El plan de Draco Malfoy para hacer feliz a Harry Potter

Harry Potter - J. K. Rowling
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El plan de Draco Malfoy para hacer feliz a Harry Potter
Summary
Draco Malfoy retorna poco antes de su tercer año en Hogwarts y solo desea que Harry, su maravilloso Harry, sea feliz. Utilizará cualquier maquinación que esté en su poder para brindarle una familia , incluso si él no es parte.
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Bendita oclumancia

Capitulo 4: Bendita oclumancia. 

 

02 de julio de 1993

 

—¡Draco! ¿Dónde has estado? Desapareciste casi una hora. La señorita Parkinson te perdió cuando fuiste por su bebida. 

 

    Narcisa se movió cual hada con su vestido de seda, tomando los hombros de Draco. No estaba conmocionado por el shock inicial de saberse desubicado en el tiempo, ni aterrado en virtud que su esposo e hijo, logros personales y laborales se esfumaron. ¡Ja, ja, ja! ¡Todo está en orden! Con sus muros altos y fortalecidos impidiendo que cualquier trauma psicológico saliera a la luz, optó por sonreír a su madre con ternura. 

 

—Investigaba la oficina de Búsqueda y Restricción de Dragones, aunque terminé en el pasillo de aurores. Por eso volví. No quiero bailar con Pansy otra vez. Me duelen los pies —Draco arrugó su nariz afilada en un puchero encantador para su madre—, ¡tampoco está Theo! ¡Los gemelos Weasley estaban apunto de atacarme! 

 

—Oh Draco —Narcisa sonrió, acostumbrada a los berrinches de su joven hijo mimado—, no debes dejar a una dama sola, no es de caballeros. El asunto de los Weasley está próximo a arreglarse —la visión de Narcisa se oscureció.

 

     En 1993, a finales de su segundo año, los Weasley estuvieron cerca de perder a su única hija. Algo sobre un basilisco en las profundidades de los terrenos de Hogwarts. Claro que jamás se enteró del chisme completo dado que no le interesaba y no utilizaría sus hilos para averiguar la salud de una muerta de hambre-traidor a la sangre. Odia a su yo adolescente. 

 

     En 2015, por parte de Harry, supo que era culpa de su padre Lucius, quien introdujo un diario maldito con el alma de Voldemort en la escuela la razón que casi asesina a Ginebra Weasley; y fue en 2016 como parte de una estrategia política de su madre que pagaron una suma cuantiosa a un editor jefe. El sorteo del Gran Premio del Diario El Profeta era un concurso anual organizado por dicho periódico, el ganador real fue sustituido por Arthur Weasley.

 

    Distrae a los Weasley con lo que más necesitan. Dales dinero y que se larguen lejos una temporada para enfriar el ambiente turbio que los errores de su padre reflejó. Las víctimas estarán felices y padre será libre. 

 

    Madre mató dos pájaros de un tiro. Mierda, Lucius debería estar pudriéndose en Azkaban. Todavía recuerda la pataleta que dio cuando lo corrieron de la junta escolar, ¡cuánta audacia!

 

—No te alejes, ¿mmh? —Narcisa habló dulce— pronto nos iremos. 

 

     Draco asintió inocente igual a su yo de trece años, aquel a quien no le interesaba la desafortunada muerte de niños mestizos o hijos de muggles. 

 

    Arrogante, presumido, engreído, ignorante y perdido en su burbuja privilegiada. 

 

—¡Draco! —miró las uñas brillantes y plateadas de Pansy sosteniendo su antebrazo. Allí está, pequeña, con el cabello corto que usó durante cinco años seguidos. No la señora magistral y elegante que solía visitar a Francia. 

 

     La carita de Pansy era redonda. Sus dedos picaron. Quería aplastar sus mejillas. Vestigios de pubertad se asoman en lo largo de sus brazos y piernas, mas no daría el estirón hasta en quinto año. 

 

—¿Por qué los gemelos terror dijeron que te buscara en el techo a la altura de tu vanidad? 

 

     Draco borró la runa de fuego de su espalda después de hablar con los gemelos Weasley, por lo que no habría un Draco con el trasero magullado esta vez. 

 

—¿Es verdad que te hicieron llorar? Tus ojos están un poco irritados ¿En realidad ellos...? 

 

     Por Merlín. Es muy chiquita. Draco siempre fue alto, está acostumbrado a los tacones de Pansy. 

 

—¡Ellos te han hecho algo! ¡¿Cómo se atreven?! Nosotros no nos metemos en sus asuntos. 

 

     O porque saben, saben lo que hizo su padre a la menor Weasley. Desean venganza.

 

—¡Por Salazar, Draco, háblame!

 

—Pensaba que el rubor de tu maquillaje te hace parecer como a una muñeca de porcelana 

 

     Los ojitos verde bosque de Pansy Parkinson se abrieron mucho. Con su vestido esponjoso y piel pálida, ella se asemeja a una muñequita de colección. 

 

—¡Uh, ah! ¡Cuánta agonía! Creí que teníamos algo especial, Draco. 

 

     Blaise Zabini sostenía su jugo de manzana con tal elegancia, Draco no pudo evitar reír. 

 

—¿Por qué no me susurras alabanzas como a la enana esta? ¡Estoy cansado de ser tratado como un trapo! ¡Nos separaremos y exijo la mitad de tu fortuna!

 

     Pansy rodó los ojos dramática. 

 

—Poco quieres para divorciarte de mí —Draco tomó el antebrazo de Blaise, siguiendo el juego—, compré una esposa y eso obtendré hasta que la muerte nos separe. 

 

     Blaise rio mostrando su dentadura perfecta, los rizos castaños bailaron. Median lo mismo ahora, pero a futuro él desarrollaría musculatura. 

 

—Te llaman Romeo —Blaise sonrió—, ahora suéltame o harás una escena. No quiero leer mañana en el Profeta que Draco Malfoy agrede a su esposo. Sería humillante. 

 

     Pansy empujó a Blaise a su izquierda.

 

—Madre indagó que tu padre fue expulsado de la junta escolar, ¿con el dinero que ha dado? ¡Debes explicarme! 

 

—Padre...

 

     Albus Dumbledore apareció en escena con una ridícula túnica amarilla y un sombrero de sol verde. Su sonrisa mística y amable engañaron a pura sangres, burgueses y magos con los que estrechó mano. Algunas lentejuelas de su túnica cambiaban de color, asemejando un árbol de navidad. 

 

     »No estoy entendiendo la maldita vibra«, pensó Draco. 

 

—Estamos agradecidos por las donaciones que el ministerio a organizado para el mejoramiento de las instalaciones de Hogwarts —dijo Dumbledore. 

 

—Hogwarts recibió más dinero este año, sin embargo, escuché que no contratarán un maestro de Cuidado de Criaturas Mágicas certificado en materia —le confesó Pansy. 

 

     Draco arrugó su nariz. Es verdad, es el año en que recibirá la paliza de un hipogrifo. 

 

     Albus Dumbledore levantó su varita en un movimiento fluido e inmediatamente sintió una presión en el pecho. 

 

—¿Draco? 

 

—¿Mi amorcito?

 

     El dolor se intensificó y cayó, sostuvo su corazón. 

 

     El mármol se rompió en miles de piezas. La gente se aglomeró a su alrededor, vio el rostro de su padre acercarse y luego el mundo sucumbió. 

 

—¿Draco? ¿Eres Draco? 

 

     Borroso. Un hombre entrado en sus treinta le sonreía avergonzado. Su cabello marrón y cicatrices fue lo primero que vio con claridad. Su pecho ardió y cerró los ojos adolorido. 

 

     Manos le sostuvieron la espalda, cuánto calor. Comenzó a retorcerse. 

 

—Draco, Draco, cálmate. Soy Remus. 

 

     Miró sus piernas y sus manos delgadas. Estas no son las manos de un adolescente. Este es un cuerpo adulto. Suspiró. 

 

—¿Podríamos dejar de cambiar de cuerpo por un minuto?

 

     Remus soltó una carcajada cansado. 

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