
Chapter 2
Satoru no dejó a Kakashi salir de sus garras el resto del día. Hubiera seguido así, pero le llamaron para que se encargara de alguna otra Maldición porque uno de los 'amigos' de los superiores había pedido un favor y, cómo no, tenían que utilizar a lo mejor de lo mejor a pesar de que era una Maldición de grado 3, rozando con pinzas el grado 2 si estabas siendo muy generoso. Y mientras que él tenía que hacer eso, no dudaban en mandar a Hechiceros inexperimentados a misiones más difíciles de lo que podrían encargarse. Los mandaban a morir, en resumen. Así era la corrupción del mundo del Jujutsu.
Y aunque la mayoría del tiempo simplemente lo rechazaría porque eran unos viejos corruptos de mierda y porque él era El Más Fuerte, Kakashi le había insistido como diciendo 'haz tu trabajo, ya los conoces, mandarán a alguien no preparado si no vas tú', así que estaba obligado a ir.
Mientras que iba, exterminaba a la maldición y volvía a casa (el viaje de ida y vuelta duró más que la misión en sí), pensó en los acompañantes de Kakashi.
Había habido alguna guerra (y a Satoru se le había congelado la sonrisa al oír sobre que hubo una guerra. Sabía que Kakashi era fuerte y que su trabajo le ponía siempre en peligro, pero una guerra era eso multiplicado por un gran número lo suficientemente grande como para poner nervioso a Satoru por la seguridad de Kakashi), y acabaron siendo cogidos por una combinación de técnicas (Jutsu, le recordaba un voz en su cabeza que sonaba exactamente como Kakashi) espacio-temporales que tuvo un efecto atrasado que trataba sobre no poder quedarse en su dimensión original (Satoru se sentía como un cabrón... Más cabrón que de costumbre, al menos. Le daba pena que Kakashi no pudiera volver a ver al resto de sus seres queridos en vida, pero, por otro lado, ahora se quedaría con él y no se volvería a ir por alguna técnica espacio-temporal de mierda que durara solamente una cantidad limitada de tiempo).
Y gracias a un no sé qué sabio (Sabio de los Seis Caminos en mayúscula, Satoru. Volvió a corregirle dicha voz), pudieron poner esta dimensión como su objetivo y así no separarse. Pudieron también despedirse de sus seres queridos allí y ahora que habían vuelto lo primero que hizo Kakashi (bueno, lo de ir a por ropa para pasar desapercibido no contaba, puso morritos Satoru) fue intentar contactar con él.
Satoru siempre había llevado ese móvil consigo mismo. No lo había vuelto a usar, pero se aseguraba de que estuviera siempre con batería y a su lado, como esperando a lo imposible. Pero acabó siendo algo bueno ya que cuando escuchó ese tono de llamada, se quedó paralizado porque no era el tono de llamada de su móvil actual, habiendo apartado el anterior como un especie de memoria.
Reconocía que tardó y dudó en cogerlo. Pero era completamente justificable, ¿vale? A ver si vosotros reaccionáis tan rápido al primer indicio de comunicación de vuestro amor tras saber que os separa toda una dimensión y que lo más seguro era que no podríais volver a verle.
Pero acabó cogiéndolo y preguntó porque no podía permitirse tener esperanzas. En el fondo, supo que era realmente él cuando respondió con un 'Hey' después de un incómodo silencio, pero no estaba de más que su consciencia se quedara más tranquila cuando escuchó ese chiste interno confirmando realmente su identidad. Y podríais decir 'pero Gojo, eso no confirma de verdad su identidad', pero no sabéis de lo que estáis hablando ni conocéis a Kakashi tanto como él, así que podéis cerrar vuestras bocas porque Satoru no os iba a escuchar (y si estaba siendo un poco pasivo-agresivo en sus pensamientos, pues os aguantáis también. Con esa situación, le importaba una mierda loq ue otros pudieran decir. Aunque claro, ¿desde cuándo a Satoru le importa lo que otros (a parte de sus seres queridos en lo que realmente importa) digan? Exactamente, desde nunca).
No dudó demandar la localización y teletransportarse ahí y volver a teletransportarse de vuelta a su casa con Kakashi y sus compañeros viajantes de dimensión.
Y en cuanto estuvo en la privacidad (o lo más privado posible teniendo en cuenta que era mejor no separar a Kakashi y a se equipo en estos momentos por posibles pánico que eso podría causar), Satoru besó a Kakashi. No tenía ningún remordimiento.
Después de unos comentarios (y dejarle claro a Kakashi que la boda seguía en pie a pesar de no tener una fecha oficial todavía. A lo mejor deberían esperar al menos unos meses para hablar las cosas y toda esa mierda de la que ni Satoru ni Kakashi querían hablar pero que deberían hacerlo en algún punto más antes que después, pero la boda seguía en pie como que él era Gojo Satoru), el ambiente se relajó y Satoru pudo sentir que Kakashi también lo hizo. Aunque esos golpes de verdad dolieron. Normalmente tendría activado su Infinito, pero había pasado demasiado tiempo (y puede que ese comentario del exhi- de eso no apto para los niños podría haber sido un poco demasiado. Pero Satoru estaba demasiado feliz como para que le importara realmente. Aunque Kakashi sí que le golpeó fuerte para no ir en serio).
No podía esperar a que todo se relajase. Había sido un último mes muy malo aunque no lo admitiría en alto. Con la muerte de Su- de ESA persona, las cosas no habían estado muy bien para él. Al menos, ahora Kakashi estaba ahí para quedarse (o eso decía él. Satoru seguía sin poder creerse que no se iría a pesar de ya no ver esa 'cuerda' que había estado tirando de Kakashi hasta que volvió a su antigua dimensión la primera vez).
Y preguntaréis, ¿seguro que estás bien? Pues él era el más fuerte, así que estaba bien. Unas pocas malas rachas personales no le iban a frenar. Reconocía que estuvo a punto de cometer asesinatos en masa más de una vez y que se lo había planteado aún más veces, pero solamente lo consideró en cuanto a los superiores. Los superiores tenían su propio nivel de ser cabrones y con las cosas que habían hecho (o más bien, habían ordenado a hacer, los malditos cobardes de mierda), Satoru estaba bastante sorprendido de que nadie lo haya hecho antes o, al menos, intentarlo. Y definitivamente no era el único en haberlo pensado antes, era solamente que él era el único que podría realizar dichos asesinatos en masa por sí mismo.
Aunque no lo había hecho. Tenían suerte de que tuviera suficiente control de sí mismo como para no hacerlo y que matarlos no serviría de nada. Si ellos no estaban, alguien tenía que ocupar el lugar y matándolos sin más solamente generaba odio y miedo, nada que pudiera hacer aprender a las futuras generaciones para no irse hacia el camino que tomaron los superiores. Por eso mismo era profesor ahora (y Shoko seguía sorprendida de que tuviera de verdad una licencia de enseñanza legal que se había ganado por derecho propio en vez de directamente pedirla y que se la dieran regalada. Y mucho menos que le dejaran enseñar. Pero, hey, no tiene que ser tan mal profesor si había conseguido entrenar ya a varios, ¿no?).
... Aunque reconocía que el estudiante emo de Kakashi sí había estado más inclinado en hacer justo eso de 'matar a los superiores' por lo que se había enterado de no sé qué venganza y viejos corruptos con poder. Bueno, no le sorprendía, la naturaleza humana era así como para dar a luz a tales viejos amargados corruptos en cualquier dimensión. Y, por lo que había oído, el niño eso no estaba tan equivocado sobre que se lo merecían (anda que ordenar la masacre de todo un clan a un miembro mismo de dicho clan que era un niño y luego obligarlo a huir de su hogar y hacer de espía de una organización de un motón de renegados rango S o algo, al haber hecho chantaje al niño con la vida de su hermano. Los experimentos le daban ganas de ir él mismo a esa dimensión, resucitar a los culpables y volverlos a matar él mismo. Era el más fuerte, encontraría una manera de hacerlo si se lo proponía, aunque, como ya había dicho, estaba optando por no hacer tantos asesinatos en masa. Y eso solamente era el comienzo de sus crímenes).
El niño rubio, en cambio, era todo lo contrario. La completa inocencia de un niño (o un adolescente, más bien) ya no estaba ahí pero seguía teniendo ese halo de brillo que solamente un niño podía hacer. Sonreía, algunas eran sinceras y otras menos sinceras. Y, al parecer, era capaz de literalmente arrastrar a su amigo lejos de la venganza incluso si tenía que perseguirlo por años.
La del pelo rosa tenía mejor cabeza y Satoru no quería presentársela a Shoko (menos mal que Kakashi estaba de acuerdo con él que cuanto más tiempo la sociedad de Jujutsu no supiera de su existencia, mejor. Al menos, hasta que sus estudiantes y su Kouhai, llamado Tenzou o algo, aprendieran a usar la Energía Maldita). Parecía más calmada que los otros dos a primera vista pero también parecía tener casi una doble personalidad cuando cambiaba de repente a estar enfada con los otros dos por pelear. Acababa lanzándolos a lados contrarios llevándose varios árboles por delante (vaya hipocresía).
Luego estaba el antisocial. A ver, el emo también era antisocial, pero al menos sabía cosas sobre la sociedad (aunque las ignoraba si eso quería, como que hablar con palabras reales era de buena educación. No era que Satoru fuera a regañarle, cada cual en lo suyo. Lo que le sorprendía era que parecía un lenguaje todos esos 'Hn' y que los demás lo entendían. Kakashi le estaba dando clases de 'Hn'), pero este llevaba una libreta y algo para escribir a todos lados y, cada vez que aprendía algo como qué se siente haciendo tal cosa, lo apuntaba. Luego Kakashi le dijo no sé qué de intento de entrenamiento de herramientas obedientes sin emociones desde niños y todo encajó cuando le dijo que el nombre de ese viejo corrupto en poder de antes, cuyo nombre no merecía la pena aprender, era el culpable.
También estaba el Kouhai, llamado así porque estaba todo el rato diciéndole a Kakashi 'Kakashi-senpai'. Se parecía un poco a Nanamin cuando ponía esa cara de pura exasperación hacia Kakashi, aunque había más admiración en su cara que Nanamin hacia Satoru. Y podía hacer palillos de madera cuando Satoru se le olvidaban o tardaría demasiado en ir a por unos cuando podía estar ya comiéndose unos esos dulces. Vale, vale, el Kouhai podía hacer más cosas, pero eso era lo más importante, obviamente.
En algún momento tendría que presentar a los estudiantes de Kakashi a los de primer año. Parecían tener alrededor de unos quince años y había una posibilidad de que se unieran el próximo año académico a los de primero (aunque no era muy seguro. Satoru prefería dejarlos al margen por ahora. Entre Suguru y Yuta hace tan sólo alrededor de un mes, poner nerviosos a los superiores tan pronto podría hacer que hicieran cosas, las cuales Satoru prefería que no hicieran, por desesperación y nervios).
Ahora solamente le quedaba hablar con Kakashi de... todo. Aunque no tenía que ser ahora, podía ser perfectamente el siguiente día. Ya era casi de noche y estaban todos cansados después de instalarlos en el recinto Gojo (porque no quedaban más Gojo a parte de él y ya nadie lo usaba realmente a menos que Satoru quisiera entrenar. Era un espacio exageradamente grande como cualquier clan viejo y asquerosamente rico. Había espacio en la casa en la que vivía Satoru, pero Megumi también vivía ahí y era mejor que no supiera nada por ahora sin haber empezado siquiera la escuela de Jujutsu).
Qué pena que los estudiantes y el Kouhai de Kakashi eran muy malos. Les dejaron solos en una habitación y se fueron. A propósito. Para que hablaran. Qué estrategia tan sucia para hacerles hablar. Al menos, no estaban intentando escuchar, Satoru cree que les asustó con el beso repentino y que no querían ver más de eso.
"... Hace tiempo que no nos vemos, ¿no?" Al menos Kakashi había tenido el valor de empezar.
"Sí... Pensé que no te iba a volver a ver." Mierda, a lo mejor estaba siendo un poco rápido. Para, boca de Satoru, no te precipites. "Te he echado de menos." Por eso mismo le decía Shoko que era bueno pensar antes que hablar. Ahora todo tiene más sentido.
"Yo también." Ah, bueno... Entonces... ¿Era algo bueno lo que había dicho? No se había sentido tan inseguro en su vida. Pero podía hacerlo, él era el más fuerte.
"... De verdad que quiero seguir con lo de la futura boda, no era una broma. Pero si quieres algo de tiempo, yo- ."
"¡No! Ehhhh, quiero decir... Yo también quiero, no necesito pensármelo y eso. Es solamente que no pensé que fuera a poder volver aquí. Me alegro de poder volver a verte, pero ahora tampoco puedo regresar."
"Me siento como un cabrón, me alegro que estés aquí y siento un placer amargo de que vas a quedarte a pesar de que eso también significa que no podrás volver a tu hogar." Mierda, se le había escapado. Bueno, mejor enfrentarlo rápido. Gojo Satoru era Gojo Satoru, pero con Kakashi parecía que eso no funcionaba tan bien.
"Puffff." Se rio inesperadamente Kakashi. "Bueno, sí, eres un cabrón." A Satoru se le rompió el corazón. "Si no lo supiera, no hubiera dicho que sí cuando tú me pusiste el anillo cuando yo aún estaba durmiendo ni me lo hubiera dejado puesto la mañana siguiente y todas las mañanas que le siguieran. Solamente alguien que sabe lo cabrón que eres sería capaz de aceptar esa horrible forma de pedir matrimonio." Ah, su corazón estaba ahora mejor... Aunque también se sentía en conflicto. ¿Debería sentirse insultado o alagado? "Pero eres mi cabrón." Oh, ¿era eso un sonrojo en su cara? Entonces se lo tomaría como un alago.
"Aaww. Estás totalmente rojo." No pudo evitar abrazarle. Kakashi se puso más rojo.
"Quítate de encima, tonto. Pensé que estábamos hablando." Luego susurró algo de que sus alumnos son muy malos y que no necesitaba ayuda para hablar sobre cosas... Hasta Satoru sabía que Kakashi nunca hubiera generado una situación en la que tuvieran que hablar sobre eso y este lo sabía por más que lo negara.
"No quiero." Se pegó como un pulpo a su espalda. Piernas alrededor de la cintura Kakashi y brazos debajo de las axilas, con la cabeza apoyada en uno de los hombros. Podría parecer una vista tonta desde un punto ajeno de vista teniendo en cuenta que ambos eran hombres adultos (y ahora Kakashi tenía varios años más que él mentalmente) y que Satoru medía casi diez centímetros más que Kakashi (ja. Daba igual la edad mental, Satoru seguía siendo más alto).
Kakashi suspiró después de un rato sin resultados y se fue a sentar en algún sofá. Cayendo con más fuerza a propósito ya que Satoru seguía detrás suya enganchado. Cuando usó su Infinito para parar la caída, Satoru miró a Kakashi chuleándose. Este no pudo evitar mirarle con una ceja levantada, pero no tardó en echarse a reír de manera un poco más sincera. Satoru se le unió, hacía mucho tiempo que no escuchaba esa risa.
"Pero..." Kakashi tuvo que parar, porque hasta él sabía que una breve pausa les vendría bien a ambos. "Si quieres esperar a que... esto..." Señaló el espacio entre los dos, refiriéndose a su relación. "Esté un poco más tranquilo, no me importaría. No creo que yo vaya a parar pronto de levantarme y tener que comprobar que tú estás aquí."
"... Es posible." Reconocía Satoru. Porque venga, si Kakashi había podido decirlo, él también. "Yo tampoco creo que vaya a parar de tener que verte o tocarte casi todo el rato para asegurarme de que estás aquí. SÉ que estás aquí, pero a veces..."
"Sí, yo tampoco me lo creo." Hubo un pequeño silencio. "Además, mi equipo necesita algo de tiempo para asimilar que tengo una relación amorosa con alguien. Ni yo soy tan cabrón."
"Ja. Pero no era demasiado para ellos como para no ver sus divertidas reacciones." No era una pregunta.
"Por supuesto. No soy tan cabrón pero sigo siendo uno." Le mandó una sonrisa de ojos cómplice. "Además, tú no puedes negar ser uno cuando intentarás sacar alguna reacción de tus estudiantes."
"No lo he negado, Kashi-chan." Ah, ese mote nunca fallaba. Kakashi se había vuelto a sonrojar, y le dio un manotazo en el hombro.
"Para. Siempre haces eso, al menos no lo hagas delante de mi equipo." Oh, ahora sí que no iba a parar. Satoru le dirigió a Kakashi una sonrisa amplia, divertida y llena de dientes y travesura.
"No deberías haber dicho eso." Los ojos de Kakashi se agrandaron por un segundo cuando se dio cuenta de lo que acababa de decir para luego mandarle inmediatamente una mirada inexpresiva.
"El sofá."
"¡¿Qué?! ¡No! Llevo años sin verte. Sabes que tú tampoco podrías soportarlo." Sus súplicas fueron respondidas con una ceja alzada y unos ojos divertidos.
"Viviré."
"Aarrgghh." Se escuchó desde la puerta. Satoru los había visto acercarse hace unos segundos para ver cómo iban. "No quiero saber sobre vuestra vida sexual. Pero si lo hacéis, usad protección y si notáis algún problema, avisadme." Era una amenaza eso último.
La estudiante de Kakashi, Sakura, recibió un par de miradas gemelas de inocencia.
"¿Qué quieres decir, Sakura-chan? Solamente hablaba de no dejar que Satoru durmiera conmigo en la misma cama." Satoru asintió firmemente un par de veces.
"Necesito mi ración de abrazos y achuchones de Kashi-chan. Después de tanta falta por años." Lo peor era que era verdad. Habían estado hablando sobre dormir juntos en la misma cama, no ese otro significado de 'dormir juntos' más sexual. Una cosa era a lo mejor un beso en público y otra cosa era hacer más que eso. Especialmente porque estaban viviendo en la misma casa que los alumnos y el Kouhai de Kakashi (o al menos Kakashi y su equipo estaban viviendo allí. Satoru venía para dormir y para pasar todo su rato libre).
"¿En qué estabas pensando, Sakura-chan?" Kakashi se giró hacia Satoru para mirarle. "Deben de ser las hormonas. Pasar por esa edad otra vez debe de ser mucho, no me extraña que salte a conclusiones como esa."
Sakura les miró con una cara inexpresiva que definitivamente sacó de Kakashi cuando ponía esa cara también.
"Os odio. Sois tal para cual." Cerró la puerta de un portazo.
Kakashi y Satoru se miraron el uno al otro y al momento siguiente se estaban riendo. Satoru de una manera libre y sincera que no había usado en años, y la de Kakashi era más bien una risita que era capaz de sacarle lágrimas de los ojos, nada como la risita traviesa de cuando estaba leyendo Icha Icha y quería molestar a alguien (eso siempre hacía que se giraran hacia y le miraran mal con la cara molesta. Era muy divertido y siempre era muy terapéutico molestar un poco a veces a los que te caen mal, como a Danzo. O a algún viejo roñoso y corrupto).
Sí. Estaría bien, decidió Satoru al mirar la cara un poco roja de Kakashi que estaba en ese momento libre de preocupación y remordimientos. Con Kakashi, estaría bien.