Segundas oportunidades

Harry Potter - J. K. Rowling Iron Man (Movies)
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Segundas oportunidades
Summary
Tony Stark se encuentra dentro de la piedra del alma, en su propio infierno personal, cuando de repente, una mujer que dice ser la muerte aparece, con su aceptación se embarca en una aventura en un universo muy parecido al suyo, pero diferente, con personas capaces de hacer magia se abre una nueva posibilidad para el genio.Entrar en un mundo de magia y señores oscuros, cuando tú mismo eres considero un simple “muggle” es irritante por decir lo menos, pero, con un poco de ayuda de inesperados aliados Tony Stark arrastrara al mundo mágico al siglo XXI con suerte a tiempo para enfrentarse a Thanos nuevamente y si consigue un nuevo hijo y un novio no estaría tan mal.
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Capítulo 33.

Capítulo 33.

"La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa."

Albert Einstein


Las dos semanas que siguieron no fueran nada buenas para Lucius Malfoy con sus inversiones atrancadas se vio en la necesidad de disminuir su lujoso estilo de vida, lo que era una gran vergüenza para él, el presupuesto para túnicas y joyas de Narcisa se vieron reducidos hasta el 60% de lo que antes normalmente compraba, al igual que los juguetes para su hijo quien había hecho conocer su descontento con gritos que hicieron temblar la mansión, los pulmones de un Malfoy descontento no era nada bueno, si eso no fuera lo suficientemente malo para él, ahora no podía seguir comprando vino, si no era por el costo era porque el distribuidor no tenía la materia prima para crearlos, los negocios en toda gran Bretaña mágica se estaba estancando, y Malfoy ni muerto iría al mundo de las sangres sucias a considerar probar su inmundicia.

Si eso no fuera poco, Lucius tubo que cortar con sus investigadores para descubrir cualquier información sobre el juicio de Black, después de todo eso ya era un hecho, lo que significaba que sus planes se habían descarriado muy mal, mirar a su heredero solo lo irritaba el niño era un completo inútil ahora para él, la única razón por la que no pateaba al maldito bastardo era porque aún necesitaba un heredero para la línea Malfoy, tal vez debería convencer a Narcisa para un segundo niño, después de todo el que ahora tenía era demasiado ruidoso, y Lucius podía admitir que temía que este terminara con las personas equivocadas, como el traidor de sangre que tenía su esposa como primo.

Suspirando se recostó en su oficina para beber algo de su Wisky de fuego, las cosas iban muy mal para su familia, Narcisa últimamente estaba muy callada y temerosa de su propia sombra, no entendía lo que sucedía con la mujer con que se había casado, había intentado interrogarla, pero sus labios parecían más sellados que su bóveda en gringotts.

- Dobby elfo inútil, tráeme el periódico- grito con rabia últimamente todo lo que sucedía a su alrededor lo hacía cada vez más molesto, ni siquiera Fudge estaba siendo útil.

- aquí maeste- respondió el sucio elfo, Lucius pateo a la desgraciada criatura, había algo que lo relajaba en simplemente vencer a esa molesta plaga.

- vete- gruño mientras trataba de componerse recordándose a sí mismo que era impropio golpear con el pie en vez de usar el método de un mago, un crucio bien colocado debería hacerlo, pero lastimosamente era el único elfo que tenían y no podía arriesgarse a quedarse sin sirviente.

Gruñendo vio la imagen en el diario el profeta “Juicios para los encarcelados en Askaban” “Sirius Black heredero de la noble y anciana casa Black será juzgado el 3 de noviembre en la ICM” eran los títulos principales, hace solo dos semanas seria “Mano derecha de tú-sabes-quien” ahora ese asqueroso traidor de sangre era “EL Heredero de la casa Black”, el título debía ser para su hijo, maldición.

Está bien por los momentos Lucius retrocedería no le quedaba otra opción, con una mueca pensó en los problemas que tendría que resolver, la fortuna Malfoy disminuirá, pero aún podían vivir cómodamente, solo tendría que mantener la cabeza abajo mientras los Aurores de la ICM aun estuvieran aquí, por mucho que quisieran poner la ley sobre él, solo podrían dictaminar la culpabilidad de los presos, pero era imposible que lo pudieran juzgar nuevamente, por lo menos no por el mismo crimen que ya anteriormente había sido juzgado.

Con eso, claro, tal vez debería concentrarse más en otros asuntos, como cuando los Aurores de la ICM se retiren obtener el control nuevamente del ministro, y un compromiso para su heredero, tal vez debería aceptar el contrato de compromiso de Parkinson, Pansy no era muy atractiva, pero las riquezas de su familia sería útil para los Malfoys, si adueñarse de los Blacks falla será bueno tener un plan B, con eso en mente Lucius asintió para sí mismo mientras empezaba a revisar sus documentos que tenían días de atraso.


Dumbledore no pudo evitar gruñir de furia mientras leía el profeta, ni sus contactos ni nadie había respondido a sus preguntas, en cambio, tuvo que enterarse por el profeta que el joven Sirius sería juzgado el 3 de noviembre, lo peor de todo no era eso, no claro que no, lo peor era el sobre que inocentemente se encontraba frente a él, gringotts se había negado a aceptar retiros por su parte, la custodia que tenía sobre el niño Potter estaba en duda, y los malditos duendes se habían negado a seguir realizando transacciones hasta que se decidiera el destino de Black.

Todo se estaba cayendo en pedazos, lo único realmente salvable es que el niño aún era inconsciente de su herencia y los Blacks no podía pelear por su tutela, con suerte los dementores habrían vuelto loco a Black lo que evitaría que se acercara al niño, tendría unos dos años antes de tener que preocuparse por ello, el niño debía venir a Hogwarts totalmente inconsciente de su herencia si quería poder guiar al niño a cumplir con su destino.

- todo debe ser por el bien mayor- dijo con tristeza mientras su mirada iba del periódico a la carta de gringotts, aunque era un retroceso iba a tener que ingeniárselas, lo único bueno era que el fondo de becas aun estaba en marcha, así que no podía ser culpado porque esto se detuvo, lo malo es que él había estado ganado muy buena voluntad de las personas por ello, ahora que los golbins lo estaban nuevamente manejando, ahora todo sería nuevamente para los Potters, y habría una gran posibilidad que los beneficiados intentaran acercarse a Harry, tendría que preparar mejor al joven Ronald para cuando sucedan esos casos.


Harry estaba emocionado, después del desmayo de su padre y los gritos que siguieron después de eso, las cosas por fin había empezado a mejorar, el señor Stark había terminado en cama y con fiebre los dos primeros días, pero se recuperó rápidamente para tranquilidad de Harry y Jarvis, luego de muchas reprimendas este había prometido ya no más trabajos excesivos y volver a una rutina más fácil de manejar, él lo había cumplido, o mejor dicho por lo menos lo intentaba hacer, Harry estaba empezando a odiar a la señorita Potts aunque aún no sabía quien era, lo cual no le importaba, esa señora le recordaba mucho a su tía Petunia y sus constantes órdenes o mejor dicho “tareas”, Harry había hablado de esto con Jarvis, pero este había dicho que no era lo mismo, aun así prometió que mantendría su cámara vigilando la situación.

Harry se enteró que el señor Tony era tan especial como él, lo que hizo que Harry no se sintiera como un monstruo, lo cual era bueno, su nuevo papa le había contado a Harry que había hablado con su papá biológico y este le había dicho que Harry venía de una familia que estaba escondida, al parecer había muchas personas como él, su papi Tony había prometido descubrir todos sobre ellos, aunque no sería su enfoque principal, los niños huérfanos lo necesitaban mucho así que cuando disminuyera su trabajo lo haría, a lo que Harry asintió estando de acuerdo más que todo porque Jarvis había estado muy irritado por lo sucedido.

Lo único bueno luego de la conversación es que ahora Harry estaba aprendiendo magia, o bueno su papá hacía pucheros, pero estaba seguro de que si Harry lo lograba su papi también lo haría pronto, con eso en mente Harry se esforzó por lograr algo para enseñar luego a su papi, nada había funcionado hasta hora, así que Harry se obligó a leer libros de fantasía y con la ayuda del señor Thomas, el único adulto con el que podía practicar sin ser regañado, bueno, papa también, pero él estaba en reuniones y cuando llegaba a casa Harry no lo quería molestar, prefería ver películas juntos o simplemente dormir, el punto es que Harry no podía hacer magia si no había nadie con él.

Había logrado crear una pequeña llama que iluminaba todo a su alrededor, Thomas había gritado cuando lo hizo y luego los dos juntos celebraron por su logro, por su puesto hacer esto lo había hecho desmayarse lo que causo que su padre lo regañara, él le grito porque papa hace lo mismo, pero al parecer ser adulto te da permiso para ser eso, lo cual es muy injusto y no Harry no estaba haciendo pucheros, no importa lo que dijera su papá, “Bien él estaba haciendo pucheros”

- Joven señor, ya llego Él- informo Jarvis, lo que hizo sonreír a Harry Thomas ya estaba aquí.

- no lo vas a perdonar Hermano- pregunto Harry con una sonrisa divertida.

- No sé a lo que se refiere joven señor- dijo ignorando la pregunta de Harry.

- Ya ha pasado dos semanas, sabes que él lo siente- murmuro en voz baja.

- por su culpa el señor colapso- gruño furioso, lo que hizo saltar a Harry, Jarvis daba miedo enojado.

- no lo hizo a propósito- trato de calmarlo.

- lo pensaré- musito dando por terminado la conversación, Harry suspiro Thomas le había pedido ayuda para volver a las buenas de Jarvis, al principio pensó que sería fácil, ya que su hermano mayor lo adoraba, pero esto era cada vez más difícil.

- Thomas- grito feliz saltando sobre el hombre mayor quien lo acepto en un abrazo.

- Harry- dijo feliz- por lo menos alguien está feliz de verme- dijo mientras miraba lastimosamente la cámara en el salón, no sabía como Jarvis lo hacía, pero podía sentir la frialdad de su mirada, era increíblemente inquietante, debería pedirle que se lo enseñara.

- heee si hola, vamos al patio- dijo con una sonrisa, a lo que Thomas solo asintió mientras dejaba escapar un suspiro.

- claro- dijo deprimido, mientras le echaba un último vistosa a la cámara, el mayor comenzó a guiarlo al patio para continuar con su entrenamiento.

Año 1984

Tony Stark 24 años

Sirius Black 24 años

Harry Potter 5 años



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