
La confesión de Cho
A la mañana siguiente se encontró con Cho a la entrada de Hogsmeade, venia en compañía de Hermione, quien le había comentado con expresión melancólica que no iría con nadie de modo que Harry, intuyendo que esto tenia que ver con el tonto de Malfoy, solo paso el brazo por su hombro asegurándose que entonces tendrían que conformarse con su presencia mutua derrochando un tono de lastima que consiguió una expresión confusa, la cual aclaro diciéndole que él explicaría en el camino hacia allá.
“Hola, Cho” saludo a la chica que se acerco con una sonrisa emocionada la cual cayó con el paso de los segundos cuando Hermione no se alejo de su lado.
Entonces todo iba así:
Harry miraba a Hermione.
Hermione lo miraba a él.
Harry miraba a Cho.
Todo en un absoluto y tenso silencio hasta que Hermione, comprendiendo incomoda la situación suelta un “Oh-uh-yo…estaré por allá” apuntando hacia la librería avergonzada dándole una sonrisa nerviosa para alejarse.
La sonrisa de Cho vuelve a crecer. Harry hace una mueca.
Está decidido, hará lo que dijo Remus, se sacará esto de encima antes de que se vuelva más grande y seguirá con su vida habitual siendo un chico popular por tener todos los años un drama con un asesino famoso en vez de por una vida romántica memorable.
Sí, eso mejor se lo deja a Dean o a Ginny, ellos parecen saber como manejarlo adecuadamente.
“Escucha…Cho, voy a ser sincero…no me gustas y la verdad…es que acepté la invitación porque me sentí presionado con todos alrededor…” confiesa sacándolo de su sistema y se siente maravilloso además de un poco ansioso. Es como si un peso fuese levantado de sus hombros y ahora todo pareciera incluso más claro.
Y ansioso, sobre todo cuando los ojos de Cho se vuelven lacrimosos y una lagrima corre por su mejilla apretando la culpa en el pecho de Harry quien pone sus labios en una fina línea, con ojos tan grandes mientras mira alrededor como algunos chicos se han detenidos curiosos.
“Cho…de verdad lo siento” repite viéndola limpiarse la lágrima, aunque todo se aligera cuando ella sonríe aliviada.
“No…no hay problema, Harry, la verdad es que…yo tampoco me sentía muy lista” tranquiliza con una mirada tímida al suelo y ahora Harry también se siente un poco confuso, tanto que Cho parece notarlo porque mira tímida hacia arriba encogiéndose de hombros. “Cedric era mi novio” informa y las cejas de Harry se levantan, pensando un “¡¿espera qué?!”. Está sorprendido, pero ahora que lo piensa no debería ya que si no recuerda mal Cho fue con Cedric al baile de los tres campeones el año pasado por lo que Harry en realidad ahora pasa de la confusión a sentirse como un idiota más en este gran mundo “mis amigas están un poco preocupadas por mi, insistieron en que seria buena idea intentar seguir adelante-”
“Pero no te sientes aun lista” completa sintiendo a Remus de presencia en su mente con Cho asintiendo agradecida.
Le sonríe amigable a la ravenclaw.
“Creo que ambos tenemos la importante tarea de respetar nuestros sentimientos y tiempos…” piensa con simpatía.
“Creo que sí” acuerda Cho con una sonrisa compartida entre ambos para despedirse. Ella siguió su camino y Harry se fue junto a Hermione compartiendo pequeñas sonrisas.