Capitulo 2 (Lado A)
Bucky se encontraba harto… Se sentía demasiado confundido, nunca había entrado en conflicto con su omega, existían ocasiones como cuando era joven y quería entrar al ejército o cuando tenía que defender a Steve de otros niños y su omega le pedía pedir ayuda de un alfa pero él se negaba; siempre supo mantener a su omega bajo control. Claro está que tenía que venir el mocoso de Stark a arruinar todo, su omega tenía la incesante necesidad de estar cerca del castaño alfa e incluso había tenido la insolencia de llamarlo en los últimos días. Bucky culpaba de esto al castaño, por ser tan irritable y odioso y sarcástico y ridículo y divertido y adorable y atractivo y… Odiaba que su omega lo guiara, no lo hacía antes y no lo empezaría a hacer ahora.
Sobre todo cuando su celo estaba a la vuelta de la esquina y se sentía tan frustrado que podía casi saborear y sentir como seria estar en una habitación cerrada con el castaño… Su hechizante aroma de vino junto con sus carnoso labios besando los suyos, el par de manos apretando su cintura e incluso las suyas propias apretando el cuello del joven lo embriagaban sin necesidad del alcohol, dejándolo jadeante y con una necesidad de satisfacer una sed, que lo incitaba a arrojarse al alfa y reclamarlo como suyo... Por lo que decidido a no pensar en ello se dirigió al gimnasio de la torre, lo que definitivamente desearía no haber hecho…
Peter estaba demasiado irritado, la atracción que tenía su alfa por Bucky era demasiada. De hecho podía percibir como el omega chillaba por su atención, pero la negativa y rechazo del sargento por él, lo tenía furioso y desconcertado. No lograba de entender al pelinegro en casi 2 meses que llevaban trabajando juntos le mandaba mensajes contradictorios; en algunas misiones cuando el pelinegro se sentía amenazado su omega chillaba llamándolo por lo que cuando se acercaba a ayudarlo lo que recibía eran gritos de Bucky diciendo que no lo necesitaba o cuando se le acababan sus ciruelas Pete solía ir a comprarle más cosa que enfurecía -y agradecía- el sargento… definitivamente Bucky no era un omega común.
Por lo que en su último resquicio antes de caer en la desesperación Peter había decidido ir al gimnasio de la torre, pese a que la mayor parte del tiempo lo evitaba por tres grandes razones: la primera debido a que era el espacio más íntimo de su Pop´s por lo que el diseño se podría catalogar como antiguo; la segunda por su falta de ventilación suficiente, lo que hacía que las feromonas y olores se almacenaran por más tiempo, esto debido a que a su papá le encantaba el olor del capitán; esto nos llevaba a la tercera razón a su padre le encantaba encerrarse algunas horas con Steve ahí… A tener una sesión de ejercicio demasiado intenso… muchas de esas sesiones no llegaban a sus oídos gracias a Jarvis. Afortunadamente sabía que nadie lo interrumpiría, ya que sus padres estaban en una misión que les habían asignado esa mañana por lo que se sorprendió cuando vio llegar al pelinegro.
Bucky por otro lado pensó haberse confundido de pasillo y terminado en la cava personal de Tony por el fuerte olor de vino que inundaba esa habitación pero fue la imagen de un Peter sin camisa, en shorts deportivos y lleno de sudor quien lo recibió. Aturdido por el olor y la imagen frente a el no pudo hacer otra cosa más que perderse en el detalle de sus músculos, en lo deliciosos que olían y posiblemente sabrían, se imaginó a él mismo en otra situación teniendo al castaño debajo de él lleno de sudor, lamiendo su abdomen, saboreando los surcos de sus abdominales, siguiendo el camino hasta su ombligo, pasando la lengua por esa bendita "V" fantaseando con como seria el final de esta, podría escuchar como el castaño lo llamaba, hasta que sintió la mano de Peter en su frente noto que él se había acercado a él, con una mirada de preocupación en su rostro.
-¿Estas bien Bucky?- la mano del castaño se sentía caliente, echándose hacia atrás y de forma brusca podía percibir el pequeño hormigueo que esta había dejado y el deseo de sentirlo por el resto de su cuerpo
-P-por supuesto que si mocoso- volteo el rostro intentando y fallando en ocultar el sonrojo que su activa mente había producido- Cambiando de tema ¿Cuándo te permití el tratarme con tanta confianza?
-Nunca sargento- dijo un Peter ahora completamente serio, percibiendo el dulce aroma de los melocotones su alfa lo instaba a acercarse más, asi que lleno de valor dio un paso hacia el pelinegro- Pero puedo preguntarle ¿Cuál es su problema conmigo?
-Mi problema…-suspiro sorprendido por lo directo que había sido el menor- Mi problema eres tú, esa aura que grita Stark a todo el mundo como si por ser un alfa y rico fuera lo mejor del mundo- dijo de forma moleta el pelinegro, sacando la frustración que la cercanía del castaño le provocaba- Como si eso te diera el permiso de ser tan impertinente, arrogante y narcisista que no se preocupa por otros- soltó de forma enérgica mientras más cerraba la distancia que los separaba.
-En otras palabras no me soporta por mi padre o por mi casta?!- dijo de forma tensa el castaño mirando fijamente al sargento frente a él- O simplemente no soy suficiente para trabajar con el "Gran sargento Barnes" Porque créame que trabajar con usted es la cosa más insoportable, desesperante y frustrante que me pudo haber pasado en mi vida.
-Ohm por el amor de dios, claro que trabajar conmigo es lo peor que te pudo haber pasado en tu vida ¿después de que? ¿De qué papi no te compro el auto que querías? Por eso eres mi problema tu vida nunca ha sido difícil no podrías con la responsabilidad de otros si no puedes cumplir una simple orden
-Cállese que no sabe nada de mi vida- dijo entre dientes Peter, mientras retenía la furia que el otro le provocaba, sabía que necesitaba calmarse, sus padres siempre le habían dicho que si se dejaba controlar por la ira se arrepentiría de sus actos, pero estaba llegando a su limite
-¿Qué no se nada? ¿Qué es lo más difícil que has experimentado? ¿Qué no te dieran lo que quería…- sin acabar la frase Bucky fue levantado por un muy molesto Peter para después ser impactado en la pared más cercana. Sujetándose de los hombros de Peter iba a reclamar cuando finalmente la tensión que habían experimentado por semanas explotaba al sentir los labios de Peter sobre los suyos. El castaño cegado por su emoción no hizo otra cosa más que dejarse llevar por sus impulsos, podía sentir al pelinegro luchando, intentando empujarlo para finalmente ceder ante él, en una danza de lenguas y voluntades, cediendo a sus impulsos y reconociéndose al fin como almas destinadas. De un momento a otro la necesidad de oxígeno se hizo presente en ambos, sin embargo los labios de Peter deseaban separarse del pelinegro por lo que en un tortuoso deleite para ambos estos se fueron dirigiendo a su cuello perdiéndose en la sensaciones que el menor le provocaba dejo de pensar en cuanto los colmillos del otro lo rozaban… Tentando al omega el alfa rozaba y mordisqueaba su colmillo como pidiendo permiso para marcarlo, justo antes de que el castaño rogara para acabar con la tortura y ceder a los deseos de su omega para marcarlo se escuchó una voz clara por todo el lugar.
-¡PETER BENJAMIN STARK-BANNER! - El gran Bruce Banner había llegado a visitar a su inocente cachorro en una situación nada inocente.