
La Poderosa Cria
—Dejame en paz, Lucian.
La pequeña y joven voz sonaba irritada.
—Salazar, ven y sal. Deja lo que sea que estas haciendo. —se quejo el joven mayor.
Salazar cerro los ojos y suspiro, tratando de no maldecir a su hermano mayor.
El pequeño Salazar Slytherin de 10 años habia crecido y mostraba ser una belleza devastadora. Todos estaban seguros de que el doncel romperia corazones cuando creciera.
Tenia un largo, sedoso, suave y brillante pelo rubio como el sol, largo hasta su cintura con pequeñas ondulaciones aqui y alla. Sus ojos verde Avada Kedavra eran tan brillantes como el maleficio. Su nariz era pequeña y aristocratica al igual que sus rasgos, aunque estos eran igual de delicados como su madre, Lady Uriel Slytherin. Su piel era blanca y suave y parecia brillar. Sus ojos eran igual de almendrados que su padre con delgadas cejas. Sus labios eran mucho mas llenos y rosados que su madre.
Salazar se presento como un doncel, y era un doncel sumamente poderoso. Salazar claramente era mas poderoso que Lucian. Su control sobre la magia era sorprendente. De hecho, el pequeño doncel habia ordenado que su varita se le fuera creada con los materiales que el quisiera. La varita estaba hecha de madera de serpiente y de un cuerno de Basilisco. Digno hijo de la Casa Slytherin, fue lo que todos pensaron.
Con su varita en mano, Salazar fue imparable. Tragaba libros y practicaba por horas hasta perfeccionar los hechizos. Aprender era una segunda naturaleza para el joven doncel. Y es que para Salazar existia un tercer lema; el conocimiento es poder. Y el estaba dispuesto a llenar su mente de conocimiento y de mostrar su poder al mundo. Despues de todo, tiene que tomar el trono de la casa Slytherin, asi como su padre le inculco desde niño.
—A diferencia de ti, Lucian, no pretendo dejar que mis habilidades se oxiden. Solo por no ser el heredero no significa que no deba esforzarme, es algo que tu aun debes aprender. Si quieres jugar, adelante, pero dejame estudiar.
Lucien suspiro y se dio por vencido, si Salazar queria perder su tiempo en estupideces, que lo pierda. El se encargara de jugar, es el heredero, el estara bien, siempre tendra a poderosos magos y poderosas brujas listos para ayudarlo, asi que no se preocupaba.
Salazar vio con frialdad y disgusto como su hermano se iba a jugar, ignorando sus estudios y deberes. Es por las acciones de Lucian que su padre lo entreno a el, un doncel, para tomar las riendas de la familia. Si dejaban el poder a manos de Lucian, la familia Slytherin no tardaria mucho en caer. Y su hermano era tan tonto que ni siquiera notaba que todo el poder poco a poco estaba siendo tomado por Salazar.
Pensamientos similares corrian por la mente de Lestat, quien observaba a lo lejos. Lestat amaba a sus hijos, y aun asi, no podia evitar tener favoritos, mas cuando Salazar estaba mostrando ser lo que un Slytherin debe ser. Lestat crecio con la mentalidad de que la familia Slytherin es lo primero, y si para mantener a su familia debia poner a un doncel en el trono, entonces Lestat se encargaria de poner el mejor doncel que pudiera criar.
Tenia confianza de que a manos de Salazar, la familia no caeria. Salazar, quien mostro ser un hablante, quien mostraba tener un inmenso poder magico. Quien mostraba ya su eficiencia en controlar el elemento agua. Ese Salazar era el que pondra en el trono y el que guiaria la familia a la grandeza. Despues de todo, Salazar nacio para esto, para ser grande.
Salazar Slytherin iba a ser imparable. Un huracan dispuesto a arrasar con todo. Un tornado listo para arrastrar a todo el mundo. Un oceano de conocimiento y poder.
Ese era el Salazar Slytherin que seria recordado desde aqui en adelante.