Draco Malfoy y el León furioso

Harry Potter - J. K. Rowling
F/M
M/M
G
Draco Malfoy y el León furioso
Summary
La vida nunca ha sido justa para los inocentes, eso lo puede dar por hecho Draco quien ha vivido desde su más tierna infancia en un abismo de dolor, sin embargo, cuando pudo liberarse con secuelas de aquella vida y con esperanzas para el futuro todo se derrumbó cuando descubrió que no era amado por su familia, además de que el colegio a dónde iba a residir no era el lugar seguro que prometían ser.Lo único que le queda es seguir sobreviviendo.Solo sobrevivir o eso creía.
Note
Buen día, tarde o noche. Como podrán ver este fic será un reescritura de la saga, por lo cuál espero poder captar la atención sobre los nuevos sucesos que se vayan agregando con el tiempo.Además de que este capítulo, es como una introducción vago de los sucesos que se van ir desarrollando dentro de la serie.Advertencia de violencia, odio a uno mismo, amor poco saludable a la familia.Gracias.
All Chapters Forward

Ridgeback Noruego

Desde los sucesos ocurridos con el león negro, Draco cada vez que podía veía de lejos el bosque prohibido, estaba vigilando si entre los árboles aparecía entre los árboles ese león, pero no tuvo ningún avistamiento. Además de que en ocasiones daba una respiración profunda para captar su aroma, para intentar ver si estaba escondido para el ojo humano, pero no lo olía, no lo sentía. El único aroma nuevo en el colegio era uno de un fuerte incienso el cuál Quirrell usaba últimamente, era horrible, olía como frutas demasiado dulces y cuando estaba cerca de este ese aroma opacaba los demás, no podía oler a nadie más y eso lo molestaba. Ese hombre no tenía buenos gustos en inciensos o perfumes, esos aromas le habían provocado que su nariz se tapara o tuviera una leve congestión nasal, estaba empezando a molestarlo. Estuvo como una semana y media sin poder oler correctamente, y eso lo ponía de los nervios.

 

Snape, al verlo en constante alerta, varias veces le había comentado que en el bosque prohibido ya habían revisado tres veces si esta bestia seguía o no ahí, él mismo había liderado una de las inspecciones, pero al final no encontraron nada fuera de lo normal.

 

Así que se calmó, intentó dejar todo atrás.

 

Pero era más fácil decirlo que hacerlo.

 

En ocasiones tenía pesadillas de ese ataque, podía recordar cómo estuvo atrapado debajo de su cuerpo, con sus fauces cerca de su cuello. En sus pesadillas ese momento acaba diferente, acaba con su garganta siendo desgarrado y él desangrándose. Se levantaba agitado y sudado, luego de ello no podía volver a pegar los ojos. No sabe cuantas madrugadas se quedó despierto.

Otras noches, las pesadillas no eran pesadillas, sino eran recuerdos. Recuerdos de sus momentos en cautiverio, de sus torturas y a cada rato podía escuchar ‘5RU06’, todo eso lo estaba volviendo loco. Sin embargo, tenía miedo de externalizar sus miedos, no quería que Snape se enterara, que viera lo roto que estaba, decidiera que era demasiados problemas y lo devolviera. No podía decirles a sus amigos, no quería que le temieran por su pasado, no quería que se alejaran.

 

Decidió callar y soportar todo ese miedo solo. Podía soportarlo, pudo antes, podrá ahora.

 

Para comienzos de las vacaciones de Pascua, Draco pasó esos días con sus amigos, observando como Hermione empezaba a hacer horarios para repasar sobre los exámenes, además que les decía a los niños que debían ir preparándose para estos exámenes que para ella estaban a la vuelta de la esquina.

 

Esta afirmación difería a la de los niños “Faltan como 10 semanas para los exámenes, ¿Por qué comenzar ahora, si luego lo vamos a olvidar? Es mejor estudiar unos días antes, todo estará fresco” decía Draco mientras jugaba con una pluma entre sus dedos, en ese momento ya había avanzado algunos ensayos, y se iba a dedicar a descansar lo que quedaba del día, solo faltaba que Snape revisara su trabajo el fin de semana y podría entregar su ensayo confiado de que su nota sería excelente.

 

“Sí, esa es la mejor estrategia. Si nos ponemos estudiar ahora, nos olvidaremos todo en el momento del examen” apoyaba Ron, mientras aún seguía haciendo sus ensayos.

 

“10 semanas pueden pasar volando. Para Flamel es un segundo. Tuve que empezar a estudiar hace un mes, ahora estoy retrasada con mi horario” cada segundo se ponía más desesperada. “Y esa técnica de estudio tuya, no es saludable”

 

“Vamos Hermione, ya terminamos con la mitad de los ensayos, déjanos descansar por hoy. ¿Por qué todos los profesores decidieron dejar mucho trabajo para estas vacaciones?” dijo molesto Harry mientras descansaba todo su peso en la silla de la biblioteca, estaban ahí y no en la habitación ‘necesito’ porque Hermione sacaba libros constantemente. Aunque hubieran preferido la habitación, tal vez hubieran convocado algo para descansar o divertirse.

 

“¡Ugh! ¿Para qué era el díctamo?” preguntaba un preocupado Ron mientras revisaba el libro de Mil hierbas mágicas y hongos, él seguía haciendo su ensayo de pociones, quería terminarlo para poder descansar como los otros dos niños.

 

Draco levantó la mano, como si estuviera en clase “Es una poderosa hierba curativa y reconstituyente, se puede comer cruda para curar heridas superficiales.” Draco habló mecánicamente lo que decía en el libro sin leerlo, ante la mirada atónita de su amigo solo complementó “Aprendo más rápido cuando estoy relacionado a ello, la esencia de díctamo ha sido aplicado a mi cuerpo dos veces desde que comenzó el año escolar. Así que puedo decir que soy un erudito en el tema” dijo sacando pecho levemente por su conocimiento adquirido por la experiencia.

 

“Draco, eso no es algo por lo cual debas sentirte orgulloso” dijo Harry al ver como Draco se vanagloriaba de su conocimiento. Los otros dos solo asintieron a lo dicho.

 

“Son mis logros, estaré orgullosos de ellos, sin importar como la obtuve” cruzó sus brazos en su pecho mientras hacía un puchero. Draco siguió descansando junto con Harry en la biblioteca, hasta que oyeron a Ron decir:

 

“¡Hagrid! ¿Qué estás haciendo en la biblioteca?”

 

Draco quién tenía la cabeza arrecostada en la mesa solo la levantó levemente para saludarlo, saludo que fue correspondido. “Estaba mirando. ¿Y ustedes? No estarán buscando sobre Nicolás Flamel, o ¿sí?” El medio gigante al enterarse que ya sabían sobre la piedra filosofal y que los niños empezaban a cuestionarle más cosas, los invitó a su casa para evitar que sigan hablando de un tema tan delicado a oídos de cualquier persona.

 

“¿Qué escondía en sus espaldas?” Hermione se sentía bien pensativa.

 

Draco la miró con duda “¿Escondía algo?” en realidad durante toda la conversación había mantenido la cabeza sobre la mesa, estaba cansado de tanto leer y de no poder dormir correctamente en las noches. “Veo que estamos curiosos hoy” dijo al ver como Ron se iba por la sección que Hagrid apareció.

 

“¡Dragones! ¡Hagrid estaba buscando sobre dragones! Leía estos libros:  Especies de dragones en Gran Bretaña e Irlanda y Del huevo al infierno, guía para guardianes de dragones” esta información fue de total interés en Draco, quién le quitó los libros y empezó a leerlos muy emocionados, se había olvidado de su cansancio rápidamente. Podía escuchar que los niños hablaban de fondo, sobre los gustos de Hagrid y la prohibición de la crianza de dragones. Ahora estaba más emocionado de que sea la hora de la visita que tenía con Hagrid, quería preguntarle todo sobre los dragones.

 

Una hora más tarde, mientras tocaban la puerta de Hagrid se sorprendieron de que el lugar estuviera completamente a oscuras, además que se sentía un calor sofocante, haciendo que todos los habitantes empezaran a sudar.

 

“Entonces, ¿Querían preguntarme algo?”

 

“¿Hay algo más que custodie a la Piedra Filosofal, además de Fluffy?” / “¿Por qué crees que el Opaleye de las Antípodas no es tan agresivo como otros dragones?” dijeron al mismo tiempo Harry y Draco, respectivamente.

 

“¿Qué? ¿Opaleye de las Antípodas? Draco eso no, dijimos que íbamos a hablar sobre la piedra filosofal” exclamó un Harry indignado. Recibiendo una alzada de hombros por parte del niño de ojos grises aburrido por dónde la conversación iba a ir, al ver que la información distribuida no iba ser de su completo interés decidió quitarse la túnica y empezar a jugar con Fang en el suelo.

 

Y cómo predijo estuvieron hablando sobre la piedra filosofal, lo que le sorprendió en esa conversación fue ver como Hermione sacaba su lado manipulador para que Hagrid hablara, eso le ganó un pulgar arriba por parte de Draco. Y con el ego hinchado, Hagrid al fin habló “Bueno, supongo que no tiene nada de malo decirles esto… déjenme ver… Yo le presté a Fluffy…luego la profesora Sprout, el profesor Flitwick y la profesora McGonagall hicieron encantamientos, además del profesor Quirrell y el mismo Dumbledore, por

supuesto. Esperen, me he olvidado de alguien. Oh, claro, el profesor Snape.” Terminó enseñando siete dedos, demostrando las siete personas involucradas para evitar el robo de la piedra filosofal.

 

Pudo ver como los gryffindors volvían a centrar todas sus dudas en el profesor Snape, empezando a sacar diversas teorías sobre porque el profesor quería esa dichosa piedra y que lo más probable solo le falta pensar como ganar sobre la trampa de Quirrell y de Hagrid. Al ver la mirada nada sorprendida de Draco, rápidamente cambiaron sus palabras ahora mencionando que tal vez Quirrell tampoco sabía cómo superar la trampa de Snape. Como no quería generar discusiones Draco decidió dejar el tema por la paz, debido a quién era más sospechoso en ese momento era Snape, pero no iba a soltar a Quirrell como sospechoso, necesitaba aferrarse a una pequeña esperanza de que Snape podía ser el bueno.

 

Los niños también buscaron asegurarse de que Hagrid no contará como pasar a Fluffy a cualquier desconocido o conocido.

 

Parecía que querían preguntarle algo más al medio gigante, pero primero había un problema “Hagrid, ¿Podrías abrir una ventana? Hace mucho calor aquí.” Dijo Harry mientras intentaba ventilarse así mismo con su mano. Hagrid negó el pedido, en ese momento se dieron cuenta que miraba constantemente su chimenea. “¿Qué es eso?” dijo acercándose.

 

“¡Es un huevo de dragón!” Draco dijo emocionado mientras dejaba de acariciar a Fang, se levantaba y acercaba lo máximo que podía para ver tan fascinante objeto “¿Dónde lo has conseguido Hagrid? Yo también quiero uno”

 

“Lo gané la noche pasada, estaba en la aldea y mientras tomaba una copa, me puse a jugar cartas con un desconocido. Y gané el juego, por lo que me dio el huevo de dragón. A mi parecer estaba muy contento de deshacerse de él” decía Hagrid igual de emocionado que el niño rubio. Al final tuvieron que arrastrar a Draco fuera de la cabaña, mientras le advertían a Hagrid de que debía recordar que su cabaña era de madera, por lo cual, debería tener cuidado por un futuro dragón escupe fuego.

 

Pasaron los días, Draco estaba de buen humor. Ya había acabado las vacaciones de pascua, Snape le había informado que él tenía su custodia y que ya era su padrino, esto le daba un sentimiento agridulce, estaba feliz de que Snape sea su nuevo tutor, pero triste de que sus padres lo entregaran sin oponerse. Había aprendido que no todo en la vida era feliz, así que tomaba lo que podía; aparte de ello estaba emocionado con el huevo de dragón de Hagrid, ahora pasaba un buen tiempo en la cabaña en sus tiempos libres, además que empezaba a estudiar todo lo que podía de los Ridgeback noruego, el dragón que estaban esperando (sí, ya se había autoproclamado uno de los padres del dragón). En ocasiones iba y le contaba algunos cuentos a la criatura. Había aprendido que estos reconocen la voz de sus cuidadores desde el huevo, quería ser querido, por eso mientras podía le hablaba a la criatura.

 

Fueron días divertidos, mientras ayudaba a cazar ratones afuera del castillo, sin entrar al bosque prohibido, para el dragón de esa forma tenga una cantidad de comida ya lista para cuando nazca. Además de ayudar a Hagrid para poder hacer una cama para el dragón que sea la menos inflamable posible, y de ir proponiendo ideas sobre qué hacer cuando crezca el dragón. Se estuvo relajando y olvidando poco a poco los sucesos con el león negro.

 

Esos días lo pasaba con Hagrid, aunque le gustaba pasar su tiempo con los gryffindor en estos últimos días eran atacados por la bola de ansiedad Granger, por lo cuál intentaba escapar antes de que lo atrape, lo arrastre a la biblioteca y le de su propio horario de repaso. Gracias, quería mantener su salud mental, claro la poca que tenía.

 

En una mañana mientras desayunaba, pudo ver que su lechuza aterrizó con un mensaje, esto era completamente nuevo, era el primer mensaje de Aquiles en entregar, estaba orgulloso de él, así que le dio un poco de su desayuno felicitándolo por su buen trabajo, mientras abría el mensaje. Era de Hagrid quién escribía de forma muy ambigua sobre el nacimiento del Dragón que iba ser el día de hoy.

 

Draco estaba emocionado, demasiado por este suceso, planeaba saltarse las clases de ese día para pasarla con Hagrid y presenciar el nacimiento, pero eso levantaría sospechas en sus compañeros de Slytherin que por meterlo en problemas se quejarían con Snape, esperando que lo castigara. El profesor no lo haría, pero preguntaría sobre su ausencia y él no era bueno mintiéndole al profesor, rápido descubriría que escondía algo. Y no quería meter en problemas a Hagrid por tener una criatura prohibida dentro de los terrenos del colegio.

 

Así que decidió tener sus clases con normalidad, solamente con más ansiedad posible, ya quería que acabara sus clases de la mañana para poder tener su hora de descanso e ir a visitar al dragón, solo esperaba que no naciera todavía, quería verlo.

 

Lo malo de todo ello, es que por su comportamiento empezaba a provocar sospecha en sus compañeros de Slytherin “¿Qué pasa Malfoy? Estás completamente inquieto. No me digas que sigues asustado por ese supuesto león” dijo burlón Nott, mientras los demás niños hacían rugidos, intentando intimidarlo.

 

No iba a negarlo, esto en vez de asustarlo le hizo reír. Esos niños se veían graciosos intentando fingir ser un león “No sabía que querían ser Gryffindors con tanta fuerza, parece que el sombrero seleccionador se confundió de casa con ustedes” no pudo aguantar y soltó una leve risa. Esto hizo detener completamente a los niños que empezaron a sonrojarse, y Bulstrode niña lo empujo al suelo. Eso solo logró hacerlo sacar una carcajada. Los niños se fueron completamente avergonzados a su siguiente clase, y Draco los siguió porque al final su destino era el mismo.

 

Cuando ya estaba libre, fue corriendo a la cabaña de Hagrid, cuando llegó sus amigos todavía no aparecían, lo bueno es que todavía no eclosionaba el huevo, a los minutos tocaron la puerta y entraron los tres niños. “Apresúrense ya va a salir” Draco comentó al ver como empezaba a agrietarse cada vez más el huevo.

 

Todos se sentaron, estaban emocionados por este suceso único en su vida. Cuando a los minutos el dragón salió del huevo, Draco se enamoró, era la criatura más bella que había visto. Tenía unas bellas alas puntiagudas, además de un cuerpo delgado. Parecía un bello cometa negro, además de que tenía un hocico con grandes fosas nasales. Sus ojos eran de color naranja, únicos y exóticos. Cuando estornudó, volaron algunas chispas de fuego. “Es tan bonito” / “Está un poco feo” dijeron Draco y Harry al mismo tiempo, haciendo que Draco lo mirara con reproche al otro niño por decirle feo al dragón, mientras este le devolvía una mirada incrédula por su apreciación a la belleza.

 

Hagrid acercó su mano, la cual fue mordida por el dragón “¡Reconoce a su mamá!” dijo lleno de emoción. Asustando a los niños al ver como el dragón enterraba cada vez más sus colmillos en sus dedos y estos empezaban a sangrar.

 

“¿Cuánto tardan en crecer los ridgebacks noruegos?”

 

Cuando Hagrid iba a responderle a Hermione, este se quedó en blanco al ver por la ventana, mientras los niños volteaban para ver que dejó perturbado al guardabosque “Alguien estaba mirando por una rendija de la cortina …era un chico…debe estar yendo al castillo” Ante la primera afirmación Draco, ya estaba corriendo a ver quién era el espía. Solo podía ver que era un encapuchado no tan grande, fue fácil embestirlo para hacerlo caer al suelo porque este misterioso niño era muy lento. ¿O tal vez él era muy rápido?

 

Al voltear al espía, pudo ver unos cabellos rubios casi iguales a los suyos, era su hermano. Cuando se dio cuenta de ello, lo soltó y se levantó poniendo una distancia prudente entre los dos, en ese momento escuchó los pasos de sus tres amigos que recién llegaban.

 

Pudo percibir que la tensión crecía con cada segundo que pasaba “Malfoy, ¿Qué haces por aquí?” dijo con rencor Harry, aún seguía molesto por todas las cosas que Lesath le había hecho a Draco desde que empezaron a estudiar.

 

“Eso no te importa Potter, creo que deberías preocuparte de que un profesor sepa sobre ese pequeño secreto” señaló con la cabeza a la cabaña.

 

“No sabemos de qué hablas Malfoy” ahora hablaba Ron también igual de enojado que Harry.

 

“Que asco que me estén hablando sucios mestizos y traidores de sangre” dijo con una mirada asqueada el heredero de los Malfoy.

 

Hermione también decidió hablar, igual de enojada que los otros dos niños “No te atrevas a insultarlos” 

 

“Y ahora, esta sangre sucia rastrera” dijo con asco mirando a la niña como si fuera basura en sus zapatos.

 

Esto enfureció a todos, especialmente a Ron que gritó el hechizo que les estuvo enseñando esos últimos días, al ver como los Slytherin de su año seguían insultándolos “¡Langlock!” obviamente su hermano no esperó el ataque, el cuál recibió pegándole la lengua a su paladar. Tenía que admitir que se sentía un poco orgulloso por su amigo, debido a que era la primera vez que le salía correctamente el encantamiento.

 

Aunque quisiera a su hermano, no iba a permitir que lance su veneno sobre este bello suceso sobre el dragón “Lesath, será mejor que te mantengas así, todo calladito, sobre lo que creas que hayas visto. A menos que quieras mantener tu linda lengua en desuso. Te digo un secreto, solo la persona que lo lanza puede deshacerlo (obviamente esto era mentira porque el profesor de pociones podía deshacerlo, lo bueno es que Snape lo había obligado a romper el hechizo cuando embrujaba a los niños de su año y si Lesath le preguntaba a los que recibieron este hechizo solo confirmarían lo dicho por Draco), así que debe mantener la boca completamente cerrada a menos que quieras que nosotros lo hagamos por ti” amenazó, su hermano asustado sobre no poder hablar más solo asintió, al momento en que Ron deshizo el hechizo Lesath se fue furioso corriendo hacia el castillo.

 

.

Las miradas furiosas de Lesath se volvieron cada vez más insistentes la semana siguiente, se veía furioso por los sucesos del Langlock.

 

En sus tiempos libres, Draco seguía visitando a Norberto (nombre decidido por Hagrid) y a Hagrid intentando pasar el mayor tiempo posible con el dragón, era su primera experiencia con este tipo de criaturas. En cambio, Harry, Hermione y Ron buscaban hacer entrar en razón a Hagrid y Draco en que debían dejarlo en libertad. “No estamos seguros de que Malfoy se quede callado, debemos dejarlo libre” decía Hermione, intentando por décima vez que los amantes de los dragones le hagan caso, y de nuevo fue ignorada.

 

El medio gigante intentó abrazar al dragón “No podemos Hermione, es muy pequeño morirá” una afirmación falsa debido a que ese dragón ya había triplicado su tamaño desde su nacimiento “He decidido llamarlo Norberto, ya me reconoce. ¿Dónde está mamá, Norberto?” decía con lágrimas en sus ojos.

 

“Ha perdido el juicio” murmuró Ron a los demás niños.

 

“Obviamente, ¿Quién le pone Norberto a un dragón? No es un nombre digno para estas criaturas” murmuraba Draco muy afectado por el nombre elegido.

 

Sus palabras solo generaron una mirada en blanco de sus amigos “¿En serio, Draco? Te preocupa más su nombre y no que dentro de dos semanas, Norberto será tan grande como esta cabaña” Harry estaba sorprendido por las preocupaciones de su amigo rubio.

 

“Además de que tú hermano podría informarle sobre Norberto a Dumbledore, cuando su miedo haya desaparecido” alertaba Hermione.

 

Hagrid que estaba escuchando la conversación se puso más lloroso “Sé que no puedo quedarme con él para siempre, pero no puedo echarlo, no puedo”

 

Mientras Draco intentaba consolar a Hagrid, escuchó repentinamente decir a Harry “Charlie” mirando a Ron.

 

“También estás mal de la cabeza, yo soy Ron ¿recuerdas?” decía Ron al pensar que fue confundido por su hermano.

 

“No… Charlie, tu hermano. En Rumania. Estudiando dragones. Podemos enviarle a Norberto.” Decía Harry muy emocionado al poder tener una solución.

 

“Sí, ¡Charlie lo cuidará y luego lo dejará vivir en libertad!” decía emocionada Hermione al poder hilar la idea de Harry.

 

“Si, tienen razón, mi hermano podría ayudar” miró a los dos amantes de dragones “¿Qué piensan Draco, Hagrid?” Los dos mencionados se vieron renuentes en aceptar, pero al final asintieron, era lo mejor para Norberto, aunque no quisieran alejarse de la pequeña criatura. Debían pensar que el dragón estaría mejor en un lugar que pueda volar y relacionarse con otros dragones.

 

No podían quitarle su libertad.

 

Draco sabía como se sentía cuando te sentías prisionero, y no quería eso para el pequeño Norberto.

 

El colegio no era un hogar para un dragón, solo lograrían dañarlo.

 

Forward
Sign in to leave a review.