En otro universo

Arcane: League of Legends (Cartoon 2021) League of Legends
F/F
G
En otro universo
Summary
—En resumen, estos tres han desaparecido y quieres que te ayude a encontrarlos.Caitlyn asiente, mirando a Vi fijamente.—Creo que sé dónde están.—¿Y vas a decirlo o prefieres que me quede con la intriga?Rueda los ojos, intentando verse lo más despreocupada posible. Pero está preocupada.—El centro de las puertas Hextech. En, bueno, la pelea, nuestras armas estaban fallando todo el tiempo.Vi asiente, recuerda el momento en que sus guantes se movían solos y se negaban a cooperar.—¿Y quieres que vayamos?—Sí, sé que es peligroso pero...Vi lo piensa por un momento, ignorando su corazón. Si fuera por eso, habría dicho que sí hace mucho.ODónde Vi y Caitlyn acaban en mundo paralelo mientras intentan ayudar.Las cosas no acabaron bien después de la pelea con Jinx, y ambas están en lados opuestos, por lo que es una sorpresa cuando Caitlyn le pide ayuda a Vi.Las cosas se complican cuando Vi llega a un mundo paralelo donde las cosas son diferentes, y dónde Caitlyn es su mejor amiga. ¿Cómo puede Vi resistirse a sus sentimientos así? ¿Cómo puede querer volver a su triste vida?
Note
Y aquí vamos de nuevo, parece que no me canso de ellas dos.Posiblemente esta obra tenga actualizaciones más lentas, ya que comienzo a trabajar por las tardes también. Pero haré todo lo posible para seguir hacia delante.Estoy muy emocionada por está, tengo muchas ideas que creo que pueden estar muy bien.Espero que lo disfruteis tanto como yo lo hago escribiendo.
All Chapters Forward

Chapter 19

Vi tiene que obligarse a parpadear un par de veces ante la imagen que tiene delante, como si su mente no pudiera creerse lo que está viendo.

Aún están lejos de la entrada de la comuna, pero reconocería a Caitlyn en cualquier lugar, incluso a tanta distancia como están ahora. Pero con cada paso que da más cerca queda más claro.

Caitlyn esta ahí, con su uniforme de comandante, su rifle en la espalda y esa postura rígida que tuvo el primer día que la vio después de que la abandonará. Todo en ella grita ejecutora por todos lados.

No es la Caitlyn con la que se quedó dormida hace unos días en otro mundo. No es la Caitlyn que le prometió que todo cambiaría.

No, no puede serlo si sigue llevando ese uniforme con orgullo cuando dijo que no quería seguir usándolo. Y si esta ahí, es porque sigue trabajando con Ambessa.

Vi siente una punzada en su pecho cuando piensa en ello, pero no sabe si es más de la confusión del momento o de la traición que se empieza a filtrar por su cuerpo sin que pueda evitarlo.

Realmente pensó que las cosas podrían cambiar después de todo.

Pasó días enteros buscando a Caitlyn sin éxito en Piltover, para poder explicarle todo y pedir su ayuda. Comprobar que todo seguía estando bien entre ellas...

Pensó que se había quedado más tiempo en la otra dimensión, como pasó al principio, y que la buscaría cuando volviera. Le costó aceptar que no la iba a encontrar, y ahora está aquí...

Fue Jinx la que insistió en dejar a Caitlyn de lado y seguí a alguno de los ejecutores hasta aquí, para saber algo más de Vander. No pensó que iba a encontrarse con esto.

No había esperado que su base o lo que fuera esto estuviera en la parte baja de Zaun. Aquí es dónde solían vivir tiempo atrás con su madre, antes de que todo fuera a peor...

El sitio se ve muy distinto, más vivo de lo que nunca ha visto Zaun. Pero no sé siente del todo bien, es extraño. Algo así no puede aparecer de la nada, en tan poco tiempo.

Pero, aún que se diga que es un refugio para la gente de Zaun, para que los ayuden, Vi puede ver más que eso. Puede ver las barreras de seguridad, los ejecutores vagando por las calles, y los zaunitas parecen... No estar muy bien, a pesar de estar curados.

La zona ya no pertenece a la gente de Zaun. Pertenece a Piltóver.

Y Caitlyn está de pie frente a la entrada, cómo si todo lo demás no hubiera sido importante. Ni siquiera sabe que está haciendo ahí, oyeron que era un sitio libre, para que cualquiera pudiera ir y entonces...

¿Qué demonios está haciendo Caitlyn ahí para en la entrada? Casi cómo si estuviera esperando...

Oh, no. No puede estar ahí por el motivo que cree Vi. No de nuevo.

—¿Esa no es…? —pregunta Jinx a su lado, con tono burlón.

Vi apenas la escucha, con todos sus sentimientos volviéndose locos en su interior. No sabe cómo tomarse la situación.

En esta dimensión, todo siempre se ha resumido en odio y rabia, es lo que mejor sabe hacer Vi. Y ahora, esta muy enfadada.

Vi la creyó cuando se disculpó, cuando dijo que las cosas serían diferentes, que podría confiar en ella esta vez...

Y ahora la ve aquí, exactamente igual que antes, con el uniforme de los mismos ejecutores que llevan años oprimiendo a Zaun. Viéndose como si no hubiera cambiado nada, cuando ha cambiado todo para Vi.

—Dame un segundo —murmura Vi, con la voz tensa.

Antes de que Jinx pueda decir nada más, seguro que un te lo dije o algo así que Vi realmente no quiere escuchar, avanza con decisión.

Esta vez no va a quedarse callada y huir cuando está bajo presión, está vez necesitan hablar de verdad. Se niega a creer que todo haya sido por la felicidad del otro universo, no puede creer eso.

Su corazón sigue siendo de la ejecutora, incluso si ahora se siente traicionada y dolida de nuevo. Pero sus sentimientos son difíciles, el resentimiento de antes... Hace que sea fácil para Vi enfadarse aún más con la situación.

Cuando más se acerca a Caitlyn, más puede sentir como su corazón se aprieta.

¿De verdad hace falta que el uniforme de comandante sea tan ajustado de todos modos? Vi esta segura de que no es algo necesario.

Cuando está más cerca, Caitlyn gira la cabeza por un segundo y sus ojos se cruzan con los de Vi. Se congela por un segundo, como si no hubiera esperado verla ahí.

La ve mirada a su alrededor, notando a los otros ejecutores, y vuelve a ponerse firme, con ese rostro sin emociones que está comenzado a molestar demasiado a Vi.

Caitlyn da un paso hacia delante, cuando parece que el resto de ejecutores están ahora ocupados con otras cosas.

—Vi... —empieza a decir, pero Vi la interrumpe antes de que pueda decir nada más.

—¿Qué demonios estás haciendo aquí?

Su tono es cortante y frío, o eso quiere creer ella. Suena más dolida que otra cosa, por mucho que quiera negarlo. Todo en esta situación la está haciendo daño, casi rompiendo todas esas esperanzas que había comenzado a tener. Casi pensó que podía tener algo mejor aquí con ella...

Caitlyn se mantiene firme, pero puede verla mirando nerviosamente a su alrededor. Es extraño. Ella es la comandante, ¿por qué se ve tan nerviosa? No entiende que esta pasando.

—Hago mi trabajo —responde lentamente, haciendo una pequeña señal con su cabeza hacia un lado.

Vi se fija en su alrededor ahora, hay otros ejecutores esparcidos por la entrada, y algunos de esos zaunitas llenos de cicatrices brillantes que Vi no acaba de entender.

Suspira, lo mejor es que se alejen de ahí antes de que Vi empiece a decir cosas de las que se puede arrepentir.

Vi siente la rabia ardiendo en su pecho cuánto más se aleja de la entrada, hacia una pequeña zona tapada dónde nadie más las puede ver.

Sabe que Jinx debe estar por ahí, pero espera que les dé privacidad por un momento. Hay muchas cosas que Vi quiere dejar claras ahora.

—¿Tu trabajo? —suelta una risa amarga—. ¿Es por eso que volviste a ponerte ese uniforme?

—No es tan simple.

Y eso es lo que más le molesta. Caitlyn nunca compartió realmente sus preocupaciones con ella, le costaba mucho que lo hiciera. Pero Vi se lo contó todo, pasó horas hablándole de su familia, de cómo había sido Stillwater... Le contó todo sobre ella, pero nunca obtuvo nada a cambio.

Sabía del dolor de Caitlyn al perder a su madre, pero Caitlyn se negó a dejar que Vi la ayudará en lo importante, se negó a dejarla entrar...

—Claro que lo es —dice Vi, dando un paso más cerca—. Me mentiste, Caitlyn. Dijiste que ibas a dejar esto. Dijiste que los ejecutores no hacían nada bueno.

—No es así... —sigue diciendo Caitlyn.

—¿Y qué es entonces? —pregunta, ahora mostrando algo más de debilidad en su tono.

No pensó que su reencuentro en esta dimensión pudiera estar tan manchado de sentimientos, pero todo siempre ha sido complicado para Vi. Una pelea más no es una gran sorpresa.

El silencio entre ellas es pesado, mientras Caitlyn parece intentar encontrar las palabras para explicárselo. No cree que deba ser algo tan complicado, o tal vez...

—¿Quieres encontrar a Jinx?

Los ojos de Caitlyn se amplían por un momento, viéndose más normal que en todo el tiempo que llevan hablando.

—No, claro que no —dice Caitlyn, cómo si solo pensarlo fuera estúpido—. Te dije que ya no iría a por ella, Vi. No voy a alejarte de tu hermana de nuevo.

—Dijiste muchas cosas, pero sigues aquí, comandante.

Caitlyn cierra los ojos por un segundo, cómo si estuviera dolida de escuchar a Vi llamarla así.

—Quiero hacer las cosas bien esta vez —susurra, con tono bajo.

Vi no sabe a qué se refiere con eso, no parece que nada este yendo bien en absoluto.

—¿Sabes lo que vi cuando llegué aquí? —dice Vi, señalando los muros de seguridad que dividen la zona—. Zaun más dividido que nunca.

Caitlyn aprieta los labios, parece muy consciente de eso. Pero, cómo siempre, se queda a un lado mientras Ambessa toma el poder.

—Las cosas han cambiado desde que acabamos en la otra dimensión, es complicado y...

—Pues tal vez deberías explicármelo antes de que me dé un maldito ataque de furia.

Un ataque de furia, o algo más, Vi no puede saberlo exactamente.

Se siente traicionada y dolida, pero Caitlyn esta delante de ella y... Todo podría ir bien esta vez, si hablarán de verdad.

Vi esta dispuesta a escucharla, a entenderla. Pero Caitlyn nunca le explica las cosas, y esta cansada de eso. Quiere estar ahí para ella, ayudarla, pero no la deja.

Ni siquiera ahora, cuando está así, Caitlyn le da las respuestas que quiere escuchar.

Es la comandante, debería tener más peso que eso. Debería saberlo todo y poder controlar a sus ejecutores. Siempre supo que Caitlyn no había aceptado ser comandante para liderar esta vez, solo para tener más recursos para encontrar a Jinx.

Caitlyn da un paso adelante, invadiendo el espacio de Vi.

Por estúpido que suene, una parte de ella está aliviada de que la mujer esté ahí y este bien. A pesar de toda la situación, estuvo días pensando que tal vez no había podido volver, había estado pensando una y otra vez en encontrarla. Y fue que simplemente no miro en el lugar donde debería haberlo hecho.

—No es tan simple como crees, Vi. Es peligroso, deberías irte a casa y...

Vi suelta un resoplido incrédulo. No puede creer que esta Caitlyn sea la misma con la que estuvo hace unos días en la otra dimensión, como si nada estuviera pasando.

—¿Ahora me quieres lejos?

—No es eso...

¿Entonces de qué demonios va todo esto? Sería más fácil si Caitlyn pudiera simplemente hablar con ella.

—No te hagas la comandante conmigo —dice Vi, con la mandíbula tensa—. Nos prometimos cosas, incluso si no llegamos a decir nada en voz alta.

Caitlyn parpadea varias veces, haciendo una mueca de dolor ante las palabras de Vi, y ella no sabe como tomarlo.

Sabía que las cosas iban a ser complicadas en este mundo, por supuesto que lo sabía, pero había esperado... Bueno, algo más lindo que esto, para ser sincera.

Está enfadada, traicionada, pero el dolor es lo peor de todo.

Es más intenso que su propio dolor muscular, su corazón se siente encogido y cómo si no pudiera pensar claramente. Todo lo que pasaron en la otra dimensión... Significó mucho para Vi, incluso cuando intentó que no fuera así.

—Vi, yo…

Pero Vi esta cansada de que nunca hable de verdad, que nunca le explique las cosas que está haciendo. Siente que Caitlyn piensa que no es útil, que es solo una zaunita y... Eso también duele.

Las emociones la golpean con fuerza, su cabeza está hecha un lío. Y Caitlyn esta demasiado cerca.

Y en un movimiento inesperado incluso para ella, tira de Caitlyn hasta que chocan y une sus labios con rabia. Sus ojos se cierran al momento, disfrutando de la sensación más de lo que había esperado.

No es un beso tranquilo como los que solía tener. No, este está lleno de furia y sentimientos no resueltos. Sus labios se mueven con rapidez, y Vi espera poder plasmar todo lo que siente ahí, que Caitlyn sepa lo mucho que la está lastimando.

No es una sorpresa cuando Caitlyn corresponde el beso al momento, besándola con la misma intensidad que Vi. Es casi desesperado, cómo si quisieran demostrar algo que ninguna de las dos entiende.

Sus manos se aferran a la cintura de Caitlyn, disfrutando más de lo que le gustaría. Ha pasado días sin saber si la volvería a ver, y ahora... La tiene de nuevo, pero no de la forma en la que querría.

Mientras se besan, no le importa el uniforme de Caitlyn, ni las promesas rotas entre ellas. Lo único que quiere es tener a mujer aún más cerca, eliminar todos esos sentimientos negativos que siempre la acompañan.

Quiere que tengan una oportunidad, pero solo podrán tenerla si Caitlyn finalmente se abre a ella con todo, no solo con las pequeñas partes que le da.

No sabe cuanto tiempo pasa hasta que se separan. Vi puede notar sus labios hinchados y ambas están respirando con dificultad. Aun así, ninguna la da un paso atrás. Se mantienen cerca, con las manos de Vi aún aferradas a la cintura de Caitlyn, como si tuviera miedo de que la mujer pudiera retroceder.

Abre los ojos con cuidado, temiendo ver la reacción de Caitlyn.

Pero la mujer también la está observando, con esos ojos azules fijos en ella. Se ve más calmada que antes, y toda esa fachada sería parece que se ha roto. Ahora se parece más a la Caitlyn con la que compartió tantos momentos, incluso si sigue llevando ese uniforme estúpido que le queda demasiado bien.

—Maldita seas —murmura Vi, apoyando la frente contra la de Caitlyn.

Aún se siente inestable, esperando que ese beso esté significando tanto para Caitlyn como lo está haciendo para Vi.

Quiere que las cosas puedan ir a mejor entre ellas, realmente lo quiere esta vez. Ahora que probó a Caitlyn de nuevo, puede que sea un poco adicta a ella. No es cómo si pudiera resistirse de todos modos.

—No puedo dejarlo, Vi. No ahora —susurra Caitlyn, con un rastro pesado en su voz.

Vi no acepta esa explicación ya, Caitlyn tendrá que explicarme más las cosas si quiere que todo esté bien entre ellas. Se niega a quedarse en la sombra de nuevo mientras ve a Caitlyn destruirse a sí misma cada día más.

—Entonces habla conmigo, Cait. Es todo lo que quiero.

Caitlyn suspira, ahora dando un paso atrás y rompiendo el contacto entre ellas.

Vi lamenta la perdida al momento, extrañando el calor sobre sus manos. Solo espera que esa distancia no sea para decirle que se vaya de nuevo. No sabe si podrá soportarlo ahora, cuando ha dejado tan claros sus sentimientos. Nunca podrá quitarse a Caitlyn de su corazón, espera que ella lo entienda.

—Ambessa está preparando algo con Viktor —empieza a decir Caitlyn, y Vi no puede evitar dar un suspiro de alivio cuando finalmente parece que Caitlyn se está abriendo a ella—. No sé exactamente qué es, Ambessa no confía en mí. Tomó mi puesto cuando desaparecí, y nadie me respeta ya. Ni siquiera está mi escuadrón aquí, y... Quería investigar un poco sobre esto antes de ir a por ti, intentar solucionarlo por mí misma y...

—No hace falta que lo hagas sola —interrumpe Vi, levantando una mano para ponerla en la mejilla de Caitlyn—. Nunca ha hecho falta que lo hagas sola, confía en mí.

Caitlyn se apoya más ante el contacto, suspirando levemente.

Parece que las dos están cansadas de la misma situación de siempre, pero espera que esta vez pueda ser distinta.

—Viktor no solo puede curar a la gente, Ambessa dijo que puede controlarlos —añade Caitlyn, con la voz temblorosa—. Tienen una especie de criatura ahí dentro, no sabe qué es. Viktor está trabajando en su mente, en liberarlo del sufrimiento para después poder controlarlo. No sé qué le pidió a Ambessa a cambio de esto, pero no puede ser bueno.

Las palabras de Caitlyn chocan en el cerebro de Vi, mientras procesa lo que Caitlyn esta diciendo de nuevo.

Una criatura ahí dentro... No puede ser.

—¿Cómo es esa criatura?

—Es enorme, no sabría como decirlo. Parece una especie de lobo gigante, algo así. Viktor mencionó que solía ser un humano antes, pero se ve tan... Pero no me extraña si es creación de Singed.

Por Janna, ese debe ser Vander.

Parece que Jinx estaba diciendo la verdad después de todo. Y ahora está ahí, siendo preparado para ser un arma, para que alguien lo controle como si no fuera más que una marioneta.

No puede dejar que eso ocurra, tienen que sacarlo de ahí lo antes posible. Antes de que Viktor acabe su proyecto y tenga el control total de Vander.

Si lo está intentando liberar... ¿Será como una persona ahora? ¿Seguirá siendo Vander? Jinx dijo que intentó atacarla, no podrán sacarlo de ahí si empieza a llamar la atención, hay demasiados ejecutores y guerreros de Noxus, sería casi una misión suicida.

Sus ojos se cruzan con los de Caitlyn de nuevo, y traga saliva antes de pensar en que decir. Por Janna, su familia se ve cada vez más retorcida, no le extrañaría si Caitlyn decidiera creer que está loca.

—Esa criatura... Puede que sea mi padre.

Los ojos de Caitlyn se abren, mirando a Vi como si acabará de decir la locura más grande del mundo. En realidad, es algo loco, pero confía en Jinx. Y hay algo en ella que le dice que tiene razón, de que ese puede ser Vander.

—¿De qué estás hablando?

Vi la mira con intensidad, esperando que vea la verdad en sus ojos. Tiene que creerla, Caitlyn es posiblemente su mejor opción para sacarlo de ahí sin problemas.

—Jinx me dijo que Vander está vivo. Sé que parece una locura, pero confío en ella. Y algo en mí me dice que es verdad, Cait.

Caitlyn se congela por unos segundos, mirándola con confusión mientras sus palabras se asientan en ella.

—¿Cómo puede ser...?

—Lo sé, sé que suena loco. Pero estuvimos en otra dimensión, Cait. Hay pocas cosas que no puedan ser creíbles ahora.

Caitlyn asiente, aún parece pensar en algo.

—Está muy protegido —dice Caitlyn, mirando a Vi con preocupación en sus ojos—. Es la principal cosa por la que Ambessa está aquí, pero...

—Tenemos que sacarlo —insiste Vi, incluso si las posibilidades son bajas, no se puede ir sin intentarlo todo.

—Está bien, podemos intentarlo. Vander fue bueno conmigo también —añade Caitlyn, en voz baja.

Vi asiente, sintiendo las emociones moverse por su cuerpo. La rabia que sintió al principio reemplazado por algo mucho más suave.

Lo único que tiene que abordar ahora es el tema de que Jinx esta ahí, muy cerca y lista para meterse en ello. No sabe aún como reaccionará Caitlyn a ver a Jinx de nuevo, a la versión que odia.

—Hay algo que no te va a gustar...

—¡Hola, comandante! —grita una voz por detrás de ellas, con el sonido de sus botas pesadas llenando el silencio—. Esa es mi entrada. Y que sepas que a mí tampoco me gusta.

Vi contiene la respiración por un momento, girándose hacia la voz.

Jinx esta ahí, caminando hacia ellas seguida de Isha. Parece despreocupada, cómo si no le importará estar cerca de la persona que intentó matarla y, que para ella, había intentado separarla de Vi.

Con un suspiro, se gira para mirar de nuevo a Caitlyn, temiendo su reacción.

La mujer se ha puesto tensa, con la mirada fija en Jinx, cómo si se hubiera quedado en blanco. Vi puede notar el momento en que su mano se mueve para agarrar el rifle en su espalda, pero no llega a sacarlo. Solo se queda ahí, tensa, mientras Jinx se acerca cada vez más.

Ni siquiera parece haber notado a la niña con ella. Todo en ella está centrado en Jinx.

No sacó su rifle, no se acercó a Jinx ni digo nada. Solamente se quedó ahí, quieta e inestable, cómo si no supiera qué hacer.

Y ahí es cuando Vi se dio cuenta de que las cosas realmente habían cambiado.

Caitlyn no habría dudado antes, tenía el tiro perfecto para sacarse a Jinx del medio, como tanto quería haberlo hecho. Pero se mantenía quieta, pero alerta, resistiendo lo que había normalizado tanto. Estaba resistiendo por ella.

—Cait —susurra Vi con urgencia, colocando una mano en el brazo de Caitlyn.

La última vez que intentó hacer algo así, tampoco salió bien. Pero ahora parece que Caitlyn se calma en su toque, mientras que baja el brazo que estaba listo para agarrar su rifle.

Vi se relaja un poco también, esperando que las cosas puedan mejorar de verdad.

—Vaya, miren quién sigue poniéndose nerviosa con mi presencia —se burla Jinx, inclinando la cabeza con una sonrisa divertida—. Pensé que ya habíamos pasado esta etapa, Cupcake.

El apodo es lo que hace que Caitlyn se ponga tensa de nuevo, puede notarlo con su agarre. Pero Caitlyn no se aparta de ella, por lo que Vi mueve lentamente la mano para poder entrelazar sus dedos, esperando que se calme la situación.

—No me llames así —murmura Caitlyn, con su voz tensa, pero sin ningún tono amenazante.

Jinx se ve confusa por un segundo, mientras parpadea hacia Caitlyn. Seguramente se había esperado un encuentro mucho más violento, por cómo todo había sido entre ellas.

Se para a una distancia de ellas, con Isha aferrada a una de sus piernas mientras mira a Caitlyn con intensidad también. Esa niña es muy protectora con Jinx, y Vi lo encuentra muy dulce.

—¿Por qué no? A Vi le encanta llamarte así.

Vi no puede evitar girar los ojos mientras mira a su hermana, por supuesto que iba a usar eso contra ella ahora. Jinx se ve divertida, por lo menos tampoco parece que vaya a atacar a Caitlyn en cualquier momento. Vi ya lo considera como una victoria.

—Jinx, basta —dice Vi, esperando que la escuche esta vez.

No quiere que esto acabe empeorando por esas bromas. Tienen algo más importante que discutir ahora.

—¿Qué? Estoy siendo simpática —dice Jinx, con esa sonrisa aún.

—Eres insoportable —bromea Vi, esperando que la tensión se vaya con eso.

Jinx suelta una risa suave, mientras se lleva una mano al pecho, pareciendo ofendida.

—Me ofendes, hermana. La insoportable aquí eres tú.

Después de eso, todo se queda en silencio por unos momentos, mientras ninguna dice nada.

Al menos, nadie está intentando disparar a nadie y todo parece en calma por unos momentos. Sabe que todas necesitan un momento para entender su presencia, y espera que puedan entenderse un poco.

Pero, sinceramente, con que no se estén intentando matar cada 5 segundos ya es suficiente para Vi.

Se gira hacia Caitlyn, esperando que su mirada esté fija en Jinx de nuevo. Pero no lo está.

Está mirando fijamente a Vi, con esos ojos azules llenos de emociones. Parece confusa, cómo si no estuviera entendiendo algo, y Vi no sabe que hacer para mejorar nada. No entiende que es lo que pasa, hasta que los ojos de Caitlyn se mueven rápidamente entre Jinx y Vi. Casi puede ver la duda en ellos.

Parece que puede entenderlo ahora. Caitlyn no puede verla como la Jinx de antes. Tampoco es Powder, pero es algo en medio de las dos. Vi lo entiende. No puede odiarla ahora, después de todo.

No después de lo que vio en la otra dimensión.

No después de haber compartido días enteros con una versión de ella que jamás tuvo que convertirse en esto.

—¿Qué estáis haciendo aquí todos? Este sitio está vigilando y...

Jinx bufa con las palabras de Caitlyn, cruzando los brazos sobre su pecho mientras la mira.

—Oh, no, no, no. La pregunta correcta es qué demonios estás haciendo tú con ese uniforme otra vez. Vi dijo que habías cambiado.

El cuerpo de Caitlyn se tensa por unos instantes, antes de relajarse de nuevo. Parece... Pérdida. Y tarda mucho más en contestar de lo que Vi habría dicho.

—No lo sé —admite después de unos segundos, dejando a todas ahí sin nada que decir.

Vi la mira con los ojos abiertos con sorpresa, nunca había esperado que Caitlyn se permitiera verse así, confusa y pérdida delante de Jinx. Ni siquiera lo había hecho mucho delante de Vi. Siempre parecía esa versión dura de sí misma, con las ideas claras.

—Yo… pensé que podía arreglar algo desde dentro. Pero me equivoqué —añade, apretando la mano que aún tiene agarrada Vi.

Vi siente que su corazón late con fuerza, pensando en todo. Parece que realmente Caitlyn esta internado que las cosas cambien, que todo pueda ser mejor entre ellas, y Vi lo aprecia con todo su corazón. Puede ver a la Caitlyn que vio en la otra dimensión ahora, la que se disculpó y prometió cosas. Tal vez...

También puede ver como los hombros de Jinx bajan un poco, mientras mira a Caitlyn con curiosidad ahora.

—Bueno… —murmura Jinx, rascándose la nuca—. Al menos no disparaste al verme. Supongo que eso es un progreso.

Caitlyn cierra los ojos por un momento, ladeando la cabeza.

—No lo hagas más difícil —dice, mirando a Jinx, pero suena suave y no enfadada ni nada de eso.

Jinx sonríe, esta vez parece más genuina. Casi parece que toda la tensión entre ellas se ha ido, al menos por el momento. Y es más de lo que esperaba Vi de toda la situación.

Por mucho que quiera deleitarse en el momento, tienen que centrarse en una cosa primero.

—Tenemos algo importante de qué preocuparnos —interviene Vi, mirando a Jinx.

Jinx asiente, y esta bastante segura de que ha oído toda su conversación con Caitlyn. Sigue siendo una pequeña cotilla, pero es algo que ya esperaba.

—Sí, lo tenemos.

—Tenemos que pensar en un plan —susurra Caitlyn, aún agarrada a Vi—. La comuna es un lugar tranquilo, y no admiten armas. Pero los guerreros de Noxus las llevan de todos modos.

—Tenemos que sacar a Vander antes de que puedan avanzar más —añade Vi, con urgencia.

—Tenemos a la comandante aquí, ¿no puedes hacer nada? —pregunta Jinx, mirándola con algo en sus ojos que no puede detectar.

—No realmente, Ambessa esta al mando de todo.

Jinx asiente, mientras parece pensar en ello.

—¿Aún estoy en la lista de busca y captura? —pregunta, intentando que suene como una broma, pero suena preocupada.

—No exactamente, dudo que seas una prioridad para Ambessa —responde Caitlyn—. Está centrada en Viktor.

—Genial, ¿tienes la distribución de la comuna? Podemos pensar en algo.

—Pero antes… —dice Caitlyn, con sus ojos encontrándose con los de Jinx—. Necesito saber algo.

Jinx la mira sin expresión, esperando que diga algo.

—Dispara, comandante.

Caitlyn tarda unos segundos en responder, pensando bien en ello.

Vi no sabe que va a decir, y se siente un poco incómoda en ese momento.

—¿Aún vas a hacerme explorar si le hago daño a tu hermana? —pregunta, y una leve sonrisa se dibuja en sus labios.

Vi no entiende la pregunta, pero Jinx suelta una risa suave, como si tampoco se hubiera esperado eso. De hecho, se ve algo confundida, no parece que sea una conversación que haya tenido con ella, puede que sea algo de Powder, pero Jinx parece divertida con la pregunta.

—Por supuesto que lo haré.

Vi siente que su respiración se corta por un momento, mientras ve a las dos mujeres las relajadas que nunca, mirándose como si no quisiera matarse. Y preocupándose por Vi...

Su cabeza tarda en aclararse mientras Caitlyn comienza a hablar sobre la distribución de la comuna y de los puestos que ocupa la gente. Jinx la escucha atenta, pensando en un plan.

Todo parece ir bien...

Y en ese momento, Vi se permite tener esperanzas en el futuro.

Forward
Sign in to leave a review.