Chapter 9
La semana de exámenes finales estaba por empezar, solo faltaban unos días y Harry se había olvidado por completo de eso.
No podía recordar del todo la última semana, era una bruma en sus recuerdos, los únicos momentos claros eran cuando estaba en la cocina o la sala de profesores, recordaba un poco de las clases, viendo los rostros preocupados de sus compañeros, aunque ahora no sabía si era la preocupación por él o los exámenes, tal vez una mezcla de ambos.
Abrió la puerta del salón y vio a Izuku, Uraraka, Iida y Todoroki, siempre llegan temprano, los tres primeros lo saludaron de forma amistosa, Todoroki solo dio un asentimiento en reconocimiento.
—¿Cómo estás? Te ves mejor— preguntó Izuku una vez que se acercó a ellos.
—Bien, creo ¿Qué estudian?— colgó su mochila en el respaldo de la silla antes de sentarse.
—Matemáticas, no pude entender del todo la última clase y no puedo resolver los ejercicios— Uraraka dejó salir un suspiro.
—¿Necesitas ayuda en alguna asignatura?— esta vez fue Iida.
—Creo que no, entiendo todo hasta el momento, aunque también me gustaría repasar las últimas clases— dijo con una pequeña sonrisa.
Los cuatro continuaron hablando en voz baja hasta que los demás llegaron lentamente, todos sonrieron cuando lo vieron estudiar junto a ellos, cuando los saludo suavemente y sus sonrisas solo crecían, guau, ¿tan mal se veía estos días?
Cuando comenzaron las clases no es que realmente las tuvieran, más bien los maestros los supervisaban mientras ellos estudiaban y se reforzaban en sus asignaturas más flojas.
Debía decir que Iida e Izuku eran geniales explicando los distintos puntos de todas las asignaciones, ambos hacían que las cosas parezcan tan sencillas y fáciles de entender, así que realmente no cree que tarde en ponerse al día que las clases a las que falto o no recuerda; podía sentir sus miradas sobre él cada cierto tiempo, solo les sonreía amablemente.
La verdad, estudiar junto a su nueva clase fue interesante, algunos necesitan más ayuda que otros naturalmente, pero ver a Mina y Kaminari desplomarse sobre sus escritorios lamentándose por lo que sea estén estudiando y Momo sonriendo amablemente consolándolos era realmente un espectáculo melancólico.
Fue como verse a sí mismo y Ron preparando los ensayos de pociones con la ayuda de Hermione.
Los siguientes dos días fueron iguales, estudiar con ellos, almorzar, estudiar y entrenar.
El fin de semana la pareja de héroes lo ayudaron a repasar historia y japonés; duda que le vaya bien en esas, pero los adultos tenían esperanzas.
Los exámenes escritos no era lo que lo preocupan, era el práctico; no había hecho mucho en los entrenamientos, solo algo de resistencia y un poco de sparring (estaba acostumbrado a correr, pero no a pelear, bueno, al menos no sin varita), no tenía idea de como sería el examen práctico, las peculiaridades de sus compañeros eran geniales, pero no sabía como pelear con ellos de forma justa, si usaba hechizos lo suficientemente fuertes, cree que hasta sería capaz de bloquear una de las patadas de Izuku o las explosiones de Bakugo.
La preocupación debió verse en su rostro porque a la hora de la cena ambos adultos le aseguraron que todo estaría bien y que no debería preocuparse por nada.
Realmente espera que sea así.
Shota e Hizashi estaban hablando sobre tomarse unos días de vacaciones, una vez que los exámenes terminaran, las vacaciones de verano eran hasta septiembre, donde empezaba el nuevo ciclo escolar; la clase 1-A se convertirá en 2-A con Harry junto a ellos si es que el chico seguía aquí para la fecha.
El azabache escucho su teléfono vibrar en la mesita de noche, ambos se miraron por un momento antes de que volviera a vibrar, lo tomó y vio quién era.
Nezu.
Por supuesto que era el animal. Abrió el chat y leyó los mensajes.
Nezu: Sé que están planeando viajar a Escocia, creí que dijeron que Harry era de Inglaterra, pero bueno; tienen la semana luego de los exámenes libres de sus trabajos de héroes. Los boletos de avión llegarán mañana por la tarde a su apartamento.
Nezu: Díganle al chico que quiero hablar con él mañana antes de clases.
Ambos parpadearon un par de veces ante los mensajes, la rata les consiguió vacaciones y boletos, malditas sean las cámaras.
No saben lo que está tramando el director, pero por ahora solo pueden agradecer el favor y prepararse para la dominación mundial.
Harry miró la puerta frente a él, no sabe por qué el director lo llama, en especial a esta hora, este día, se supone que los exámenes empiezan en una hora Y ya estaba lo suficientemente nervioso.
La abrió lentamente y entro, miró alrededor de la habitación vacía; soltó un suspiro, ¿por qué lo llama aquí si ni siquiera va a llegar?
Antes de que pueda pensar en algo más, la rejilla de ventilación que estaba sobre el escritorio se abrió, un pequeño animal blanco asomo su cabeza por la abertura, era parecido a un ratón, pero cuatro veces más grande.
La criatura le dio una mirada antes de... ¿Sonreír? Y una cuerda cayó de la ventilación, la rata con traje giraba mientras reía en su descenso hasta la silla detrás del escritorio.
—¿Soy un ratón? ¿Un oso? ¿Algún otro animal? No, soy Nezu, el director de la U.A.— finalmente bajo por completo.
—Emm...-no sabía como reaccionar— ¿Hola?
—Buenos días, Harry— la cuerda volvió a subir y la rejilla se cerró— ¿juegas ajedrez?
—Sí... emm yo— el director abrió el cajón superior y saco un tablero de ajedrez, todas las piezas perfectamente en su lugar— ¿vamos a jugar ahora?
—Sí— dijo alegremente— toma asiento.
Harry se sentó frente al escritorio, se removió un poco incómodo por la mirada del roedor, bajo la mirada hasta el tablero.
Blancas.
Quería que él comenzara, le dedico una última mirada al otro antes de hablar.
—Peón a E3— la pieza no se movió y pudo sentir su rostro arder antes de hacerlo con la mano— ¿Solo me llamaste para jugar?— pregunto mientras el otro hacía su movimiento.
—No, quería hablar contigo, el juego es solo para pasar el tiempo— entrelazo los dedos mirándolo mover otra pieza.
—¿Sobre qué exactamente?— alzó una ceja.
—Nada en particular, ¿quieres decirme algo?— volvió a sonreír.
—No realmente— volvió a moverse incómodo, era como si lo estuviera diseccionando con la mirada.
—Tiene que haber algo de lo que quieras hablar, todos tenemos algo que no podemos contarle a los demás— derribo uno de los caballos de Harry.
—Supongo, pero la verdad es que no tengo nada— el tablero estaba relativamente parejo.
—¿En serio? Creí que querrías hablar sobre de dónde eres realmente— movió otra pieza— jaque mate.
Harry lo miró con los ojos bien abiertos, era como si el mundo dejara de girar, sus oídos empezaron a zumbar levemente.
—¿Qué?— fue todo lo que pudo decir.
—Hay algo raro en ti, algo que no puedo descifrar— se inclinó un poco más cerca del escritorio— ¿Quién eres, Harry Realstorm? ¿O prefieres solo Harry? No te queda el apellido, como si no fuera tuyo.
Las manos de Harry empezaron a temblar, la atmósfera se volvió pesada y sofocante, el roedor estaba intentando mirar dentro de su alma.
—No entiendo— su boca estaba seca.
—Las circunstancias donde Eraserhead te encontró son, desafortunadamente, bastante normales, el mundo no es ajeno a secuestros o al tráfico de personas, en especial a los que estos consideran... Interesantes, por decirlo así— se levantó y camino alrededor del escritorio, Harry retrocedió y su silla cayó al piso.
—No sé de qué hablas— era como volver a estar frente al basilisco, como si solo esperara a saltar sobre él y morderlo.
—Lo sé, después de todo, eso no fue lo que te paso— avanzo otra vez— ¿me dirás que fue lo que paso en verdad?
No sabe como puede sentirse intimidado por una criatura que ni siquiera pasa de su cadera, se enfrentó a mortifagos, Voldemort, criaturas mágicas, ¿cómo es posible, en nombre de Merlín, que se sienta intimidado por esta criatura?
No espero otro segundo más y salió disparado de la habitación.
Los exámenes escritos fueron tan bien como cabria esperar, en la mayoría de ellos tuvo calificaciones aceptables de 78% para arriba, el único que estuvo al filo fue japonés, pero no reprobó ninguna.
Algunos de sus otros compañeros no tuvieron tanta suerte, por las reacciones de Mina, Sero y kaminari, está bastante seguro de que reprobaron al menos una asignatura.
Actualmente, estaban en un autobús que los estaba llevando a una de las ciudades falsas del campus, sus compañeros tenían sus trajes de héroes mientras que él llevaba el uniforme.
Explicaron el examen antes de subir, se dividirían en cinco grupos de cuatro, una vez que llegaran a la ciudad los equipos se elegirían por sorteo.
Consistía en lucha y ayuda, habría unos villanos esparcidos por la ciudad, así también como civiles; deben atrapar a los villanos y asegurarse de que no hubiese bajas y la menor destrucción a la propiedad posible. Cada equipo tenía un sector de la ciudad con escenarios distintos.
Sostenía su varita en sus manos con fuerza, no sabe qué situación le tocara ni si podrá sobrellevarla de manera adecuada, pero hará lo mejor que puede, después de todo, había estado en medio de una guerra antes de llevar hasta aquí.
Shota estaba mirando las pantallas que mostraban a los chicos esparcidos por la ciudad, pudo sentir el alivio de Harry cuando Midoriya fue sorteado para ser de su equipo junto con Kirishima y Koda.
Los cuatro se llevaban bien, pero esta era la primera vez de Harry trabajando en equipo, no solo con ellos, si no con cualquiera de sus compañeros y espera que logren un conjunto apropiado para pasar el examen.
No dudaba de ellos, pero le preocupa si serían capaces de trabajar apropiadamente en conjunto.
Les tocó la situación E, una redada en un banco con rehenes y algunos otros villanos acechando unos edificios más alejados; ninguno de los alumnos sabía que situaciones les tocaron, solo la ubicación.
Tan pronto la alarma sonó, los 20 salieron corriendo en dirección a sus objetivos, no aparto la vista de Harry.
Su equipo se encontró primero con los villanos, entre ellos, Ectoplasm.
Superaron fácilmente a los robots, Harry hizo que algunos cortocircuiten, Midoriya los pateo, Kirishima los golpeaba y Koda usó algunos pájaros e insectos para desorientarlos y que se atacaran unos a otros.
El primero en notar el banco fue Koda, le hizo señas a Harry para que lo siga, los otros lo estaban haciendo bien contra el maestro, pero Midoriya terminó pateando una pared cuando Ectoplasma deshizo uno de sus clones; Harry la reparo antes de seguir al otro chico.
El banco era un edificio de dos pisos, con cuatro villanos y 23 rehenes, contando el personal; dos de los villanos entraban en la planta baja con 21 rehenes y dos en el sótano con dos rehenes, donde estaba la "bóveda".
Koda distrajo a los villanos mientras Harry atraco a uno y ayudaron a unos cuantos rehenes a salir, Harry vio una luz parpadeante en una de las manos del otro villano.
Por las comunicaciones escucho a Harry decir algo antes de que la bomba se dirigiera directamente hasta él, corrió hasta la calle y la lazo hacia arriba, una burbuja de agua se formó a su alrededor.
A pesar de estar bajo el agua, la explosión fue... Grande, algunas de las ventanas se agrietaron por el impacto; Shota frunció el ceño.
Harry volvió al edificio y ambos derrotaron al villano, estaban evacuando al resto de los rehenes mientras ayudaban a los "heridos" a salir del edificio y llevarlos a la zona segura; miró las escaleras por un momento antes de decirle a Koda que iría a investigar, bajo lentamente hasta que llegar al final y agacharse cuando vio a los otros villanos.
Tomo su varita y los "noqueo", ayudó a los rehenes a salir, pero no vio la segunda bomba; el pitido de advertencia sonó y Harry grito algo, se formó una pequeña cúpula azul y blanca a su alrededor junto a los rehenes antes de que la bomba explotara.
Vieron como el edificio se sacudía y unos escombros caían antes de que las cámaras se apagaran, la habitación entro en pánico.
¡Eso no tenía que pasar!
Desde una de las cámaras exteriores apenas podían verse los escombros por todo el polvo, pero vieron el traje amarillo de Koda sobresalir desde ellos.
El chico nunca alzó la voz, solo hablaba en susurros si es que lo hacía, mayormente se comunicaba por señas, pero ahora...
—¡HARRY!— esa fue la primera vez que lo escucharon gritar, un grito desgarrador que sonó en toda la sala de control y les erizo la piel.
Por otra de las cámaras pudo ver al otro Héroe correr hasta el edificio seguido por los adolescentes.
Rápidamente, salió de la sala y corrió hasta el área de la ciudad.
Ectoplasma había visto a Harry salir de un edificio y encargarse de la bomba unos metros más abajo, incluso él sintió la onda expansiva que libero a pesar de estar amortiguado por el agua.
¿Debía ser tan fuerte?
No le habían informado nada, así que continuo enfrentándose a Midoriya y Kirishima, han mejorado mucho y si se distrae lo atraparán.
Apenas pasaron unos minutos antes de que otra explosión se escuchara por la calle, el sonido de un edificio cayendo seguido del polvo paralizo a los tres; miraron congelados en la dirección de la explosión.
Y luego lo escucharon.
El grito de Koda.
Esto NO era parte del examen.
Corrió por la calle seguido de los dos chicos, al llegar vieron que la mitad del cuerpo del adolescente estaba atrapado bajo los escombros; Midoriya usó su peculiaridad para levantar el trozo de concreto mientras Kirishima y él lo sacaban de ahí.
Su corazón se apretó en su pecho mientras escuchaba al pobre chico llamar a Harry una y otra vez con lágrimas corriendo por su rostro.
Necesitaban sacar al chico de ahí abajo.
Pero no puede hacerlo sin ayuda y debe sacar a los otros de aquí.
Harry abrió los ojos solo para encontrarse con la habitación a oscuras, iluminada únicamente por su hechizo, giro sobre su espalda y parpadeo un par de veces antes de intentar pararse.
Miro con más atención antes de notar que realmente no estaba viendo la habitación, sino los escombros de lo que una vez fueron parte de ella, no sabe qué paso, solo que escucho un pitido similar al de la otra bomba cuando iba a explotar y uso protegí por instinto; ahora estaba atrapado debajo de un edificio colapsado, genial.
El espacio donde estaba era demasiado pequeño, aún más con los dos robots tirados a un lado de él, apenas tenía espacio para mantenerse arrodillado; podía escuchar los pequeños pedazos cayendo sobre su barrera, pero se oían demasiado fuertes, como si pedazos más grandes estuvieran cayendo.
Como si alguien estuviera caminando con pasos fuertes sobre su barrera.
Como si estuvieran saltando sobre su habitación.
Su pequeña habitación debajo de las escaleras.
De pronto todo se sintió mucho más apretado, su hechizo parpadeo y uno de los escombros más grandes choco contra la barrera; se oyó como un golpe en una puerta.
En una puerta demasiado pequeña, en una habitación demasiado pequeña, con golpes y gritos que eran demasiado fuertes en sus oídos.
¿Por qué hacía tanto calor?
Su habitación siempre fue demasiado cálida, pero… No está en su habitación, ¿verdad?
No estaba en la casa de la tía Petunia, entonces… ¿Por qué puede oír al tío Vernon?
Los gritos se hicieron más fuertes, las pisadas de Dudley en la escalera se intensificaron, todo era demasiado pequeño y ruidoso.
Se tapó los oídos deseando que todo se detuviera, no estaba ahí, no ha estado ahí desde hace años, pero ahora está en un espacio tan reducido que le recuerda a su maldita habitación del infierno.
Siente uno como si tuviera un agujero en el estómago, hambre, apenas ha comido en días… Apenas le han dado comida.
Su respiración era cada vez más rápida y fuerte; hacía demasiado calor, todo era muy ruidoso, apenas podía moverse, tenía hambre.
El hechizo volvió a parpadear.
Otro golpe, seguido de otro, y otro, y otro.
Los gritos de desprecio y enojo de sus tíos retumbaban una y otra vez dentro de su cabeza, no podía detenerlos, no se callarán, solo sonaban más fuertes, como si estuvieran a un lado de él; presiono sus oídos más fuertes, tanto que empezaron a dolerle.
Las lágrimas se formaron en sus ojos y antes de que pudiera detenerse, soltó un sollozo, lo siguieron varios más; ahora estaba llorando libremente.
Estaba llorando como un niño al que encerraron en su habitación demasiado pequeña debajo de las escaleras solo por existir.
Shota no cree que alguna vez haya corrido tan rápido.
Había escuchado la alarma que dictaba el fin del examen, se supone que aún faltaban diez minutos para que terminara, pero era mejor prevenir que más estudiantes salgan heridos, todas las situaciones tenían al menos una bomba; las de las situaciones A y C ya fueron detonadas, pero esas fueron explosiones normales, aún quedaban las de B y D, si esas también fallaban sería un problema aún mayor.
Aún tenía puesto es auricular de comunicaciones, intento comunicarse con Harry múltiples veces, pero no tuvo respuesta; su corazón latía tan fuerte que creyó que se saldría de su pecho en cualquier segundo.
Estaba llegando a la escena de derrumbe cuando lo escucho.
Respiraciones rápidas y entrecortadas se oían atreves de las comunicaciones, susurros tan bajos que no pudo entender lo que decía.
—¿Harry?— dijo rápidamente, no tuvo respuesta— apaguen las comunicaciones de los estudiantes— dijo a cualquiera de los otros héroes, si los demás lo escuchan definitivamente se hará el caos.
Kirishima lo vio llegar y alertó a los otros.
—Eraser, esto no— dijo antes de que lo interrumpieran.
—No tenía que pasar, lo sé, se supone que la bomba solo era lo suficientemente fuerte como para aturdirlos.
—Sensei, Harry está ahí abajo— dijo Midoriya mientras era retenido por los clones que evitaban que intentara levantar los escombros, no sabían que tan frágil era.
—Lo sé, tienen que volver a la entrada de la ciudad con los otros, nos aseguraremos de que...— un sollozo lo detuvo, esta vez las palabras eran más claras, están entrecortadas por hipos y quejidos, pero pudo entenderlos.
—Lo siento, yo... no qu-quise hacerlo... Perdón... por favor... dejen-déjeme salir... Por favor... Por favor— los sollozos se hicieron más fuertes.
—Váyanse, ayuden a Koda y váyanse— les dijo a los chicos.
—Pero...— dijo Kirishima.
—¡Ahora!— dijo firme mientras apuntaba en la dirección de la salida de la ciudad, los vio irse antes a regaña dientes de volver a hablar por las comunicaciones— ¿Harry? ¿Puedes oírme? Todo va a estar bien, vamos a sacarte de ahí abajo.
El niño no dio señales de que lo hubiera escuchado, no sabía si solo no estaba contestando o era una comunicación unilateral.
Vio a Ectoplasm tocar su oreja antes de mirar a Shota directamente a los ojos, ahora él también podía escuchar a Harry.
No podían hacer nada hasta que los demás vinieran ayudar, apretó las manos con fuerza clavando sus uñas, un pequeño hilo de sangre se deslizó por su palma; se sentía impotente solo ahí parado mientras escuchaba al chico, ahora uno de sus hijos, lloran desconsoladamente y suplicar a quien fuera que esté viendo que lo sacara de ahí.
—No volveré a hacerlo, por favor, perdón— su corazón solo se estrujaba más con cada palabra— juro que no lo haré, lo juro, lo juro, lo juro... Por favor, abre la puerta... Por favor, me duele, duele mucho, tengo hambre... Por favor, tengo mucha hambre... Tío Vernon.
Y Shota de pronto vio rojo.
Fue su familia, la familia que se supone debía darle amor y cuidarlo, esa familia le había hecho esto.
Sabe que no todas las familias son buenas, el mismo vivió en negligencia y posteriormente fue puesto en el sistema de servicios sociales, no todas sus familias de acogida fueron buenas, algunas peores que otras.
Pero no importa lo que haya hecho un niño, no importa lo malo que haya sido, no puedes encerrarlo y matarlo de hambre.
Parpadeo furiosamente cuando sintió que la humedad se acumulaba en sus ojos, no era tiempo de llorar, debían sacar Harry de ahí abajo.
Además, ahora tiene un nuevo nombre para su lista y se asegurará de que estas personas no vuelvan a ver la luz del día.
Una figura con gabardina negra salió sigilosamente del recinto.
La capucha cubría su rostro, pero sus ojos grises brillaban a la luz de la luna.
Se sobresaltó cuando escucho una voz llamándolo, pero al darse la vuelta vio que era la mujer amable; ella se acercó rápidamente y le entrego una bolsa de tela mediana.
—Corre— susurró la mujer, y sin pensarlo la figura desapareció del recinto con un pequeño destello.
Cuando volvió a aparecer, estaba a la orilla del agua, se giró y miro en una dirección específica, tomo su varita con fuerza, frunció los labios, dobló las rodillas...
... Y corrió.