
La sociedad para damas
Dos semanas después de comenzadas oficialmente las clases Hermione pudo notar un ligero cambio en el comportamiento de algunas de sus compañeras, por ejemplo Lavander y Ginny nunca habían sido cercanas antes, pero ahora conversaban bastante seguido y en tono bajo, mirándola sospechosa y callándose cuando Hermione se acercaba, junto a otras chicas de sexto y séptimo año.
No es algo de lo que se sienta orgullosa, pero admite que le cuesta conectar con otras personas y con lo que Draco le dijo el año pasado, cree que mucho de eso se debe a su propia superficialidad personal y egoísmo tendencioso por demostrar que tiene un lugar en esta comunidad mágica. A veces se consuela con que los demás no la entenderán, quiere decir, la gran mayoría tiene su puesto asegurado, no debe de exponerse a poner en duda que son un mago, sin embargo con ella ocurre, porque no tiene familia mágica siendo por ende una sangre sucia, algo que ha analizado posterior al regaño del profesor Lupin y a la propia oscuridad que ha puesto sobre sus padres respecto al tema.
Ella…no les ha explicado toda la situación o mejor dicho lo grave de esta, porque sabe que sus padres no la dejaran seguir con todo esto. Ellos la aman y como todo padre que ama a su hijo quiere que este en un lugar seguro y que sea absolutamente feliz. Asi que, sintiéndose culpable por todo esto, ha decidido poner un poco de su parte y ser más empático con ellos que ponen su confianza en que ella sabrá cuidarse.
“Hola, Ginny” saluda incomoda con la Weasley mirándola atentamente junto a las otras gryffindor “puedo…estar aquí con ustedes” pregunta ansiosa comenzando a arrepentirse de esto.
El profesor Lupin les dijo al inicio de año que quería que la casa trabajara en sus relaciones con sus compañeros y es lo que hará Hermione.
Viéndolas mirarse entre ellas unos segundos, Lavander le sonríe divertida para decirle que no hay problema, inclinándose a susurrarle que eso si no puede decirle a los chicos nada de esto, para tomar asiento junto a ellas mirándolas escribir unos apuntes en una libreta.
“¿Es una tarea?” pregunta curiosa sabiendo que no tiene nada al pendiente a lo que Ginny resopla diciendo que no todo se trata de tarea para indicarle que se tiene que leerse un manual que le tiende titulado “el arte de curar” que la deja parpadeando confundida, preguntando que para que es este material.
Si no mal recuerda ninguna clase les ha pedido leerlo.
Susurrándole con una sonrisa sospechosa que ya lo vera, el grupo de chicas se levanta una hora después indicándole que las siga, interceptando a Harry y Neville que la buscan para responderles que esta ocupada en estos momentos con Ginny tomando su brazo derecho y Parvati su brazo izquierdo. Guiándola por el pasillo con Hermione preguntándose cada vez más preocupada en que se ha metido. Su ansiedad baja un poco reconociendo el camino hacia la enfermería.
Haciendo oídos sordos a sus cuestionamientos, cruzan la puerta encontrando al menos unas quince chicas más, de slytherin, ravenclaw y hufflepuff sentadas en sillas al centro del cuarto con una pizarra y la señora Malfoy cuyos ojos se centran en Hermione divertida y satisfecha.
“Oh, señorita Granger, me preguntaba cuando vendría” confiesa con Hermione tomando asiento confundida preguntando que es todo esto.
“Nosotras la llamamos la sociedad para damas” informa Parkinson con las piernas cruzadas “es un club no autorizado por el director Dumblendore para aprender técnicas de sanación y curación en caso de una emergencia”
“¿Y porque el nombre?” pregunta confundida ya que no parece tener mucho que ver a lo que Lavander sonríe complacida apartando un mecho de cabello largo y rubio de su hombro.
“Es para que no pregunten demasiado el resto, si les dices que vas a un club de damas todo el mundo pensara que es para discutir chismes y nadie querrá indagar sobre ello” explica con Hermione no encontrando el punto de mantenerlo en secreto con Parkinson poniendo los ojos en blanco, explicándole que cancelaron el club de duelo ya que el ministerio considera que no necesitan saber defensa si el mundo no tiene nada con que amenazarlos, por lo que de seguro cancelarían este club ya que, según su visión idealista, no hay nada allá afuera que pueda dañarlos.
Aceptando su punto, la señora Malfoy le da la bienvenida y le informa que ojalá a futuro, cuando todo se haya relajado un poco, puedan hacer de este club uno oficial donde también puedan venir más estudiantes, aunque por ahora, solo tendrán que conformarse con esto.
Entregándole una copia de la guía, que por cierto la compro de su propio bolsillo la señora Malfoy, comienza a explicarle el encantamiento Anapneo, para despejar una garganta obstruida, y la maniobra Heimlich en caso de que no tuvieran varita con un muñeco que replica y entrega a cada una para pasar después la maniobra de reanimación. Es absolutamente fantástico y Hermione se encuentra tomando apuntes y preguntando, aunque eso no es lo que más le ha encantado.
Resulta que unos diez minutos antes de terminar la clase, la señora Malfoy toma asiento en una silla y eligen un tema que quieran discutir al respecto sobre el papel de la mujer en la actualidad, descubriendo que más de alguna de sus compañeras tienen esa visión anticuada de la vida femenina en que es su papel principal ser ama de casa y cuidar a los niños.
“Es importante que sepan que nadie aquí, merece estar obligada a ser una madre y ama de casa, persigan sus sueños, sean aquello que siempre quisieron ser en la vida, ya sea sanadora, aurores, profesoras e incluso quizás si una quiere de verdad ser ama de casa, pero no permitan que otros decidan sobre su vida porque solo tienen una y son ustedes quienes han de vivirla” explica con pasión la señora Malfoy asiendo asentir a más de alguna alumna que va en séptimo que le explica que sus padres suelen presionarla para que se case con un pariente lejano para preservar el estatus de sangre y Hermione se siente absolutamente horrorizada y totalmente emocionada cuando una a una se apoyan con frases de aliento a superar las dificultades.
“¿Y? ¿Cuándo son las próximas reuniones?” pregunta con Ginny, Lavander y el resto de las chicas sonriéndole divertidas.