Traducción: "Can I Tell You Something?" de GallaPlacidia

Harry Potter - J. K. Rowling
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Traducción: "Can I Tell You Something?" de GallaPlacidia
Summary
No es una fiesta a menos que Draco Malfoy esté allí. ¡Es tan divertido! ¡Tan salvaje! ¡Tan alocado! ¡Con Drogas! Tantas drogas. ¿Demasiadas drogas? Harry está empezando a creer que probablemente sean demasiadas drogas.Esta no es una ficción sobre la recuperación de la adicción por las drogas, aunque hay una recuperación de la adicción por las drogas.Con un desarrollo del personaje a través de viajes con MDMA1 con los ojos muy abiertos y Draco Malfoy encontrando la paz como bailarín burlesque2.
Note
IMPORTANTE: La presente es una traducción del fanfic de GallaPlacidia “CAN I TELL YOU SOMETHING?” . Quien ha eliminado su cuenta en esta plataforma, así como todos sus fanfics, como una fan que ama su trabajo he decidido traducir sus fanfics al español para que sus fans de habla hispana podamos seguir disfrutando su trabajo. Nota de GallaPlacidia en la versión original: Este fic es un regalo para Aylaar, quien pacientemente responde mis preguntas y se merece muchas cosas.¡También gracias a Nilolay por vetear de último momento cuando me di cuenta de que no podía aterrizar el avión solo!¡Únanse a mi boletín de Newsletter.gallapod.com! Notas de la traductora: Enlaces de contacto a Gallaplacidia: Gallapod.podbean Y newsletter.gallapod Fanfics de Gallaplacidia Descargados El Fanart utilizado en esta historia pertenece a BUGVILLE quien ha dado su permiso para compartirlo en esta traducción. Por favor vayan a su Tumblr: short666bread donde encontraran su bello arte.
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CAPÍTULO 3

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CAPÍTULO 3

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Harry tardó dos días en volver a sentirse humano, pero cuando lo hizo, se sintió mejor que en mucho tiempo.

 

Le envió una nota a Malfoy, junto con una botella Magnum de champaña.

 

***

Estimado Draco:

 

Muchas gracias por cuidarme la otra noche. Sé que debo haber sido increíblemente molesto. ¡Realmente lo aprecio! En serio.

 

Sinceramente,

Harry.

***

 

La respuesta de Draco llegó en menos de una hora.

 

***

NHP

 

-DM

***

 

Esto, dedujo Harry, significaba “No hay problema”. Una carta tan corta parecía una evidencia bastante clara de que Malfoy no quería hablar con él, pero de alguna manera, dos días después, Harry se encontró escribiendo de nuevo.

 

***

Estimado Malfoy:

 

¿Cómo te va con el tema de tu ruptura? Esa mierda es difícil. Después de que Ginny rompió conmigo, no dormí durante una semana. Lo cual fue irónico, porque mis pesadillas fueron una gran parte de la razón por la que rompimos. Ella dijo que yo sólo estaba existiendo. ¿Quizás eso es cierto? No sé, no he querido pensar mucho en eso. No quiero sentirme enojado todo el tiempo, y si lo pienso ¿Me enojo? ¿Tiene sentido? No sé por qué diablos te cuento todo esto.

 

Te agradecería que no le contaras a nadie sobre todo el asunto bisexual. Ni siquiera estoy seguro si lo soy. Realmente nunca he actuado en consecuencia. Probablemente no lo haré, para ser honesto. Creo que es más fácil no hacerlo.

 

Sinceramente,

Harry

***

 

***

Estimado Harry:

 

Tu secreto está a salvo conmigo.

D. Malfoy.

***

 

***

Estimado Malfoy:

 

Eso es un peso menos en mi mente tbh3. No es que realmente pensara… bueno, tal vez me preocupe un poco. Sin ofender, pero es algo que has hecho antes. Ir a los periódicos para hablar de mí, quiero decir. Sin embargo, recientemente se han calmado conmigo. Probablemente porque ya no hago nada. Eso es lo que dicen Ron y Hermione, lo cual es realmente molesto, en realidad, porque soy un maldito buen Auror y eso debería contar para algo. Ayer detuve a un traficante de veneno taiwanés, por ejemplo.

 

¿A qué te dedicas? Espero que te sientas mejor después del rompimiento, etc.

 

Harry.

***

 

Malfoy no respondió esa carta.

 

Tampoco respondió las siguientes tres cartas que Harry le envió.

 

Pero después de la cuarta, escribió:

 

***

Estimado Potter:

 

La gente siempre me dice que también hable de eso. Se pueden joder.

D. Malfoy

***

 

Y así comenzó su inconsistente correspondencia. Por cada cuatro o cinco cartas largas que Harry enviaba, Malfoy le respondía una, nunca más larga que una línea.

 

En marzo, Malfoy le envió una carta no solicitada.

 

***

Estimado Potter:

 

¡Michael y yo volvimos a estar juntos!

D. Malfoy

***

 

Harry se quedó mirando la carta durante mucho tiempo. Los signos de exclamación. El hecho de que Malfoy lo hubiera enviado. A Harry se le ocurrió por primera vez que él y Malfoy podrían ser amigos. Le escribió a Malfoy más o menos de la misma manera que alguien podría escribirle a un diario, y Malfoy le respondió lo suficiente para probar que las cavilaciones de Harry no se habían perdido en el vacío. Pero aún no había visto a Malfoy desde la última fiesta, hace más de seis meses.

 

Podría haberlo hecho, si quisiera. Malfoy salía todo el tiempo. Estuvo en cada evento, en cada fiesta. Pero parecía que Harry no podía salir de su casa excepto para el trabajo, o bagels cada dos martes en casa de Ron y Hermione. A veces lo intentaba, pero se sentía como si estuviera bajo el agua. Por eso había decidido probar las drogas; quería saber si eso habría hecho una diferencia. Lo había hecho, por supuesto, pero no era exactamente una solución sostenible.

 

Harry extrañamente infeliz ante la perspectiva de que Malfoy y Michael volvieran a estar juntos.

 

***

Estimado Malfoy:

 

¡Eso es brillante! ¡Estoy tan feliz por ti! Ustedes parecían tan enamorados. Tienes mucha suerte.

 

Me gustaría alguien así. Sería bueno tener a alguien con quien volver a casa. Tal vez debería tener un gato. No me siento solo; Me gusta mi propia compañía. Me gusta estar solo. Es bueno, es liberador, de verdad, nadie que me moleste o trate de hablarme, o lo que se. Me gusta.

 

Aun así, sería bueno tener a alguien con quien charlar basura por las noches, ¿Sabes? Como lo que tú y Michael tienen. Super feliz por ti.

 

Harry.

***

 

En el vigésimo segundo cumpleaños de Harry, Malfoy le envió una tarjeta. Era de la tienda especializada sin licencia de Harry Potter en el Callejón Knockturn. Tenía la cara ceñuda de Harry en el frente.

 

***

Feliz Cumpleaños, escribió Malfoy. Intenta no pensar demasiado hoy, ¿Sí?

***

 

Harry estaba asombrosamente conmovido, aunque no lo mencionó en su siguiente carta. Solo describió cómo Ron y Hermione lo arrastraron al pub; cómo alguien se acercó a él, llorando y describiendo con minucioso detalle cómo su madre había muerto por complicaciones después de la maldición de un Mortífago.

 

***

Y la gente se pregunta por qué no salgo, escribió Harry.

***

 

Como respuesta, Malfoy envió un recorte de periódico. El Mortífago Draco Malfoy Golpeado En La Cara Con Un Cristal Por Una Víctima De La Guerra Enojada, decía el titular difícil de manejar. Había una foto de Malfoy, con las manos cubriendo su rostro, la sangre brotando de sus dedos. El artículo señalo que esta era la cuarta vez que Malfoy había sido atacado ese año.

 

***

Mierda, escribió Harry. ¿¿¿Estás bien???

***

 

Malfoy no respondió.

 


 

   —Oh, él está bien —dijo Ron— Cosas así no cicatrizan, ya sabes, no como la magia oscura.

 

   —Siempre es bastante molesto cuando eso sucede —dijo Hermione.

 

   —¿Cuándo eso sucede? —repitió Harry con incredulidad.

 

   —Bueno, obviamente Michael trata de mantenerlo a salvo, pero no siempre está ahí —dijo Hermione.

 

   —¿Por qué no lo mantienen a salvo?

 

   —Está por todos lados, amigo —dijo Ron— Intenta vigilar a Malfoy en una fiesta. Una vez terminó en un barco en Kuwait. Solo habíamos ido al pub a jugar dardos.

 

   —Entonces, ¿Qué?, los extraños lo golpean todo el tiempo. ¿Y eso está bien?

 

   —He hablado con el Ministerio sobre esto varias veces —dijo Hermione— Dicen que las cosas se calmarán eventualmente. Realmente no sé qué más hacer.

 

   —Estaba tan borracho esa noche, de todos modos —dijo Ron, mordiendo un panecillo— Dudo que lo sintiera.

 


 

Harry le había estado escribiendo a Malfoy durante más de un año y medio cuando Ron y Hermione lo convencieron de ir a la fiesta de cumpleaños de Hannah Abbott.

 

   —La gente se ha relajado mucho —dijo Ron.

 

Lo hicieron. Se arremolinaron, bebiendo de copas de vino. Parecían civilizados, adultos. Harry se sintió aliviado, pero aún se sentía incómodo y fuera de lugar cuando intentaron hablar con él.

 

Se quedó cerca de la mesa de bocadillos, preguntándose cuándo aparecería Malfoy. Aunque, tal vez él no venía a eventos como este, donde nadie se columpiaba de un candelabro. Pero no, estaba Michael Corner, en las sombras cerca del baño, luciendo malditamente miserable, en realidad.

 

Y entonces la puerta del baño se abrió de golpe. Malfoy salió a grandes zancadas, hermoso y drogado evidentemente.

 

   —Draco —dijo Michael.

 

Harry no tenía exactamente la intención de espiarlos.

 

   —¡Michael, cariño, hola! ¡Te amo! ¡Dios, te ves bien, diablos, te amo!

 

No se parecía en nada a su voz de MDMA. Draco sonaba brillante y agudo, como si estuviera en pasando el mejor momento de su vida, excepto que hablaba demasiado rápido.

 

Michael no parecía complacido.

 

   —Lo prometiste —dijo.

 

   —¿Qué quieres hacer, cariño, hablamos de la guerra? ¡Querías hablar de la guerra, estoy listo, qué quieres saber, pregúntame cualquier cosa, cariño, te diré cualquier cosa!

 

   —Quería hablar contigo sobre la guerra antes —dijo Michael.

 

Draco se rio. Era una especie de risa real, más real que la risa de MDMA, de todos modos, excepto que la cadencia estaba apagada, trinó demasiado rápido, como el latido del corazón de un pájaro pequeño,

 

   —Pero podemos hablar ahora, cariño, o podemos bailar, o podemos ir a casa y follar toda la noche, lo que quieras, ¡Dime quién quieres que sea y seré él cariño!

 

   —Quiero que no seas un puto cocainómano —dijo Michael. Draco se rio de nuevo, en una frecuenta alta, falsamente.

 

   —Estás enojado porque no te compartí; Lo siento, cariño, pediré a Dean que te dé algo…

 

   —Draco. Escúchame. Lo prometiste. Me prometiste que iríamos a casa y hablaríamos.

 

   —¡Lo hablaremos! Hablemos ahora; de qué cosa espantosa hablaremos primero; ¿Alguna vez has torturado a alguien? ¡Yo sí! ¿Te lo cuento?

 

   —¡No se trata de la maldita guerra, Draco!

 

   —¿No es así? oh, eso es bueno, ¿De qué hablaremos a continuación?, lo que quieras, Michael, te amo, eres tan bueno, constante y amable, eres todo lo que quiero ser, cuando crezca más, quiero ser como tú, Michael, cariño…

 

Michael apoyó la cabeza contra la pared.

 

   —Ya no puedo hacer esto —dijo.

 

   —Sí, es una fiesta terrible, ¿No se han vuelto todos aburridos de repente? Hay un nuevo club en Berlín que acaba de abrir, escuché que tienen un oso polar encantado…

 

   —Nunca me hablas a menos que estés drogado. No adecuadamente. Al principio pensé… pero nunca lo haces. Y tampoco me digas que estás hablando con alguien más, porque sé que no es así. Soy tu único amigo.

 

Draco se rio.

 

   —¿De qué estás hablando, cariño? ¡Ví a Goyle la semana pasada!

 

   —¡Ni siquiera estás en términos de nombre con Goyle, por el amor de Dios! Y en cuanto a Dean, ¿Cuándo fue la última vez que hablaron sobrios?

 

   —¡Dean! Busquemos a Dean, él te dará una línea o dos, y te animarás, cariño, luego nos iremos a casa y te haré ver estrellas, soy tan bueno, ¿Verdad? Lo soy, tan bueno para ti, te amo, y tú me amas, ¿No es así, me amas?

 

   —Yo sí —dijo Michael— Desearía no haberlo hecho. Eres un cobarde, Draco. Fuiste un cobarde en la guerra y lo eres ahora. No eres una persona real. No eres más que un recorte de papel de un hombre.

 

La risa aguda de Draco fue como el fuego de una ametralladora. El pánico había comenzado a filtrarse en su expresión.

 

   —Eres demasiado gracioso, cariño; ¡Busquemos a Dean!

 

   —No puedo arreglarte, Draco.

 

   —Claro que puedes, cariño, me haces mejor, algún día seré bueno, estable y amable, como tú, oh Dios, cuando me dejaste, Michael, pensé que me ahogaría, estaba tan perdido, ya no sabía quién era…

 

   —No tienes idea de quién eres. No dices lo que quieres decir a menos que estés completamente drogado.

 

   —No, no, no, no, no —dijo Draco.

 

   —Ni siquiera me muestras tu maldita cara real, Draco, y si esa no es una metáfora adecuada para nuestra relación, no sé qué es.

 

   —Son feas —dijo Draco— Soy mucho más bonito así, cariño…

 

   —¡Eras ! —gritó Michael— Eras a quien quería, ¿Por qué no puedes ver… oh, maldita sea, nunca debí… no puedo… me estás rompiendo el corazón…

 

Dean se acercó dando saltos, sin darse cuenta de que Michael estaba al borde de las lágrimas y que Draco resoplaba y sacudía la cabeza como un caballo que se preparaba para correr.

 

   —¿Otra probada, chicos?

 

   —Draco —dijo Michael, pero Draco no podía mirarlo a los ojos.

 

   —Adelante entonces —dijo Draco, y siguió a Dean al baño.

 

Michael se quedó mirando mientras cerraban la puerta, luego salió de la fiesta, limpiándose las mejillas solo una vez, rápidamente.

 


 

Harry caminó a casa, aturdido y con una sensación de vacío. Había esperado a que Draco saliera del baño de nuevo, pero una mirada a las enormes e hinchadas pupilas de Draco, a sus dientes castañeantes, a su nariz que olía, le había mostrado a Harry que no se podía lograr nada útil esa noche.

 

No estaba sorprendido de lo mucho que le importaba. Lo sabía desde hacía tiempo, en realidad. Su extraña relación unilateral de amigos por correspondencia se había vuelto importante para Harry hace mucho tiempo.

 

Draco no tenía amigos, había dicho Michael, pero estaba equivocado. Draco tenía a Harry. Harry quería asegurarse de que Draco lo supiera.

 

***

Estimado Draco:

 

Lo siento mucho, pero te escuché pelear con Michael en la fiesta de cumpleaños de Hannah Abbott, así que sé que ustedes dos terminaron o lo que sea. Solo quería contactarte y ver si estás bien. 

 

Michael estaba completamente fuera de lugar con mucho de lo que dijo, pero… pareces un poco loco, amigo. Ojalá te tomaras un respiro. Por la forma en que estaban anoche, no parecías estar festejando. Parecía mucho más aterrador que eso.

 

Estoy preocupado por ti.

 

Harry.

***

 

Draco como era de esperar, no respondió. Tampoco respondió a la siguiente carta de Harry, ni a la siguiente.

 


 

Finalmente, Harry fue al bar del viernes por la noche, para poder preguntarle a Dean.

 

   —¿Malfoy está bien?

 

Dean se encogió de hombros.

 

   —No lo he visto en mucho tiempo —dijo.

 

   —¿Qué quieres decir?

 

   —Aparentemente se escapó, o algo así. Sus padres me llamaron en estado de pánico hace una semana. Él y Michael se separaron, y Draco simplemente se levantó y se fue.

 

   —Se fue, ¿A dónde?

 

   —No lo sé —dijo Dean— Realmente no lo conozco muy bien.

 


 

***

Solo avísame si estás vivo, escribió Harry. Por favor. Ni siquiera sé si estás recibiendo estas.

***

 

Excepto que su lechuza siempre regresaba sin la carta, lo que sugería que la había entregado en alguna parte.

 

Casi dos semanas después, llegó una postal a Grimmauld Place. Era del Museo Británico, pero había sido enviado, curiosamente, desde Minneapolis.

 

***

Estoy vivo.

 

DM.

***

 

Harry continuó enviando las cartas, pero nunca más volvió a saber de Draco.

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...CONTINUARÁ...

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