
Sentirse mas vivo
"Hay risas eternas, hay siestas contigo, hay largos otoños que hoy tienen abrigo, si tuviera que elegir…te elegiría a ti"
-Necesito que me digas porque.- La voz de Rachel rompe el silencio de tu habitación, con bastante trabajo abriste los ojos, la resaca del día anterior estaba matándote
-¿Por que?.- Preguntas sin entender realmente lo que sucedía
-¿No tienes nada para decirme? ¿Algo que quieras comentarme?.- Injiere caminando hasta el borde de tu cama
-Rachel, ¿Cuál es el punto?.- Te incorporas ahora un poco molesta
-Estuviste con Quinn.- Sentencia la castaña de pronto
-Las dos estuvimos con ella durante la fiesta.- Haces una pausa y entrecierras los ojos.- ¿Tú también bebiste más de la cuenta ayer?.- Preguntas más divertida
-¡Santana!.- Te grita exasperada.-Te acostaste con ella
Entonces te callas, eso de “lo que sucede en la boda, queda en la boda” no era tan real como pensabas
-¿Por que hiciste eso? Ella aún está enamorada de ti.- Agrega la más baja
-Estábamos ebrias Rach, sé que estuvo mal, lo se.- Suspiras.- Pero no volverá a suceder, además Quinn dejo claro que no sería algo regular
-Eso ni tú te lo crees, pero hare como que no lo escuche.- Dice y se sienta a tu lado
-Sabes, sucedió algo curioso, tal vez hayan sido las copas de más…-Comenzaste a hablar.- Pero cuando estuvimos.- Abres y cierras la boca buscando alguna palabra para determinarlo.-Bueno, luego de que estemos juntas terminamos hablando de Brittany
Rachel rodo los ojos.- Tu si que sabes tratar a una mujer morena
-No, espera.- Dijiste y le lanzaste una almohada.-Ella saco el tema, me conto sobre la última vez que la vio
-¿La misteriosa charla?.- Pregunto mirándote con más atención.- Finalmente ¿Qué fue lo que le dijo?
Flashback
-Tuvo el valor de invitarme a su casa, no sé qué esperaba que me dijera.- Decía Quinn sentada sobre el mármol del pequeño cuarto de baño.-Fue extraño, sentí un poco de pena en sus ojos, creo que eso fue lo peor.- Esta era una conversación que no querías tener, mucho menos con ella.-Y entonces se paró frente a mí, me pidió disculpas por haber, de alguna manera traicionado mi confianza, que las cosas no se dieron como a ella le hubieran gustado y dijo algo así como que lo sentía, pero que no se arrepentía de nada, tal vez si de la forma, pero no de lo que sucedió.- Hizo una pausa y te miro a los ojos con una sonrisa bastante amarga.- Eso me lo imaginaba
Fin del Flashback
-Después de eso yo hubiera preferido que me tragara la tierra.- Te interrumpió Rachel negando con la cabeza
-Fue tan incómodo como lo esperaba, pero cuando la conversación llego a ese punto, me mato la curiosidad.- Agregas levantándote de la cama.-Pero basta de mí, ¿Has hablado con Finn?.- Preguntas para desviar el foco de atención de tu persona
-En realidad he tratado de hablar con él, pero no me responde los mensajes.- Contesta la castaña algo triste
-Realmente deberían dejar de pelear, el grandulón te ama.- Dices simplemente encogiéndote de hombros
-Muchas veces el amor no alcanza y creo que ambas lo sabemos de sobra.- Te dice, estaba a punto de agregar algo más, pero el timbre de la casa sonó
Te dirigiste hasta la puerta de entrada y lo primero que viste al abrir, fue un enorme ramo de flores, detrás de el, Finn
-Hola San.- Dijo el muchacho cuando al fin te vio con una sonrisa
Solo atinaste darle un fuerte abrazo, te hiciste a un lado y lo dejaste entrar
-¿Quién era…-Tu amiga comenzó a decir hasta que lo vio y se paró en seco
-Bueno, aquí el porqué de que no te contestara los mensajes ¿Lo ves?.- Agregaste para romper el silencio.- Me iré a dar un paseo, avisare antes de regresar
Tomaste tu chaqueta, saludaste cortésmente a tus amigos y comenzaste a caminar, hace bastante que no te tomabas una tarde únicamente para recorrer. Después de un tiempo de viaje te pareció reconocer el lugar, se te hacia demasiado familiar, para tu mala suerte o por acto del destino, terminaste tu paseo en un parque, lo lamentable era que no era cualquier parque
Caminaste un poco más hasta que encontraste espacio en uno de los bancos, era jodidamente irónico, pasaste tu mano por tu cabello y cerraste los ojos, por un segundo tuviste millones de imágenes, momentos que estaban más que guardados y que en un minuto explotaron en tu cabeza
Se sentía casi como si escucharas su voz y uno a uno los recuerdos fueron apareciendo en tu memoria
“Un placer señorita López, yo soy Brittany”
“Bien, en primer lugar, soy muy sexy, es algo con lo que deberás lidiar. En segundo soy extremadamente sincera. Y finalmente y la más importante, soy jodidamente tentadora, más de lo que te imaginas”
“Vamos a jugar ¿Verdad o reto?”
“Sí, ella besa increíble, ¿Pero sabes qué? Yo te quiero a ti”
“Me gustas Santana, me gustas mucho. Te quiero, así, loca, celosa, abogada, artista, te quiero”
“-San si tú me pides que te deje en paz lo hare, de lo contrario lo dudo mucho, es tu decisión
-He intentado vivir sin ti, pero sinceramente, no creo estar dispuesta volver a intentarlo”
El sonido del exterior te trajo de nuevo al mundo real y de pronto, tenías una especie de barita de madera sobre tus pies. Cuando te acercaste a tomarla ya sentías muy de cerca el ladrido de una perrita que extrañamente se te hacia bastante familiar
Levantaste poco a poco la vista y parecía contenta de verte, una loca idea cruzo tu mente ¿Podría ser?
-¿Bache?.- Dijiste y se lanzó a tus brazos. Finalmente caíste en la cuenta de lo que significaba todo eso, si Bache estaba allí, Brittany también
-¿Santana?.- Escuchaste su voz y tu mundo que giraba con total normalidad, se detuvo
-Britt, como ha pasado el tiempo.- Fue lo primero que pudiste decir cuando tu mirada se encontró con ese mar azul que reposaba en sus ojos
-Alguien no te ha olvidado.- Dijo la rubia señalando a la pequeña canina
-¿Cómo estás?.- Preguntaste más como una cortesía que como una duda, no tenías demasiadas ganas de saber, mucho menos que te dijera que estaba bien, eso determinaba que estaba feliz, pero sin ti
-De maravilla ¿Y tú?.- Repregunta tomando a Bache en brazos.-Bueno en realidad sé que muy bien, supe lo de la gira, felicidades.- Agrega regalándote una sonrisa
-Gracias.- Haces una pausa.-¿Crees que podríamos ir a tomar un café? Para ponernos al corriente, no quisiera robarte mucho tiempo
-Bueno es que yo…- Dice algo nerviosa y escuchas una voz que irrumpe su conversación
-Cariño, ¿Que estás haciendo?.-Era una bella muchacha, cabello marrón, ojos oscuros.- Oh, hola.- Dice por fin cuando se percata de tu presencia y te sonríe
-San, ella es Sadie, mi novia.- La frase resonaba en ti una y otra vez, ¿Novia? Hasta donde sabias ella solo tenía citas, ¿Tanto había cambiado desde que terminaron?
Sadie extendió su mano para saludarte.-He escuchado mucho de ti.- Dijo más como una molestia que como un alago.
Te mordiste la boca para retener la reacción que tu cuerpo generaba, tenías que huir de allí, y tenías que hacerlo rápido
-Ha sido un placer volver a verte Britt, un gusto.- Concluyes dedicándole una sonrisa, le das una última caricia a Bache y te marchas de allí
No tenías idea de cuánto tiempo pasaste dando vueltas, necesitabas pensar, es que era lógico ¿No? Había pasado casi un año ¿Qué esperabas? ¿Que esté disponible cuando regresaras?
No claro que no, pero sin embargo… Sin embargo dolía, todo conspiro en tu contra esa tarde, el lugar, tu memoria.
Era increíble lo que te sucedía con Brittany, porque podías pasar meses, miles de días sin saber de ella, de su vida, de sus amores. Podias odiarlas con todas tus fuerzas, pero bastaba que tus ojos se encuentren con su sonrisa para que todo vuelva al comienzo, a esas miradas cruzadas en la disco, al encuentro en la librería, a los besos, a los te amo.
Te encontraste llorando sin saber cuál era el motivo, sí que ella estuviera con alguien más, que te hubiera olvidado o que el sentimiento que creías que había desaparecido te arrase como una ola sin final. De pronto te invadió un mar de dudas, querías saberlo todo de ella, si de verdad la quería, hace cuánto tiempo estaban juntas, y al mismo tiempo sabias que cada respuesta te quebraría un poco más el alma.
Llegaste finalmente a tu casa, te habías olvidado de llamar, entraste tratando de hacer el menor ruido posible, para tu sorpresa Rachel estaba sentada en el sofá tomando una taza de café
-¿Qué haces aquí? ¿Y Finn?.- Preguntaste lanzando tu abrigo sobre la mesa
-Cállate, vas a despertarlo, estaba muy cansado por el viaje, y le dije que se recueste en mi cuarto.- Contesto la castaña haciéndote lugar a su lado.-Y tú, ¿Por dónde estabas?
-Yo sali a caminar, llegue al parque, me encontré a Brittany con su novia.- Haces una pausa.- Y regrese
-¿Qué?.- Grita Rachel sin poder creérselo aun
-Exactamente eso fue lo que sucedió.- Contestas recostándote en el sofá
-Y como…-La más baja trataba de buscar las palabras correctas.-¿Cómo estas con eso?.- Te pregunto finalmente
-La mejor palabra que me define en este momento es confusión, cuando la vi…-Sonríes casi instantáneamente.-Estaba preciosa.- Te muerdes el labio para continuar.- Y después no sabía qué hacer, es decir apareció la novia, no era una amiga, ni una cita, dijo novia, fue demasiado para mi.- Concluyes negando con la cabeza
-Ha pasado mucho tiempo y…- Empieza a decirte Rachel y la interrumpes
-Lo sé, no estoy juzgándola, solo que… creí estar preparada para algo así, esta es la prueba de que no tenía ni idea de lo que sentiría cuando volviera a verla
-Quizás sea hora de dejar ir ¿No crees? Avanzar.- Te decía la castaña mientras acariciaba tu cabello
-Es lo que pensé que estaba haciendo desde que terminamos, pero lo único que hice fue ignorar que el sentimiento seguía ahí, casi intacto como la última vez
Sentiste el leve sonido de tu celular, te acercaste hasta el bolsillo de tu chaqueta y el número desconocido te desconcertó
“¿Tu invitación sigue en pie? Vayamos a tomar ese café. Britt”
¿Hace cuánto tiempo que no le sonreías así a una pantalla? Había una sola respuesta a ese mensaje y no dudaste ni un minuto en escribirla.