
Chapter 2
"Por toda mi desesperación, por todos mis ideales, por todo eso amo la vida. Pero es complicado, y aún tengo mucho, muchísimo que aprender".
Sylvia Plath
Draco se encontraba en su habitación, pensando en todo lo que aconteció el semestre pasado.
Su aparente beso lleno de dominio no fue él último, de alguna manera desde que Potter lo proclamó suyo la línea establecida se borró por completo, claro hay temas que no se tocan por respeto del otro pero, hablaron realmente lo hicieron.
Recordándote ahora Harry debimos hacerlo, demostrar que al final siempre hubo cosas, elecciones, y personas que siempre van primero no pude comprenderlo hasta que te vi con ella del brazo, nadie nunca te prepara para lo que no te quieres enfrentar.
Supo lo dolido que estaba que le ocultaran las cosas, que lo subestimaron con la excusa de protegerlo cuando supo lo de Black, y su absurdo desenlace al final del curso.
Draco se pregunta, ¿Qué será verdadero? De todo lo que lo rodea, todos tienen "razones" por lo cual ocultar.
Y fue así que Draco le prometió a Potter ser siempre sincero incluso cuando no quisiera que lo sea. La sonrisa de Potter eclipsó la belleza de la luna en su totalidad.
Sin saberlo, fue condenado a una cadena de oro y diamantes que le fueron arrancados una y otra vez colocados en su corazón.
No tenía mucho que hablar de sí mismo, porque mucho de lo que lo componen son secretos y mentiras, cuando se lo expreso solo le pidió hablar de sus cosas felices.
Habló de sus amigos, de las pociones, de la astronomía.
No hablaron de sus padres, de los muggles de él. Ambos sabían, ambos se consuelan.
Aunque seguían atacando, soltando veneno, pero a solas eran simplemente ellos.
Es lo único que importa.
Obviamente su repentino cambio de humor fue captado por sus amigos, pero estos no preguntaron, no lo señalan, solo lo miran con preocupación aceptando sus decisiones. Claro por ahora.
Su tren de pensamientos se desvió por el rugido de su estómago, se levantó de su cama vistiendo sólo su ropa informal. Dirigiéndose a la cocina para poder buscar algún tipo de bocadillo ve a su padre pasear por los pasillos murmurando con alegría.
— El fin se acerca, será glorioso. Mientras su bastón resuena con un sonido constante de su caminata y su largo cabello volaba a su ritmo.
Draco, escondido detrás de la pared continúa congelado.
Su cabello refleja el desenfreno que estaba su mente, conteniendo su respiración para no ser detectado por su distraído padre. La única manera que se alegre de manera tan… Obvia quiere decir una sola cosa.
Soltó un débil sollozo mientras todo su cuerpo se sacudía con horror.
Lágrimas enmarcan la desesperación de su rostro.
Sus suposiciones eran sin duda, solo una pesadilla.
Debe serlo.
Porfavor
Porfavor
Debe serlo. Porque si no, Potter se enfrenta a él de nuevo y la suerte puede fallar.
Sus amigos, su familia. Las implicaciones de su regreso son el ingreso directo a su círculo, Pansy y… Theo, Blaise en un lugar desconocido completamente solo con su madre.
¡NO!
¡¡JAMÁS!!
Secando su rostro respiró profundo para tranquilizar el frenesí de su mente. El hizo una promesa, donde sería lo suficientemente poderoso y fuerte para que ni siquiera la muerte los toque.
Él lo complirá.
Antes de darse media vuelta para volver a su habitación, escucha el leve sonido del papel caer al suelo de manera inconsciente y espera que se aleje su padre para tomar la carta arrugada en su bolsillo.
De vuelta a la seguridad de su habitación la coloca en su escritorio, es una costumbre bastante… inofensiva su padre es bastante descuidado a la hora de salvaguardar sus cartas porque se siente seguro, sabe que tiene el control absoluto de todos los mientras de la familia por tanto no debe tener una traición.
Es la única manera que encontró para revelarse contra él, al menos.
Respirando profundo nuevamente para calmarse alisó su pelo y sacudió su ropa.
Necesita pensar, planificar.
Sabe que tiene mucho en su contra, su juventud, su estatus es de un mero heredero, no tiene ni las armas ni los recursos de acción.
Sentado frente a su escritorio se encontraba las cartas de poker de Blaise, en su caja tiene el dibujo de una X para que puedan distinguirse de las cartas de los demás. Lo supo.
Si tenía armas en la palma de su mano, se fueron acumulando a lo largo de los años gracias a Merlín su padre es un excelente político.
Y se rió, rió a carcajadas, ignorando la mirada desaprobación de los retratos que seguían su paso por los pasillos junto con sus comentarios despectivos, no tenía miedo, su padre no sospechara porque nunca quiere ver fuera de la superficie, claro excepto los materiales de chantajes.
Así se dirige a las afueras de la mansión, su extensión conectada a un bosque que exploraba de niño, fue a su escondite que nadie sabe. Ni quiera Theo, cuando llegó a un gran árbol este tiene un hueco en su tronco lo suficientemente grande para guardar cualquier cosa.
De ella salio una caja bellamente decorada, era de oro blanco y negro, con diamantes esmeraldas no pudo evitar pensar en sus ojos, sonrió.
Tienen la misma tonalidad de verde.
La caja le fue regalada por Theo a los 5 para que él pueda guardar lo que no pueda ser dicho, donde no tendrá que mentir o esconder.
Theo, su mejor amigo nunca necesito que Draco le guardará ningún secreto porque entre ellos nunca lo necesitaron.
Su entretenimiento delictivo, comenzó a los 8 años por tanto cuando abre la caja está repleta, con un amuleto de desilusión puesto se llevó la caja a su habitación.
Las personas piensan que fue solo monetariamente la razón que su padre esté fuera de Azkaban.
Fueron secretos, todos harían lo que fuera por mantenerlos.
Draco, por primera vez encontró estos satisfactorios.
Sentado una tarde, tomando té con su madre donde las charlas son cordiales y sumamente vacías, sabía que a su madre no le interesa realmente lo que pasa en su vida, en cambio Draco sabía exactamente la rutina de su madre.
Entonces después de que conjuró el tempus. Observó, que su padre iba tarde a la hora del té cuando se levantó. Su madre lo intercepta. Diciendo que está en su despacho con Severus que vino de visita, mientras tomaba su té y continuaba con su bordado.
En ese instante recordó un acontecimiento a mediados de los 9 años cuando por curioso espío por la puerta mientras su padre y severos charlaban, que normalmente siempre tiene un hechizo silenciador pero en esa ocasión no.
Severo salió de la puerta lo encontró, le enseñó un hechizo que tanto lo silencio como lo cautivó por completo y todo eso para que no diga lo que escuchó a sus amigos o su madre y le enseñó cómo podría utilizar, lo había olvidado por completo ahora las cosas cambian, el juego aumentan a su favor.
Se disculpó educadamente con su madre, mientras se dirigía a su habitación, hechizo su puerta, tomó su caja y la abrió. Tomando un pedazo de pergamino y su pluma escribiendo furiosamente ya tiene los recursos (los secretos) tanto las cartas de su padre como sus recuerdos de lo acontecido en la casa de sus amigos sobre las vocaciones de sus padres.
También ahora tiene un medio para conseguir dinero, porque nadie puede negar el poder que tiene un secreto y pagarán por él. Los slytherin no son diferentes a la hora de la dominación de sus enemigos. El poder y el dominio lo son todo.
Ahora solo queda planificar cómo utilizará este recurso, se los vendrá a los estudiantes de manera que sea un mero juego el cual pague algunos pagos pequeños.
Uno que otro favor, contactos para emergencia al menos este año. Ya para el siguiente podrá pedir y aumentar su precio pondrá amigo contra amigo, socio contra socio y al final.
Será el único beneficiado.
Ahora lo que falta es el cómo. Y cuándo.
Mientras escribía esto mordió severamente la pluma mientras subrayaba constantemente una interrogante ¿cómo mantener a sus amigos alejados cuando todo esté hecho? es esencial.
Terminado de escribir guarda el pergamino en la caja y recita el hechizo que lo mantiene protegiendo el contenido.
Sinceramente, alguien debe de agradecer a Snape adecuadamente por ese inmenso favor.
Sonriendo, su mente se vacío de cualquier contenido.
Protegiéndola.
Faltando unos pocos días para el mundial de quidditch se dirige a la casa de Blaise. Se pasará lo que queda de las vacaciones en Italia con su mamá.
Sí, eso suena como un maldito infierno.
Por eso, convenció a su padre que lo dejara un fin de semana en su casa.
Cuando salió de la chimenea y limpio los polvos restantes.
Blaise lo recibió con su sonrisa y lo abrazó con fuerza.
— Dios, no sabes como extrañe a mi rubia escuálida. Comentó divertido cuando se separaron.
Draco no pudo evitar reír.
— Pues esta rubia escuálida pateare tu trasero italiano en cualquier tipo de juego en los próximos días. Le devolvió la burla sin esfuerzo.
Blaise sin perder la sonrisa lo sujeta de la muñeca y lo lleva a su habitación, para comprobar de seguro la veracidad de su burla.
Hablaron de sus días, bromeando con todo y nada, Draco se siente ligero.
Se siente como si fueran simples adolescentes, como si fuera permitido serlo.
Entonces, lo olvida todo.
Estando con Blaise tiene ese efecto, te hace sentir una normalidad ligera que nunca quieres estar fuera de su foco.
Y quiera merlín, saben que ambos necesitan sentirse así al menos un rato.
No hablaron de ninguno de sus padres.
Al día siguiente después del desayuno se encontraban en la biblioteca, Blaise recostado en un gran sofá rojo vino deslumbrante, acostado tan descuidadamente pero manteniendo su ropa de marca lo suficientemente cuidada para no arruinarla, no sabía que alguien podía acostarse de una tan elegante.
Negó con la cabeza, enfocándose en su libro de astronomía, sentado en el sillón individual cuando llegó a cierta parte no encontró la información que quería, deberá buscar otro tomo.
Se levanta con elegancia descuidada con libro en mano le dice a Blaise si puede adentrarse al laberinto de biblioteca que tiene.
— Claro Dray, suerte en tu búsqueda y si te pierdes grita fuerte y claro justo como viste ese bichos el año pasado. Con un ademán lo invitó a seguir sin despegar la vista de su libro.
Poniendo los ojos en blanco, se va indignado.
Estúpido Blaise.
La biblioteca es magnífica, es mucho más grande que la que tiene en la mansión, y de muchos más idiomas.
Caminando con paso lento observando todo, le encanta la sensación de perderse en un mundo como este, cálido, silencioso y lleno de libros.
No lo ama tanto como Theo pero si lo cautiva, giro a la izquierda y de nuevo a la derecha hileras llenas de libros lo siguen distrayendo de la hilera correcta, siguió explorando deteniéndose en diferentes secciones.
Pociones, maldiciones, hechizos de magia oscura, rituales vudú, todo tipo de cosas de las cuales pueden soñar se encuentran aquí.
Y justo se encontró con un corredor, no era llamativo como los demás, era simple y solo tenía una sola hilera.
Curioso se acercó con un largo dedo pálido rozando toda la orilla leyendo sus títulos uno a uno, hasta que encontró uno muy desgastado y de un azul muy pálido que hablaba sobre los diferentes festivales y rituales de la magia salvaje.
Es ligero y no muy grueso, expectante lo abrió y dentro del mismo se encontraba una pequeña libreta muy antigua.
Su idioma era desconocido para Draco, excepto el título en latín.
Clausa clavis praesidium, Protección de la llave cerrado, cerró los ojos.
Protección…
Sabe gracias a su educación que estos rituales siempre tienen un costo.
Con la magia salvaje nunca se sabe, es impredecible, voluble y libre.
Te da lo que quieres a cambio te quita una parte de ti, es peor que la magia oscura porque al menos se trata de tus emociones se alimenta de ellas, en cambio la magia salvaje tiene voluntad propia y no es domesticable.
Solo sus favoritos son sin duda bendecidos y protegidos por ella, solo ellos llevan el honor y la voluntad de ellos mismo y no de la magia a quien sirven.
Aun con los ojos cerrados, tomó una decisión: se llevará el libro a casa, lo estudiará a fondo y hará lo que sea necesario.
Aunque el precio sea demasiado alto, lo pagará.
Y lo fue, se llevó todo lo que era, lo que una vez quiso ser, lo dejó encerrado en su propia oscuridad por demasiado tiempo.
Mató su alma.
Y lo hundió en el pozo más profundo y oscuro, sin voz, sin brazos ni piernas.
Pero no se arrepiente.
Esa noche se encontraba la señora Zabini con ellos, la señora siempre fue demasiado simpática, demasiada observadora de un modo incómodo cuando la miraba de esa manera.
Blaise siempre se asegura de que tome su asiento a su lado lo más distante de su madre, cada vez que sus ojos oscuro miran a Blaise adivinando sus intenciones su dulzura se convierte en veneno cuando comenta cualquier a Blaise
Cada vez, Draco coloca su mano en su muslo recordandole que no está solo y que no lo estará.
En uno de esos momentos Draco se perdió en sus recuerdos, cuando ambos terminan de enterrar a los amantes, la clara participación de Draco, Blaise la oculto con uñas y dientes pero se aseguró de estar a su lado en esos momentos, escuchando a escondidas como la dulce voz de la señora Zabini agradeciendo a su hijo acariciando su cabello donde le recalca que nunca pierda su sonrisa, que es lo único que siempre lo protegerá hasta de ella misma.
Draco siente como el vómito sube a su garganta.
Blaise le preguntó después en esas noches, ¿cuándo será su turno de terminar en el patio? Draco solo pudo abrazarlo.
Pero Blaise siempre mantuvo su sonrisa aun cuando lloraba, siempre.
Ojalá pudiera arrancarse, ojalá la borrase para siempre de su memoria.
Ojalá la que termine muerta en el patio sea la señora Zabini.
— Draco
Una voz femenina lo despertó de sus pensamientos.
Pestañeando levemente se sacudió.
Con una sonrisa cordial, le preguntó qué deseaba.
— Tranquilo, la juventud siempre tiene un pie dentro del mundo dentro de su cabeza y otro en sueños un poco…
Con una risa tan hermosa como la persona misma dejó en el aire las palabras sin completar, en cambio Draco se preguntó si el maldito vino podría ahogarla.
Antes que dijera nada más, Blaise con una sonrisa tensa se interpuso elevándose sobre la mesa
— Lo siento madre, estamos cansados y debemos partir a mi habitación.
— ¿Por qué con 14 años aún siguen compartiendo la cama? No sabía que tenían esas libertades en su amistad.
Comentó divertida, sabía que no pasaba nada entre ellos, pero le encanta atormentar a su hijo porque sabe que todo lo que le hizo fue para que sea incapaz de conectarse con alguien, de hacerle saber que todo es efímero y que nada vale la pena excepto la belleza del poder.
Qué el amor te hace débil, y siempre ha considerado a Blaise como uno de ellos.
Tal vez, por eso no lo ama. Porque ella es incapaz de hacerlo.
Blaise no le contesta, nunca lo hace todas las veces, pero parece que ella tiene más que decir, que cortar y lastimar.
— No te culpo hijo, Draco sinceramente está creciendo bien, elegante y lleno de pómulos.
De un momento a otro Blaise se encontraba inclinada encima de su madre que estaba bastante desinteresada en la reacción de su hijo mientras tomaba un sorbo de su copa de vino.
Blaise en cambio su sonrisa rozaba en lo siniestro cuando su rostro se acercó aún más al de su madre.
— Madre, se lo que estás haciendo y lo que deseas, viviste siempre con tus propias reglas pero dejemos algo muy claro si te atreves a tocarle un solo pelo de su cabeza, que tu perfume no roce con sus manos y sus extremidades, porque te juro por Merlín bendito que Ruberò fino all'ultima goccia del tuo potere, e quando ti ritroverai vuoto e vuoto, ti darò il coltello per tagliare il tuo bel collo e il tuo viaggio di successo culminerà nel giardino fiorito nel cortile.
Draco curioso inclinó la cabeza, Blaise nunca lo dejó aprender italiano argumentando que sería aburrido si siempre sabe todos sus insultos.
Pero sabe, que lo que dijo fue clave.
Por la mirada casi contemplativa de la señora Sabini, y la mirada llena de sincera e intención de Blaise.
En toda la habitación la tensión es palpable, sabe que no debería hacer esto, le da poder y dominio a su madre para atormentarlo mostrando su debilidad.
Pero debe saber algo… Que no puede permitirse que ocurra.
Draco no es estúpido, sabe lo infame que es la señora Sabini.
— Hai la forza per una cosa del genere? Prenderò quello che voglio, quando voglio, come sempre Blaise. Contestó muy calmada la señora Sabini, tenía una sonrisa divertida en sus labios rojos sangre.
Blaise se rió secamente.
—Madre, che è chiamata il fiore rosso. Quello che pensi sia la mia debolezza è la mia forza, provami e vedrai che sono stato un apprendista molto efficace. Su voz lleno de puro desdén y desafío.
Draco, asustado lo sujeta del brazo para detenerlo, las cosas se pusieron rápidamente aún más intensas.
— Para Blaise, por favor. Le rogó, lo último que quería es que su madre lo aísle de todos ellos.
La señora se carcajeó, sus dientes blancos brillaban en contraste con su labial.
— Sei debole figlio mio, alla tua età disegnano quello che sarebbe stato un magnifico futuro, invece un giorno tanta debolezza può ucciderti, sarebbe triste se ti trascinerò dietro il bel ragazzo Malfoy, vero? Hazle caso a Draco es lo suficientemente sabio como saber cuando detenerse, buenas noches.
Con la copa en alto los despidió de su presencia.
Cuando llegaron a la habitación, un Blaise con sonrisa tenebrosa le hizo prometer que nunca, bajo ninguna circunstancia se encontraría solo con su madre por mucho tiempo.
Draco lo miró, sabía que tenía otra elección delante de él.
Podría acceder con sinceridad y solo chequear el libro cuando esté de visita, o podría mentirle a su brisa ligera, a su manto de normalidad, a su hermano, solo para que en el futuro pueda estar a salvo.
Y todo por una suposición que podría ser falsa.
Lastimaría a su familia, rompería la confianza absoluta de su hermano.
Solo para protegerlo de una suposición.
Sintió como un rayo le atravesó el cuerpo, cuando se oyó a sí mismo decir que sí.
Mantuvo sus ojos en Blaise mientras la sonrisa de este se convertía en la sonrisa que siempre fue para él.
Arriesgaría lo que sea, hasta su cordura si eso signifique que estén a salvo, que esté a salvo.
Draco odia cada minuto.
Draco se odia a sí mismo.
Lo que no sabía en ese momento, que toda inocencia, que toda alegría infantil y cualquier deseo de normalidad se volvería un concepto desconocido para mi desde el momento que la mano de ella se posó en mi hombro con coquetería.
Inhumano, desde ese momento soy lo que sea menos un ser humano.
Me odio tanto, tanto tanto tanto tanto.
A pesar de los años, eso todavía no cambia.
Perdón Blaise, sé que me perdonaste pero yo no puedo perdonarme a mí mismo.
Tal vez, al final me lo merecía, yo la busqué y sabía, sabíade sus intenciones conmigo, la manera que me veía, como reía. Yo le di las armas para romperte para siempre.
Lo siento tanto Blaise, ojalá me odiaras, ojalá, ojalá.
Ojalá me odiaras como yo me odio a mi mismo.
Porque sus instintos le dicen, que es verdadera tal suposición por muy estúpidamente suicida que sea.
Eran más de la media noche, se levantó de la cama y se observó en el espejo.
Una pijama de algodón blanca, ligera y transparente, se notaba los resultados del quidditch, se observa etéreo con su cabello revuelto y sus ojos soñolientos.
No quiere hacerlo.
No quiere
Es demasiado
Es solo un niño
Tiene miedo
Tanto tanto miedo
Se suponía que su virginidad le pertenece a Harry, no quiere a nadie más.
Estará sucio de por vida.
Mira a Blaise, pacifico en sus sueños, piensa que sería de él en el tiempo que se dé comienzo la segunda guerra mágica.
Escucha su risa hueca llorosa.
Siente la humedad de la tierra.
La pregunta, siempre la misma pregunta.
Huele la sangre, los fluidos y el…. Lubricante de olor a rosas en las ropas de Blaise.
Es definitivo, no pasará por eso por más tiempo.
Si es que logra tener éxito, claro. Piensa sarcásticamente.
Con un respiro tembloroso se dirige a la puerta, tiene la desesperada sensación que cuando vea a Potter de nuevo lo sabrá, igual que Theo.
Potter solo lo ignorará, en cambio Theo lo mirara a los ojos, siempre.
Y tiene miedo.
No quiere enfrentar esas miradas, ni las sonrisas de Blaise más tarde.
Sabe, que ningún jefe de casa acepta que sus libros sean llevados fuera de su propiedad, excepto cuando dan su consentimiento.
Tiene a su favor que siempre lo subestiman, a sus ojos es solo un mero títere de la familia Malfoy, con ambición pero nunca suya, Y de solo pensar que necesita un simple libro astronómicos que (casualmente Draco agrandó para guardar la pequeña libreta), en su biblioteca en lugar de su hogar aumentaría su ego, que lo quiera tanto para pasar por eso solo le harán saber que es un niño estúpido y débil.
Desear la atención y amor de un adulto será visto como una debilidad para ella.
Y lo es en realidad.
Draco sabe cómo alimentarlos, su padre vive de ello.
Solo debe de darle algo a cambio, hacerle creer que tiene el poder y que ganó.
Cuando salió de la habitación, se sentía entumecido como si su alma estuviera fuera de su cuerpo observando todo.
Y grita, grita que se detenga pero no lo hace.
Grito tanto, que su cabeza se llena de un ruido sordo.
Cuando llega a la sala, ella se encuentra allí con un camisón de encaje blanco lo suficientemente transparente que sus pecho se visualizan con claridad, tuvo una sensación de náuseas en la boca de su estómago.
Pero educa su rostro y se sienta en el sofá, a su lado.
— Buenas noches señora Sabini.
— Por Favor, llámame Selen. Mientras esta se inclinó ofreciéndole una copa de vino tinto sus senos chocaron accidentalmente con el brazo de Draco.
Se estremeció.
— Gracias… Selen. Contestó nervioso tomando la copa.
Ella se rió encantada mientras lo contemplaba, una delicada mano se posa en su pierna.
Siente que su toque lo quema como ácido.
Pero le sonríe, sus ojos se encuentran con lo suyos codicia decían, Draco como siempre sabe que darles cuando lo miran así, como su padre.
Mostrar vulnerabilidad, ellos aman tener el poder.
— Una noche hermosa, ¿no crees?
No, no lo es.
Todo es tan hueco, como el olor de su perfume dulzón.
Muerto como sus frías manos sobre su muslo.
Y vacío como sus palabras, porque nunca se interesaría en las respuestas.
Draco asintió, mientras ella colocaba su otra mano en el hombro.
Esa noche, esa noche dejó de ser humano.
Se convirtió en una suciedad permanente con un rostro bonito.
Una hermosa muñeca.
Se pregunta, cuando se despidió de Blaise al día siguiente, si Harry alguna vez tendrá el valor de preguntarle de frente lo que sucedió o le interesaría al menos.
Harry Potter, es en realidad bastante distante de cruzar la línea si eso significa hablar de los sentimientos.
Sabía, que nunca haría ninguna de las dos.
En cambio tendrá que seguir este camino trazado que eligió si quiere que Theo se quede quieto.
Draco, llegando a su casa se pregunta. ¿Qué quedará de él cuando todo acabe?.
¿Encontrará un fin, siquiera?
Cuando se encontraron en el mundial esta más hermoso que siempre, su pelo rubio suelto a los lados, vestido con un elegante traje negro resaltando su palidez y sus fríos ojos grises.
Parece como el invierno, duro, frío y llamativo.
Su respiración se aceleró cuando lo vio interactuar junto con su padre con los Weasley pero todo quedó como ruido de fondo cuando sus ojos se posan en él.
Dice una provocación, quiere ver el fuego de su juego, pero algo ha cambiado en ellos.
Se ven más calculadores, más fríos.
Más viejos y cansados.
Más rotos.
Y supo entonces, que algo sumamente malo pasó.
La pregunta radica, ¿Cómo puede eso afectarlos a ellos?
Y la más importante, ¿Debería involucrarse?
Sinceramente no desea hacerlo, está feliz en como están las cosas.
¿Es egoísta elegir la ignorancia?
¿No tomar una medida o posición que al final resulte un fracaso absoluto?
Esperará y verá que sucederá. Se encogió de hombros y se concentró en el partido.
En la estación Theo no dejaba de verlo, cada vez que se distraía o se encontraba con su mirada sabía que pronto tendría una confrontación.
Se excuso que iría al baño obviamente Theo captando la indirecta lo siguió, caminando por el pasillo se encontró con Potter y justo en ese jodido instante Theo lo empujó en un compartimiento lo último que vio fue los ojos abiertos que lo observaron con sorpresa.
Genial, ahora Potter se pondrá posesivo, él siempre tiene algo con Theo.
Theo claramente lo sabe.
Le importa una mierda Potter.
Sujetando su muñeca, mandíbula apretada y unos ojos verdes claros como las hojas de las flores lo miran con dureza pero también con miedo.
Mucho, mucho miedo.
Draco suspiró, sabía que no podía ocultarle el cambio, podría mentirle al mundo entero con su fachada menos a él.
Theo siempre lo encontrará, por primera vez no le gusto que lo hiciera porque tendrá que mentir, abusar de su confianza para poder mantenerlo a una distancia, es una maldita suerte que no comparta habitación con ninguno de sus amigos.
Tiene que ser muy cuidadoso a su alrededor, Draco debe convertirse en alguien totalmente desconocido para Theo, así no podrá intervenir y evitar todo lo que hará.
Porque si lo hace, nada habría valido la pena, cada sacrificio y planificación a la basura no puede permitirse. Ya no puede dar vuelta atrás.
Ya no, no después de eso.
— Theo, sabes que últimamente padre está muy contento, y a veces cuando lo está hace cosas terribles a otras personas y tuve la desafortunada suerte de presenciar.
Theo frunce el ceño con preocupación, se sienta y guía a Draco a su regazo, gracias a su muy diferencia de altura Draco parece encajar perfectamente, mientras se acurruca en su pecho y Theo lo abraza desde atrás. Eso le permitió respirar.
Se siente como si guardara la respiración todo el tiempo, que olvidó cómo no hacerlo.
Él lo sabía, por eso se conectan de una manera tan cercana, tan unidos como si antes estuvieran unidos en el útero de su madre.
Su hermano es su oxígeno.
No hablo, siempre fue de pocas palabras. Pero el peso de su barbilla en su hombro y su mano acariciando sus costados fue suficiente.
Estoy aquí, siempre.
Y lo hizo, cada vez. Hasta cuando le rompí el corazón.
No habían podido hablar desde el final del curso, porque claramente ninguno podía enviar correspondencia al otro por seguridad.
Las cosas estuvieron tensas en sus primeros encuentros, una por los celos que obviamente no confiesa, dos porque no le dijo nada de los torneos de los 3 magos, y 4 que todos incluyendo al nuevo profesor ha fomentado su rivalidad.
Sus encuentros han sido escasos en los últimos 2 meses, las pocas veces fueron en aulas abandonadas y solo se besan, no hablan. Es como si supieran que sí lo hicieran las cosas se pondrán mal. Mientras espera a Potter lee el libro, estuvo aplicando y practicando algunos rituales y hechizos bastante útiles, toma notas que salvaguarda, cada vez más cerca de traducirlo todo al francés para aumentar la potencias de los hechizos, aún no encuentra que le sea útil específicamente en lo que se refiere a la seguridad de su familia.
La cosa es, que Draco extraño terriblemente a Potter tanto que siempre queda como un maldito estúpido ante él y sus "amigos".
Pansy, aunque muchos no lo crean es bastante inteligente e intuitiva, le espetó que debería tomar a Potter del cuello y aclarar su mierda antes que de nuevo todo se salga de control.
Pansy, puede ser algo así como su conciencia. Le recuerda que no está solo, no lo estaría nunca.
Draco sabe que no será por mucho tiempo pero lo va atesorar todo lo que pueda.
Unas semanas antes de la llegada de los otros colegios, decidió que era hora de comenzar su plan. Espero pacientemente que todos tomen su lugar en la sala común sus amigos en los sillones de la esquina, justo al frente de ellos usualmente se encuentran Daphne Greengrass y Millicent Bulstrode son mejores amigas pero es bien conocido su rivalidad, en todos los sentidos, desde las notas hasta su propia belleza.
Sin mencionar que Daphne es la chismosa local de la casa, no solo sería su primer cliente sino que regaría la voz por él.
Sentándose perezosamente en el sofá al lado de Pansy, Theo le lanza su habitual manzana sin mirarlo de nuevo. Casi se sintió como algo normal.
— ¿Cómo te fue con Snape?. Pansy abre su habitual revista esperando su respuesta.
— Como siempre, ayudándolo con las pociones mientras corrige ensayos. Contestó mientras mordía la deliciosa manzana.
Frunciendo el ceño como si pensara en algo que se le estaba escapando, de pronto sonrió, todos en la sala estaban atentos como siempre, siempre sus palabras son esperadas de su príncipe.
De algo debe servir su influencia.
— Cuando estaba preparandolas Snape colocó un hechizo silenciador y recordé un momento de mi infancia cuando visito a mi padre y me encontró espiando me enseñó en ese entonces un hechizo bastante interesante que no solo hizo que guardará silencio sino que él también guardaría el hecho que me encontró en tal situación lo había olvidado por completo.
Pansy arqueo su ceja, hasta que la mire a los ojos señaló el titular de su revista sobre algún nuevo rico de manera juguetona, y ella entendió.
Aquella vez de niños cuando les dijo una una realidad futura.
Ganaré dinero, el suficiente para irnos los 4 lo suficientemente lejos posible de aquí. Todos asintieron creyendo en su palabra.
Sus ojos llenos de compresión, un guiño coqueto de Blaise y un asentimiento de parte de Theo.
Claro, este último "sabe" el motivo del comienzo de tal acción.
Primer paso, desviar la atención de Theo, hecho.
No le fue difícil a Pansy seguirle la corriente.
— ¿Hechizo? Por merlín eso es fantástico, debes explicarme correctamente.
— No puedo nombrarlo porque solo el primer lanzador puede otorgar el permiso. Eso es ciertamente mentira, desde el momento que Severus le enseñó el hechizo solo el puede tener tal autorización.
— Pero si te puedo explicar su estructura, el lanzador debe lanzar primero el hechizo antes de que sea revelado el secreto, hace que la contraparte sea incapaz de hablar porque si trata de delatar, se convertirá en lo que más teme por el tiempo de al menos 20 minutos, en pocas palabras la contraparte no puede revelar ni el secreto y a quien se lo confesó.
— Y va para ambas partes, el lanzador no puede revelar el nombre de quien le dijo el secreto.
— ¿Entonces, qué nos asegura que no se puede forzar una confesión al respecto?. Preguntó Pansy con la cabeza inclinada ligeramente.
Por supuesto, los Slytherin son desconfiados por naturaleza y necesitan más seguridad que esa.
Las vio de reojo, siendo las Slytherin que son actuaron con indiferencia pero ninguna de ellos engaña el ojo de Draco.
Tienen curiosidad.
— La misma condición de castigo aplica para un tercero, es bastante simple pero despiadado. Hizo un ademán de indiferencia.
— Muy Snape. Estuvo de acuerdo Pansy.
Una pausa, todos se encontraban asimilando lo dicho por su príncipe a su amiga.
Draco sonrió internamente, sabe quien preguntara a continuación.
— ¿Cómo puede ser verificado dicho hechizo?. Dijo Daphne.
Bingo.
Los Slytherin pueden ser tan predecibles en algunas ocasiones. Y Draco fue entrenado para ser el mejor.
— Porque fue de su creación. Se escuchó un jadeo general.
— Entonces, ¿por qué te lo diría?. Preguntó confundida, entrometida.
Sonriendo con frialdad, por la falta de decoro de Daphne. Está bajo la cabeza en señal de disculpa.
— Es mi padrino, como sea es un hechizo fascinante, nadie nunca se arriesgaría a exponerse de esa manera al tratar de romperlo.
Sin más, se dispuso a ir a descansar a la habitación, dejando atrás a una pensativa Daphne y su mejor amiga muy callada.
Impactadas.
Draco sonrió con satisfacción, lo que no sabían que el hechizo para que funcione en su totalidad, debe ser lanzado después de revelar el secreto así se podría aplicar ambas condiciones, también el lanzador controla el castigo, es decir si sienten la tentación de delatarlo la magia de la persona enviaría pulsos a la suya avisando inconscientemente de su aparente traición. En pocas palabras no solo tiene el control de quien hechiza sino también el poder castigarlos, y lo mejor de todo como no cumplió del todo con los requisitos puede revelar el nombre y el secreto de quien confeso.
Necesitaban la seguridad de que su secreto sería protegido, y que podrían conseguir una de otro, porque no mencionó deliberadamente que guardaría el secreto, sino solo el nombre de la persona en cuestión.
No podrán evitar la tentación.
Y más teniendo en cuenta que una traición directa solo sería pagada exponiéndose a sus enemigos, les brinda la seguridad para dar el paso.
No solo creará su negocio lucrativo de información, sino que tendrá bastante armas para el futuro.
Porque vendrán a él, eso es lo que hacen, conoce bien a sus serpientes.
En 3 días Daphne se acercará primero.
Así fue, justo cuando se separó de su grupo porque se contraría con Potter solo hizo doblar una esquina para ser interceptado por ella.
Con preámbulo, lo jalo discretamente a un pasillo vacío y lanzó un hechizo silenciador. Bastante precavida, bien.
Le pregunto si le interesaría unos 600 galeones en intentar el hechizo con ella, claro accedió con indiferencia.
Otra ventaja es que el hechizo es no verbal y su movimiento de mano es complejo, tuvo que observar el recuerdo varias veces para memorizarlo.
Cuando terminó, un hilo azul los unía.
Dándose cuenta que funcionó el hechizo preguntó si su amiga se había acercado, Draco le contestó que no, entonces ella solo sonrió maliciosa.
Oh, esto se pondrá interesante.
Draco le propuso que por el doble de monedas, no solo le avisará cuando se acerque sino también puede esparcirse cualquier rumor de su elección de su tan querida amiga.
Esta asintió, le indico se que inclinara hacía ella para decirle en su oído, Draco obedeció.
Cumplido ya su propósito Draco se despide de ella, cuando de pronto ella le pregunta el tiempo límite del pago, él voltea y le indica 3 simples cosas.
— El dinero lo invertiré en la nueva empresa de tu padre, bajo la identidad que le enviaré por correo en los próximos días.
— En el momento que se expandan con éxito los rumores y te llegue la notificación de ella, harás lo primero que te indique.
— Un último recordatorio, si tratas de traicionarme en incumplimiento de nuestro trato el castigo sigue siendo el mismo, estoy seguro que no deseas que tu amiga sea la que gane, al final.
Con una sonrisa irónica y cruel se da la vuelta y la deja allí sola y templando.
De la emoción, de la adrenalina, del poder. Que ignoró la sensación de que algo andaba mal.
Amigas contra amigas.
Y con la protección de cierto ritual en luna llena, que asegura que los Jefes de casas nunca lleguen a su identidad, diferentes identidades tomarán forma en los recuerdos de sus clientes sin dejar rastros algunos cuando quieran indagar.
Aunque pagó un precio, cada vez que lo realizaba, era la sangre de los animales recién nacidos, lloraba junto con ellos cuando los apuñalaba. En cada práctica sentía como la presencia de la magia lo rozaba como una mano delicada y un poco fría en su hombro, no podía odiarla porque fue su decisión hacer esto, la magia no influyó en él en ninguna de sus decisiones.
Y cada vez que lo retaba, lo esperaba para ver si se arrepentía.
Draco no lo hizo, aunque cada vez que asesina a esos animales inocentes las lágrimas nunca lo abandonan, pero no se arrepiente.
Ni una sola vez.
La magia salvaje, es como una entidad misteriosa, se sienta en tu mesa y negocia contigo pone un precio a su uso, pero de nada importa que hagas cada proceso correcto si no lo haces en serio, sin arrepentimiento, sin miedo, que tus sentimientos los domines por completo, y a veces aunque cumplan todo eso, no siempre acude a ellos, porque como es tu elección también es la suya acercarse es sin duda la de ella.
Nunca usa su influencia ni te manipula, acudir por propia voluntad, te lo devuelve con fuerza el precio que pagaste.
Draco desearía que todos sus errores, sus pecados no fueran suyos para cobrar, sino para pagar.
Tan diferente a la magia oscura o clara, donde los sentimientos o intenciones no importan, excepto que la magia salvaje desea darte su favor si es que lo desea.
Es él poder más antiguo, de ella nació la magia oscura llena de emociones fuertes y cosas crueles. En cambio la magia blanca son intenciones y protección llena de amor, la existencia de una brinda equilibrio a la otra para existir.
En cambio la magia salvaje no es ninguna de ellas, no necesita equilibrio, ni es representada por ninguna emoción o acción y es por eso que es tan temible, porque no la entienden.
Siempre condenan lo que no comprenden, pero aun así es respetada y reverenciada.
De alguna manera, a pesar de lo desgarrado que está por dentro, es satisfactorio que él mismo escoge su destino y que tal sacrificio es pagado de vuelta con la misma fuerza, cada vez que la usa la sensación se siente como…. Familiar, como si la magia lo abrazara, fría y silenciosa.
2 semanas después pasaron muchas cosas, Millicent se le acercó preguntó justo lo mismo que su antecesora, comprendió de inmediato que debía ofrecer algo ya que ofreció el título de una tierra no deseada que su familia desecho hace años, a cambio que le revelara su tarea. Draco consideraba bastante buena su oferta pero el negocio que invertiría sería un éxito entonces tuvo que encontrar un enfoque diferente, le daría la información pero no sobre los rumores, no sospecharía ya que el "hechizo" lo obliga a no nombrar a nadie, excepto el secreto mismo, por tanto debe ser un rumor que cualquiera pueda comenzar, por ende no puedan relacionarlo, en cambio le pidió un abogado notario bajo un voto de silencio para que pueda estar a sus servicios, tal voto debe ser presenciado por el mismo y aprobar las condiciones.
Así, ganaba no solo unos terrenos que podía vender, sino un lugar en la junta directiva si sigue invirtiendo, de aquí a 6 meses ya será unos de los accionistas mayoritarios.
Se preguntaran muchos fuera de su casa cómo es posible que simples herederas pueden tener tal poder, tal vez no tenga poder contra un jefe de familia pero tienen la suficiente autoridad para manejar ciertos asuntos solos, siempre y cuando al final de mes ellos vean los beneficios para la familia, junto a la protección que Draco se colocó, las cosas marchan bien.
Y así fue como la guerra entre las dos familias comenzó, una rivalidad a un extremo que ahora sus casas son participantes ya que se calumnió al heredero de sus casas.
La reputación lo es todo para los Slytherin tanto los actuales como los que no.
Los procesos comenzaron, cuando él abogado pasó por el colegio por "algunos negocios para la heredera" hicieron el voto y lo hizo su cabecera hasta que tenga la edad suficiente para hacerse cargo él mismo, el abogado será sus piernas y cara por él.
Cerrando el trato con un hermoso anillo con un diamante cristalino en el centro, que se asegurara que estar del lado de Draco será beneficioso para él también, para evitar futuras traiciones.
No lo malinterpreten, no doblega su voluntad, sino que inconscientemente vea constantemente un futuro más comprometedor a su lado.
Él no ha llegado tan profundo en la magia salvaje como para doblegar la voluntad por completo de alguien, al menos por ahora.
El solo influye, nada más. Le interesa sus opiniones y estrategias ya que estas son abundantes junto a su conocimiento, es un hombre inteligente, sutil y astuto, sabe jugar bien.
Pero las decisiones serán tomadas por Draco al final del día.
Pagó muy caro para que sea permanente, puede quitarse el anillo o hasta se lo pueden robar, la clave era que el anillo entrara en contacto inmediato para que se activara el ritual hace que el hechizo aplicado al anillo sea tan sutil como un pequeño gusano invisible pase desde su dedo hasta su núcleo mágico y se fusionen, activando en menos de 5 minutos su funcionamiento.
Las cosas desde entonces marchan bien, su traducción de igual forma encontró bastante cosas interesantes por ahora que utilizará en un futuro cercano, las cosas con Potter se han calmado y comenzaron a hablar más tiempo, no preguntó su cambio y lo agradeció.
Lo extrañó tanto, que cuando está con el olvido su suciedad, su desgarradura, el quisquilleo de la magia en sus venas.
Sus amigos lo apoyan en su negocio, les aseguro que cuando comience a dar frutos les contará a fondo sus planes, ignorando el punzante odio en su garganta cuando mintió.
Cuando a pesar de ver un cambio cada vez más obvio para ellos, confían plenamente en él.
El sabe que el uso constante de la magia salvaje le facilita el uso de su máscara, él sabe y se lo permite.
Daphne hizo bien su trabajo, algunos se han acercado en estos días, ha estado ocupado con todo, su negocio, sus tareas, sus amigos, Potter y sin hablar de la llegada de las escuelas sumando rápidamente activos a su negocio.
Hasta Potter se dio cuenta de lo ocupado que ha estado últimamente.
Y ahora sabe, con certeza, que él estaba en lo correcto con su suposición cuando a Harry lo eligieron como campeón.
Con un nudo agudo, los oídos le pitan con furia sus ojos entrecerrados se da cuenta que tiene pánico.
Pánico de lo que puede pasarle a su Harry.
Y que de una manera está seguro que esta vez no podrá evitar que resurja.
Todo está tan malditamente bien organizado esta vez, alguien está moviendo los hilos.
Sus manos apretaban los cubiertos con mucha fuerza, con un brillo salvaje en sus ojos hasta que escuchó el susurro de Blaise diciendo que se calmara, agradeció a Merlín que pareciera sumamente enojado.
Pero ellos saben que es miedo puro.
Respiro profundo, y observó cómo Weasley mira con evidentes celos a Potter mientras Granger está aturdida como todos.
Se desata el infierno, una vez más en Hogwarts con Harry Potter en el centro.
Más tarde esa noche, se encuentran donde un furioso y asustado Potter lo espera, argumentando la aparente pelea con su mejor amigo.
Draco, como siempre, decide decirle lo que piensa.
— Compartir un trauma, no los hace amigos y créeme que sé de eso, siempre es algo más que los conecta, en tu caso es todo lo que tienes y él no. Le dijo mientras se sentaba en su regazo, las manos de Potter rodeaban su cadera susurrando en respuesta.
— Puede que tenga sus defectos Draco, pero él es mi amigo tiene una parte como tu y yo, oculta, solo que no puedes comprender su oscuridad, es solo que duele pasar por todo esto. Draco lo besó dulcemente en los labios como consuelo.
— Yo se que no hiciste nada malo, aunque sigo manteniendo lo que dije, espero para tu tranquilidad que él mismo se de cuenta pronto, ¿Qué dice Black al respecto?
— Aún no se lo he dicho, quería encontrarme contigo aunque sea el toque de queda, quería saber si todavía eres mío Draco. Dijo con tranquilidad, como si comprobara algo con solo mirarlo a los ojos, pero aun así Draco lo dijo.
— Yo siempre lo seré Cara rajada. Sé puso serio.
— Debes tener cuidado Potter, todo esto fue una planificación bastante precisa, y sin mencionar que escuche un susurro perturbador de parte de mi padre estas vacaciones, ve con precauciones.
— Tranquilo, Hermione me ayudará. Contestó mientras acariciaba su pelo y se fundían en un apasionado beso.
Y lo fue por mucho tiempo, ser suyo, hasta que ya no quería serlo, hasta que dejó de serlo.
En la noche de la última tarea Harry volvió con la copa.
Pero no volvió solo, con el cuerpo de Cedric a rastras.
Gritos, maldiciones y llanto. Tantos llantos de Harry, de los padres de Cedric, de todos.
Los fuertes brazos de Theo lo rodearon, desesperado y por primera vez sin saber qué hacer con el verano que los espera.
El señor oscuro volvió.
Es hora de tomar medidas más severas, colocarse en su papel y lanzar las fichas.
Porque aunque todo esté en su contra, ganará.
Ganará.
Lágrimas de pura rabia se deslizan por sus mejillas.
Mientras la magia en sus venas rugía como carcajadas.
Eran las 3 de la mañana, sus manos cepillando su cabello largo, mientras su imagen refleja el hierro de su mirada, determinado.
Sabe que tendrá que arruinar aún más su desgastada alma cuando tenga que asesinar para esto, su objetivo.
Es un sacrilegio, asesinar mata una parte del alma en lo más profundo, pero asesinar a una persona que amas es como condenar tu propia alma.
¿Se quemara?
¿El fuego será eterno?
Oh merlín, será todo un espectáculo de mierda, porque la magia no lo va influenciar, no lo someterá.
Cambiará, porque decidió hacerlo, hará lo que quiera hacer por su propia ambición.
Morirá, de una manera que no sabe cómo podría resurgir de la cenizas de su alma, porque el fuego nunca se apagará, será eterno pero en ello tendrá que hacerlo, lo sabe. Sabe que lo hará y por supuesto la magia también, él entregará su alma, pero bajo sus términos y su propia libertad.
Esta reverenciara su voluntad y fortaleza, abrirá miles de caminos por él y para él.
Los secretos serán susurrados en sus sueños.
Sus enemigos caerán, uno por uno.
Decisiones, decisiones que están a punto de tomarse cambiará las cosas de forma permanente.
Colocó el cepillo en la cómoda, la bata que abriga su desnudo cuerpo tiñe a su figura esbelta se encamina a su baño a pasos delicados y suaves como si sus pies fueran de humo, su pelo anormalmente largo gracias al hechizo es hasta la cintura se balancea a su paso, sus dedos largos y fríos tocaban todo a su paso como recordando cada pedazo de historia vivido allí, cada pequeño detalle.
Se despidió, de quien fue y de lo que murió cientos de veces.
A su alrededor, la familiar sensación de la magia lo seguía distante pero cerca, como si lo contemplara de una forma suave.
Suave, eh.
Sabe, en el fondo, que se derrumbara algún día.
Quedará tan vacío, que ninguna lágrima saldrá porque eso significa que queda algo humano en él.
Nadie nunca pudo imaginar tal comportamiento.
Pero Draco la siente como en casa, se siente como el confort de un hogar jodidamente disfuncional y horrible a veces, pero siempre estará a tus espaldas y será tu espada, romperá tus huesos pero procurará que jamás se rompan de nuevo.
Claro, con un precio que estés dispuesto a pagar.
Ojalá, su hogar hubiera sido así, ojalá.
Alistó su baño, el agua teñida de rojo pálido, y flores muertas, especies y velas de diversos colores.
Son justamente la media noche, la luna llena ilumina toda la habitación, el gran ventanal se visualiza el bosque se siente cuya sensación es vibrante y viva.
Sumerge su cuerpo, las pequeñas partículas de las flores y especies se pegan a su piel y cabello, juntando sus palmas tomo un poco en sus manos y se la trago.
El sabor era algo indescriptible, de textura dudosamente dulce y sin duda mortal.
Pero no importaba, no se detendrá.
Comenzó a cantar mientras hundía su cuerpo casi por completo en la bañera comenzó a cantar en voz baja y suave, no como un secreto o por miedo.
Vulnerable sinceridad, es lo que lleva su voz.
Parce que j'ai parcouru mille routes
Traversez des croix et des vallées oubliées.
J'ai oublié d'aimer, j'ai oublié de payer, j'ai oublié de percevoir.
Perdu, mais avec espoir je veux un nouveau départ, et je sais que tu me le donneras.
Vous facturerez et paierez, puis nommez-moi comme vous le souhaitez, facturez vos prix.
Mais laisse-moi choisir, choisis-moi comme je t'ai choisi.
Parce que je suis perdu, sans aucune lumière ni guide.
Sumergió su cabeza en el agua, aguantando la respiración.
Siente cómo sus pulmones se llenan de agua, el ardor, el picor detrás de sus párpados, el grito silencioso en su garganta atorado pero no sale.
No lo hará, porque esto resultará.
Vivirá, y será elegido, elogiado por la magia salvaje.
Sólo debe persistir, ser tan jodidamente terco que no pueda ser ignorado.
Debe pasar este ritual, para ser aceptado por la magia misma y poder acceder al poder correspondiente a "ese" ritual tan esperado.
Sin importar el costo, o los sacrificios.
Cuando sus ardientes pulmones se rendían y casi cae en la inconsciencia cómoda una fuerza invisible lo enderezó de golpe, justo cuando tomaba un gran bocado de aire, su piel, sangre y nervios ardía como fuego.
Arde, arde tanto.
Gritó con todas sus fuerzas, sabe que su magia está transformándose.
Draco pensó en ese momento, ¿cuantas veces se quemó mi alma?
¿Hasta cuando, permitiré que el fuego me toque?
Entonces, decidió que se convertirá en fuego, tomará este dolor y los que vienen y lo convertirá en su fuerza.
Así como comenzó, se detuvo.
Se levantó lentamente, su conjurado cabello largo mojado se pega a su rostro, escuchando el aleteo de un ave, y esta se colocó en su hombro.
Una sensación de euforia, logro y hambre lo embriaga.
El ave es hermoso, completamente negro y ojos que parecían humanos lo absorbe todo y lo escupe en una realidad que para Draco parece surrealista, pero aquí esta la magia lo acepto y lo abrazó.
Lo siente en las mortales garras que fácilmente podría arrancarle el cuello, como lo sostiene suavemente, salió de la tina mientras seguía tarareando la canción junto al ave a su lado desnudo y chorreando agua en la fina loza blanca de su baño.
Cada paso, elimina todo desastre anterior, cada estrofa de la canción hace que todos los animales cercanos se esconden, temerosos de aquel nuevo fenómeno que acaba de pasar.
La magia salvaje obtuvo un nuevo hijo.
Tal hijo desconoce, aún.
Y nadie lo tocó jamás hasta entonces.
Los ojos de hielo de Draco, tenían algo brillando en su interior, incontenible, extraño y salvaje.
Parece libre
Parece incontrolable
Parece el fuego mismo
Sonrió,se convirtió en el fuego mismo.
Porque, ¿si yo ardo no deberían arder mis enemigos conmigo?