Draco Malfoy y el año donde todo empezó a salir mal

Harry Potter - J. K. Rowling
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Draco Malfoy y el año donde todo empezó a salir mal
Summary
-Harry Potter ha muerto-gritó Voldemort.Draco Malfoy viaja al pasado mediante un peculiar giratiempo.¿Qué pasaría si regresar al año de Hogwarts donde todo empezó a salir mal?¿Qué pasaría si Draco Malfoy finge estar a lado de Voldemort para traicionarlo?Todo el mundo de Harry Potter pertenece a J.K Rowling.
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Gringotts y Profecía

El primer mes del verano se desvaneció en un parpadeo, lleno de días interminables dedicados a entrenar con Draco desde el amanecer hasta el anochecer

El primer mes del verano se desvaneció en un parpadeo, lleno de días interminables dedicados a entrenar con Draco desde el amanecer hasta el anochecer. Cada jornada revelaba un nuevo nivel de maestría en su magia, una evolución tan rápida que resulta inquietante. Está al borde de superarme.  

La verdad es que mi orgullo se resiente al recordar que ayer casi me desarma. Aunque acordamos tácitamente no utilizar los hechizos imperdonables, tuve una fuerte tentación de lanzarle un Cruciatus cuando me sonrió con una arrogancia desafiante, consciente de que estuvo a punto de vencerme.

—Eres mejor de lo que pensaba —murmuro con una mueca de desagrado.

Hoy, mientras camino hacia el comedor para el desayuno, me sorprende la solicitud de Draco de tener el día libre. Este pedido es inusual, ya que suele ser el primero en exigir que comencemos el entrenamiento. Algo en la atmósfera de la Mansión Malfoy me dice que hay algo más detrás de esta petición. 

Al entrar al comedor, me encuentro con una escena inesperada. Todos los Malfoy están presentes. Lucius y Narcissa observan a su hijo con miradas cargadas de preocupación, casi como si temieran su ira. No me sorprendería que este demonio rubio haya utilizado nuevamente un hechizo imperdonable en su padre. 

—Lucius, Narcissa —saludo mientras me siento al lado de Narcissa.

Mientras me sirvo huevos revueltos, me pregunto qué le habrán hecho a Draco para que albergue un odio tan profundo hacia su familia. Tengo curiosidad, pero sé que el joven no revelará nada, se ha convertido en un maestro del sigilo, digno del título de Príncipe de Slytherin.

El desayuno es interrumpido por la entrada apresurada del Sr. Crabbe.

—Mis disculpas por la llegada inesperada, pero nuestro señor me ha ordenado informar al joven Malfoy que debe presentarse en el Duelo de Nacimiento dentro de tres días en el Salón Principal de la Mansión —explica rápidamente.

—Allí estaré, señor Crabbe —responde Draco con una calma que no oculta la anticipación.

—Puedes retirarte, Crabbe —ordena Lucius con un tono autoritario.

—S-Sí, Malfoy —responde antes de darse la vuelta y salir del comedor.

—Aún tienes a alguien que te respete, padre —dice Draco con un tono cargado de sarcasmo.

—Draco, por favor, cálmate —susurra Narcissa con una mirada suplicante.

—Madre, deja de fingir. Sé quién es la verdadera responsable de todo el sufrimiento que he padecido. Mi padre solo acataba tus órdenes, ¿o me equivoco? —responde Draco con frialdad.

—Draco, no permitiré que hables a tu madre de esa manera. ¡Discúlpate inmediatamente! —reprende Lucius con voz amenazante. 

Draco se levanta con elegancia de la mesa y dirige una mirada helada a su padre.

—Dentro de unas horas, una lechuza traerá los documentos para mi emancipación. Es mejor que los firmes sin objeciones, o te desafiaré a un duelo dentro de tres días y te someteré a la mayor humillación de tu vida. 

Sin decir una palabra más, Draco se dirige hacia la salida con pasos decididos. Lucius y Narcissa se quedan inmóviles, incapaces de ocultar el enojo y desconcierto que las acciones de su hijo. 

Honestamente, también me encuentro perplejo por las decisiones de Draco.

—¿Qué le hicieron a Draco? —pregunto, tratando de mantener la calma.

—Ese no es nuestro hijo, Snape —dice Narcissa, mirando con reproche la dirección por la que se ha ido Draco.

—No es el hijo que criamos —declara Lucius.

—Es mejor de lo que era —afirmo desafiante.

Draco, con todas sus imperfecciones, ha evolucionado de una manera que desafió todas mis  expectativas. 

Salgo del comedor con pasos tranquilos, dirigiéndome a la sala de la Mansión

Salgo del comedor con pasos tranquilos, dirigiéndome a la sala de la Mansión. Hoy le he pedido a Snape el día libre para ir a Gringotts. A medida que avanzo por los pasillos, me cruzo con un grupo de jóvenes Slytherin encabezados por el Sr. Goyle. Entre ellos están mis mejores amigos Pansy, Blaise y Theo, pero, por el momento, me falta la valentía para enfrentarlos. Decido ignorarlos y continúo mi camino hasta la sala, donde me dirijo hacia la chimenea para utilizar la red flu.

Al llegar al recibidor de Gringotts, encuentro que el lugar sigue igual que en mi vida anterior, un gran vestíbulo lleno de magos de sangre pura que deambulan despreciando los servicios del banco, mientras los duendes ocultan su repulsión y frustración. 

Camino hasta el primer duende que veo, y por casualidad es el mismo que estuvo en cautiverio con Luna Lovegood en el sótano de la mansión.

—Señor Malfoy —saluda el duende al notar mi aproximación.

—Griphook, que tu oro fluya —respondo con una leve reverencia, en señal de saludo.

—Que tus enemigos caigan rendidos a tus pies, Heredero Malfoy —Griphook responde con una mezcla de sorpresa y duda. 

—Necesito hablar contigo en un lugar más privado —digo sonriendo mientras toco la insignia en forma de ave que llevo en la túnica— Mi pago por tus servicios será más que satisfactorio.

La mirada de Griphook se vuelve fría al reconocer el origen de la insignia, que perteneció al Rey Duende antes de ser robada por los magos. Se da la vuelta y hace una seña para que lo siga.   

Mientras lo sigo por los pasillos, trato de pasar desapercibido, aunque es imposible. Mi cabello rubio platino destaca en la oscuridad del pasillo, y aunque me lo he dejado crecer como lo tenía en mi tercer año, es poco sofisticado. Sin embargo, representa la libertad que pronto tendré.

Griphook abre la puerta de una oficina, dejándome entrar primero y cerrándola rápidamente detrás de él. El interior es elegante, adornado con obras de arte en las paredes y vitrinas que exhiben partes de cuerpos de diversas criaturas, una vista ciertamente inquietante.

—Elegante oficina, Griphook —comento tratando de mantener la cortesía a pesar del ambiente perturbador.

—Gracias. Por favor, tome asiento, Heredero Malfoy —dice mientras se sienta detrás del escritorio— ¿Qué trámite necesita?

—Deseo emanciparme —explico con seriedad, tomando asiento frente a él.

—Eso no es posible. Se requiere que el núcleo mágico crezca al tamaño de un adulto, así como el permiso de tus padres, si se da el caso —dice con un tono de fastidio, como si estuviera hablando con un niño caprichoso.

—Perfecto, empieza los trámites para mi emancipación —respondo con una sonrisa de arrogancia al notar la sorpresa en sus ojos.

—Permíteme un momento —se levanta rápidamente y abre una caja fuerte detrás del escritorio.

Desvío la mirada, considerándolo una falta de educación observar a un duende mientras abre sus secretos.

Griphook regresa con una expresión de satisfacción, llevando consigo una esfera de cristal de un brillante color dorado. La coloca sobre la mesa y me mira con una mezcla de emoción y anticipación.

Lo observo con sospecha.

—Heredero Malfoy, coloque sus manos sobre la esfera. Esta medirá el color de su núcleo mágico. Si se vuelve amarillo, significa que tiene un núcleo normal, y no será posible tramitar lo solicitado. Si se vuelve púrpura, indica que tiene un núcleo de edad adulta y podrá continuar con el trámite —explica.

—Entiendo —coloco mis manos sobre la esfera.

La esfera comienza a cambiar de color, pasando lentamente de amarillo a púrpura. Escucho un murmullo de sorpresa por parte del duende cuando el color púrpura se transforma en negro. 

—¿Qué significa el color negro? —pregunto, sintiendo una punzada de preocupación por primera vez desde que viajé en el tiempo.

—El color negro indica que serás un mago extremadamente poderoso —responde Griphook—. Sin embargo, también significa que estás destinado a no ser amado.

Maldita sea.

Como si la esfera hubiera escuchado las palabras del duende, cambia nuevamente. Un dragón de humo negro emerge de la esfera, con ojos esmeralda que parecen observarme intensamente. Alejo mis manos de la esfera rápidamente, sintiendo el sudor frío correr por mi frente.

Es Harry Potter. No sé cómo explicarlo, pero todos mis sentidos me están advirtiendo que él es más peligroso que Lord Voldemort.

—¡E-Es maravilloso! —exclama Griphook, levantándose abruptamente de su asiento y haciendo que algunos libros caigan al suelo.

—¿Qué sucede, Griphook? —pregunto, tratando de recuperar la compostura.

—Heredero Malfoy, solo dos magos han hecho que la esfera se vuelva negra —responde el duende con un tono de reverencia—Dumbledore y el-que-no-debe-ser-nombrado. Ambos son magos poderosos, pero desdichados. Ninguno ha conocido el amor. Es un destino cruel, si me preguntas.

—Gracias por el ánimo —respondo con sarcasmo.

El duende, visiblemente avergonzado, me extiende una carta. La tomo con cautela.

—Es una profecía escrita por un duende con visión hace más de mil años —informa Griphook.

En el sobre de la carta está escrita la frase: "Eres el tercer mago poderoso, pero solo eres bienvenido si es tu segunda oportunidad."

Abro la carta con nerviosismo, preparándome mentalmente para cualquier revelación.

En tiempos de desesperación, cuando el poder más se necesite, la esfera brillará en un oscuro negro

En tiempos de desesperación, cuando el poder más se necesite, la esfera brillará en un oscuro negro.

Cuidado, gran mago, pues en una vida no hallarás la felicidad.

En la segunda oportunidad, la luz se hará visible, pero solo si logras olvidar tus sentimientos y temores.

En el corazón de la oscuridad, se oculta tu mayor debilidad.

Esa debilidad, propia del villano, revela al verdadero héroe.

Deberás volver a elegir, pero esta vez, hazlo sabiamente.

¿Elegirás el amor o el poder?

¿La luz o la oscuridad?

El segundo en todo, la segunda vida, la segunda decisión,

Será el tercero quien determine el destino.

El destino del villano está destinado a cambiar, pero para ello, debes aprender sobre el amor.

Aprende a amarte a ti mismo antes de intentar amar a otros.

La verdadera fuerza radica en el equilibrio entre el poder y el corazón. Solo así, el futuro podrá ser esculpido según la voluntad del elegido.

 Solo así, el futuro podrá ser esculpido según la voluntad del elegido

Estoy jodido. 

Hasta aquí llegue 😓

 

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