palpitar de su corazón parecía querer sacarlo de su pecho, el calor de su mejilla quemaba y la sensación de su estomago solo le indicaban una cosa. Tomo el peño espejo que tenia en la mesita de noche.
Su Mangekyo Sharingan se activo.
-Ya veo.- Sarada apoyo la mano en su pecho.- Así son las cosas.
Una lagrima rodo por su mejilla, Sarada rápidamente la limpio.
No podía llegar llorando a decirle lo que sentia.
Aunque habia algo de lo que debia ocuparse antes: Kawaki.