Hyggelig
Disclaimer: Los personajes de Naruto no son míos, son propiedad de Kishimoto.
Summary: Hinata y Satsuki se relajan después de unas tensas semanas en la universidad. AU
Pairing: SasuHina yuri
xxx
Hyggelig
("El cálido placer que se obtiene de las cosas o actividades suaves y cómodas")
Las últimas dos semanas habían sido muy atareadas para Hyūga Hinata y para Uchiha Satsuki. Ambas estaban en su penúltimo año de universidad y los exámenes finales eran cada vez más demandantes. Afortunadamente, para ellas, "las semanas del terror" habían finalizado y sus exámenes habían sido aprobados. Por lo que ahora se dedicarían unos días para relajarse y ponerse cómodas.
La noche anterior habían caído rendidas en la cama, durmieron toda la noche y gran parte de la mañana. Hinata fue la primera en despertar y aunque ya era medio día, decidió sorprender a su novia llevándole el desayuno a la cama. En silencio salió de la habitación y se dirigió a la pequeña cocina del apartamento que compartían.
Se decidió por hacer algo sencillo y ligero, ya que era tarde y pronto sería la hora del almuerzo. Por lo que hizo un poco de té, unas tostadas, huevos y en un tazón puso uso pocos tomates cherri cortados a la mitad para su novia, Satsuki adoraba los tomates, por lo que Hinata trataba de ponerlos casi siempre en las comidas.
Una vez listo todo, puso los platos en una bandeja y volvió al dormitorio. Al entrar vio que la Uchiha se estaba despertando.
—B-buenos días, S-Satsuki-chan, ¿dormiste b-bien? —dijo Hinata.
—Hmp… Hola —la Uchiha murmuró con voz adormilada.
—T-t-traje el desayuno… Yo… Pensé q-que podrías t-tener ha-hambre —mencionó la Hyūga y con cuidado puso la bandeja en la cama para que ambas pudieran comenzar a comer.
Después de comer, Satsuki puso la bandeja sobre la mesita de noche que estaba a su lado.
—Gracias por la comida, Hinata. Ahora vuelve a la cama —dijo Satsuki con expresión seria.
—¿Eh? P-p-p-pero tengo que… —ella fue interrumpida por su novia.
—Vamos Hinata, descansemos un poco más. Después habrá tiempo para hacer otras cosas.
—B-bien, pero… P-podemos… ¿a-a-acurrucarnos? —Hinata tímidamente preguntó.
—¡Jum! Si eso es lo que quieres, está bien —expresó la Uchiha.
—Te q-q-quiero, Satsuki-chan —la Hyuga admitió, abrazando con fuerza a su novia.
—Hmp… Yo también te quiero Hinata —respondió y beso suavemente a Hinata.
Y así se quedaron en la cama, disfrutando de la suave comodidad de los brazos de la otra.
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Naoko Ichigo