
31 de mayo de 1979
Querido Sirius…
Si mis cuentas son exactas, y si las cosas salieron al plan, para el momento en el que estes leyendo esta carta yo ya estaré muerto, no te preocupes, ya le di saludos de tu parte a nuestros padres. (si fuera posible, estoy seguro de que murieran otra vez si hiciera eso).
Yo se que probablemente no estes muy feliz conmigo, conociéndote, estas ahogando tus penas en alcohol y cigarros, no te culpo, pues yo también ahogue mis penas (¡Ja! ¿Entiendes? ¡Porque morí ahogado! Soy gracioso incluso muerto).
Pero, aunque me odies en este momento, o probablemente por el resto de tu vida, quiero que sepas que termine la mía amándote mas que a nadie. Me arrepiento completamente de todos los errores que cometí a lo largo de mi vida, aunque en realidad no, pues fueron esos errores los que me llevaron a donde estoy ahorita, y aunque no sea el fin ideal que tenías para mí, espero, con lo mas profundo de mi corazón, que encuentres en el tuyo el estar orgulloso de mi. ¡Lo intente hermano! ¡Intente ser tan valiente como tú! En realidad, lo intente, aunque fue demasiado tarde.
El horocrux de Voldemort está a las manos de Kreacher, intercambié el verdadero por uno falso, y antes de caer al helado vacío, ordené al elfo encontrarte y darte las instrucciones para destruirlo. Se que Kreacher no es de confiar, pero está bajo estrictas ordenes mías, bajo ordenes del ultimo heredero de la casa de Black, no le queda de otra mas que obedecerme.
Perdóname hermano, en serio perdóname por no haber luchado más. No solo me refiero a mi muerte, sino a todas las veces en las que pude haber escapado de la miseria en la que vivía, y no lo hice por temor.
Siempre te admiré ¿Sabes?, admiré tu valentía, tu bondad, tus valores que estaban en el lado correcto, admiré tus ganas de luchar, tu esfuerzo, admiré todo lo que diste e hiciste para salir de casa, las batallas que luchaste y ganaste, te admiré por la simple casa de Hogwarts a la que pertenecías, aunque en esos tiempos dije todo lo contrario.
Después de que te fuiste lloraba día y noche por ti, por que te extrañaba, por los gritos de odio de madre, y porque había perdido la oportunidad de escapar contigo. Supe, desde el momento en que me rehusé, que esa decisión cambiaria mi vida por completo, de la manera mas negativa posible. No dormía imaginándome como hubiera sido si estuviéramos los dos con los Potter, felices, llenos de comida hecha con amor, segundas y terceras pociones de cena, besos en la frente antes de dormir, abrazos llenos del cariño más puro que solo una madre puede dar, el sentimiento de una familia regida por amor y no por odio.
Tres años después de que te fuiste, madre me presentó a mi más grande pesadilla, me arrodilló frente a el y me obligo a prometerle lealtad, forzó la marca oscura sobre mi brazo y marcó mi vida para la muerte. Lo único que me mantuvo en vida fue pensar en ti, en que haría todo lo que pudiera para enorgullecerte, en que sería tan valiente como tú y tomaría la decisión correcta por primera vez. Decidí usar los conocimientos que forzó sobre mi en su contra, y cuando me confesó, muy idiotamente, donde se encontraba un pedazo de su alma, supe que esa era mi sacrificio, lograría matar una parte de el y ayudar por primera vez al lado correcto de la guerra.
Así que eso haré, iré esta noche a la cueva y robaré ese amuleto, llevaré a Kreacher conmigo y le daré las ordenes que ya te mencioné, pero antes, dejare esta carta para que sea entregada a ti mañana. No es una misión de vida o muerte, porque la única salida es la muerte, una que estoy dispuesto a pagar completamente.
Perdóname Sirius, pero ya no puedo más, he intentado seguir pero es demasiado, el odio está consumiendo todo mi interior, me siento cada vez con menos energía, amor es un sentimiento tan lejano que ya no recuerdo como se siente, estoy completamente cansado, ya no puedo más hermano mayor, ya no puedo seguir.
Así que, por favor, una vez más, perdóname por rendirme, perdóname por todos los errores que cometí, perdóname por todo el desprecio que te di, por todo el dolor que trasmití. Me hubiera gustado decírtelo en persona, pero eso seria imposible, así que te lo escribo aquí. Te amo hermano, nunca deje de amarte y se consciente que, en incluso en mis últimos segundos, moriré amándote por el gran hermano mayor que siempre fuiste para mí, aun a la distancia.
Por favor Sirius, destruye el amuleto y encuentra los demás horocrux, hay 6 más, y si la profecía que encontraron sobre el niño que destruiría a Voldemort es en algo cierta, entonces serían 7. No tiene sentido matar solo su cuerpo, para destruirlo tienen que destruir primero los 6 o 7 pedazos de su alma que se encuentran regados a lo largo de Londres. Creo que hay 2 en Hogwarts y uno en su diario, así que empieza por ahí.
Y por favor, ten en cuenta la profecía, esta habla sobre un niño recién nacido que será conocido por ser el vencedor de ya sabes quién, así que, si alguno de tus amigos planea tener un hijo pronto, será mejor que lo evadan a cualquier costa, lo ultimo que quiero es que tal niño sea el hijo de un amigo cercano tuyo. Algo ridículo de pedir, lo sé, pero algo en mi dice que es necesario que te mencione sobre esto.
Cuídate, y por favor, sal de esta guerra con vida y se feliz.
Mis mejores deseos, siempre, y con todo el amor que resta en mi…
Tu pequeño hermano, Reggie.
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Nota del 4 de mayo de 1998.
Hola Reggie, no me conoces, pero mi nombre es Harry Potter y justo hace dos días Voldemort fue derrotado y la guerra terminó por fin, después de décadas de sufrimiento.
Encontré esta carta mientras limpiaba los cuartos de Grimmauld place, estaba tirada bajo un escritorio viejo, completamente intacta y todavía sellada en su sobre. Por lo que leí, tu intención era que esta carta llegara a Sirius, pero lamento informarte que no fue así, el nunca leyó esta carta, y ahora él también está muerto, pero estoy completamente seguro de que, si la hubiera leído en su tiempo, no solo la guerra hubiera sido completamente diferente, pero también su vida. No voy a mentirte, te odió por lo que hiciste, pero era claro que su odio venía del inmenso amor que sentía por ti, y del hecho de que no pudo salvarte a tiempo.
Si te hace sentir mejor, fue tu aportación la que cambió por completo el rumbo de la segunda guerra mágica; si no hubiera sido por ti, hubiera durado muchos años más. Lo hiciste Regulus, tomaste la decisión correcta y fuiste parte fundamental en la destrucción de Voldemort. Estoy seguro que Sirius estuviera demasiado orgulloso de ti.
Tengo que decirte gracias, gracias por tu sacrificio, Londres mágico esta completamente agradecido por tu aportación en la guerra, pues ayudaste a ganarla, así que descansa en paz, cumpliste tu objetivo.
Espero y te hayas encontrado con Sirius en el otro lado, y que ahora puedan ser los hermanos que no pudieron ser en vida. Mándale un saludo a mi padrino, a mis papas y Remus y Tonks de mi parte, por acá los extrañamos demasiado.
Fue un gusto conocerte R.A.B.
Mis mejores deseos, el niño de la profecía.