Juego de Shumil gemelos

Pdv: Rozemyne 

Después de despedirnos de nuestra familia noble, nos dirigimos al templo en la bestia alta de Ferdinand. Y de camino allí, Cattleya le hizo una pregunta. “Oye mentor, ¿cuándo nos enseñarás a hacer nuestras propias bestias altas?”. 

Mi gemela había estado esperando con muchas ansias, que Ferdinand le enseñara hacer su propia bestia alta, ya que nos había prometido que nos enseñaría después de nuestro bautismo, en preparación de nuestra recolección para este otoño. En cuanto a mí, no había querido enseñarle, debido a que Cattleya es demasiado peligrosa con sus ocurrencias, no quería arriesgarme a que tuviera su propia bestia alta e hiciera alguna locura. Y por lo visto, yo no era la única que estaba preocupada por este hecho. 

“Cattleya, ¿por qué tienes tanta prisa por tener tu propia bestia alta? No creo que sea necesario aún. Además, conociéndote estoy seguro que estás planeando hacer alguna de tus locuras con ella”. Ferdinand dijo esto en respuesta, a la pregunta de mi traviesa hermanita. 

“Mentor, no haré ninguna locura con mi bestia alta, es solo que me emociona saber que tendré una propia, sabes? Además, tu dijiste que nos enseñarías después de nuestro bautismo, recuerdas?”. Mi gemela le recordó con entusiasmo, a un Ferdinand ya arrepentido de haberlo sugerido. 

“Si, lo recuerdo Cattleya. Pero quiero retrasar este aprendizaje en específico todo lo que pueda, es más, si fuera por mí, jamás te daría una bestia alta”. Ferdinand respondió algo que yo misma había pensado hacer. 

“Por ahora estarán muy ocupadas, así que no creo que tengamos tiempo para eso, ya que mañana será su ceremonia de investidura, y luego tienen que prepararse para la ceremonia de unión de las estrellas. La cual será su primera ceremonia que realizarán como Sumos Obispas, y debe ser perfecta”. Él explicó las razones de porqué, no tendríamos tiempo para nada más que los rituales, que tendríamos que realizar como Sumos Obispas, dentro de poco.

Y ante las exigentes palabras de Ferdinand, mi hermanita respondió. “Ok mentor, me esforzaré mucho y daré lo mejor de mí en estos rituales, si me prometes que nos enseñarás a hacer nuestras bestias altas, después de la ceremonia de unión de las estrellas”. 

Entonces oí suspirar con cansancio a Ferdinand, antes de responder. “Está bien Cattleya, como quieras, les enseñaré a hacer sus bestias altas después de la ceremonia de unión de las estrellas. Sin embargo, no espero menos que la perfección en estos rituales. Solo si es así, y terminan estas ceremonias sin incidentes como el de hoy, te concederé tu petición”. ‘Y como era de esperar, Ferdinand logró sacar provecho de esta situación, manipulando a mi gemela’.

“¡¡¡Siiiiii!!! Nuestro mentor nos enseñará hacer nuestras bestias altas. ¡¡¡Yupiiiii!!!”. Mi tonta hermanita exclamó muy emocionada, alzando su puño en celebración, olvidando que aún estábamos en el aire.

“¡Cálmate tonta!”. Ferdinand la regañó, apretando el agarre de su brazo con el que nos estaba sosteniendo por seguridad, mientras que con el otro sostenía las riendas de su león alado. 

Y como eso fue peligroso, yo también la regañé. “¡Hermanita tonta, aún estamos en el aire! ¡Eso fue peligroso!”. 

“Je, je, je… perdón, me dejé llevar”. Ella se disculpó avergonzada.

Pero esa disculpa no fue suficiente para Ferdinand, ya que él, la siguió regañando hasta que llegamos al templo, donde ya nos esperaban Fran y Zahm en la puerta de los nobles. “Ya me arrepiento de haber hecho ese trato contigo, Cattleya”. Ferdinand dijo, con molestia. 

“Ya lo aceptaste mentor, ya no puedes retractarte”. Cattleya continuó diciendo con súplica, en una interminable discusión.

“Hola Fran, hola Zahm, es bueno verlos de nuevo”. Mientras Ferdinand seguía su discusión con mi hermanita, yo saludé a nuestros preocupados asistentes.

“Bienvenida lady Rozemyne bienvenida lady Cattleya, bienvenido Sumo Sacerdote”. Nuestros asistentes del templo nos saludaron.

Cattleya al oír su nombre y los saludos de nuestros asistentes, ella detuvo la discusión para devolverles el saludo con una brillante sonrisa. “Ah, hola Zahm, hola Fran, es bueno estar de regreso en casa. ¿Nos extrañaron?”. 

Y ante el cálido saludo de mi hermanita, ambos asistentes abrieron mucho los ojos con sorpresa, luego asintieron con la cabeza, mirándonos con cálidas sonrisas. Pero cuando mi hermanita dijo esto, pude ver que el abuelo y el hermano Eckhart e incluso Ferdinand, hicieron muecas de dolor y pusieron caras de circunstancias, al ver tan feliz a Cattleya. Esto fue como si se hubiera liberado y volviera a ser la misma chica desenfadada y relajada de siempre. Y sinceramente, yo también sentía lo mismo, esto era como regresar a casa, después de estar un largo tiempo fuera.

“Rozemyne, Cattleya, vayan a sus aposentos y descansen, han pasado por mucho hoy, no quiero que colapsen con fiebre. Mañana será su ceremonia de investidura, así que por ahora no quiero que hagan nada más que descansar”. Ferdinand nos ordenó descansar, a lo que nosotras asentimos con la cabeza, obedeciendo esa orden. ‘¡Siiiiii, leeremos en la cama, mientras descansamos!’. Entretanto yo planeaba esto en mi mente, Ferdinand continuó dando instrucciones. “Fran, Zahm, hagan todos los preparativos necesarios para la ceremonia de mañana”.

“Como desee, Sumo Sacerdote”. Los dos asistentes respondieron, haciendo una reverencia con los brazos cruzados sobre el pecho. 

Después de recibir las instrucciones de Ferdinand, nos dirigimos hacia nuestros aposentos en las cámaras del Sumo Obispo, guiados por nuestros asistentes, junto con el abuelo Bonifatius y nuestros caballeros de la guardia. Donde tomamos el té y charlamos un rato con el abuelo Bonifatius, quién nos habló de los aposentos que nos había preparado en su finca, donde él dijo que podríamos quedarnos, en lugar de ir al castillo. 

Esto nos hizo muy felices a Cattleya y a mí, ya que no tendremos que vivir en el castillo como yo en el tejido roto, y la verdad es que tenía bastante sentido, debido a que fuimos adoptadas por el abuelo en lugar del archiduque. ‘Y eso quería decir, que no tendremos que ver a Verónica, ni al molesto Sylvester’. Yo pensé con alivio, mientras el abuelo decía que no tendremos que dejar de vivir en el templo o en la mansión Linkberg, pero si, nos pidió que nos quedáramos algunos días con él en su finca, cuando visitáramos el barrio de los nobles. Pero cuando dijo que nos dejaría administrar la biblioteca de su finca, el abuelo Bonifatius se transformó en el mejor abuelo del mundo.

“No tengo tantos libros como Ferdinand, pero tengo una colección de libros sobre estrategias de batalla y libros que tendrán que leer si desean hacer el curso de caballeros. Además, de los libros que tendrán que estudiar para el curso de candidato a archiduque”. El abuelo Bonifatius nos explicó.

“¡No importa abuelo Bonifatius, los leeré todos! ¡Puedo leerlos, y los leeré por completo todos y cada uno de ellos! ¡¿Cuándo podemos visitarte abuelo?!”. Yo pregunté muy emocionada, quería ir ahora mismo a la finca del abuelo y apoderarme de esa maravillosa colección de libros.

“Hermanita tonta cálmate. No podemos ir hasta después de la ceremonia de investidura, recuerdas?”. mi gemela dijo esto, golpeando mi frente con su dedo. 

“¡Auch!”. Yo me quejé, pero estaba tan feliz que no me importó mucho los regaños de Cattleya. ‘¡¡¡Yahoo!!! Más libros’. Y solo celebré con maracas imaginarias, en mi mente.

Y mientras yo hacía la danza de los libros en mi mente, ella dijo. “No sé si tome el curso de caballeros, aún no lo decido, pero me interesan ese tipo de libros, así que también los leeré todos, abuelo”. 

Aunque mi gemela sonó más seria y compuesta que yo, pude ver la misma emoción que yo, en sus expresivos ojos dorados. ‘A mí no me engañas hermanita. Ufufufuu… El abuelo Bonifatius nos dejará leer sus libros y administrar su biblioteca. ¡Tenemos el mejor abuelo del mundo!’. 

Después de esta conversación el abuelo Bonifatius se retiró, diciendo que quería hablar algo con Ferdinand, antes de retirarse juntos al castillo. Al parecer tenían una reunión con Sylvester por lo ocurrido en nuestra ceremonia de bautismo. Pero el abuelo nos aseguró antes de retirarse, que enviaría a padre Karstedt, para hablar con él de lo ocurrido, antes de que nos fuéramos a dormir. ‘Bueno, me imagino que será para ofrecernos una disculpa’. 

****

Al día siguiente, fuimos sacadas de la cama temprano en la mañana por nuestras asistentes femeninas, para darnos un baño y cambiarnos a nuestras túnicas ceremoniales de Sumos Obispas. Cuando estuvimos listas, Ferdinand vino por nosotras a nuestros aposentos, ya que tenía todo listo para realizar la ceremonia de investidura. 

Pero primero nos explicó todo el procedimiento, en el cual consistía la ceremonia en sí. En realidad es lo mismo que en el tejido roto, pero con algunos cambios, como por ejemplo que Egmont ya no está entre los sacerdotes azules, o que esta vez Matthias, Laurenz y Janrik están entre los sacerdotes azules, al igual que Lagertha. Y esta vez, ninguno de los sacerdotes azules dudará de nuestro pedigrí, debido a que, aunque no somos hijas del archiduque, aun así somos candidatas a archiduque e hijas del Lord comandante de los caballeros y también somos hijas adoptivas de Lord Bonifatius, o sea que formamos parte de la familia archiducal lateral.

Sin embargo, lo más importante de esta ceremonia, es que Ferdinand nos entregará la llave de las escrituras que lleva a los verdaderos cimientos del ducado, y eso definitivamente es muy importante. ‘Sin mencionar que es la llave de la sala de libros… y no es como que eso, sea lo único que me importa… Uhmm… Bueno, a quien engaño, también quiero volver a administrar todos los libros de la sala de libros del templo. Ufufufuu…’.

Y al igual que en la línea de tiempo original, la ceremonia se celebró en la capilla con todos los sacerdotes y sacerdotisas de túnicas azules junto a sus asistentes, y de igual forma, todos los sacerdotes y sacerdotisas grises que habían llegado a su mayoría de edad estaban presentes. Y tal como recordaba esta ceremonia la ofició Ferdinand, quien explicó lo que ya todos sabían, que el Sumo Obispo Bezewanst fue ejecutado por el crimen de robo de maná al ducado, y que debido a esto, por orden del archiduque ya se había nombrado a quien ocuparía este cargo. 

Entretanto esto sucedía, Cattleya y yo estábamos en la puerta esperando a que Ferdinand nos llamara. “Debido a la importancia de este cargo para nuestro ducado, las hijas del comandante de los caballeros Lord Karstedt y nietas e hijas adoptivas de Lord Bonifatius, como parte de la familia archiducal, se les ha confiado el puesto de Sumos Obispas adjuntas, a lady Rozemyne y a lady Cattleya candidatas a archiduque”. Ferdinand terminó de decir esto, mientras las puertas se habrían lentamente frente a nosotras.

Cattleya me tomó de la mano, mirándome muy seria y decidida, esta vez quería realizar correctamente esta ceremonia de principio a fin, ya que de esto dependía si Ferdinand le enseñaba o no, a hacer su tan anhelada bestia alta. ‘Aunque a mí, no es necesario que me enseñe, porque yo ya tengo a mi “Lessy”’. Yo pensé esto, mientras me aferraba a la mano de mi gemela y comenzamos a avanzar, viendo las filas de sacerdotes expectantes y luego miramos a Ferdinand de pie en las escaleras diciendo. “Denle la bienvenida a las nuevas Sumos Obispas y ofrezcan sus oraciones”.

A lo que todos los sacerdotes azules y grises exclamaron. “¡Alabados sean los Dioses!”. Dijeron todos los sacerdotes azules y grises ofreciendo sus oraciones con la pose de oración de “Glico man”. Mi hermanita y yo caminamos de la mano con gracia por el centro de la capilla hasta el pie de las escaleras, donde Ferdinand nos ayudó a subirlas con elegancia, hasta el punto más alto del altar, que nos permitió ver a todos en la capilla.

Esta vez todos los sacerdotes azules y grises que pude ver, nos miraban con curiosidad o seriedad en sus ojos, e incluso admiración de parte de mis antiguos sirvientes, Matthias y Laurenz. Pero Janrik nos miraba con curiosidad más que con admiración, en contraste con la devoción que mostraban Lagertha, junto con la mayoría de sacerdotes y sacerdotisas grises. Y esta vez no logré ver dudas en sus expresiones, ya que todos habían tomado las palabras de Ferdinand como ciertas, y nadie las puso en duda.

Entonces Cattleya y yo los saludamos al unísono. “Les agradecemos por venir en este auspicioso día de verano, bendecido por los brillantes rayos de Leidenschaft el dios del fuego”. 

Luego me presenté. “Yo soy Rozemyne”.

Y después se presentó mi gemela. “Y yo soy Cattleya”.

“El archiduque nos ha confiado el cargo de Sumos Obispas adjuntas”. Dijimos en perfecta sincronía. 

Al ver que todos nos aceptaron sin objeciones, e incluso algunos sacerdotes azules que ya conocían a mi hermanita palidecieron, porque le temían. Esto debido a que les había jugado algunas bromas bastante duras, por faltar el respeto a Ferdinand, una práctica común en el templo bajo el dominio del anterior Sumo Obispo. 

También se enfrentó a otro que había agredido a uno de nuestros asistentes grises, al cual tampoco le fue muy bien. Eso, sin mencionar el rumor de lo que sucedió al “sapo”, alguien con el poder de transformar a un noble de alto rango en un “sapo” o para ellos en un animal extraño, es peligroso. Y para los sacerdotes que están en el nivel más bajo de la nobleza, a un paso de ser plebeyos, saben muy bien que no deben enemistarse con alguien así. ‘De seguro se ha corrido la voz entre ellos, sobre las a sañas de mi gemela. Cattleya en ocasiones da miedo, sobre todo cuando se enfrenta a abusadores. Estoy segura que esto se debe a su pasado doloroso’.

Después de nuestra presentación, comenzamos a enumerar las cosas que cambiarían bajo nuestro mandato. Uno de los principales cambios fue, que no toleraríamos ni una sola falta de respeto hacia el Sumo Sacerdote, ni mucho menos hacia nosotras. Cattleya también dejó muy en claro que no tolerará que se maltraten a los sacerdotes y sacerdotisas grises. “Si no deseas el servicio de algún sacerdote o sacerdotisa de túnica gris, entonces devuélvelo al orfanato sin ningún daño. Y si deseas el servicio de alguien más, tendrás que solicitarlo a nosotras con un informe completo de porqué se despidió el anterior y porqué estás solicitando uno nuevo. Esto debido a que nosotras estamos a cargo del orfanato también, y eso no cambiará”. Cattleya informó con una sonrisa malvada en su rostro, mirando a los sacerdotes azules.

Y mientras ellos, tenían expresiones de terror en sus rostros, yo agregué para alivianar el ambiente. “Asimismo, todos los sacerdotes azules tendrán que hacer su parte del papeleo que les corresponde, pero además les ofrezco subir sus ingresos, a los que deseen hacer trabajo extra con nosotras y el Sumo Sacerdote en el papeleo. Esto será muy bien remunerado, y en el futuro se les considerará para asumir puestos de más responsabilidad”. Con esto dicho, pude ver que esto interesó a varios sacerdotes azules, que estaban dispuestos a trabajar duro como Kampfer y Frietack. ‘Al parecer, tendremos mucha más ayuda en el trabajo esta vez. ¡¡¡Yahoo!!! Menos carga de trabajo para Ferdinand’.

Una vez que terminamos nuestras metas, ambiciones y advertencias, comenzamos a rezar. “Oh, poderosos rey y reina de los cielos sin fin. Oh, poderosos cinco eternos que gobiernan el reino mortal…”. Oramos al unísono.

“¡Alabados sean los Dioses! ¡Gloria a los Dioses!”. Ofrecieron sus oraciones todos los sacerdotes azules y grises, adoptando la pose de oración. Luego de despedirnos, Ferdinand nos ayudó a bajar las escaleras con mucho cuidado para salir de la capilla, de regreso a nuestros aposentos. 

Y de camino a nuestros aposentos, tuvimos una pequeña charla con Ferdinand. “Oye Sumo Sacerdote, lo hicimos bastante bien esta vez, verdad? Y terminamos la ceremonia sin ningún incidente, y todo salió a la perfección como querías, no es así?”. Mi hermanita dijo con una expresión alegre y satisfecha en su rostro. Luego continuó diciendo. “Esto quiere decir que nos enseñarás a hacer nuestras propias bestias altas, cierto?”.

“Uh, Uhm….”. Yo asentí con la cabeza en apoyo a los esfuerzos de mi hermanita, luego dije algo de interés para mí. “Sumo Sacerdote, ahora que ya terminamos la ceremonia de investidura, ¿nos darás la llave de la sala de libros? Eeeeh… Bueno, me refiero a las llaves de las escrituras”. Yo pregunté tratando de ocultar mi emoción, por tener de regreso mi preciosa sala de libros.

Entonces Ferdinand ante nuestras peticiones respondió. “Cattleya, recuerdo claramente que acordamos que debías realizar con éxito tanto la ceremonia de investidura como la ceremonia de unión de las estrellas, o me equivoco?”. 

Ferdinand después de darle esta respuesta negativa a mi gemela, se dirigió a mí diciendo. “Rozemyne, en cuanto a la sala de libros, debo recordarte que tienen mucho que hacer preparando la ceremonia de unión de las estrellas. Y debido a que se ausentaron por bastante tiempo, me imagino que deben tener mucho trabajo acumulado, así que no creo que tengas mucho tiempo para leer. Además, si recuerdo bien, dijeron que querían hacer una reunión con los comerciantes a su regreso, no es así?”. Y con estas palabras, él terminó de decir con exasperación, recordándonos la enorme carga de trabajo que teníamos por delante, justo cuando habíamos llegado a nuestros aposentos. 

Y ante estas palabras de Ferdinand, yo le respondí con confianza, ya que esta ceremonia sería pan comido para mí. “No te preocupes Sumo Sacerdote, ya tenemos todo preparado para la reunión con Benno y el papeleo es el de siempre. En cuanto a la ceremonia de unión de las estrellas, no será tan difícil aprender las oraciones y procedimientos, verdad hermanita?. Así que no hay nada de que preocuparse”. 

Ferdinand nos miró con cansancio y un poco fastidiado, al vernos asentir a las dos en acuerdo, muy seguras de que todo estaba en orden. “Bien, como quieran”. Él respondió entregándome las llaves de la sala de libros, y luego se marchó a sus propios aposentos, diciendo. “Para mañana estaré presente en su reunión con los comerciantes. Hasta entonces”.

Una vez que Ferdinand se fue, entramos a nuestros aposentos, donde Fran y Zahm nos estaban esperando con una montaña de trabajo atrasado. ‘¡¡¡Noooo… Mi sala de libros!!! ¿Por qué es que siempre termino con una montaña de trabajo, sin importar cuántas veces repita el tejido? Bueno, no saco nada con quejarme si tendré que trabajar igual’. Yo pensé con resignación. Además, no puedo quejarme ante mi hermanita, quien no se está quejando a pesar de que para ella será más duro, ya que no solo tiene que hacer esta montaña de papeleo, sino que también, tiene que aprender las oraciones y procedimientos de la ceremonia de unión de las estrellas. ‘Cattleya realmente quiere una bestia alta, y está trabajando muy duro para obtenerla. Y ella aprende muy rápido cuando está motivada. Ufufufuu… creo que nos parecemos mucho en eso’.

Debido a la importancia de la llave de las escrituras, la mantendríamos en nuestra habitación oculta, dentro de la caja fuerte donde guardábamos la capa de invisibilidad, entre otras cosas importantes. No había lugar más seguro que ese, ya que tiene un sistema de código y se necesita registrar nuestro maná para abrirla. 

****

Al día siguiente nos reunimos con Benno, Mark y Lutz. Sin embargo, esta vez no convocamos a Freydís ni al maestro del gremio Gustav, ya que solo hablaríamos del negocio de la impresión. Así que no era necesaria su presencia en esta reunión, aunque Ferdinand como nuestro tutor, si era necesario que estuviera presente en esta reunión. Para la cual, Cattleya y yo en preparación habíamos hecho los planos de la imprenta, de la prensa, de las letras de metal, y todas las herramientas que necesitaríamos para comenzar a imprimir. Y aunque yo solo quería crear la imprenta para hacer más libros y llenar de libros este mundo, a diferencia de mí, Cattleya pensaba usar la imprenta para dominar la información de este mundo. 

Así, cuando nuestro socio comercial Benno llegó, junto con Mark y Lutz, nosotras ya teníamos todo listo. Y en cuanto entraron en las cámaras del director del orfanato, ellos ofrecieron los saludos de temporada pertinentes, luego sin perder el tiempo, nos sentamos para comenzar la conversación.

Pero Cattleya, antes de comenzar a explicar a Benno nuestros planes, dijo sacando su varita. “Muffliato”. Lo que puso en alerta a Ferdinand y a todos los presentes. “No te preocupes mentor, es solo un hechizo que recordé durante nuestra ceremonia de investidura… bueno, el cómo lo recordé y porqué no importa mucho ahora, verdad? Lo importante es, que este hechizo actúa como una herramienta mágica anti escuchas. Aunque a diferencia de la herramienta mágica, este hechizo produce un zumbido en los oídos de los que están a tú alrededor, que les impide escuchar tu conversación”. Mi hermanita explicó esto, agitando su mano como si no fuera la gran cosa.

Y ante el nuevo hechizo, Ferdinand se mostró muy interesado, y aunque se veía que deseaba saber más de el hechizo, él solo se dio unos golpecitos en las sienes tap, tap, tap… y luego dijo. “Ya veo. Se oye interesante ese hechizo, y muy útil, más tarde quiero que me expliques como funciona y cuales son sus fundamentos”. 

“Ok, como quieras mentor”. Ella respondió asintiendo con la cabeza.

“Yo también quiero aprenderlo hermanita”. Yo también pedí, ya que es un hechizo básico y muy útil. ‘Así no es necesario depender de una herramienta mágica anti escuchas. Aunque los que saben leer los labios como Justus, pueden espiar tu conversación de igual forma, pero eso se soluciona hablando en otro idioma’. Yo pensé en esto, para que nuestras conversaciones sean mucho más privadas.

“Ejemm…”. Benno se aclaró la garganta para interrumpir nuestra pequeña charla. “Mis Ladys, podrían explicar a este servidor, ¿para qué lo citaron aquí el día de hoy?”. Luego preguntó algo irritado, por hacerle perder su tiempo en una conversación de la cual él, no era parte.

“Ok Benno, no te enojes y no necesitas ser tan formal con nosotras, ya que ahora no nos pueden oír los demás en la habitación. Bueno, solo los que yo quiero que escuchen esta conversación”. Mi gemela dijo esto, despreocupadamente.

Pero ante la actitud despreocupada de Cattleya, tanto Benno como Ferdinand, la regañaron por bajar la guardia. A lo que ella respondió encogiéndose de hombros. “Solo estoy diciendo, que como el tema que hablaremos es bastante importante y serio, necesito que hablemos con franqueza aquí, o esto no funcionará”. Y después de decir esto Cattleya me indicó que comenzara la reunión.

A lo que yo de inmediato comencé a hablar del negocio de la impresión. “Benno, ¿recuerdas el negocio del que te hablamos? Pues, ya estamos listas para comenzarlo”. Yo dije indicándole a Fran, que le entregara los planos a Benno y los documentos que contenían todos los pasos para comenzar y poner en funcionamiento la industria de la impresión. 

Benno rápidamente comenzó a echarle un vistazo a los documentos y a los planos de la imprenta, el cual los leyó y estudió con mucho interés. Y como Ferdinand no había tenido tiempo de leerlos y revisarlos a detalle, también los tomó, para mirar los planos con más detenimiento y estudiar los documentos. 

“Vaya, esto está muy bien elaborado. Veo que esta vez se lo tomaron con calma, ¿eh?”. Benno dijo esto, en forma de elogio. 

Pero esto se debe a que mi hermanita, me había dicho que lo tomáramos con calma, ella dijo que lo mejor es sentar las bases, construyendo y mejorando al máximo las imprentas, antes de difundir la impresión. Luego invertir en la fabricación de las maquinarias, buscar e investigar los lugares estratégicos para la construcción de imprentas dentro y fuera del ducado. 

Asimismo, necesitamos trasladar el taller de papel del templo a la provincia de Illgner entre otras provincias, que sean buenas para la fabricación del papel. De esta forma, poder montar nuestro primer taller de impresión en el templo por ahora. Una vez tengamos todo este plan de trabajo y las maquinarias, podríamos comenzar a imprimir y simultáneamente formar el gremio de la impresión. 

‘Y por supuesto esta vez queríamos evitar el incidente de Hasse…’. Yo pensé esto con un poco de ansiedad, mientras Benno decía. “Pero esta industria es completamente revolucionaria, y sin duda, es algo grande”. Él dijo esto, ya olfateando las ganancias de esta nueva industria.  

“Me sorprende que se tomen con calma algo que tiene que ver con libros”. Ferdinand dijo mirándonos con sospecha, y luego preguntó en nuestro idioma secreto Inglés. “[¿Están planeando usar esta industria, de alguna manera en el futuro?]”.

Pero la que respondió a esta pregunta, fue Cattleya. “[Exactamente mentor, será una poderosa arma en el futuro, para cuando tengamos el poder. Dominaremos la información a través de la imprenta, ya que crearemos el primer diario informativo de Yurgenschmidt, de nombre “El profeta”]”. Ella dijo esto último, alzando una mano y moviéndola en el aire, mientras decía el nombre del periódico, imaginando el letrero del futuro establecimiento. ‘Bueno, dejando de lado el ridículo nombre del periódico, debo reconocer que mi hermanita sabe lo que hace’. Yo pensé esto con una mezcla de orgullo y exasperación, por su obsesión por recrear en este mundo las cosas de su libro favorito.

Pero la idea principal de hacer todo esto y esperar para difundir la impresión, es porque Cattleya no quiere que Aub Ehrenfest se adueñe de esta industria en específico. Esto fue lo que me dijo mientras elaborábamos los planos y documentos. “Que se adueñen del papel o la tinta e incluso de los restaurantes, no me interesa, siempre y cuando paguen lo que corresponde por ellas. Pero la imprenta es otra cosa hermanita, ese será nuestro máximo poder para cumplir con nuestra misión. Con la imprenta manipularemos a la población tanto de nobles como de plebeyos. Con un periódico o diario informativo, podremos manipular y controlar la información, como en nuestro viejo mundo. Es por esto, que no hay que apresurarse, solo hay que tenerlo todo listo para cuando nos tomemos el poder. ¿Entiendes hermanita?”. Cattleya me había explicado todo esto, con una sonrisa astuta en su rostro. La misma que le estaba dedicando a Ferdinand, justo en este momento.

Y recordando las palabras de mi gemela, yo dije con firmeza. “[Esta industria es y será nuestra. No queremos que ningún ducado la tome o intente destruirla antes de que comience a difundirse]”.

A lo que Ferdinand asintió con la cabeza, diciendo. “[Entiendo. Luego hablaremos de esto más a detalle]”. 

Después de decir esto en nuestro idioma secreto, volvimos a hablar con Benno y comenzamos a darle más detalles sobre los primeros pasos a seguir para comenzar con el negocio de la impresión. Los cuales eran; encontrar a los artesanos, y pedirles que hagan los primeros prototipos de todas las herramientas y las partes de la imprenta en los planos. Por ahora eso sería lo primero y lo más importante, luego de tener los prototipos listos, nos centraremos en fabricar las maquinarias, para luego montar los talleres de impresión. 

‘Bueno el proceso de la creación de la imprenta sería lento esta vez. Pero una vez que estemos en el poder, la difusión será rápida, ya que será enteramente nuestra, porque no permitiré que Sylvester se involucre en esta industria’.

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¡Hola nobles y plebeyos, brujas, magos y Muggles también! 😉 

Primero que nada espero hayan disfrutado de este capítulo, pero me gustaría aclarar una confusión sobre el personaje de Cattleya y porqué lo hice de esta manera. Debo decir que no me gusta hablar sobre el personaje, ya que es mejor descubrirlo dentro de la historia. Sin embargo, he notado que no se han dado cuenta de algunos detalles importantes, como; la razón de su obsesión por las historias de fantasía y magia. Las cuales son por criarse leyendo estos libros y formando una conexión emocional con ellos, como un refugio. Y la raíz de ello es su padre, quien formó en ella este amor por las historias de aventuras, fantasía y ciencia ficción. Esto lo usó Hanna por años, como una forma de suplir la ausencia de su padre, creando una percepción de la realidad bastante distorsionada, algo parecido al “Quijote de la mancha”.

Este personaje lo hice de esta forma, porque a través de él, necesitaba desarrollar la magia de este mundo, y la magia requiere mucha imaginación. Algo que Cattleya tiene de sobra, formada por leer solo literatura de fantasía y mundos mágicos, a diferencia de Rozemyne, quien leía todo tipo de libros con información, más que de entretenimiento. Es por esta razón que ella se siente a menudo como una niña inmadura, pese a que es una joven de más o menos 27 años, sumando la edad de Hanna y Katy. Pero Myne, definitivamente sigue siendo mayor, ya que si sumamos la edad de Urano, de la Rozemyne del tejido roto y la Myne de ahora, pues nos da un total aproximado de 37 años. Pero en su defensa yo tomé su personalidad y solo la continué desarrollando de donde quedó en el canon, y lo desarrollé a mi manera sin abandonar su esencia. En cuanto a Cattleya, su personalidad se irá desarrollando a medida que avanza la historia.

Pero también, tengan en consideración que al hacer esta fusión de dos universos, yo capturé la esencia de los primeros libros de Harry Potter y también capturé la esencia de las primeras temporadas de AoB, sobre todo en este primer libro. Así que aún queda mucho fic por delante, ya que ahora estoy en proceso de escribir el segundo libro, el cual es un poco más adulto.😏Y si, se suponía que sería un fanfic corto, pero bueno las cosas nunca salen como las planeaste. Jajajaja 🤣 

Próximo capítulo: “Ceremonia de unión de las estrellas. (parte 1)”, con un punto de vista de Cattleya.

Y sin nada más que decir, travesura realizada ¡Gracias por leer mi fic! 😘