
Descanse en paz Regulus Black
Capitulo final: Descanse en paz Regulus Black
Los tres corren. Cuando aparece Peeves, Hermione los hace que se escondan. Quedaban menos de cinco minutos.
“¿Qué pasa si no regresamos antes de que Dumbledore cierre la puerta?” pregunta Harry con curiosidad.
“Se muere Harry Junior” responde Draco, provocando que Hermione le dé un golpe en la nuca “Por favor, Mione. Necesito reír luego de tantos dementores”
“No quiero ni pensar en las consecuencias” dice Hermione volviendo a ver su reloj “¡Un minuto!” Los tres llegan al pasillo en que se hallaba la enfermería “Bueno, ya se oye a Dumbledore” dice nerviosa “¡Vamos, chicos!”
Los tres llegan a estar detrás de la espalda de Dumbledore.
“Lo voy a cerrar con llave” dice el anciano “Son las doce menos cinco. Señorita Granger; tres vueltas deberían bastar. Buena suerte”
Dumbledore salió de espaldas de la enfermería, cerró la puerta y sacó la varita para cerrarla mágicamente. Asustados, Harry y Hermione jalan a Draco para apresurarse. Dumbledore alzó la vista y una sonrisa que parece nacer de sus labios se cae al ver detrás de sus dos alumnos una cabellera rubia.
Draco siente como su varita se pone nerviosa con la sola presencia de Dumbledore. Se siente arisco al ver como los ojos del anciano parecen mirarlo con leve molestia.
“Señor Malfoy, usted no debería de estar aquí” dice el anciano con una falsa amabilidad.
“¡Lo hemos logrado!” grita Harry en cambio “Sirius se ha ido y está a salvo”
Dumbledore le sonríe a Harry antes de volver a ver a Draco.
“Sin Draco no lo hubiéramos logrado, director” salta Hermione a defender a su amigo “Sé que dijo que lo dejáramos descansar, pero también quería ayudar”
“Está bien, señorita Granger. No estoy molesto” responde el anciano antes de prestar atención a la puerta “Creo que ya no se encuentran allí. Entren. Los cerraré”
Harry y Hermione obedecen e ingresa. Draco camina sin bajar la cabeza, pero la mano del director se queda en su hombro.
“Solo anda con cuidado, señor Malfoy. Me preocupa muchos mis alumnos y su seguridad. No vuelva a hacer algo así, podría salir herido” advierte.
Draco mira al director. Sus ojos grises se afilan y sin algún respeto se quita la mano del anciano.
“Claro, a no ser que sea Harry Potter. A él no le importaría enviar como un cerdo al matadero, ¿verdad? Pero no se preocupe, Harry nació con un nivel de magia superior y me tiene allí” Dumbledore sonríe, pero realmente no muestra emoción alguna “Buenas noches director”
Draco entra a la habitación. Nota como en la cama de Ron está el pelirrojo durmiendo.
“Te demoraste en entrar ¿qué te dijo el director?” pregunta Harry preocupado.
“Sí, ¿qué hablaron?”
Draco inhala profundo antes de sonreír.
“Solo me pidió no hacer cosas así” responde honesto “Pero mientras ustedes idiotas se sigan metiendo en problemas, creo que no será posible” camina a cama. Su cuerpo le exige dormir. Estaba tan mareado y cansado.
Hermione hace una mueca. Ella camina a su propia cama y se mete. Harry los imita. Minutos después aparece la enfermera, pero Draco no presta mayor atención, debido a que en cuanto tocó su cama el cansancio de su cuerpo y su magia hace que caiga profundamente dormido.
Al principio todo es como un sueño normal. La tranquilidad de dormir sin tener sueños o pesadillas estaba, hasta que su propio cuerpo se siente en un vació y siente como es jalado del vientre.
Iba a reunirse con el anciano una vez más.
Joder.
Draco vuelve a estar en ese lugar tan oscuro. Esta vez había relámpagos iluminando el lugar. Draco se siente nervioso al sentir el ambiente mucho más hostil.
Y aparece el anciano.
“Draco Malfoy” dice el hombre caminando hacía él.
Draco se queda quieto al ver que el anciano tenía entre sus manos una guadaña brillante y desbordante de magia.
Perfecto, lo iba a matar.
“Es lamentable que hayamos llegado hasta aquí ¿no crees muchacho?” pregunta el anciano con una fingida tristeza.
“Casi me matas con ese enjambre de dementores” dice molesto “Si tu maestro se enterase, ¿qué te pasaría? Dijo que no me puedes lastimar. Que estoy protegido”
El anciano golpeo la punta de su guadaña en el piso. Parecía molesto por esas palabras.
“Es por ese motivo que te traje aquí, niño estúpido” gruñe “Puede ser que no te pueda lastimar ni tocar, pero mi magia te está protegiendo. Ya viste lo que pasa si no me tienes como escudo. Los dementores solo son un paseo en el campo a todo lo que vendrá si decido cortarte mi magia”
La varita parece enojarse por eso. Draco no. Ahora estaba más que confirmado que el anciano realmente no lo lastimaría. Además, con lo de los dementores sabía que tiene a la varita de su lado. No necesitaba la magia del viejo. Además, el anciano iba detrás de él, solo tenía alejarse de sus amigos para ponerlos a salvo.
Y lo haría. Si el anciano le pedía cosas como dejar a Sirius sin ayuda, volvería a ignorar el trato. Llámenlo idiota suicida.
“Está bien. Lo siento ¿okey? Trataré de que no vuelva a pasar”
“Sé que me mientes” dice el anciano de forma tranquila “Pero yo ya cumplí mi parte advirtiéndote que, si sigues incumpliendo lo que se te pide, perderás más de lo que crees que ganarás” Draco siete que la marca vuelve a quemar “no soy solo yo el único con poder, Draco Malfoy. Hay entidades con mucha más jerarquía que yo a los que no me gustaría hacer enojar, así que dudaré si te atreves a cruzar el límite”
“¿Cuál?” pregunta Draco “¿Hasta dónde puedo llegar?”
El anciano chasquea los dientes. Con su guadaña hace que Draco mira alrededor deja de ser una bruma para mostrar muchas velas de diferentes tamaños. Draco nota que en cada uno estaba grabado un nombre. Algunas velas estaban unidas a otras por cuerdas de distinto colores. Las cuerdas más brillantes eran las rojas.
“Cada vela se apagará a su debido momento. Tú, Draco Malfoy, no puedes alterar cuando estas se apagan”
“¿Qué?” dice Draco sin entender.
“Es parte del equilibrio. Otras entidades se encargan de otros trabajos. Si uno no cumple su trabajo, afecta al mundo. No puedo permitir que arruines el mío y haré todo lo que esté en mis manos para hacerte pagar si te atreves a hacerlo. Ni aunque tengas a alguien confiando en tus potenciales, cederé a que arruines mi trabajo.”
“Bien, no apagaré las estúpidas velas o lo que eso signifiqué” dice Draco.
“no te preocupes. Ya me aseguré de que eso no pase, no me importa si estás tan jodidamente protegido tanto magica como fisicamentente”
Draco quiere preguntar que quiso decir con eso, pero siente como nuevamente es jalado del estómago.
Draco se levanta agitado de su cama. Estaba completamente cubierto de sudor y mira su mano. Nuevamente la marca del anciano está marcada en su piel. Se acomoda mejor y piensa en lo que pasó.
Sea lo que signifiquen las velas, Draco no apagó ninguna esa noche, lo que, en teoría, significa que muchas de las instrucciones del anciano no tenían nada que ver con las velas… pero el problema era saber cuál de esas instrucciones de plano afectaba a esas velas.
Bien, cumpliría con la mayoría de las órdenes y solo las rompería cuando sea estrictamente necesario.
Volvió a acomodarse para dormir. Esta vez sí logró sumergirse en el mundo de los sueños una vez más.
Draco despierta adolorido. Siente como su cuerpo le reclama por todo el ajetreo. Se acomoda mejor en su cama y mira a sus amigos. La enfermera lo revisa una vez antes de quedar totalmente extrañada.
“Tus núcleos de magia están casi vacíos” dice asombrada para aplicarle más hechizos de revisión “¿Cómo pasó? Ayer solo tenías una cortada en el hombro ¡Iré a hablar con el director!” dice comenzando a salir de la enfermería luego de ver los niveles de magia tan bajos en un niño sangre pura.
Las cortinas de las demás camas se abren para dejar ver a sus amigos, incluyendo a un pelirrojo.
“¿Qué quiere decir con que tus núcleos de magia están casi vacíos?” pregunta Hermione.
Draco quiere reír, pero solo sale un quejido. Se siente totalmente fatal y se vuelve a echar.
“¿Draco?” dicen Ron y Harry a la vez.
“Creo que voy a vomitar” es lo único que alcanza a decir comenzando a notar el dolor de cabeza.
Cosas como núcleos mágicos con drenado de magia como la que estaba pasando Draco debían ser tratados en San Mungo.
“¿Qué hiciste?” pregunta Ron asustado de ver a su amigo así.
“Draco se fue con demasiados dementores detrás de él y regresó sin ninguno… ¿los destruiste a todos?” pregunta Harry alterado.
“Sí, creo que allí se fue toda mi magia” comenta Draco con una mueca “Joder, mi cabeza”
La puerta se abre de golpe. Severus Snape ingresa. Tenía el brazo descansando, lo que significa que algo se había roto cuando Lupín lo tiró al suelo.
“Draco” dice el mago “No te duermas. Será más sencillo si estás despierto”
Draco quiere decir algo más, pero madame Pomfrey regresa junto a al directo.
“Señores Potter y Weasley junto a la señorita Granger” dice la enfermera, pero es interrumpida por el director “Ya pueden retirarse a tomar desayuno o si desean podemos hacerles alcance de un carruaje para que vayan a Hogsmeade” comenta tranquilo el director “El señor Malfoy debe someterse a un tratamiento de emergencia. No se preocupen, para el atardecer estará de regreso con ustedes. No es tan grave la condición de su compañero, caso contrario estaríamos llevándolo a San Mungo”
Madame Pomfrey bufa por eso. Claramente la mujer quería hacer eso, enviar al alumno en un lugar donde pudieran tratar de mejor manera a Draco Malfoy.
“Queremos quedarnos, director” dice Harry “Queremos quedarnos con Draco, no lo vamos a dejar solo”
“Señor Potter” dice Severus molesto “Si sigue insistiendo, retrasaremos más el tratamiento de Draco ¿es que acaso no lo ve? Ahora largo”
“Harry” dice Draco cansado “Estaré bien. Vayan y díganles a los chicos que estaré bien. No llegué a dormir, estarán preocupado”
Harry parece querer negarse, antes de sonrojarse para luego desviar la mirada y asentir como un cachorrito.
Así el trío de oro sale de la enfermería.
Madame Pomfrey explica a detalle que es lo que harán. En resumen, Draco recibirá la magia de Severus. Lo recomendable era que sean de un familiar con su sangre, pero no habría problemas si era del padrino de Draco. Severus le transmitiría de su magia a través de un hechizo medico hasta que llegaran a niveles de magia que el cuerpo necesitaba para funcionar. Al ser Draco un chico sangre pura, la magia era mucho más importante a nivel fisiológico que de un nacido de muggles.
Así. Severus se quedó con él durante esas horas. Draco al principio intentó quedarse despierto para agilizar el proceso siendo él quien tratara de absorber todo, pero bastaron quince minutos desde que comenzaron para que Draco no diera más y volviera a quedarse dormido.
Al abrir los ojos, notó que había un plato frío con su comida.
“Lo hiciste” dice Severus “Acaban de venir a avisarnos que la aprendiz para auror Nymphadora Tonks acaba de atrapar a Sirius Black junto a Peter Pettigrew convertido en una rata”
Draco abre los ojos para luego sonreír victorioso.
“Hay suficientes fotos de Pettigrew siendo transportado al ministerio que mañana saldrá en El Profeta, lo hiciste mocoso. Acabas de darle la libertad a Sirius Black”
Draco sonríe y mira la mano de su padrino agarrar la suya. Aprieta la mano y mira a Severus.
“Perdón por meterte en esto, mira como quedó su brazo, padrino”
Severus rueda los ojos.
“Debería castigarte hasta que te gradúes por tu insolencia, pero quiero guardar mis energías para lidiar con cierto perro que en cuanto le den la libertad vendrá a intentar llenar mi vida de pulgas”
“Padrino, debería hablar con Sirius” dice Draco.
“No es algo que te deba interesar, Draco. Si Sirius te dejó que te metas en sus problemas, es porque tiene la edad mental de un niño, pero no esperes que te deje hacer lo mismo. Si quieres que te siga considerando mi ahijado, no vuelvas a decir estas ridiculeces”
Draco asiente.
“Padrino” dice Draco una vez más “¿Le dirás a mamá?”
“No, no soy ninguna lechuza, Draco” dice molesto Severus.
Draco sonríe y vuelve a cerrar los ojos.
La oscuridad no dura mucho. Esa tranquilidad que sentía su cuerpo al recibir la magia de su padrino es cortada de repente de manera brusca. Draco es sacado del mundo de los sueños de golpe, pero al seguir muy cansado no logra entender nada. Abre los ojos poco y nota como en la habitación están Lupín y Severus.
“¡¿Qué dices, Lupín?!” grita su tío con rabia.
“No lo sé, Snape” responde el profesor de DCAO “Apenas me estoy recuperando. Estaba dirigiéndome hacía acá cuando el director me intercepto para que te diga esto. Si no estuviera tan cansado, también estaría buscando respuestas en el ministerio”
“¿Sirius está bien?” pregunta su padrino.
Draco se siente alerta. Todo el sueño se va.
“No lo sé. Dumbledore solo me dijo que el ministerio tuvo una explosión. No sé más” responde triste Lupín “Realmente tienes que ir, Severus. Yo me quedaré a ver a Draco, ve con Sirius, por favor”
Draco siente que todo da vueltas.
Explosión en el ministerio. Mierda.
“Carajo” dice Severus totalmente impotente “Es que ese perro no puede tener buena suerte. Joder. Bien, Lupín. Iré al ministerio a ver a Sirius. Cuida a mi ahijado” ordena molesto.
“Sí, ve ahora” responde Lupín cansado.
“Cuídalo bien, Lupín” dice Severus molesto “Lo estoy dejando aquí y espero que me lo cuides bien. Si lo haces, no le diré a nadie que eres un hombre lobo. Es mi ahijado, lo único que me queda”
“Sí, Snape” dice Lupín algo sorprendido “Además, Harry adora a ese chico. Créeme que tengo muchos motivos para cuidar a tu ahijado”
Draco escucha un bufido de Severus. Los pasos característicos de Severus se escuchan alejarse con cada segundo que pasa. Cuando queda el silencio, Draco se sienta.
“¿Qué pasó?” pregunta mirando al profesor.
Draco se queda completamente callado al ver a Remus Lupín así. Estaba muy maltratado y delgado. Mucho más de lo que creyó que sería posible en menos de veinticuatro horas. Su cabello estaba muy desordenado y sucio. Las cicatrices en su cara parecían que se volvieron a abrir y había un par más en el labio, la ceja y la mandíbula. Lo único limpio era la túnica que vestía, pero el resto de él parecía muy maltratado.
No parecía como Greyback. Ni de lejos daría esa impresión de hombre lobo cruel y malvado.
“Profesor” dice Draco ignorando la incomodidad en su estómago al verlo así. Tan parecido a como Draco terminaba cuando Greyback lo maltrataba a petición de Bellatrix “¿Qué pasó? ¿De qué explosión están hablando?”
“Draco” dice el profesor tomando asiento con una mueca “Vuelve a echarte. Vamos. Debes descansar. Severus dijo que tienes agotamiento mágico. Eres un chico sangre pura en crecimiento, eso es peligroso y no se realizó por completo tu tratamiento” dice el hombre con tranquilidad antes de descansar su cabeza en el asiento luciendo cansado y derrotado.
“Profesor Lupín” dice Draco “Sé que no fui un excelente alumno con usted”
“Está bien, Draco. Sé que me tienes miedo” responde profesor con tranquilidad.
Draco se queda congelado por esas palabras. Quiere negarse, pero sabía que tal vez no serviría de nada.
“¿Por qué cree que le tengo miedo?” pregunta en cambio.
“Draco” dice el profesor “No es la primera vez que alguien me mira así. Mis padres también me tenían miedo” responde el profesor con tranquilidad “Y está bien. Eres un niño. No te voy a culpar por temerme por esto. Sé que Severus te lo habrá dicho al inicio del año. Te quiere mucho y buscó protegerte el hombre lobo malo de Hogwarts y eso está bien. Sé quién soy y lo que trae ser yo. No te sientas mal por eso”
Draco hace una mueca.
“¿En serio?” pregunta Draco.
“Sí. Nunca dejaré de ser un hombre lobo, Draco. Hace muchos años hice las paces con eso. No podía continuar viéndome al espejo y odiarme por las cicatrices que tengo, no es sano ¿verdad?”
Draco baja la mirada y mira a su brazo izquierdo. Recuerda en su vida pasada como todos los días miraba su brazo y se odiaba. Cuando acabó la guerra y el mundo lo aborreció no solo por ser un Malfoy, sino un mortifago…. ¿eso no era lo mismo que ser un hombre lobo? Era jodidamente igual… solo que a este profesor lo convirtieron en uno siendo solo un niño tan pequeño.
¿Qué malicia haría un niño a esa edad como para querer la marca?
Nada, absolutamente nada.
“Lo siento” dice Draco al final “Por cómo le hablé cuando me pidió que le devolviera el mapa… Solo estaba molesto por ser atrapado y cuando usted insinuó que sería capaz de traicionar a Harry, sí… no fue respetuoso”
“Gracias y acepto sus disculpas. También discúlpame si te ofendí. Solo quiero lo mejor para Harry. Es el hijo de mis dos mejores amigos y ahora ellos no están. Solo quiero cuidarlo” comenta con nostalgia “Es tan parecido a James, ¿sabes? Pero también tiene cosas de Lily”
“No los conocí” responde Draco “Pero si es así, debieron ser personas maravillosas, porque Harry es maravilloso. Es… es poderoso” Draco recuerda todo lo que vivió en esos tres años siendo parte de la vida de Harry en su nueva oportunidad “Es valiente, es leal. Joder, es tan protector que a veces dan ganas de matarlo porque cree que él debería cargar con todo. Es noble y ese jodido cabello que parece un nido de ratas lo hace ver tan… tan” se cubre el rostro para ocultar su frustración “Y esos ojos. Profesor, ¿fueron así de verdes los de sus padres? ¿De quién lo sacó?”
Draco se queda completamente quieto cuando mira la mirada de Lupín. Ese hombre tenía una sonrisa tonta, como si en vez de Draco viera a alguien más.
“¿Te gusta tanto?” pregunta en cambio el profesor.
Draco siente que su alma se va de su cuerpo. Comienza a negar desesperado. No.
No. No. No.
“¡NO!” dice antes de toser “No, solo es mi amigo”
Lupín niega con una sonrisa antes de mirarlo una vez más.
“Los de Lily eran igual de verdes. Sacó los ojos de su madre. El cabello lo sacó de James” agrega en son de broma.
“Los ojos de su madre” dice Draco recordando la intensidad de estos “No me puedo imaginar que alguien más haya tenido esos ojos… eso ojos tan verdes que parecen nunca dejar de brillar”
El silencio se instala por un largo momento. Draco sale de su ensoñación para ver al profesor.
“Profesor, ¿volverá a enseñar el próximo año?” pregunta antes de retomar lo de la explosión.
“Sí, Draco. Mi secreto no salió a la luz, así que supongo que así será” responde el profesor.
Draco se siente más tranquilo. Tal vez pueda dejar de ver a Remus como un hombre lobo peligroso si se permite conocerlo mejor.
“Sí, eso suena bien. Podría prestar atención el próximo año” comenta. Lupín niega con humor “Pero en serio, le pido que me diga que pasó. ¿Sirius está bien? ¿Qué hay de Pettigrew?”
“Descansa Draco. Sí, hubo una explosión, pero ahora no hay mucha más información que esta”
Draco hace una mueca. Se acomoda mejor y cierra los ojos. No logra dormir porque su cuerpo estaba completamente alerta al percibir la magia de un hombre lobo.
Cuando logra hacerlo, vuelve a levantarse al recordar las cosas horribles que vivió en la mansión.
Draco abre sus ojos al sentir una magia que no era de su padrino, sus padres o sus amigos. Mira a Madame Pomfrey lucir más satisfecha.
“Muy bien, creo que puede ir a cenar en el Gran comedor” comenta “A este paso, usted y el señor Potter serán mis pacientes más comunes”
Draco hace una mueca.
“¿El profesor Snape?” pregunta aun sabiendo la respuesta.
“Se fue con el director al ministerio” responde la enfermera “Espero que por fin hayan atrapado a Sirius Black”
Draco sonríe de forma falsa.
Draco sale de enfermería arrastrando los pies. Respira una tranquilidad momentánea. Piensa en el anciano… piensa en todo lo que podría pasar de aquí a más adelantes luego de esto.
Las posibles peticiones.
El torneo era el próximo año. La aparición e Voldemort estaba a un año de distancia. Draco comenzó a notar que perdió bastante tiempo en vez de averiguar cómo diablos es que este regresó. Sabía que había una relación con Harry Potter. Este simplemente se había desaparecido y regresado con el cadáver de Diggory.
Eso significaba que tal vez necesitaban algo de Harry para hacer que regrese Voldemort. Debía encontrar una manera de evitar que se llevaran a Harry Potter del castillo ese día.
O mejor. Evitar que pusieran el nombre de Harry.
Con esa línea de pensamientos, Draco llega al gran comedor. Mira la puerta y la cruza. Ve a lo lejos a todos sus amigos en la mesa de Slytherin. Theo estaba abrazando a Luna mientras Millie parecía apunto de arrancarse el cabello que había crecido tanto este año por no haberse lo cortado ni una vez. Justin estaba devorando un pie de limón mientras Greg y Vincent parecían metidos en sus pensamientos.
Bien, era momento de tranquilizar a sus chicos.
Camina con la cabeza en alto.
“¿Quién se murió?” pregunta cuando está detrás de la espalda de Harry Potter.
“¡Draco!” gritan casi todos.
“Theo, Luna, Millie, Justin, Greg, Vincent” hace una mueca al notar cuantos nombres tenía que pronunciar ahora “Los siento tanto. No planee nada de esto”
Cruza la enorme mesa y es recibido por Luna, quien se sube a él como un koala adorable.
“Mentiroso, dijiste que regresarías en tres horas”
“Yo te mato” dice Millie también acercándose “No dormí nada por ti, maldito desconsiderado ¡No vuelvas a hacernos esto nunca más! Piensa en nosotros, joder”
Justin dejó su comida para correr a unirse al abrazo. Draco suspira y trata de moverse.
“Lo siento, pasaron cosas”
“Siempre pasan cosas contigo, Draco Malfoy” dice molesta Pansy uniéndose al grupo. Ella lucía ojeras bajo sus ojos verdes oscuros “Y siempre tienes que estar relacionado con ellos tres” apunta al trio de oro.
“¡Hey! No nos puedes culpar. No es como que busquemos ponernos en peligro adrede” se queja Ron cruzado de brazos “Y Draco también es nuestro amigo, nunca nos abandonaría”
“Draco es un idiota” dice Pansy “Por no abandonarlos en cuanto se ve el peligro, pero claro que no. Él se queda a arriesgar el culo por ustedes ¡Y luego somos nosotros quienes no dormimos de la preocupación!”
Draco mira como Harry se levanta a querer responder a las palabras de Pansy, así que toce.
“ni piensen que se van a pelear conmigo aquí” dice serio “Está bien chicos, estoy bien. Solo fue cansancio mágico. Ya estoy sano. Vamos. Ahora tenemos cosas más importantes de que hablar”
Justin se separa y asiente.
“Tenía miedo” dice el tejón “Dijiste que no saliéramos al bosque, así que trate de que nadie saliera como tu quisiste. Ahora me arrepiento mucho”
Draco sonríe enternecido.
“Hiciste bien. Había un hombre lobo afuera”
“¡¿Qué carajos?!” dice Millie.
Draco se sienta con Luna aun sujetando su brazo. Comienza a contar todo, quitando muchos detalles que solo Harry y Hermione notaron. Todos se quedaron en completo silencio cuando terminó de contar.
“Merlín” dice Greg “Somos un asco como guardianes”
“No le digas a tu padre, por favor” pide Vincent.
Draco sonríe.
“¿Por qué lo haría?” dice Draco “Si ayer estuve en mi calientita cama”
Los dos sonrieron por eso y asintieron. Millie gruñe y se acomoda.
“No sé porque no me sorprende todo lo que nos dices. ¿Hombre lobo? ¿Dementores? ¿Viajes en el tiempo? ¡Es que están locos!”
Draco siente un brazo rodearle el hombro. Mira a Theo quien luce pálido y aliviado con Libra en sus brazos.
“Solo no vuelvas a irte sin decir nada. Estaba tan aterrado” pide el castaño.
Draco empuja a Luna, quien entiende y lo libera. Con los dos brazos abraza a Theo, quien lo aprieta desde la cintura. Draco acaricia su espalda y respira su aroma a melaza del perfume que le regaló.
Le comenzó a disgustar. Así no olía Theo.
“Lo sé, lo siento tanto” dice Draco “Sé que sonaré cruel, pero me alegro de que no hayan estado allí. Ya fue difícil para mí cuidar a Hermione y Harry, hubiera perdido la cabeza si hubieran estado allí” explica.
Theo se separa un poco para mirlarlo con molestia.
“Suena a que nos ves como una carga”
“Suena a que los adoro tanto que dejaría todo por cuidarlos” corrige Draco “Puedo entender que no me digas tus problemas como yo espero que entiendas que así es como funciono. Así con mis prioridades ¿Bien?”
“Está bien. Haz lo que quieras. Te conozco. No quiero recibir un puñetazo en la cara si te digo que no” dice.
Draco hace una mueca al recordar el puñetazo que le dio a Harry. Sí, Theo lo conocía mejor. Escuha un gimoteo y ve a Harry cubrirse la cara roja. Sí, no fue el único en recordar eso.
El resto de la cena fue tranquila. Ya nadie realmente hizo más escenas. De cierta manera, era muy triste que todos comenzaran a acostumbrarse que cosas así de fuertes le pasaran a Draco junto al trío de oro.
“Bien” dice Pansy “Ahora que sabemos que el idiota está bien, alguien me puede explicar ¿cómo carajos es que se filtró la información de que Luna es prima de Draco?”
Draco sonríe por eso. Ahora era de conocimiento público. Se sentía tan orgulloso.
Draco agranda el diario de Regulus Black. Mira que le falta tan poco. Siente un sabor amargo. Abre la página siguiente a la traición. Muchas páginas eran maldiciones en contra de James Potter y Sirius Black. Todas conteniendo tanto dolor, hasta que llegó al primero de setiembre.
1 de setiembre de 1977- 16 años.
Pandora y Evan fueron a por mí. Siento que no puedo ver su cara o me rompería. Es su último año en Hogwarts y todo lo que pensé que haríamos ahora no se dará nunca más.
Ahora es un Premio Anual junto a la sangre sucia de Lily Evans. Ambos se ven tan jodidamente bien juntos. Me quema el corazón haber entrado a ese compartimiento de prefectos solo para ver a ambos bromear juntos con esa perra fuera su novia.
Yo lo soy. Era… creo que nada es más hermoso que romper en el momento en que Potter se llevó a mi hermano lejos de mi hogar. Lo odio tanto.
Pandora estuvo allí sosteniendo mi mano.
Solo quiero que esto acabe.
20 de setiembre de 1977- 16 años.
Es oficial. Acabo de romper con James Potter. El imbécil creyó que podríamos actuar normal. No es así. Estoy cansado. Me siento traicionado.
Mañana no celebraré nada. Es más, no volveré a celebrar ninguna festividad de la rueda del año. No mientras mi corazón siga pidiendo al imbécil de Potter.
No mientras mi hermano siga siendo un traidor.
1 de octubre de 1977- 16 años.
Sirius no ha vuelto a acercarse a mí y duele. Jodido traidor. Lo odio.
Severus luce decepcionado, pero es mejor así. Sirius solo rompe. Destruye y daña. No quiero eso para Severus ni nadie.
31 de octubre de 1977- 16 años.
Tuve una pesadilla. Una en la que me ahogaba. Fue jodidamente extraño, pero sentía como me jalaban miles de manos y solo podía sentir paz.
Fui a la cama de Evan y de allí no me moví hasta que estamos aquí, mientras te escribo.
Solo fue un sueño. No soy un vidente para preocuparme.
1 de enero de 1978- 16 años.
No ha pasado ni un año desde que terminamos y regresó a estar detrás de la sangre sucia. Claro, James Potter siempre será ese mago idiota y coqueto.
Duele. Maldición. Quiero llorar.
No es justo. ¿por qué buscan lastimarme más?
Solo quiero que todo acabe.
14 de febrero de 1978- 16 años.
Me llegó una carta. Es de Potter. Lo leí y pide que nos reunamos, pero al querer ir solo vi allí a Sirius allí.
Al parecer el idiota de James Potter creyó que tendiéndonos una trampa así de estúpida arreglaríamos nuestros problemas. Vaya idiota. Solo volvimos a pelear. De ahora en adelante esta será nuestra relación. Nada de amor, solo odio.
Nunca más vuelvo a ilusionarme así.
1 de marzo de 1978- 16 años.
Mulciber volvió a la vida de Severus. Parece que el mago idiota lo quiere reclutar para unirse a Voldemort.
Merlín, espero que Severus diga que sí.
Puedo ver a la lejanía como Sirius se llena de celos, bien. Venganza. Comenzaré a apoyar a Mulciber. Vamos, tú puedes.
27 de marzo de 1978- 16 años.
Hoy es cumpleaños de James. Hoy cumpliría dieciocho años. Hubiéramos hecho una fiesta loca.
Pero eso nunca pasará.
Escuché rumores de que si le harán una fiesta. Bien por él.
28 de marzo de 1978- 16 años.
De ahora en adelante, mis esperanzas con James Potter acaban de morir. Los dos se pueden ir mucho a la mierda. Realmente- Los odio. Los odio tanto.
¿por qué?
Desde el primer momento que puse un pie en el gran comedor, la noticia de Lily Evans y James Potter dándose un beso en medio de la fiesta me inunda. Los comentarios sobre la pareja destinada desde el primer año con un pequeño James Potter enamorado de la sucia pelirroja me enferma.
Quiero llorar.
No importa diario. Es inevitable. Ojalá se llenen de bebes mestizos asquerosos y jamás me los tenga que topar en la vida.
Lo odio tanto.
1 de mayo de 1978- 16 años.
No sé qué quiere James Potter de mí, pero no me ha parado de buscar. Pandora y Severus me han ayudado tanto a esconderme y los aprecio tanto.
25 de mayo de 1978- 16 años.
Severus acaba de aceptar la marca. Creo que el beso que Lily y James se dieron lo orilló a eso. bueno, algo bueno tuvo que tener las acciones del imbecil de James y la sangre sucia inmunda.
1 de junio de 1978- 16 años.
El año escolar está acabando. El rumor de Voldemort alzándose en el mundo mágico se a extendido en el colegio. Todos dicen que nosotros seremos sus futuros discípulos y no se equivocan.
Ahora nos llaman los mortifagos de Hogwarts.
James parece demasiado decepcionado cuando nos ven caminar. No me importa.
Él y Sirius al final de este mes saldrán de mi vida para siempre.
No me importa para nada lo que ellos puedan opinar. Me rompieron el corazón, pero yo tendré clemencia. Cuando nuestro señor se alce, haré lo posible para que sean perdonados.
Seré diferente a esos traidores. Seré mucho mejor. Nadie puede tratar de esa manera a Regulus Black.
De allí, todo se iba al inicio de como inició.
Draco miró la siguiente hora, era de Regulus describiendo como iba a recibir la marca a después de su cumpleaños número diecisiete. Draco sintió una presión en su pecho.
Demasiado joven.
Al día siguiente día, en el profeta se observaba una fotografía… pero no era lo que Draco se esperaba.
Era una explosión junto al titular.
“Desastre en medio de la lucha por libertad”
“¿Qué?” dice Draco sin creerse nada de lo que estaba pasando. ¿Tan rápido lo cubrió El Profeta?
“Merlín” dice Pansy “Atraparon a Sirius Black junto al supuestamente fallecido Peter Pettigrew, pero mientras trataban de preparar todo para dar Veritaserum a los dos y así descubrir el verdadero responsable de la muerte de los padres de Potter, hubo una explosión que hizo que uno de los posibles culpables huyera”
“¿Quién?” pregunta Draco totalmente pálido, pero ya conociendo la respuesta.
Sirius no tenía ningún motivo para huir.
“Pettigrew”
Draco agarra el periódico.
Desastre en medio de la lucha por libertad
Corresponsal del diario El Profeta.
Es más que sabido que en los últimos meses, en el mundo mágico se ha dado una búsqueda extensa alrededor de todo el territorio del reino unido y países vecinos para encontrar a uno de los seguidores de quien-no-debe-ser-nombrado encontrados culpables en los juicios de mortifagos de 1981, Sirius Black.
Búsqueda que terminó el día de ayer a horas de la mañana gracias a una de las futuras promesas de la comunidad de aurores, la aprendiz del retirado auror Alastor Moody, Nymphadora Tonks, quien coincidentemente es sobrina de dicho mago capturado por sus propias manos.
El mago encontrado culpable de traicionar al matrimonio Potter como su supuesto guardián y de haber provocado la muerte de doce muggles no se encontraba solo. En medio de todo el panorama, tenía en sus brazos un animal. Una rata negra. Dicha criatura no era más ni nada menos que Peter Pettigrew, una de las presuntas víctimas de Black, quien resultó ser un animago ilegal todos estos años.
¿Por qué Peter Pettigrew nunca dio la cara durante tantos años?
Las palabras de Black al respecto dejaron congelado a todo el público presente.
Peter Pettigrew era realmente el presunto culpable ¡Qué escandalo!
Lamentablemente, horas después de dicha revelación, sucede un accidente sin precedentes dentro del propio ministerio.
Una explosión en la celda de Peter Pettigrew permitió que el mago declarado muerto en 1981 se escapara transformado en una rata gracias a su habilidad de animago. Un lamentable hecho que puede generar que el juicio que se planeaba abrir para ver el estado de culpabilidad de Sirius Black se deje de gestar y que el mago permanezca teniendo los cargos de asesinatos y traición en su contra.
El diario El Profeta desea junto a sus lectores que todo el asunto se maneje de la manera correcta como siempre ha sabido hacer el ministerio.
Consultar pagina 7 para saber más sobre los animagos y la pagina 8 si se desea saber el caso de la caída de Voldemort y la muerte de los Potter junto a la historia de victoria de Harry Potter, nuestro niño que vivió.
Draco arrugó el diario. Miró a la mesa de Gryffindor y notó como Harry acaba que romper el diario a la mitad luciendo molesto.
“Iré a la mesa gryffindor” dice Draco levantándose.
Camina hacía sus amigos. Toma asiento y Hermione lo abraza del brazo.
“Harry” dice Draco.
“Amigo, creo que debemos dejar que le pase el enojo” dice Ron incomodo,
Draco solo mira a Harry.
“No es justo” dice Harry mirando a Draco “todo el sacrificio que hiciste fue por gusto”
“No, Harry” dice Draco “Más de uno vio a la rata. Es imposible que no le den un nuevo juicio más justo a Sirius”
“Nunca tuvo un juicio” dice Ron “Recuerdo que simplemente lo encerraron”
“Eso es mucho mejor. Sirius con una buena defensa puede reclamar su derecho a un juicio. Dora nos ayudará a estar conectados con todo. Podría hablar con mi madre para que ayude” dice Draco “Esto no es una derrota, solo una batalla perdida. Hay fotos de Peter. Él mismo ministro lo habrá visto. No hay manera que no le den la libertad a Sirius”
Harry asiente.
“Hubiera sido más fácil si no hubiera escapado”
“Harry, nada en esta vida es fácil” comenta Hermione “Pero estaremos aquí para ti”
“Sí, hermano” dice Ron “Ellos no son tan idiotas como para cometer un error con el ojo del mundo mágico sobre ellos. Además, eres Harry Potter. Si demuestra que quieres que Sirius sea libre, harán lo posible para satisfacer tus deseos”
Draco ríe por eso. Se acomoda y aplaude a Ron.
“Ese es mi comadreja” Ron rueda los ojos por eso “Quita esa cara fea, Harry. Es momento de trabajar”
“Bien” responde Harry “¿Juntos?”
“Siempre” responde Draco.
El año escolar llega a su fin. Todo el mundo hablaba sobre Luna Lovegood siendo prima de Draco Malfoy. La noticia de Pettigrew solo era hablado por los sangre puras y mestizos, ya que, a los nacidos de muggles no comprendían lo importante que esto era. Draco escuchaba todos esos días muchos cuchicheos en la mesa Slytherin. Chicos hablando sobre sus padres molestos por la noticia y entre otras cosas.
Claro, muchos de los padres de los Slytherin eran mortifagos.
Aparte de eso, esa mañana iba a ser publicada la lista de los primeros lugares de todos los años juntos a las notas de los exámenes. Hermione estaba perdieron la locura por saber su puesto, cosa que dio gracia a todo el grupo.
Luna comentó feliz de que ya quería que llegaran las vacaciones para ir a la casa de Draco y conocer por fin a Altair, cosa que alegró a Draco.
“Podríamos tener un par de reuniones” comenta Draco “O citas” mira a Theo.
Su novio hace una mueca. Parecía que había algo que Draco no sabía o más bien, él no le dijo.
“Sí” miente Theo “Por supuesto, cariño. Todas las que quieras”
“Theo, me estás mintiendo” comenta molesto.
Comenzaba a ser cansado.
“A Theo lo van a enviar a otro lugar” dice Neville. Theo mira mal al león y este frunce el ceño “Theo, creo que Draco también debería saberlo. No me gusta a donde te van a enviar”
Draco mira a Theo con el ceño fruncido. Comenzaba a ser molesto que Theo no le dijera ese tipo de cosas. Joder, eran mejores amigos por amor a Morgana.
“Bien” dice Theo molesto “Mi padre me enviará a un lugar. Una especie de reformatorio sangre pura. No es seguro, estoy negociando eso por cartas ¿bien? No te preocupes, no es muy diferente a la crianza que me dio mi padre”
Draco sintió mucho enojo, pero asintió.
“Estarás bien” dice Luna con tranquilidad “Theo es fuerte”
“Soy fuerte” concuerda Theo con orgullo.
Draco rueda los ojos. El toque de Theo ya no le agradaba mucho, pero igual no se apartó. Sería muy hipócrita de su parte hacer un drama por Neville. Solo le molestaba que era su mejor amigo y al parecer estaba por detrás del león.
“¡Ya están publicadas las notas!” chilla Hermione Granger agarrando la mano de Draco.
Draco frunce el ceño, pero toma la mano de Hermione cuando esta la jala. Ellos corren a ver las notas siendo seguidos por su grupo de amigos. Como pueden van a ver la lista de notas. Allí estaban también varios Ravenclaw y Slytherin. Blaise estaba allí sonriendo al ver la lista de primeros lugares.
Hermione no duda en empujar a todos para observar la lista con ansiedad. La chica mira la lista antes de comenzar a leerla. Draco se pone a su costado, solo para escuchar el chillido de felicidad de su amiga.
“¡Lo hice!” grita feliz “¡Primer lugar! ¡lo logré!”
“¡Bien hecho, Hermione!” dice Millie “¡jajaja! ¿Qué se siente ser el segundo lugar, Draco?” dice con burla la pelinegra.
Las sonrisas de broma se murieron al ver el rostro de Draco perder brillo. Sus ojos grises se posaron en su nombre junto al numero tres… en tercer lugar… y arriba de él estaba nada más y nada menos de Blaise Zabini.
“¿Draco?” pregunta Hermione “¿Estás molesto porque te gané? Bueno, hasta yo estoy sorprendida, pero me lo merezco ¿no lo crees?” dice Hermione nerviosa.
“Vamos, Draco. Estás dramatizando demasiado” dice Millie algo preocupada y levemente molesta “Le estás arruinando el momento a Mione”
“No” dice Draco “Soy tercer lugar” admite con dolor “Hermione es primera… Blaise es segundo… él me ganó”
Su mente se imagina a su padre mirando con orgullo a Blaise. Como el hombre le dice lo orgulloso que está.
Blaise le ganó.
“Joder” dice Millie “Está bien. El próximo año le ganarás ¿bien?”
“¡Oh, Blaise!” dice Pansy en el fondo corriendo a los brazos del moreno “Estoy tan orgullosa de ti. ¡Lo hiciste!” dice la pelinegra antes de besar al chico, quien la sujeta de la cintura y se deja besar.
“Oh, soy cuarto lugar” dice Theo sorprendido “¿Cómo es que permití bajar tanto?” dice molesto antes de ver su nota en herbología “Oh, tiene sentido. Bien, felicidades cariño. Un tercer lugar también es bueno”
Draco asiente. Mira a Hermione algo decaída. Se siente fatal.
“Pero nuestro primer lugar está aquí” comenta Draco enterrando sus emociones “¡Nuestro primer lugar es tan brillante!” grita para que todos escucharan que tal vez no sea el primer lugar, pero tiene como amigo a la que se llevó el puesto.
Que no es un perdedor.
Hermione recupera los colores y se pavonea. Luna aparece sonriente celebrando su segundo lugar gracias a sus altas notas en pociones junto a Ginny quien estuvo en un séptimo lugar bastante complacida.
Todos van a celebrar el triunfo de haber pasado el año sin dificultades. Greg y Vincent también habían pasado con la mínima nota, pero era un gran avance a diferencia del año pasado donde sacaron de las peores notas.
El último día en Hogwarts llega. Todos deciden arreglar sus cosas para luego pasar una tarde en el lago alimentando los peces con Luna Lovegood.
Draco decide ordenar todo con tranquilidad. Su uniforme es doblado con paciencia. Además, discretamente cambió la esencia a melaza del perfume de Theo por uno a de naranjas, sin recibir reclamos al respecto. Los libros son encogidos para que no pesen demasiado y los regalos de Harry también sufren el mismo destino. Draco no tuvo la valentía de abrirlo. No iba a darle una oportunidad a su corazón para seguir suspirando por Potter. Por último, estaba el diario de Regulus Black.
Draco mira el diario de Regulus con una idea en mente. Llama a Dobby.
“Draco Malfoy llamó a Dobby” die el elfo feliz “Dobby supo las noticias. Dobby lamenta mucho que Peter Pettigrew haya escapado”
Draco sonríe. Mira su baúl y camina para sacar una caja que dentro tenía el Horrocrux del guardapelo. Siente la magia familia golpearle. Se la pone en el cuello y agarra el diario.
“Dobby, por casualidad ¿sabes dónde enterraron a los padres de Harry?” pregunta inseguro.
Dobby frunce el ceño y asiente.
“Dobby fue allí en uno de sus viajes luego de ser un elfo libre. Están en el cementerio del valle de Godric, señor” responde el elfo.
Draco mira el diario. Respira profundo y mira al elfo.
“Llévame allí, por favor”
El elfo obedece. Draco toma su mano y desaparecen del cuarto compartido. Al abrir los ojos nota que estaban en un extenso cementerio. Draco mira las lapidas de muchas personas a distancias casi iguales. El frío de la noche no lo detuvo a buscar entre todos hasta llegar a dos hermosas lapidas de mármol blanco que tenían en letra casi brillantes en plena oscuridad que tenían grabado la frase “El último enemigo que será derrotado es la muerte”
Algo dentro de Draco se removió de incomodidad.
Debajo de esa bella frase estaban los nombres de Lily y James Potter junto a sus fechas de nacimiento.
“Dobby solía venir a aquí. Dobby desea que Harry Potter pueda venir a saludar a sus padres también” dice el elfo triste.
Draco suspira y asiente. Camina y en el lado de James Potter cava un agujero. Sus manos comienzan a lastimarse al no estar acostumbrado al trabajo físico, pero lo ignora para acabar teniendo un agujero lo suficiente grande donde metió el diario y se sacó de su cuello el guardapelo maldito.
“Aquí estamos, Regulus Black” dice Draco con tristeza “Sé que tal vez tengas una lápida sin un cuerpo en algún lugar de este mundo, pero este diario es lo más cercano que tendremos de ti” siente que el viento mueve su cabello “Así que como sé que tu corazón jamás dejó de amar a James Potter, quiero que descanses en paz junto a él. Ambos merecen verse una vez más”
Draco comienza a enterrar los dos objetos con cuidado. Comienza a tararear una canción que en la costumbre de los sangre pura se cantaba para despedir a los seres queridos que habían partido al más allá. Dobby lo acompañó y ambos terminaron cantando toda la letra. Cuando acaban, Dobby transfigura una piedra a pedido de Draco en la letra “R” que coloca sobre la tumba improvisada.
“Volveré por el horrocrux para cumplir tu último deseo, ahora guárdalo por mí. Descansa en paz Regulus Black”
Lo dice de corazón. En ese instante una luz se enciende. Regulus Black completamente empapado de pies a cabeza aparece en la forma de un fantasma, ya que, su apariencia se asemejaba mucho a la de los fantasmas de Hogwarts. Mira a Draco con una sonrisa leve. Todo su cuerpo comienza a secarse.
“gracias” escucha que dice antes de que la leve presencia de un Harry mucho más grande y alto se manifestara detrás de Regulus extendiendo su mano para ser esta vez aceptada por Regulus, desapareciendo ambos volviendo a dejar todo en oscuras.
“Vamos, Dobby. Ya está. Esto se terminó” pide Draco.
Dobby le toma de la mano. Al parecer, Draco fue el único en ver la situación, porque el elfo no pregunta al respecto. Nuevamente en el cuarto, Draco se sumerge en su cama y decide dormir.
La tarde en el lago fue maravilloso. Luna comenzó a explicarles a todos cada uno de los peces que aparecían junto a un torpe idioma “para peces” que ella sola creó para entenderlos. Ginny le susurró a Draco preocupada por la salud mental de su amiga mientras le contaba todos los intentos de luna para establecer una comunicación con dichas criaturas marinas. Draco estaba a punto de darle algo de razón a la pelirroja, cuando vio a Greg, Vincent y Justin intentar imitar a Luna.
¿Cuál era la posibilidad que tuviera tres amigos locos?
Así que Draco se une a ellos para intentar hablar con peces. Hermione de fondo parece estar sufriendo por eso mientras Pansy, Millie y Ron se parten de la risa observando todo.
“También quiero” dice Neville uniéndose a ellos comenzando a imitar a Luna con un rostro concentrado.
“Es adorable” dicen a la vez Harry y Theo, solo para mirarse por un largo tiempo antes de encogerse de hombros.
“¡No puedo más!” dice Hermione “¡Ese idioma no existe por amor a merlín!” termina por decir molesta.
Draco le responde con el idioma nuevo que aprendió, recibiendo un puñado de agua en respuesta. Así, terminaron todos en una guerra de agua teniendo como ganadores a Vincent, Greg, Justin y Luna, quienes fueron protegidos por ambos chicos como sus guardianes.
Draco terminó con todo el cabello empapado y la ropa también. Se sintió muy observado, pero decidió creer que era Theo hasta que lo vio reír con agua siendo levitada con su varita mientras seguía a Neville Longbottom, quien gritaba feliz por piedad en forma de broma.
“¡Tú puedes, Neville!” dice Draco con humor, antes de que Harry le arrojara agua a la cara “¡Harry!” grita ofendido antes de elevar agua con su varita y comienza a correr detrás del pelinegro.
Todos deciden ir en el mismo compartimiento. Hermione aplica un hechizo de expansión que, aplaudido por todos, pero eso no evita que Draco vaya una vez más en las piernas de Theo, quien lo mima sin quejarse.
“benditas vacaciones” lloriquea Millie “Este año creo que me haré un pircing más”
“¡¿Tienes un pircing?!” pregunta escandalizada Hermione.
Millie sonríe engreídamente antes de sacar de su bolsillo una especie de arte que lo coloca en su nariz. Luna aplaude fascinada.
“Te ves hermosa” dice Justin sin dudar.
“Gracias, Justin” responde Millie con una sonrisa preciosa.
El tejón se sonroja totalmente la cara. Draco golpea el pecho de Theo cuando este gruñe un poco.
"Celoso" le susurra.
"Me molesta que se acerque a Millie" responde de la misma manera "Ella es una dama que no debe de estar cerca de esas estupidas hormonas de tejón"
Draco rueda los ojos y le peñizca la mano, provocando que Theo se queje y todos los observen.
“¿Cuánto tiempo están juntos?” pregunta Neville mirando a Draco y Theo con ojitos curiosos que Draco no reconoce.
“Unos días después del suceso del Boggart” responde Draco con una sonrisa.
“¡Es verdad que derretiste un Boggart!” dice Ginny “¿Cómo es que no presumiste algo así?”
Draco se encoge de hombros.
“No dijiste una fecha” dice Ron curioso “Porque saben su fecha de aniversario ¿verdad? Mi madre siempre quiere asesinar a mi padre cuando este parece olvidarlo”
Draco frunce el ceño. Theo también parece estar pensando algo antes de maldecir.
“¿Lo sabes, Draco?” pregunta Theo resignado.
“Por Salazar, no lo sé” dice Draco.
“Solo ustedes pueden salir y no apuntar el día que comenzaron a salir” dice Millie con humor.
Theo y Draco se encogen de hombros sin darle mayor importancia, como la mayoría de cosas en su relación.
Siguen el recorrido. En un punto del recorrido aparecen Greg y Vincent con muchos dulces.
“Es aburrido” dice Greg “Blaise no nos quiere ni hablar y Pansy cuando está con Blaise solo tiene ojos para él”
“Vengan aquí. ¿Quiere escuchar sobre mis teorías sobre el cielo creando el color azul?” pregunta Luna.
Ambos Slytherin asiente emocionado. Los tres se sientan en el piso. Justin se une, quedando en el medio de ambos grandulones porque estos le dan su espacio y el camino se llena de la conversación de los cuatro.
Y luego, llega una lechuza. Ron y Harry se apresuran a abrir. El ave cargaba una jaula que tenía pegada una carta. La deposita en las piernas de Draco para nuevamente irse. Draco frunce el ceño.
La jaula tenía una cobaya.
Draco abre la carta y reconoce la letra de Dora.
Querido primo del demonio.
Sabes. No sé porque hasta ahora no renuncié a quererte de primo. Bueno, bromeo. Jamás te abandonaría, aunque fueras un criminal muy buscado.
¡¿Pero enviar a Sirius Black a mi casa en medio de la noche?! ¡¿Es que tú quieres que mi madre me mate?!
Tienes suerte que mi madre adora a Sirius o ahora estaría sin cabeza penando a tu alrededor.
En fin. Te escribo para decirte que mi madre estará dispuesta a ayudar con el caso. Ella pondrá una parte de su tesoro para pagarle el abogado. Te recomiendo que hables con la tía Cissy para que apoye también. Será un caso muy largo sin la rata como nuestra prueba fuerte.
La cobaya es para tu amigo pelirrojo. Sé lo que es perder una mascota de la noche en la mañana, así que le compré una cobaya antes de enviar la carta. Espero que pueda llegar antes de que se vayan de Hogwarts.
Con amor, Tonks.
Draco hace una mueca. Hablar su madre sobre Sirius.
Sí. Merlín y Salazar lo cuiden.
Draco mira una vez más a la cobaya y sonríe.
“Toma, Ron” dice Draco “Tu nueva mascota. Es una cobaya. Mi prima la compró para ti. Una forma de reponer a Scabbers”
El pelirrojo mira la jaula y sonríe. La toma antes de mostrársela a Crookshanks y Libra que descansaban en las piernas de Hermione.
“Miren, chicos” dice Ron “¿Qué opinan? ¿Es peligroso?”
Ambos felinos ronronean. Libra asiente satisfecha mientras Crookshanks comienza a acicalar a la gatita con cariño.
“no puedo creerlo” dice Millie abrazando al señor Bigotes “no mires, hijo mío. No es tu culpa que el gato de Mione haya robado a tu novia”
“¿Disculpa?” dice Draco con los brazos cruzados “¿Cómo que novia? Libra, ven cariño. Aléjate de esas malas influencias. Tu eres una dama. Si quieren tu mano, deben pedírmela a mí directamente”
“Amigo” dice Ron burlón “Que papá más celoso. ¿así fue como Nott consiguió tu mano?” pregunta para molestar.
“¿Nott habló con tu padre antes de salir contigo?” pregunta Harry con mucha curiosidad.
Theo parpadea antes de reír maliciosamente.
“Por supuesto, Potter. Eso es lo que hice” miente inflando su pecho. El gryffindor parecía estar pensando cosas que Draco no quería saber.
Draco rodó los ojos.
“Joder” dice Harry “Yo solo pude gritarle porque realmente estaba molesto por cómo estaba hablando de Hermione y Justin en vez de preocuparse por ti. No era justo y Draco hubiera hecho lo mismo, incluso si en ese momento estabas con Sirius” cuenta tranquilo y orgulloso, como si fuera una comptencia.
Draco frunce el ceño.
“¿Qué dijo mi padre de mis pollitos, Harry?” pregunta molesto.
“No importa” corta Theo “Potter reaccionó mucho mejor que yo” responde "y lo agradezco. Estaba más ocupado con Luna como para hacer algo y él lo hizo"
“Gracias, Nott” dice Harry con algo de sorpresa “Y perdón por cómo te estuve tratando. No fue respetuoso, ahora comprendo que no estuvo bien”
Todos miraron a Harry con sorpresa, incluyendo a Draco.
“Supongo que está bien” dice Theo tranquilo “igual no me quitabas el sueño como me tratabas”
“Theo” dice Draco.
“Sí, no importa. Igual me quería disculpar. No estuvo bien como actuaba” dice Harry con tranquilidad antes de mirar a Draco "Y ahora quiero hacer las cosas bien"
El silencio se trata de instalar. Ron hace algo al respecto.
“Lo llamaré Roll Weasley” dice el pelirrojo con orgullo para quitar el silencio.
“¿Roll?” dice Millie entendiendo el propósito “Que original”
“Gracias” responde Ron antes de fruncir el ceño al entender el sarcasmo “Hey, es un buen nombre. Parece un rollo de canela”
“Es encantador, Ron” dice Hermione con una melodiosa voz.
El pelirrojo se sonrojó por eso antes de asentir.
“Mi ratón se llama Cherry” dice Justin apuntando a su jaulita con orgullo “Y no parece una cereza, así que sí es un buen nombre”
Todos ríen por eso. Draco se acomoda mejor y continúan con el viaje.
Llegan al Anden 9 ¾ sin ningún problema. Draco baja con sus cosas. Quiere correr hacía su madre en cuanto la ve, pero una mano lo detiene.
“¿Realmente ayudarás con el caso de Sirius?” pregunta Harry dudoso.
Draco sonríe. Hechiza su baúl para tomar del brazo de Harry.
“Claro, cara rajada” responde “Tal vez puedan venir a la mansión. Hermione podrá leer todo lo que desee e iremos a buscarte si vuelves a escaparte por inflar a tus tías. Te recomiendo que lo hagas lo más rápido posible”
“Eso fue un accidente” dice Harry avergonzado “Realmente no quise hacerlo”
“Madre” dice Draco con una sonrisa “Saluda, Harry”
“Señora Malfoy, es bueno verla en mejores condiciones” dice avergonzado Harry Potter.
Narcissa Malfoy sonríe enternecida.
“Solo Narcissa, cariño. Un amigo de mi hijo siempre será bien recibido” dice la mujer.
“Sí, Narcissa. Gracias”
“Acá Harry Potter no me cree que lo voy a invitar a mi hogar ¿puedes creerlo, madre?” finge estar ofendido “Así que vengo a pedirte directamente permiso de invitar a Harry las veces que quiera”
Narcissa ríe enternecida al ver el sonrojo fuerte en el niño que vivió.
“Eso es mentira” dice avergonzado Harry.
“Claro, cariño. El señor Potter siempre será bienvenido a la mansión Malfoy” comenta Narcissa encantada.
“Listo, dudas despejadas. Vamos madre, Theo segura también te querrá despedir” dice Draco con alegría.
“Sí, creo que lo vi caminando junto a un elfo” comenta Harry incomodo.
“Nos vemos, cara rajada” se despide “No hagas tantas tonterías sin mí. Tal vez Hermione evite que te mate, pero sí recibirás un buen golpe de mi parte”
Harry hace una mueca recordando el puño de Draco ese día.
“Solo si no intentas arriesgar tu vida” dice para luego abrazar a Draco cuando este se quiere quejar “Gracias por todo, Draco. Realmente eres un ángel ten… tan”
“Ya, ya” dice Draco sin querer escuchar el resto “Nos vemos”
Harry y él se separan. Draco jala a su madre y esta se despide del niño que vivió para ir con Theo Nott, quien estaba escuchando el grito de su padre con la cabeza en alto.
“Theo” dice Draco sin acobardarse “Nos vemos” dice con tristeza.
Theo ignora la advertencia de su padre. Camina hacia él y Draco lo abraza.
“Solo dime si te hace algo. Iré con mi madre a sacarte de allí” le susurra.
“No te preocupes. Solo me enviará a un reformatorio vacacional. Estaré bien”
Draco se queda quieto. Mira al señor Nott con tanta rabia.
“No prohíben las cartas” le dice Theo antes de separarse “No vemos el próximo año”
Draco asiente.
“Tía Narcissa” dice Theo con una reverencia perfecta.
“Cuídate, cariño. Siempre eres bienvenido a la mansión” dice Narcissa con cariño.
Theo asiente.
Ambos Nott se desaparecen. Draco se siente amargo, pero no puede decir nada más.
Se van a despedir de Luna, quien abraza a su tía con cariño y emoción, siendo correspondida por una amorosa Narcissa, quien elogia el hermoso peinado de la niña y la niña le asegura que volverá a la mansión a conocer a Altair. Con Millie es mucho más escandaloso la despedida. La niña lo abraza con fuerza y le recuerda en mandar cartas.
Draco se siente decepcionado al notar que no alcanzó a despedirse de Justin, Hermione, Ron, Ginny, Greg y Vincent.
“Bien, Dragón” dice Narcissa extendiendo su mano.
“Madre” dice Draco tomándola “¿qué tan castigado estaría si te pido ayuda para el caso del tío Sirius?”
Narcissa se detiene. Lo mira ojos los ojos azules brillando de confusión.
“¿Qué dijiste?” dice pálida.
“Es una larga historia” comenta Draco incomodo.
“Son unas largas vacaciones, Draco Malfoy” comenta Narcissa “y él te secuestró”
“Madre, por favor” dice Draco cansado.
Narcissa parece querer responder a eso, pero solo inhala profundamente.
“Está bien, cariño. Solo dime las cosas como son y veremos cómo ayudar a Sirius, lo prometo”
Con esa promesa, ambos Black tomados de las manos desaparecen del Andén 9 ¾ para ir su hogar ancestral para saludar unas nuevas vacaciones de verano.
Continuará