Inmortal She [H.P] [HoTD]

Se reunieron en la sala del consejo privado.

Corlys se sentó en lo que una vez fue su silla tratando de procesar la última hora.

Lucenys había regresado, pero no era su amada nieta. Era el mismo rostro, pero su cabello era negro como una lo fue el de Rhaenys y sus ojos eran como plata derretida, fríos y algo malvados.

No estaban los amables y brillosos ojos castaños de su amada nieta.

—En simples palabras — dio Viserys mirando a la bruja de Assahai — ¿Es y no es a la vez nuestra Lucenys?

—Había escuchado rumores de que envuelven a la casa Black — contestó la bruja, llevaba un extraño collar. Un Triángulo partido por la mitad y dentro de él un círculo — De cómo muchos de sus magos eran una segunda vida. Normalmente estos magos tienen dos destinos. O son destinados a la grandeza o se están condenados a la locura.

—¿Así que ella es una loca? — preguntó el príncipe Aegon.

—No exactamente. El que primero decidan atacar antes de preguntar es algo normal en cualquier miembro de esa familia — contestó la mujer — Si ella ostenta el título de Heredera significa que su familia hará lo imposible para que ella no caiga en la famosa locura Black. Después de todo, ella gobernará la casa el día que la cabeza de la familia muera.

—¿Gobernará? — preguntó Corlys. Lucenys había sido su heredera natural. Desde que el funeral de Laena la había estado preparando para que un día ella lleve a toda la flota Velaryon.

El agua había sido un elemento natural en Lucenys.

—El mundo de donde ellos vienen, de donde vengo, los magos no responden antes reyes. — comenzó a explicar — El mundo se divide entre el mundo mágico y el mundo de los muggles, personas sin magia. El mundo mágico tiene un gobierno en que las veintiocho familias más poderosas escogen al mago o bruja que los representa. Los muggles si tienen monarquía.

“ A esas familias se les conoce como los Sagrados Veintiocho. Nobles familias que jamás en su historia han mezclado su línea de sangre o personas con sangre muggles. Luego de la eliminación de la línea de los cuatro grandes, los fundadores del colegio de magia en nuestro continente, son pocas las familias las más representadas. Los Black encabezan ese orden de respeto y temor. Son una de los tres familias que fundó la sociedad mágica que tienen hoy en día, por lo que son considerados como la realeza del mundo mágico”

—¿Es decir que esta Lucenys es parte de una familia a la cual muchos temen?— preguntó Otto Hightower

—Los Black son personas a las cuales jamás debes ofender a menos que quieras sufrir las consecuencias — contestó la bruja — La familia Gaunt, mi familia, solía ser muy estimada porque somos descendientes de uno de los fundadores. Hace cuatro generaciones atrás, un segundo hijo de nuestra familia atacó física y carnalmente a una hija de la casa Black luego que ella se negara a ser cortejada. En sí atacar a una bruja es una gran ofensa a la Madre Magia. Los Black son vengativos, hicieron que el prestigio de nuestra familia desapareciera al igual que nuestra fortuna hasta volvernos una familia miserable y paria en el Mundo Mágico.

—¿Ese conjuro? ¿El que ella me lanzó? — dijo el príncipe Aemond con una mueca de dolor — ¿Qué era?

—Oh— una sonrisa algo sádica cruzó por los labios de la bruja — Una de las tres maldiciones Imperdonables. Es muy fiera para usar una sin que le tiemble la mano. La que ella lanzó fue la maldición Cruciatus, destinada a provocar dolor.

—¿Y cuales son las otras dos? — preguntó Jacaerys.

—El Imperius que busca controlar el cuerpo y mente de la víctima — respondió — Y la más mortífera de todas, de la cual no existe un contrahechizo, el Avada Kedavra, la maldición asesina.

Muchos en la sala vieron con miedo a la bruja.

—Pero solo en casos de vida o muerte —- calmó la bruja — La heredera Black es demasiado joven para ser una asesina. Además, el uso indebido de esas maldiciones hace que el que comete estos hechos será condenado a la cárcel.

Corlys sacó un collar de perlas. Eran pequeñas perlas en dos filas, un pequeño zafiro en forma de gota y debajo el sigilo de los Velaryon. Tenía planeado dárselo en su onomástica Quince, pero su nieta se suicidó con catorce años.

—Los Black y los Potter deben estar buscando sus grimorios familiares en forma de buscar tener de regreso a sus hijos — explicó la bruja — No sabemos cómo influye el tiempo en el mundo mágico. Al menos, sabemos que estaban en clases ya que portaban sus uniformes escolares.

—¿Clases? — preguntó Baela.

—Hogwarts. El colegio de magia y hechicería — empezó contar la bruja — Fundada por cuatro grandes magos: Godric Gryffindor, Rowena Ravenclaw, Helga Hufflepuff y Salazar Slytherin de la cual mi familia es descendiente directo. Por lo visto en los uniformes, ambos chicos son parte de la noble casa Slytherin.

—¿Su colegio fue fundado por brujas? — preguntó Otto —¿ Y las chicas estudian?

—Las brujas son el núcleo central de nuestra sociedad, sus vientres mágicos son los encargados de preservar las líneas mágicas — contestó algo molesta ante la pregunta de la Mano del Rey — A diferencia de aquí que solo ven a las mujeres como simples yeguas de cría. Las brujas se preparan en muchas ramas mágicas, son las encargadas de criar a los niños ante las Vías Antiguas y el camino de la madre magia. Muchas son las señoras por derecho de sus casas, como lo es en el caso de esta Lucenys.

—En este mundo Lucenys era mi heredera. La próxima dama de las Mareas — dujo Corlys contradiciendo a la bruja roja

—¿Y cómo acabó? ¿Muerta por un corazón roto y con un bebé en el vientre?

Corlys golpeó la mesa ante la insinuación amada nieta como una simple moneda de cambio. El reino le había quitado la corona a su esposa, y cuando nació Lucenys , Corlys reafirmó a su nieta como su principal sucesora.

Pero fue Corlys quien dio la señal para que el ataúd de piedra donde estaba el cuerpo de su nieta sea lanzado al mar.

—Deben saber que los jóvenes en mundo mágico, sobre todo los pertenecientes a familias nobles son muy estrictos con sus protocolos — dijo la bruja — El más importante, no pueden llamarla por su nombre de pila, primero deben tener confianza. Así que les sugiero que se dirijan a ella como Heredera Black y a él como Lord Potter.

—¿Entonces no podemos llamarla Lucenys? — preguntó Aemond.

— No mi príncipe — negó la bruja con la cabeza — No hasta que ella les dé el permiso de ser llamada por su nombre de pila. Deben ser cuidadosos con ella, su familia es una de núcleo oscuro. Lo cual me sorprende que sea prometida a una familia de la facción de la Luz.

—¿Facciones? — preguntó Rhaena.

—Tres facciones. Las familias oscuras como las Black, están inclinadas a practicar artes oscuras. Las familias de luz como los Potter, inclinados a encantamientos de curación y a la naturaleza. Y los neutrales, que practica artes oscuras y hechos de luz. — la bruja jugó con su collar — O los Black bajaron sus estándares de parejas o el chico es el mago más grande de su generación para que autorizaran ese compromiso.

Corlys miró el collar.

—No doy más de medio año para que ambos regresen al mundo mágico — comentó la bruja .

—¿Y si ella decide quedarse ? — preguntó Viserys, la bruja sonrió cruelmente.

—Una princesa sangre pura como una Black no dejaría para nada su derecho de sangre para quedarse en un mundo distinto al de ella — finalizó la bruja. 

Los segundos de silencio acabaron con la llegada de Alicent, Rhaenyra y Daemon.

—Lucenys y el joven mago ya fueron instalados — dijo la reina Hightower — Ella se dio un baño y se quedó dormida. El joven mago está en una habitación a parte esperando a que Lucenys despierte. 

──── ∗ ⋅✧⋅ ∗ ────

[1997]

Sirius bebió un poco de Whiskey mientras revisaba los pergaminos flotantes alrededor

Dos días sin su preciosa cachorro y mini cornamenta lo han mantenido en vela. Junto a Remus se atrincheraron en Black Manor lejos de los sollozos histéricos de Kreacher ante la desaparición de su pequeña ama.

—Están en mundo desconocidos sin ayuda — dijo su madre llevándose la copa de vino a sus labios — Es más fácil enviar que arrastrar. Envíenme.

—¿Madre? — Sirius la miró confundido.

—Por mucho que los hayas preparado necesitan a un mago más experimentado — contestó ella — Dile a los chicos que tengan un punto de llegada. Estaré con ellos, es al menos unos siete u ocho meses en encontrar la manera de preparar un portal para trabajar. Están desprotegidos.

Sirius miró a Remus y luego a Walburga.

Madame Black irá a proteger a sus niños.