Capítulo 21.
Capítulo 21
“EL MIEDO es la emoción más difícil de manejar. El dolor lo lloras, la rabia la gritas, pero EL MIEDO te atrapa silenciosamente en tu corazón”
David Fischman.
Stane grito de frustración mientras tiraba el vaso de licor al suelo, su mirada llena de rabia se encontraba fija en las noticias de la tarde, donde hablaban sobre el atentado que había tenido su gallina de huevos dorados, gruñendo de estrés y rabia se llevó las manos a la cabeza tratando de tranquilizarse, pero era inútil, Antony se había estado convirtiendo muy rápidamente en un dolor de cabeza, lo que hacía que Stane se desesperara, la ira lo seguía mientras caminaba de un lado a otro, no le gustaba para nada lo que estaba sucediendo, sus planes se estaban deshaciendo y el poder que había ganado con duro trabajo se estaba escapando entres sus dedos muy rápidamente.
Stane suspiro y se acercó a la licorera para tomar otro trago, el maldito francotirador había fallado, pensó, mientras tragaba su bebida, tenía que ser más listo que esto, eso le pasaba a él por contratar novatos, pensó, mientras volvía al televisor donde hablaban sobre como Antoni había salvado la vida de una periodista, lo que hizo bufar a Stane, eso solo había sucedido por suerte.
- Supongo que debo contactar a la querida señorita Potts- mascullo mientras reflexionaba en cómo darle la vuelta a la situación a su favor, la Señorita Potts se había vuelto un activo dentro de sus planes, sin ella nunca pudo haber preparado el atentado, pero todo había fallado, y todo por culpa de ese estúpido francotirador.
- Ho bueno, solo le diré a la señorita Potts que si me hubiera avisado a tiempo pude haber preparado seguridad de ante mano, la irresponsabilidad de Antony pudo costar muy caro a la empresa- dijo con una sonrisa entre dientes, su mirada fija en la escena donde su gallina de oro escapaba por poco de una bala en la cabeza- umm…- dijo para luego apagar el televisor, por los momentos será mejor agacharse un rato, luego volverá a intentarlo, Stane no entendía por qué el mocoso estaba tan interesado en la empresa últimamente, no le gustaba nada esto, debía eliminarlo antes que se adentrara más y descubriera alguno de sus tratos, con eso en mente se dio la vuelta para salir, había que realizar algunas llamadas, el control de daños debía ser su prioridad.
Tony se recostó en el asiento trasero de su limusina agotado, todo había sido un espectáculo de mierda, uno tras otro, luego de que llegaron la policía, esto se desplegaron solo para encontrar el arma y los cartuchos, pero no había absolutamente nadie en el área, aún no se habían creado cámaras de vigilancia así que iba a tener que empezar ir a pie a investigar, Jarvis, por otro lado, estaba Hackeando cada teléfono para encontrar cualquier información que le pudiera servir, para encontrar al francotirador.
Después de hablar con la policía se encontró siendo trasladado a un hospital para sacar la bala, no hubiera sido molesto sino fuera porque Pepper había estado allí gritándole sobre su irresponsabilidad y cualquier estupidez que se le ocurriera, él había perdido la paciencia y le había ordenado que se largara, está por supuesto se había ofendido, pero ver su mirada y como las doctoras y médicos la observaban fue suficiente para que asintiera, Potts se disculpó y se fue sonrojada, Tony entendía que estaba asustada, pero eso no le daba derecho a culparlo como si él hubiera querido que le dispararan, luego de una hora soportando a los médicos y luego que lo cocieran de nuevo, Tony se había visto en la necesidad de llamar a Happy para que lo buscara, no podía manejar, así que Tony se había calado dos horas más esperando a su guardaespaldas personal.
Escuchando a Jarvis quien estaba en alerta máxima sobre como iba la investigación, e insistir constantemente que pondría a Thomas a trabajar, Tony estaba amargo por este último, aun así estaba agradecido de que el nombrado estuviera cuidando a Harry mientras Happy llegaba, Tony se dispuso a observar el hospital, la maquinaria actual era una burla de lo que sería en el futuro, la atención que recibió a pesar de ser de alta cálida no era absolutamente igual a lo que recibiría una persona común en el futuro, lo que hacía que Tony considerar incursionar en el área médica más pronto que tarde, cuando llego Happy Tony solo tenía una orden para el hombre.
- A casa Happy-
Tony espero que el camino fuera pacífico, y que pudiera llegar rápido a casa para abrazar a su hijo, pero a medida que iba, Tony se desesperaba más su corazón latía mientras recreaba lo que había pasado una y otra vez, su cerebro se llenaba de imágenes de como había podido terminar la tarde, en una de ellas se encontraba otra vez muerto y su hijo terminaba huérfano, el solo pensamiento lo hacía tener ganas de vomitar.
- Se encuentra bien, señor- dijo Happy con voz tensa y preocupada.
- Si Happ- respondió con voz entrecortada, Happy tarareo mientras miraba el camino su semblante más serio de lo ordinario.
- Suelta lo que vas a decir Happy- dijo Tony mientras se encorvaba sobre el asiento, a pesar de ser muy cómodos Tony se sentía con molestia, no podía encontrar una posición donde no le doliera el brazo.
- Se supone que soy tu guardesp…-
- Happy estás protegiendo algo mucho mayor que mi vida- dijo Tony sabiendo por donde iba la conversación.
- Yo, lo sé, es solo que…-
- Lo entiendo, pensaré en algo, pero no puedo confiar en nadie más que pueda cuidar a mi hijo- gruño Tony.
- ¿Y el señor White?- Pregunto Happy, a lo que Tony solo alzo una ceja, mientras elevaba su brazo bueno al comunicador de la limusina.
- Le volaré la cabeza si intenta algo con el joven señor – dio su respuesta Jarvis lo que izo sonreír a Tony, disfrutando la expresión de sorpresa de Happy.
- Eso, no sé cómo pueden tener una relación así- dijo Happy, lo que hizo que a pesar de todo Tony luchara con una sonrisa, aunque odiaba la implicación, algo le decía que su hijo le había estado contando historias fantasiosas a Happy.
El resto del transcurso Tony se la paso discutiendo levemente con Happy, desde los papeles para hacerlo pasar por el tío de Harry, hasta los planes para la fiesta, los planes se superponían, primero era la fiesta por supuesto Harry ya estaba cerca de cumplir cinco años y luego estaban el comienzo de clases, en el cual Happy tomaría el papel como tutor, lo que protegería el niño, por supuesto los papeles de adopción ya estaban muy bien archivados y ya había comenzado el proceso de cambiar su voluntad algo que Stane no estaría muy feliz cuando se diera cuenta, pero a Tony no le importaba, Happy sería el tutor y el responsable de Stark industria si algo le pasaba por lo menos hasta que Harry fuera mayor, Rhodey estaba como segunda opción a pesar de que no se había encontrado con su amigo Tony no podía evitar dejarlo por fuera, esperaba que pudiera arreglar las cosas con él antes de que todo se arruinará y perdiera a su hermano.
Cansado se bajó de la limusina siendo ayudado por Happy, lo que lo hizo hacer una mueca él no estaba inválido muchas gracias, solo era un brazo, pero a Happy no parecía importarle, bufando camino hacia su casa, emocionada por encontrar a su hijo, Tony sintió que no lo había visto desde hace mucho tiempo, pero sabía que eso era solo por el susto que había tenido, de lo cerca que había estado ese francotirador de matarlo, sus ojos se encontraron con los de Harry quien grito feliz de verlo, su sonrisa hermosa se apagó, supo en ese momento que había hecho algo mal, la mirada feliz era ahora una de miedo y luego hubo una chispa de lo que creyó era rabia, los recuerdo golpearon a Tony como una bala, mientras observaba la reacción de Harry, magia, susurro una parte de su mente, mientras pensaba en Wanda y Strange, Harry tenía Magia.
- ¡Qué demonios! - Dijo Randan quien había volado lejos luego de que Harry reaccionara, el miedo y tristeza coloro su rostro y fue eso lo que hizo que Tony se moviera, abrazando al niño, Tony empezó a susurrar palabras tranquilizadoras acariciando el cabello.
- No, no- seguía repitiendo Harry mientras se aferraba a él.
- Tranquilo mío bambino, todo está bien, ojos verdes, estoy aquí- decía en voz baja Tony mientras se aferraba al niño, tratando de calmar la angustia e ignorando resueltamente lo que había descubierto.
- No quiero ser un bicho raro, no, por favor, no me dejes- decía mientras lloraba.
- No eres un bicho, eres mi lindo ojos verdes, vamos amor calma- decía Tony mientras observaba las corrientes de lo que supuso era magia, suspirando siguió acariciando la espalda con un solo brazo, mientras maldecía su propia estupidez, había estado tan deseoso de ver a su hijo que no pensó en como esté reaccionaria al verlo herido- todo estará bien, lo prometo- dijo Tony, y lo decía en serio, abrazando con fuerza Tony se quedó al lado del niño hasta que este se calmó, Harry estaba callado solo sollozando y aferrándose a él, la magia alrededor se había calmado también, Tony se preguntó si Harry también había sido experimentado, o algo había sucedido para que tuviera eso, al final no importaba, Tony se había equivocado y había asustado a su hijo, lo menos que podía hacer era estar a él.
- No me odias- pregunto en voz baja.
- ¿Por qué lo haría? La magia es solo una ciencia que aún no se ha descubierto- dijo Tony.
- ¿Magia? La magia no existe- dijo muy serio Harry, con ojos rojos mirando a Tony.
- A, pero lo que acaba de hacer es magia, cariño- dijo con la sonrisa más amable Tony.
- Crees… que yo soy ¿mágico?- pregunto con los ojos muy abiertos.
- Si eres un mago Harry- dijo con una sonrisa enorme, sus ojos brillando con diversión.
- Eso es lo más…-
- ¡Cállate Randan!- gruño Tony, lo que hizo que el renombrado alzara los brazos mientras daba un paso atrás.
- Tú…- trato de preguntar Harry viendo a Thomas, lo que hizo que Tony lo mirara sombríamente.
- Eso es increíble, mocoso, por mí no hay problema, he visto algunas cosas locas- dijo mientras se encogía ante la mirada de Tony, satisfecho con la respuesta Harry sonrió.
- ¿Qué te paso?- pregunto triste mientras miraba el brazo de Tony, por supuesto Harry se preocuparía más por Tony que por descubrir que era un mago, con una sonrisa Tony le contó como fue su día, ocultando algunas partes no aptas para niños, no quería que Harry tuviera pesadillas, mientras hablaba su mente se iba a una persona que sabía podía ayudar a su hijo, era hora de hacerle una visita a Strange.
Año 1984
Tony Stark 24 años
Sirius Black 24 años
Harry Potter 4 años