
Desde el día en que volvió a la tierra y su omega le gruño por haberlo dejado con su cachorro en el vientre, Peter hizo cumplir su promesa y se quedó todo lo que fuera necesario, le delegó el puesto de capitán temporal a Rocket y le pidió que adaptara uno de esos comunicadores que usaban para tener comunicación entre las naves y así poder seguir en comunicación con su equipo aún en la tierra y le podría servir en un futuro también.
Peter se quedó en la tierra y acompañó a Scott durante todo el embarazo y aunque el plan era volver al trabajo unos cuantos meses después de que su pequeña naciera. En cuanto cargó a su cachorro no quisó volver a estar sin ella, así que aplazó el volver a ser un guardián un par de años y aunque en algún punto regreso, solo aceptaba misiones cortas de no más de un mes y dejaba que Rocket se encargará de lo demás, pues aunque amaba ser un guardián de la galaxia ver a su pequeña cachorro lo enamoró aún más.
Cassandra Eleonor Lang Quill nació un 20 de julio y se volvió la estrella más brillante en el universo de sus padres, una estrella por la que sus padres y tíos darían todo. Peter no podía estar más feliz con su familia, aunque se había vuelto un poco más protector, pues su pequeña era omega, descubrió que la niña era muy inteligente y sabía sacarle provecho a sus encantos.
Todo había comenzado una mañana en la que antes de llegar al colegio de Cassie, la menor había decidido que no quería ir al colegio, Peter intentó convencerla, razonar sobre lo importante que era ir a tomar clases y esas cosas que suponía tenía que decir un padre responsable, pero su cachorro hizo algo con lo que no pudo negociar, sus ojitos se iluminaron como si estuvieran llenos de lágrimas y Peter jura que crecieron aunque sea un poco, por lo que tuvo que aceptar llevarla de nuevo a casa y mandarle un recado a su profesora diciendo que estaba enferma y no había podido asistir. Claro que llegando a casa Scott los regañó a ambos y el alfa perdió el privilegio de llevar a la niña a la escuela.
Pero las cosas no se detuvieron ahí, Cassie aprendió que si quería algo solo bastaba en pedírselo a su papá Peter y poner sus ojitos de cachorro para conseguirlo, no lo usaba mucho, pero era su pequeño truco bajo la manga. Hasta que su papá Scott la descubrió.
— No puedes estar haciendo eso Cassie.
— ¿Por qué no? — preguntó la menor con inocencia.
— Pues porque no vas a poder conseguir todo lo que quieres así, funciona ahorita con tu padre, pero en un futuro conseguir algo te va a costar más y necesitas aprender también esas formas. — Intentó explicar Scott, de una forma en la que se diera a entender.
— Pero tú también lo haces. — Replicó dejando al mayor bastante sorprendido.
— ¿Yo cuando hago eso cariño?
— Cuándo quieres helado y papá Pet dice que es muy noche o el día que querías ir a ver al abuelo Hank y papá tenía una reunión con tía mantis para saber cómo iba la misión o-
— Bien ya entendí, también hago eso cuando quiero algo. Pero también sé trabajar para conseguir otras cosas. — Interrumpió a la menor cuando se sintió muy expuesto. La pequeña solo asintió y prometió no seguir abusando sobre su habilidad. O tal vez solo la usaría cuando su papá no la estuviera viendo.