Delante suya, en las manos del padre de todo, uno de los objetos más preciados de toda Asgard se encontraba.
La manzana dorada, fruto de los dioses, la cual puede otorgar la inmortalidad a cualquier ser que la comiese.
― Anthony Stark.― Habló el rey.― Yo, como rey de Asgard, y padre de mi hijo Loki, te hago entrega del fruto de los dioses.― El genio la agarró entre sus brazos, y ahí supo que sus problemas se habían acabado.― Un solo mordisco de este fruto será lo suficiente como para hacer efecto, y quince minutos será el tiempo necesario para que tu cuerpo empiece a notar los cambios.
Costó mucho convencer al Padre de Todo para que aceptara darle una de esas manzanas, pero el trabajo ya estaba hecho.
Tras casi cuatro años de relación, hoy en la noche le daría a su pareja uno de los regalos más importantes en toda su relación, una vida eterna con él.
Regresó a su alcoba, sin la preocupación de que Loki regresara, pues este estaba ocupado en algún asunto con los hechiceros.
Debería terminar de prepara todo.
Esta sería la noche perfecta; se comería la manzana, pasaría una velada romántica celebrando todo, y por último, tenía una pequeña sorpresa que involucraba una cama.
Puso la manzana en una pequeña mesa, avisó a las cocineras para que prepararan la cena, y esperó impaciente a que el dios viniera.
Justo quince minutos antes de que Loki llegara, el genio pegó un mordisco a la manzana. Al lado suyo, en la cama, descansaba el resto de la fruta, y sus manos agarraban la carta escrita el día anterior.
La leyó una vez más.
❝Por fin lo conseguimos, Loki. Por ti, por mí, por nosotros. Ha costado bastante convencer a tu padre, pero hoy por fin comenzamos una nueva etapa. Tú y yo estaremos juntos por toda la eternidad, como siempre soñaste. Ayudaremos juntos al reino, y sobre todo, estaremos el uno para el otro. La Manzana Dorada es la solución, y tras darle el mordisco, ya me puedo imaginar una plena vida a tu lado. Te quiero, Loki Laufyson.❞
Ya en el sobre metida, solo quedaba esperar.
Posiblemente esos fueran los 15 minutos más largos de su vida.
Cuando lo inesperado pasó, todos los asgardianos pudieron notar el lamento del dios.
Los curanderos no pudieron hacer nada.
Él tampoco.
Los efectos de la manzana en los midgardianos no deberían ser estos.
¿¡Por qué malditas acabó todo de esa forma!?
Thanos regresó, y le llenó de esperanza.
Una esperanza falsa que él se creyó, bajo la ilusión de que con la ayuda de las gemas del infinito, Anthony volvería.
"Te prometo que regresarás con él." Fue lo que le dijo, e hizo todas las cosas que le pidió sin rechistar. Por Anthony.
Sí, al final sí regresó, pero de una forma que no le gustó. Loki, dios de las mentiras, asesinado por el Titán Loco tras no serle más de utilidad.
Ambos lo hicieron por el otro, ambos acabaron de la peor manera.