Get You 2
No podías culpar a Will. No era neoyorkino: el auto regresó por un estacionamiento subterráneo, y subieron por un ascensor privado, por lo que no fue hasta que salieron al penthouse que los ojos de Will perdieron esa expresión de reconcentrado temor y adquirieron ese aspecto entrecerrado y desconcertado que significaba que estaba atando cabos. Dio unos pasos hacia la elegante sala, con sus ventanales y terraza dominando New York, se giró en círculo para observan los flamantes pasillos y el luminoso living con sus pantallas y la mesa de ocho sillas, con sus carpetas y Mjolnir puesto de decoración en una esquina.
- Tony… Stark?- peguntó en un susurro incrédulo. Bruce iba a asentir y empezar a explicarse, pero el ruido de una turbina los hizo saltar, y la familiar figura rojo y oro se quedo suspendida en el aire unos minutos, al otro lado de los ventanales, antes de hacer su entrada por la terraza y el conveyor belt que desvestía a Iron Man y lo convertía en Tony Stark.
Bruce contuvo el deseo de rodar los ojos. Era teatro. JARVIS le había avisado que venían, por supuesto.
- Buenas noches, agente Graham. O puedo decirle cuñadito?-
- Obviamente fue su dinero el que pagó esa hospitalización, no me cobraron ni los medicamentos.- dijo Will ignorándolo y volviéndose a Bruce.
- Sí, oye, y tus muletas?-
- No uso muletas. Es… deprimente.- dijo Will con acidez.
- Un tipo a mi gusto, claramente. Y los ojazos tampoco están mal.- dijo Tony agarrando su mano, estrechándola a su placer, y dirigiéndolo a los sillones.- Pero no hay necesidad de extremar el masoquismo, a no ser que se una noche especial… un whisky? Vino, quizá? Cerveza?-
- Estás medicándote.-
- Cállate, aguafiestas.-
Will los miró discutir, y tras darle una larga ojeada evaluadora a Tony, cojeó levemente a uno de los sofás, antes de sentarse, su rostro relajándose.- Una cerveza, por favor.-
- LEGOLAS, te hablan!- gritó Tony, sirviendo un bourbon y volteándose con una sonrisa cuando Clint entró de la cocina secándose las manos, con un paño estampado con piñitas y gotitas de espuma en la camiseta.- Ofrécele tus servicios al hermanito lumberjack de Bruce, que quiere cerveza. Este.- agregó apuntando con el vaso.- Tiene la mayor colección de brebajes artesanales de New York, es como un hobby, se contacta con los tipos que destilas y hablan de bacterias…-
- Lager rubia, ácida, sin filtrar?- dijo Will esbozando una sonrisa tímida, que Clint reprodujo ensanchada.
- Por supuesto. Hasta que lo trajiste, eh? Voy a avisarle a Nat.- agregó, partiendo a la cocina. Bruce se sentó junto a Will, que parpadeó, y luego lo miró a la cara, y le vino una risa irreprimible un poco histérica.
- Qué?-
-… era la Black Widow bajando mis cosas de ese auto cuando me fueron a dejar a casa?-
- Ehm, sí.-
- Y yo estaba preocupado porque…- agregó antes de detenerse y mirar a Tony de arriba abajo. – Me preocupaba que no fueras un buen tipo, y eres un superhéroe.-
- Viniste al fin porque pensabas que quizá Tony… Will…- dijo Bruce con ternura, oprimiéndole el brazo. Will no se resistió al contacto, y sonrió avergonzadamente, mientras Tony bebía su bourbon y los miraba con cuanta satisfacción existe en el mundo.
- Te veo los planes de adopción en la cara, Stark.- dijo Clint, volviendo con unas botellas salpicadas de condensación del cuello, y alargándole una destapada a Will, antes de susurrarle a sotto voce.- Resístete un poco, si te resistes, le pone más cosas a tu apartamento, Nat tiene hasta estudio de baile…-
- Hawkeye.- dijo Will tras una pausa.
Clint asintió, tras un largo sorbo de cerveza, instalándose en el brazo del sofá en el que se había acomodado Tony.- Yup. Y me apena romper tus expectativas, pero lo de buen tipo y superhéroe no es siempre correlativo, nosotros dos somos ejemplos, pero ése que tienes al lado es el mejor de nosotros…-
- Hear, hear.- dijo Thor con un saludo y un palmoteo al salir del ascensor, haciendo que Will diera un respingo.- Has dicho una verdad como un templo, amigo Clint! Es éste el honorable pariente de nuestro doctor? Bienhallado eres, joven Will! Grande es la felicidad de verte sanado de tus heridas y reunido con tu hermano, en días auspiciosos!-
- Uhm, hola.- dijo Will, comprensiblemente intimidado por el enorme y expansivo asgardiano, que inesperadamente frenó a dos metros, tomó tranquilamente una cerveza e hizo un reverencia con la mano en el corazón, antes de ir a instalarse en un sillón con una sonrisa. – Thor, supongo?-
- No, es la Black Widow, es sólo que lo viste encorsetado y afeitado.- respondió Clint fresco como una rosa, haciendo que Bruce y Tony se atorasen y Thor soltara la carcajada.
- No te he dicho que no sea trollea a amigos y familiares, a no ser que se trate de Darcy, Barton?- dijo Natasha de la puerta, desde donde entró en calzas y camiseta de danza, el pelo en un moño alto.- Bienvenido, Will Graham. Por favor, no hagas caso de estos idiotas.-
- No te dí las gracias ese día por… bueno, todo.- dijo Will, esbozando una media sonrisa, aunque se heló un poco cuando ella se acercó. Si Thor y Tony intercambiaron miradas al ver cómo Will se comía a Natasha con los ojos, y algún codazo al estilo “ mira, éste es el Banner hetero” Clint en cambio entrecerró su aguda mirada, pero la expresión de Will no era la de un hombre mirando a una mujer bellísima, sino la de un entomólogo observando una extraña y nueva mariposa y estudiando cómo clasificarla.
- No tienes que agradecerme nada. Eres familia de nuestro Bruce, y además, es un honor poder ayudar al tipo que atrapó a Garret Jacob Hobbs, a Lawrence Wells y al Chesapeake Ripper.- dijo ella, y había un retintín en su voz. Inmediatamente hubo un silencio, y Bruce se dio cuenta que Will había empalidecido.
- Nat.- dijo Clint cansadamente, con reconvención.
- Me investigaste?- dijo Will ácidamente.
- Por supuesto. Tú crees que dejamos que cualquiera se acerque a Bruce y venga a la Torre de los Avengers?- soltó Nat de regreso.
- JARVIS me habría alertado si fuera peligroso, Nat!- protestó Tony, a lo que Bruce se volvió él.
- Lo investigaste?-
- No, nada, ni siquiera lo googleé, para que veas lo que respeto tu privacidad, aunque me picaban las manos, por supuesto! – agregó mirando a Nat.- Ahora tú eres mi Id, angelito malo?-
- Tony, tú eres un YO con piernas.-
- Qué está pasando? Quién es… hola, soy Steve Rogers.- dijo Steve asomándose de la cocina.- Vamos a comer? Me muero de hambre.-
- Y ahí está nuestro Superyó.- dijo Clint, haciendo que Tony riera.- Will, guárdate las zarpas. Tu trabajo con el FBI no difiere tanto del nuestro.-
- Pensé que dijiste que enseñabas.- dijo Bruce, con voz apagada.
- Y lo hago. Es sólo que en casos, especiales…- Will hundió los hombros.- Mi jefe me pide que le de impresiones… que evalúe escenas del crimen, y eso es todo lo que hago.- acabó, con una sonrisa áspera algo temblorosa.- Nada de lo que quieran oír hablar en la cena, créanme, es mejor que me vaya…-
- Graham, deja el culo exactamente en donde lo tienes, que perderte la noche de spaguetti de Steve Rogers es un delito contra América.- ordenó Clint, Tony asintiendo a su lado.- Hablando de asesinos seriales, le conté lo que pasó cuando me enfrenté con Deatlock…?-
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Parecía increíble, pero aunque a Thor lo abandonó el apetito en la mitad de la historia de las chicas secuestradas y sacrificadas como venados, Will acabó hablando sobre su trabajo, y sobre la brillantez del equipo de criminalística del FBI en Baltimore. Los Avengers, ya bastante acostumbrados a la modestia de Bruce, supieron leer entre líneas, y mientras Tony opinaba en voz muy alta que ésos tipos eran monstruos que valía la pena ponerles un misil en la jeta, Thor puso inesperadamente su mano sobre la de Will, que se había detenido en su cucharita del helado.
- Tu trabajo es grande y valedero, pero lamento el sufrimiento que debe costarte asomarte a esos abismos de maldad por el bien de otros. Puede que nosotros seamos aclamados, pero tu heroísmo merece cuando menos igual celebración.-
- Sí, bueno, el tipo no lo hace por la aclamación.- dijo Clint, que se bebía otra cerveza con el helado.- Si fuera por eso, sería stripper, mira lo bonito que es…-
Will, que se había tensado, soltó la carcajada.
- Tu hermano hace yoga y es muy flexible, si tratar seguro puedes.- agregó Nat con falsa sinceridad, lo que aumentó la hilaridad general.- Clint puede enseñarte. Tiene una coreografía con Dirty Diana que básicamente embaraza… Bruce, qué opinas, le enseñamos?-
- Opino que es hora de irnos a la cama, Will tiene tren temprano.- dijo Bruce, que llevaba un rato en silencio.- Vamos, puedes estrenar la pieza de invitados de mi piso, yo soy el que nunca tiene visitas…-
- Eso sólo porque Betty Ross y sus bebés se quedan en la nursery cuando vienen!- canturreó Clint, a lo que añadió en un susurro conspirativo.- Pídele que te muestre fotos, su ex es una Miss Universo…-
- Para qué le va a mostrar fotos, Will tiene de “mejor amiga”- Nat hizo comillas con las manos sin verter su vaso de vino.- a la fotocopia!-
- Nooo. Hay más de esas?- Clint se fingió asombrado.
- Después de que veas su casa, la chica y las dos docenas de perros que tiene en Maryland, no te sacamos más de ahí…-
- TIENES PERROS?-
- Vamos a estar aquí hasta que amanezca si no huyen ahora.- dijo Steve, una mano en el brazo de Clint que gesticulaba.-Buenas noches, Bruce, Will. Que descansen.-
Will sonreía cuando se metieron al ascensor, pero en el espejo del cubículo vio la expresión seria de Bruce, y aunque calló hasta salir al lujoso apartamento tonos tierra y muebles de bambú, al fin habló cuando Bruce dejó su chaqueta en un perchero y fue a abrir la puerta de un dormitorio, perfectamente hecho y fresco, con un vista maravillosa al East Side.
- Te estás arrepintiendo de haberme traído? No venderé la exclusiva, si ese es lo que te preocupa…-
- No me preocupa eso, Will.- dijo Bruce con un suspiro, antes de sentarse en uno de los silloncitos.- Porqué no me dijiste sobre tu verdadero trabajo?-
- No es algo que salga fácilmente a la conversación. Tampoco es muy alegre de contar, francamente.-
Bruce suspiró.- Haces un trabajo necesario e importante.-
- Para hacer ese trabajo, tengo que ser un monstruo, Bruce. Es eso lo que te disgusta?- dijo Will, cruzándose de brazos.
- Will, lamento mucho decirle esto a tu ego, pero en esa mesa, tú eres el normalito. Hay un Dios alien, un genio ingeniero con un reactor en el pecho, un supersoldado de 1940, una asesina criada como animal y un tipo con puntería mutante en ese penthouse, frente a eso, tú eres…-
- Y tú qué? Tienes que ver con el monstruo verde, no es así? Era el único no sentado a esa mesa, y todos parecen tratarte como un camarada. Qué eres, el carcelero de un alien? El domador de un monstruo? Algo peor?-
- No puedo decírtelo.- dijo Bruce, su rostro cansado y gris.- Si te lo digo, corres peligro. Ya fue bastante inconsciente insistir en conectarte conmigo. Te estoy pintando un blanco en el pecho si se sabe de nuestra relación, Will.-
- Qué se supone que es esto? Me estás diciendo después de todo esto, que prefieres que no te llame?- Will se rascó los rizos.- Esto es un “ no eres tú, soy yo?”-
- Es eso exactamente.-
- Entonces para qué carajo me contactaste?-
- No me supe resistir.- dijo Bruce sombríamente.- La idea de volver a tener familia cerca… me encegueció. Pero, Will, no me paré a pensar en lo que eso podía hacer en tu vida.-
- Le hice ojos a tu novio? Porque suena como si te preocupara algo como eso…-
- Will, tengo enemigos. Todos los tenemos. Si te hicieran algo por tu parecido conmigo, que asintamos que ya bordea en lo ridículo, me…-
- Soy un agente del FBI, Bruce, no una astrónoma de cuarenta kilos, que me han dicho es la novia de Thor. Crees que puedo defenderme menos que ella?-
- Los enemigos de Thor quieren matarlo, o echarlo del planeta.- dijo Bruce en voz baja.- Mis enemigos quieren viviseccionarme y cortarme en tiras.-
Hubo una brusca inspiración de parte de Will, un suspiro: Bruce vio cómo había empuñado las manos, antes de esbozar una sonrisa agotada.
- Mira, qué coincidencia.-
- Qué?-
- Nada.-
- Tony siempre dice que soy el tipo más complicado de la tierra.-
- Pues quizá valdría la pena que nos corten en tiras, si al fin tenemos a alguien que entienda nuestras… complicaciones.- suspiró Will. Bruce, que se había quedado sentado, lo vio levantarse, y vagar por el amplio apartamento, y se veía tan perdido, tan exhausto, tan solo, que a pesar de todo lo que había dicho, no pudo aguantarse: dio unos pasos, y yendo detrás suyo, lo abrazó, Will rodeó el brazo en sus hombros con el suyo, y se quedó quieto.
- Irás… irás a verme a casa? No es como esto, y huele a perro, pero…-
Bruce asintió.- Si prometes volver a venir unos días. Tony no me dejará en paz. Así como tu recoges perritos, él hizo exactamente lo mismo con nosotros, está obsesionado con tener una familia. –
- Dudo que Thor sea un perrito. Es como el collie de raza que te encuentras desorientado en el bosque. Barton es uno de esos perros de caza que son todo amor y gracias hasta que los pescas destazando un pájaro. Y el Capitán América es inevitablemente un labrador.-
- Y yo que soy?-
- Creo que Stark aún no se da cuenta que lo que cree que es un perro, es un grizzly.-
- Y Nat?-
- No me hagas llamas perra a un chica.- dijo Will con falso humor, a lo que Bruce suspiró y susurró:
- Ya no lo hace, a no ser que le gente lo merezca.-
Will asintió. – No soy quién para juzgar.-
Bruce pareció que iba a decir algo más, pero se contuvo. Cuando se fueron a sus respectivas camas, los dos se dieron cuenta cuán desacostumbrados estaban a dormir con el aliento de otro ser humano tan cerca…