
3
Teddy
Lo primero que noto fue una sensación de ingravidez, como flotando de alguna manera rara, sus cuerpo se sentía pesado como una bolsa de cemento, y podía sentir sus extremidades balanceándose. “ahora, eso es raro” pensó, trato de abrir los ojos y así hizo su segundo descubrimiento: un dolor agudo se disparo en su cabeza como un rayo y le hubiera quitado el aliento de la sorpresa si no hubiese ya algo presionándose contra su abdomen haciendo precisamente eso. Trató de abrir los ojos por segunda vez, “el entrenador realmente me quiere muerto esta vez”, de pronto los recuerdos lo asaltaron y abrió los ojos de golpe tratando de moverse “¿¡donde estoy!?” pensó con pánico, ¿o lo grito?, no podía estar seguro.
-ow, oye, cuidado- dijo una vocecilla abajo suyo, y entonces lo dejo caer al suelo como la bolsa de cemento que ya sentía que era. El impacto lo sobresalto y desequilibro de igual manera, pero la adrenalina demostró ser un aliado poderoso y en menos de un segundo se arrastro torpemente para ponerse de pie.
-wow, oye Mols, lo asustaste- dijo una voz masculina detrás suyo, Teddy se dio vuelta y vio a un chico caminando hacia ellos, vestía una camisa blanca con el ultimo botón desabrochado, unos pantalones negros hasta debajo de la rodilla con tirantes, zapatos y calcetines verdes, era un poco mas bajo que el, con la mirada rebelde y divertida, ojos verdes y un extraño cabello platino. Teddy se quedo sin palabras, ¿quien demonios se viste asi? ¿Era algo de la isla?, no, el había visto a los habitantes, ademas el cabello...
-el se removía Tommy- se quejo la niña, que ahora que veía era bastante joven, al parecer 8 años o algo así, y se veía muy bien vestida, pensó el rubio, hasta que recalculo.
-¿espera, que?- de ninguna manera ella podría cargarlo, no es que el fuese gordo o algo asi, pero reconocía que no era liviano tampoco, ambos voltearon hacia el, recordando su presencia.
-mira tu, te despertaste, no creí que lo haría tan pronto, la próxima le pondré algo mas de fuerza-exclamo alegremente el peliblanco.
-¿que tu que?-exijo Teddy desconcertado, de pronto el dolor del golpe vino a el con fuerza, soltó un quejido y coloco su mano en la cabeza con cuidado.
-vaya, lo has dejado tonto, la señorita Peregrine y Billy no estarán contentos- refunfuño la niña ignorándolo como si no estuviera allí. El peliblanco, “Tommy” resoplo.
-no tenemos que mencionárselos, podrían pensar que ya venia tonto, ¿por que sino estaría dando vueltas por la mansión?, además Billy…
-¿yo que?-irrumpió un chico acercándose tras ellos con uno de los gemelos de blanco tomado de la mano y otro correteando cerca. Teddy reconoció la voz el chico era muy parecido al peliblanco, “como gemelos” pero donde uno era blanco y salvaje, el tal Billy tenia una mirada color marrón chocolate, mas suave y dulce, en su opinión, su cabello era un desorden de negro azabache, tenia una camisa celeste pálido de mangas largas, con una pequeña cinta el el cuello, pantalones grises, pero lo mas llamativo de su atuendo eran unas botas que parecían de metal pesado, y que retumbaban a cada paso que daba, algo así como,... el recuerdo golpeó a Teddy como un tren.
-tu eres William- exclamo mirando al pelinegro, este lo miro sorprendido, como si recién fuera consciente de su presencia, “es lindo” dijo una voz en su cabeza, pero la ignoró en favor a la emosion.
-¿Y como sabes tu eso?- pregunto el supuesto gemelo peliblanco con seriedad, pero Teddy ignoro la pregunta.
-Y tu Thomas-
-es Tommy- refunfuño este cruzado de brazos.
-Y Molly- señalo a la niña, quien asintió sonriendo ante su reconocimiento-los gemelos Aaron y Jacob- los aludidos lo miraron con curiosidad al oír su nombre pero su atención se desvió rápido en favor de jugar en la hierba.
-vaya, ¿un admirador o un acosador?- dijo una voz, o mas bien una presencia, la camisa y chaleco verde, junto con mocasines y una gorra con pequeños cuernos a su lado.
-y tu eres Loki, y eres invisible-
-su servidor- murmuro este divertido.
-pero, todos ustedes están muertos, hace tiempo-
-wow, alto ahí, no estamos muertos- gruño Tommy- Loki es invisible, pero no esta muerto.- La sonrisa de Teddy se borro.
-¿entonces yo estoy muerto?-miro a su alrededor y noto que ya no estaba en la mansión, sino en alguna especie de claro rocoso el la playa, a la entrada de una cueva, el cielo seguía nublado y grís, o el paraíso era muy cutre o aún seguía en la isla. El chico pelinegro suspiró.
-no, no estas muerto, pero pudiste estarlo, la mansión es peligrosa en ese estado, eso y los riesgos de un trauma en la cabeza- murmuro mirando de reojo a su hermano quien se encogió de hombros.
-era para que no nos diera problemas huyendo-
-¿por que? Donde estoy?, y como es que ustedes están vivos?-
-para responder a tus preguntas -exclamo Loki- estamos esperando para entrar al bucle, no es seguro intentarlo descuidadamente.- Teddy se animo.
-mi abuela dijo algo sobre eso… un bucle...¿que es?-
-menos preguntas mas caminata, la señorita Peregrine te vió en el transbordador, quiere que te llevemos con ella-explico William, conduciéndolo suavemente del brazo, para adentrarlo a la cueva, los gemelos de blanco corrieron a su lado y se adelantaron a la oscuridad. Tommy, Loki y Molly los siguieron atrás, sin inmutarse ante el hecho de que se estaban metiendo en un lugar peligroso, parecían conocerlo y se movían con familiaridad. Teddy suspiro temblorosamente con pasos indecisos, la cueva era fría y húmeda, incluso se podían escuchar pequeñas gotas caer del techo y salpicar en pequeños charcos, el olor a sal golpeo a Teddy con fuerza, entonces cayo en cuenta en lo que estaba haciendo en ese momento; adentrándose en una cueva extraña y oscura, alejado de todo lo que podría ayudarlo con unos extraños que bien podrían tener que ver con la muerte de su abuela, ella estaría molesta con el si pudiera verlo ahora. Entonces el rubio se paro de golpe.
-¿estas bien?-pregunto el chico a su lado, Teddy giro para verlo, sus ojos marrones y curiosos, desvió la mirada y la enfoco en los demás niños que lo miraban atentamente, la poca iluminación que llegaba a la cueva retrataba sus siluetas pálidas y antiguas, Teddy se giro de repente y empezó a correr, lejos de la cueva, lejos de esos niños, lejos de las respuestas que ya no estaba tan seguro de querer desesperadamente.
…………….
Tras correr unos minutos logro regresar trabajosamente al sendero, intentando hacer caso omiso a la sensación de humedad y el olor a sal de la que sentía que había penetrado en ropa, y se encaminó al pueblo. Curiosamente, el sendero se veía un poco mas verde y seco que antes, por un segundo dudo en si había tomado el camino incorrecto, pero un poco mas adelante ya se lograba captar el murmullo de vida de la gente de pueblo y la silueta de los techos acercándose
Al adentrarse al pueblo pudo notar que olía aun peor que antes, pues se había llenado de carretas tiradas por caballos, la calles ni siquiera estaban pavimentadas y el zumbido de los generadores de gasoil. No se oía ¿Se habría quedado la isla sin combustible en las pocas horas durante su viaje? ¿Y dónde habían escondido los vecinos todos estos enormes animales? Teddy apuro su paso al hotel al ver que todos lo miraban con confusión y sobresalto. A entrar noto que algunas diferencia sutiles, pero todo parecía igual que cuando se fue. Suspiro aliviado y se encamino hacia las escaleras, de pronto una voz desconocida lo detuvo.
-oye tu ¿Adónde crees tú que vas?-
Giro la cabeza, con un pie en el primer escalón, y vio que el encargado de la barra lo estaba mirando de mala manera. Teddy no reconoció. Llevaba un delantal de tabernero, un bigote grueso que hacía que su rostro pareciera tener una raya.
-Arriba, a mi habitación- más como una pregunta que como una declaración.
-ya veo-exclamo el tabernero, depositando sobre la barra con un golpe seco el vaso que había estado llenando, los parroquianos se volvieron en sus taburetes para verlos. El pánico inundo a Teddy, estaba seguro que lo sacarían de esa isla con un chaleco para locos, gracias doctora Golan, por su maravillosa idea.
-mi padre y yo ocupamos las habitaciones de arriba, mire, tengo la llave.
-esa no es nuestra llave -gruñó, el tabernero- ahora dime realmente qué quieres hacer
ahí arriba... ¡y esta vez, no me mientas!
-es americano —comentó un hombre oscuro- del ejército, tal vez.
-miren su impermeable te costaría una barbaridad encontrar eso en una tienda. Del ejército..., tiene que serlo.
-alto, no pertenezco al ejército ni intento engañar a nadie, ¡lo juro! Sólo quiero encontrar a mi padre, coger mis cosas, y...
-escuchen su acento ¡Debe ser espía, un cabeza cuadrada!
-yo digo que le saquemos la verdad a la antigua. ¡Con una soga!-Corearon ebrios gritos de asentimiento. Eso no terminaría bien, Teddy se giro y empezó a correr; justo cuando la muchedumbre iba a lanzarse sobre el unos frascos de vidrio explotaron sobre su cabeza, algunos volaron y se estrellaron en la paredes. Eso pareció distraer a todos, de pronto un grito se alzo entre el resto anunciando fuego, subía por las cortinas. Teddy no se quedo a ver que pasaba, salio rápidamente por la puerta y de pronto su mano fue apresada, el chico de cabello plateado de antes lo miro con molestia y tiro de el con fuerza hasta una carreta en donde esperaba su gemelo agarrando las riendas con ansiedad.
-¿ya estamos todos?-pregunto con nerviosismo.
-tengo al idiota-contesto su hermano sin humor empujando a Teddy para que subiera, este no discutio mientras santaba a la carreta.
-¿y Loki?-
-aquí-dijo una voz en el aire, de repente se sintio un peso extra en la carreta y las prendas tiradas en el suelo se movieron en el aire.
-¿estaba desnudo?- pregunto Teddy con la voz quebrada.
-pues a ti que te parece?, teníamos que sacarte del lio en el que te metiste tu solo, idiota, ahora mas te vale que escuches o esos borrachos no serán los únicos que te linchen- respondió el peli-plata- y ten en cuenta, nadie puede huir de mi.
-dejalo en paz Tommy -gruño Billy mientras agitaba las riendas y se ponían en marcha a toda prisa y las voces de los pueblerinos se perdian.
-no entiendo- murmuro el rubio con algo de pánico-¿que demonios sucede? ¿porque actuaban asi? Tengo que encontrar a mi papa-
-wow tranquilo chico, todo a su tiempo-
-Loki, vístete- la voz resoplo.
-esta bien, pero solo porque se que se siente cohibidos de mi belleza extraordinario- Tommy resoplo, la voz se inclino hacia Teddy.
-es cierto que soy muy atractivo, solo que sus simples ojos mortales no pueden notarlo-
-iremos a ver a la señorita Peregrine-explico Billy con calma-ella responder tus preguntas, y tal ves tu puedas responder las nuestras.