
Capítulo 23
Capítulo 23
You've been on this road too long
Hearing music but it's not your song
Wanna scream but your voice is gone
Days trapped inside your head
Can't look up cause your world is down
Walking miles staring at the ground
All alone inside the crowd
Letting pockets hold your hand
But the sun is always there to shine
The clouds block out the sky
Oh hold on
Just once more day
Oh hold on
You know you'll found a way
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on
Just one more time
Hold on
I'll be your reason why
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
So let's paint the sky
It's time to start remembering dreams
Lift your eyes see the things unseen
Remember who you wanna be
Let the light hit your eyes
Let out the beauty that's been trapped inside
Let them know that your not gonna hide
Hey up there your arms open wide spread your wings and fly
But the sun is always there to shine
The clouds don't own the sky
Oh hold on
Just one more day
Hold on
You know you'll find a way
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on
Just one more time
Hold on
I'll be your reason why
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Oooh oh oh oh
Hold on
Hold on
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on
Just once more day
Hold on
You know you'll found a way
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on
Just one more time
Hold on
I'll be your reason why
Hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on, oh hold on, oh hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
Oh hold on, oh hold on, oh hold on
You've got stars in your eyes
So lets paint the sky
So let's paint the sky
―Espera, muévelo un poco a la izquierda… ― Comenta la voz de Asami mientras sujeta su barbilla observando la posición de uno de los pequeños armarios que usarán para colocar la ropa de las gemelas, su gesto de concentración es tan determinado que parece estar decidiendo las jugadas estratégicas del Pai Sho ante su padre y aunque sólo se trate de la simple decoración de la habitación piensa que todo debe estar perfecto antes de su llegada.
―Asami, cariño ¿podrías decidirte en dónde quieres el mueble? ― Pregunta un poco agitada la morena secando unas gotas de sudor en su frente, la joven heredera le ha convencido de continuar con la decoración y el armado de los muebles ese sábado en su “sagrado” día de descanso prometiéndole que serían un par de horas y de eso ya han pasado más de cuatro ― Te recuerdo que esto no está nada liviano ― estira y soba su espalda un poco pues ha movido el mueble en una distancia considerable de orilla por las cuatro esquinas porque la joven de mirada color esmeralda no encuentra la posición que busca según los expertos del Feng shui.
―Espera… Muévelo unos centímetros a tu izquierda ― niega levemente ― no tu otra izquierda ― bromea y ríe al ver la expresión confundida en su novia ― sólo bromeo amor ― se acerca y le besa la mejilla ― pero si pudieras moverlo hacia allá ― apunta hacia otra esquina que ya ha probado.
―Pero… ― Su paciencia se está agotando y quiere descansar un poco así que muerde sus labios y tomando una gran bocanada de aire se inclina para levantar el pesado mueble hacia donde le indica.
―No, mejor hacia allá ― señala hacia la otra dirección cerca de donde están los cambiadores que hace un par de días ha instalado y armado la joven mariscal.
(https://www.youtube.com/watch?v=TpqiUqy9PvI Legend of Korra AMV | Pompeii)
Korra casi grita en frustración pero repite el mantra que ha estado usando en su mente durante los últimos meses para no perder la poca paciencia que debe quedarle: “déjalo pasar Korra, déjalo pasar Korra… Respira, respira…” pero el tamaño del mueble y su cansancio le hace perder el equilibrio pero el mal paso y la alfombra movida se atraviesan en su camino y termina arrojando el armario contra la pared esparciendo todo su contenido y cayendo sobre su estómago sin poder meter la manos siquiera.
―Korr… Cariño ― se apresura Asami a su lado reprimiendo las ganas de reír, pero la morena no se levanta ― ¿Cariño?
―No, estoy bien… Pero creo que tuve suficiente por hoy de esto ― se levanta con un gesto adolorido y molesto sin dejar que su novia replique nada.
―Korra, Korra ― pero en vano lo intenta pues no recibe respuesta además de que la expresión de la morena le desconcierta un poco debido a que no le ha visto nunca en esa faceta silenciosa y frustrada.
Y no es para menos si se trata de enumerar las veces que Korra ha mantenido la paciencia para con su novia pues si no ha armado una escena de celos infundada en nada, tenerla contenta con la decoración tampoco ha sido fácil además la codependencia y aprensión hacia la morena por parte de la joven heredera ha crecido bastante pero el no expresar palabra alguna al respecto o quejarse al menos por no decir una palabra que les enfrasque en una acalorada discusión o hiera el estado cambiante y hormonal de la adolescente embarazada no resulta nada fácil ni de provecho para la joven atleta pues sus nervios y paciencia se está agotando aunque ya ha sabido antes en qué estaba metiéndose y tiene que aceptarlo como parte de su responsabilidad además de que pensar en cómo los cambios y la situación afectan a Asami le hace intentar complacerla pero presiente que esos últimos meses serán muy largos y dudosamente logrará sobrevivirlos.
Así que para intentar calmarse, la atleta se dirige hacia la cocina para beber un poco de agua y tranquilizarse un poco pensando que necesita salir a correr para sacar la frustración de la cual es presa en ese preciso instante como lo ha solido hacer algo le molesta, quizá lanzar un par de balones y golpear un saco le vendría bien y sin pensarlo dos veces toma su bolsa del gimnasio junto a sus llaves, y sale disparada hacia la salida del departamento dejando a la joven heredera con una expresión desconcertada y triste cuando le ha ido a buscar.
***
―Korra Bauer, nunca pensé encontrarse por aquí a esta hora ― comenta una voz femenina a su espalda cuando le ve golpear el saco sin mostrar piedad.
―Hola Sukki ― le sonríe y con un poco de agitación se vuelve hacia su nueva acompañante secando unas gotas de sudor sobre su frente al tiempo que masajea parte de su cuello y espalda ― lo mismo debo decir ― su mirada se pasea por el área del gimnasio.
―Entrenamientos y un viejo habito de agotamiento, supongo ― se encoge de hombros puesto que el torneo de baloncesto semi-profesional está próximo a comenzar y requiere todo tipo de acondicionamiento.
―Ya veo, ahora entiendo por qué casi no he tenido la oportunidad de verte otra vez ― se acerca a la joven castaña recién llegada mientras afloja los vendajes en sus manos y muñecas para darle un fraternal abrazo a su antigua compañera de entrenamiento y vieja amiga.
―Bueno, en parte también es tu culpa porque ya no me llamas para invitarme a salir y nuestros horarios no coinciden con el tiempo libre además de que te has desaparecido por completo ― rechaza el apretón de mano que le ofrece la morena y le engulle en un caluroso abrazo que toma por sorpresa a la mariscal y sólo puede atinar a responderlo de igual manera.
La joven castaña nunca pierde la oportunidad de tocar a la atleta pues desde que se conocen gracias a las profesiones diplomáticas de sus padres además de que siempre ha tenido un “enamoramiento” secreto por su amiga a quien nunca le ha dicho nada por temor a perder la camaradería que han compartido y que Korra nunca ha notado por ser la distraída que es y debido a que siempre ha sabido que tiene novia.
―Y, ¿Cómo has estado, cómo ha estado Opal? ― Se aventura a preguntar no sabiendo la triste realidad debido a que su ajetreada vida de deportista le mantiene bastante alejada de su vida social.
― ¿No lo sabes? ― El desconcierto en el rostro de su amiga le preocupa y le hace pensar que han terminado su relación, lo cual es triste, pero le da una oportunidad ― Ella… Falleció hace unos meses ― el semblante de Korra decae un poco al recordar a la querida Opal.
―Oh por Raava, Korra yo lo siento… En verdad no lo sabía ― se golpea mentalmente por no saber una noticia de esa magnitud y por no estar ahí cuando su amiga ha debido necesitar de su apoyo, aunque eso le da la posibilidad de conquistarla, claro si está disponible ― lo siento en verdad ― se disculpa nuevamente sintiendo que el rubor tiñe sus mejillas.
―No te preocupes, no lo sabías y es lo mismo que yo hubiera preguntado si las cosas fuesen al revés ― le sonríe triste y por un momento el silencio les invade ― debo ir a las duchas, ¿ya te vas? ― Sukki niega levemente y señala sus propias ropas.
―Creo que también debo darme un ducha ― ambas caminan hacia los vestidores para comenzar a asearse.
Korra se siente un poco más relajada y la tensión sobre sus hombros ha disminuido lo bastante como para comenzar a soportar las desesperantes acciones de su novia una vez más sin que la paciencia le abandone o quiera gritarle y salir huyendo para abandonarla, se siente renovada y ligera además de que ver a Sukki le distrae un poco de sus pensamientos.
―Así que… Estaba pensando que, ya que hemos coincidido otra vez, quizá podríamos salir a tomar algo o caminar por allí… ― Comenta casualmente la joven castaña mientras ambas caminan hacia la salida del gimnasio.
―Sí, extraño nuestros viejos tiempo ― sonríe nostálgica ― pero en este preciso instante no voy con el tiempo para hacerlo, ¿te parece si nos ponemos de acuerdo con más calma? ― Propone observando su reloj y percatándose de que ya ha estado fuera de casa más del tiempo debido.
―Claro, esperaré tu mensaje ― le besa la mejilla y le da un abrazo a manera de despedida, gestos que son correspondido de igual forma por la entusiasta morena.
Ambas parten con rumbos diferentes y Korra hace una parada en la tienda de postres y pasteles favoritos de la joven heredera para llevarle un pequeño refrigerio; los sabores nuez, algunas frutas tropicales, zarzamora y queso han rondando los últimos antojos de Asami así que considera que podría ser una forma de disculparse por dejar el departamento sin decir nada.
***
Asami permanece recostada sobre la cama pensando qué pudo haber pasado con su novia para que reaccionase así mientras su mente no le ayuda en nada y comienza a divagar cosas que la tienen al borde del llanto por su elevado nivel de hormonas que han estado acrecentando su inseguridad sobre su figura disparando sus celos y sentido de la pertenencia hacia niveles que jamás ha pensado existiesen pues ha estado a punto de llamar a su madre y suegra para pedirles que busquen a su novia, quien por cierto entra ahora por la puerta cargando una pequeña charola junto a una sonrisa arrepentida.
(https://www.youtube.com/watch?v=hnhtI6IV9N0 Who Are You - Fifth Harmony (Lyrics))
Korra busca a Asami por todo el departamento sin éxito alguno hasta que decide buscar en su habitación donde la encuentra hecha un pequeño ovillo enrollado sobre la cama con la mirada ausente y triste dándole la espalda a la puerta, la imagen le constriñe el corazón pues sabe que está así por ella y la escena de la habitación de las gemelas.
Así que camina hacia ella sosteniendo la charola con los postres con mucha firmeza en su mano derecha mientras la cama cede a su peso y apoya su cuerpo sobre su brazo izquierdo besando el hombro de su novia recarga su barbilla sobre éste sintiendo temblar y sollozar a la joven heredera bajo ella.
―Cariño, mi amor… ― Susurra la morena casi sin voz y de manera suave ― ¿Estás bien? ―La joven de mirada color esmeralda niega levemente con la cabeza y la mariscal se maldice mentalmente ― Mira, lo siento, sé que tuve una sobrerreacción pero no quería lastimarte ― Asami le mira de soslayo con evidentes lágrimas en sus ojos ― pero todo este asunto de las gemelas, la decoración de su habitación, la escuela, el trabajo y las hormonas están acabando conmigo.
― ¿Qué quieres decir? ― La joven de cabellos color ébano se gira con un poco de dificultad para contemplar su reflejo en los orbes de su novia.
―Que algunas veces necesito un respiro de todo, no de ti sino… ― Bufa de manera frustrada por no encontrar las palabras correctas ― de mi situación, sabía que no sería fácil pero creo que todo me está superando y termino por estresarme porque en algunas ocasiones no sé tampoco de que humor estarás y esto es… Simplemente frustrante y yo… Sé que eres tú la que lleva la peor parte y te admiro por ser tan valiente y traer a nuestras pequeñas angelitas a este mundo, las dos siendo muy jóvenes ― su mirada denota todo el cariño y afecto que le tiene sintiéndose más enamorada que nunca ― me siento culpable de todo esto, yo…
―No todo es tu culpa, en todo caso también es mía porque se necesitan de dos para bailar tango ― su estado emocional ha cedido un poco y acaricia los mechones cortos posando su mano en la mejilla de su novia mientras le sonríe ― y creo que me he excedido un poco, tampoco te he puesto las cosas muy fáciles que digamos, pero debo decirte que te admiro porque has soportado todo esto sin quejarte… Mucho ― ambas sonríen ― porque sí, no soy una persona simple…
―No, eres especial y maravillosa ― su sonrisa se ensancha mucho más ahora que se están sincerando pues siente que un peso abandona su cuerpo con la conversación.
― ¿Eso que huelo son pastelillos de Heaven´s? ― Su nariz capta el suave aroma del paquete que ha traído la morena, y quien sólo atina a besar su mejilla mientras que Korra coloca los pastelillos cerca del borde de la cama y le abraza con mayor fuerza y le atrae hacia así.
Y de pronto, algo casi maravilloso sucede, ambas gemelas patean y la joven pareja se sorprende ante el acto pues Korra, debido a su cercanía ha compartido la dicha de sentir a penas perceptiblemente el ligero movimiento de las gemelas manifestándose como intentando darles ánimo a pesar de que la doctora les ha dicho que las manifestaciones de las pequeñas serían hasta un par de semanas más siendo que Asami todavía se encuentra dentro de los primeros días del quinto mes del embarazo.
―No fue sólo mi imaginación, ¿cierto? ― Pregunta la joven heredera con los ojos cristalinos ahora por la felicidad que el embarga.
―No, ellas patearon ― sujeta las mejillas de su novia y le da un beso al atraerla hacia sí sintiendo la humedad de sus mejillas ― ¿crees que lo harán otra vez? ― La morena coloca su mano sobre la zona donde parece haber sido la manifestación, pero nada sucede.
―No, yo creo que sólo fue cosa de una vez ― le sonríe al ver el ligero puchero en sus labios y le besa otra vez de manera lenta y suave ― en un par de semanas, tal vez… ― Ambas ríen emocionadas en medio del beso uniendo sus frentes.
―Te amo ― el corazón de Asami casi salta de alegría en su pecho pues Korra no le ha dicho una palabra tan significativa como esa en todo el tiempo que han estado juntas por lo que no puede contener su emoción y colocando una mano tras el cuello de su novia le atrae para otro beso.
―Yo también te amo ― ambas mantienen los ojos cerrados memorizando ese instante en sus memorias como el primer momento en que se han atrevido a poner sus sentimientos en un par de palabras.
***
La vida parece estar más tranquila para las chicas y más para Korra debido a que Asami ha dejado de lado su faceta mandona y voluble aunque todavía tiene sus arranques hormonales mayormente con los comentarios y al ver su reflejo cambiante ante el espejo, con su vientre creciendo y su figura estirándose mes con mes dando paso a un balón de futbol soccer más o menos, su inseguridad crece día con día y sus celos van y vienen como esa escena del supermercado en donde Korra a penas y le ha sonreído a una de las jóvenes que le atienden de manera amable y en forma de agradecimiento pero para Asami eso ha significado un coqueteo y lo que ha llevado a la morena a dormir un par de horas en el sillón de la sala hasta que la joven heredera ha extrañado su calor corporal, pero para estar dentro del sexto mes lo están haciendo bien.
Aunque la joven de cabellos color ébano ha entrado en el sexto mes, las gemelas no han hecho otra manifestación ante sus madres pero de acuerdo con la galena durante la última semana cuando ha sido la cita, esto parece ser normal en todas las mujeres embarazadas pues los movimientos comienzan a sentirse más desde la semana 16 del segundo trimestre pero para otras la espera para poder sentirlos hasta la semana número 19 pero de acuerdo con la doctora Tsun las cosas con las gemelas marchan más que bien. De hecho, a esas alturas ambas bebés ya han alcanzado unos 15 centímetros, aunque el vientre de Asami parece no mostrar un tamaño exagerado como alguna otra mujer con embarazo múltiple pues al parecer las pequeñinas serán más pequeñas que otros bebés al nacer; sin embargo, y de acuerdo con la ginecóloga, los sentidos de ambas bebés se han desarrollado mucho porque en su cerebro, para estas alturas, están madurando las áreas especializadas en la audición, el tacto, el olor y la visión.
Así que les ha comentado que este es el momento ideal para hablar con las pequeñas recomendándoles ponerles música relajante debido a que, algunas investigaciones, han demostrado que los bebés ya pueden escuchar los sonidos provenientes del exterior, sobre todo la voz de su madre puesto que los bebés pueden reconocer la voz de su progenitora apenas nacen ejerciendo un poder tranquilizador en ellos por lo que Asami pasa la tarde escuchando algunas melodías esperando la llegada de Korra, quien aprovecha el pequeño tiempo libre que tiene antes de hacer su tarea para leerles un poco o reconfortarse con la tranquilizadora voz de su novia mientras es ella quien lee.
(https://www.youtube.com/watch?v=fonsGqCtUnA How To Be A Heartbreaker Lyrics - Marina and the Diamonds)
Esa tarde ha sido diferente, Korra ha concertado una salida con su amiga Sukki para presentarle a su nueva novia, pero las cosas no van como quisiera pues desde que han llegado Asami se ha mostrado hostil ante el cariñoso comportamiento de la joven para con su novia y ésta no ha hecho absolutamente nada para detener las exageradas y descaradas muestras de cariño como la que presencia en ese momento en que la joven de mirada chocolate está sujeta del brazo de la morena y minutos antes ha estado acariciando su cabello corto recargando su cuerpo en el de Korra acaparando su atención y excluyendo de la conversación por completo a la joven heredera.
― ¿Asami te sientes bien? ― Korra le mira preocupada por su gesto serio con el ceño ligeramente fruncido.
―Sí, estoy bien ― gira su rostro bebiendo de la limonada que ha ordenado.
―Si quieres podemos irnos ― intenta sujetarle la mano, pero Asami la retira como si el contacto le quemara y la mariscal siente una punzada de dolor.
―Yo… Voy al baño ― se disculpa Sukki escondiendo una sonrisa satisfecha.
―´Sami, amor, ¿Qué pasa? ― Se acerca más a ella y sujeta su barbilla para hacer que le mire, pero la joven heredera se libera bruscamente del agarre.
― ¿En serio quieres saber? ― Se cruza de brazos y la joven deportista asiente ― Me pasa que ESA… ― Pone énfasis en la palabra ― Está coqueteándote y tú no haces nada, ¿es en serio?
― ¿Sukki? ¿De qué hablas? Ella es sólo una amiga…― Intenta defenderse ― Y sólo está feliz de volver a reunirnos.
―Sí, claro muy feliz ― comenta de manera irónica cruzándose de brazos ― Korra está prácticamente sobre ti, te come con la mirada y… ― Se interrumpe para no decir que la está desnudando en su mente ― A penas me prestas atención,¿a caso es porque estoy más gorda? ― El temor y la inseguridad se puede palpar en su voz.
― ¿Qué? No ― se acerca para abrazarla sintiendo que el gesto será rechazado, no le permite alejarse ― No estás gorda, recuérdalo, estás embarazada, ¿Cuántas veces tendremos estas conversaciones? Además, yo no tengo ojos para nadie más que tu, mi amor ― Murmura cerca de su oído y se aleja para subir la barbilla de su novia y besarle.
― ¿Interrumpo algo? ― Sukki se acerca a la mesa con un gesto molesto.
―No, para nada ― Korra le sonríe afablemente mientras Asami le dedica una mirada de advertencia.
―En absoluto ― la joven heredera toma el rostro de su novia para besarle y ambas se sumergen un beso necesitado y hambriento mostrando quien es la dueña de esos labios rosados con sabor a cereza y para cuando se separan, Asami se recarga en su pecho sintiendo la seguridad en los brazos que la rodean.
https://www.youtube.com/watch?v=6IQyPZJkWEI Fifth Harmony - We Know (Subtitulado al Español) NA: ustedes disculparán pero me ha salido una pequeña obsesión por las chicas de Fifth Harmony, especialmente por las Camren pero me han gustado las canciones aunque en un futuro verán algo con ellas y algo más)
Con la demostración de afecto, la joven castaña de mirada chocolate parece retroceder con sus muestras de cariño hasta que Asami tiene que ir al baño por décima, en serio odiaba esa parte del embarazo así que acude a la llamada de la naturaleza y Sukki aprovecha para hacer un ligero movimiento pensando que ha ganado terreno con los anteriores gestos así que cuela una mano hacia el regazo de Korra apretando su pierna y haciendo sobresaltarse a la morena, quien le mira incrédula.
―Sukki, ¿Qué…? ― Le mira desconcertada.
―Korra, tú me gustas, me has gustado desde hace un tiempo atrás ― intenta acercarse para besarle, pero la mariscal se aleja levantándose.
―Tengo novia y está aquí mismo ― niega con la cabeza ligeramente ― y no pienso perder lo que he construido con ella por algo de 5 minutos ― comenta sabiendo un poco la reputación que posee su amiga a pesar de tener un carácter tranquilo.
―Pero no decías nada hace un momento ― intenta acercarse nuevamente, pero Korra se aleja.
―Pues lamento que te diera otra impresión pero yo quiero, no, amo a Asami ― le aclara ― y si así son las cosas, me temo que ya no podremos ser amigas ― piensa por un momento qué hacer.
―Pero…
―Yo pensé que estabas feliz por nuestra reunión pero ya veo que me equivoqué y Asami tenía razón ― talla su rostro con ambas manos ― lamento si te dio otra impresión ― comenta decepcionada.
―No, Korra yo… ― le mira arrepentida.
―He vuelto ― anuncia la joven heredera y puede sentir la tensión en el ambiente y en la mirada crispada de su novia ― ¿sucede algo? ― Mira entre la mariscal y su amiga.
―No, simplemente que recordé que tenía que hacer algo, ¿nos vamos? ― No le permite sentarse y Asami accede sin comentar nada.
―Korra… ― Intenta detenerle.
―No, en serio debemos irnos ― le interrumpe ― pero fue un gusto volver a verte y saludarte pero creo que no podremos volver a reunirnos de momento así que nos mensajeamos ― prácticamente sale corriendo seguida de su novia dejando a Sukki con la palabra en la boca.
― ¿Qué fue eso? ― Pregunta la joven de mirada color esmeralda.
―Nada, simplemente que me di cuenta de que te amo y mucho ― le sonríe lo más dulcemente que puede indicándole a su novia que no quiere saber lo que ha pasado y ésta sólo puede asentir comprensiva abrazándola.
Y otro suceso inesperado sucede, las gemelas hacen acto de presencia haciendo sonreír a sus madres pudiendo presentir que sólo se manifiestan cuando hay momentos de afecto y sinceridad entre ambas para reafirmarles que pueden hacer esto si permanecen juntas.
―Hola ustedes, pequeñas inoportunas ― Korra se arrodilla a la altura del vientre de Asami y lo acaricia sobre la tela de su vestido de maternidad en color verde pastel mientras dirige su mirada hacia su novia y siente que se enamora otra vez ― digan hola Akemi, Tamiko ― acaricia nuevamente pero no obtiene respuesta.
― ¿Akemi y Tamiko? ¿En serio? ― Asami le mira arqueando una de sus perfectas cejas.
―Me gustan esos nombres ― se encoge de hombros.
―Pero a mí no ― se cruza de brazos ― además dijimos que lo hablaríamos primero.
―Sí, pero no llegamos a nada cuando lo hacemos ― se queja recordando las ocasiones en que ha sacado el tema a colación.
―Pues… Pues no, porque… Ya vámonos a casa ― cambia el tema porque sabe que es por ella que no pueden ponerse de acuerdo pero quien la puede culpar por ser una madre que quiere los perfectos nombres para sus hijas y camina hacia el satomóvil sin esperar que su novia le abra la puerta se introduce en el vehículo mientras la morena le mira y niega levemente acercándose al lado del piloto.
Quien podría pensar que escoger el nombre perfecto les tomaría demasiado tiempo, bueno, pero es que cuando quieres cuidar hasta el último detalle como padre primerizo todo te resulta difícil para decidir y más siendo la novia de Asami Sato, aunque Korra Bauer no se rendirá tan fácil a pesar de que cada vez que hablan teme hacer enojar a su novia, quien la podría mandar a dormir al sillón por tiempo indefinido por lo que tendrá que escoger muy bien su táctica si quiere tener al menos algo que decir sobre los nombres así que el drama y las peleas continuarán un poco más…