
Shigeru x Junkichi
-Ya tengo listo mi manuscrito.
Shigeru se preguntó si estaba soñando. Junkichi nunca antes había entregado un manuscrito a tiempo.
-¿Qué poder le diste ahora al protagonista?
-Ninguno.
Definitivamente estaba soñando. Era imposible que Junkichi hubiera entregado su historia a tiempo y no hubiera recurrido a su recurso de siempre de darle mas poderes y habilidades a su personaje principal.
-¿Qué fue lo qué hiciste?
-¿Recuerdas el viajero rubio que a veces pasa por aquí? Me dijo que tal vez para obtener inspiración debía preguntarle a las personas que es lo que buscan en una historia y eso hicimos y gracias a eso descubrí que lo que esta de moda es el romance, las personas quieren ver a un personaje enamorarse y quieren que sus escenas juntos sean tanto románticas como pasionales y no solo eso, resulta que desde que la gran sacerdotisa Yae Miko publicó una novela que narra la historia de amor de una chica mitad pez con su antigua enemiga una mujer mitad cuervo el romance con especies no humanas ha tenido un gran auge y eso es lo que la gente de Inazuma quiere leer.
Shigeru pensó que tal vez hubiera sido mejor si Junkichi hubiera hecho más poderoso a su protagonista. Con miedo tomó las hojas de su mano y comenzó a leer.
El capítulo narra como cuando cae al agua durante una pelea y casi muere ahogado es rescatado por un hombre mitad pez quien lo lleva a su cueva submarina y le salva la vida. Los días pasan y ambos se enamoran. Se declaran su amor y todo iba bien hasta que llegó a la escena de sexo. No es que su manera de escribir fuera mala pero todo era biológicamente incorrecto, por ejemplo escribió que las sirenas no tienen pene y eso no es cierto.
-Es bastante obvio que jamás has conocido a una sirena.
-Hey, no seas tan criticón. Lo intente pero es muy difícil encontrar a una sirena. Primero que nada en la actualidad existen muy pocas sirenas y la mayoría de ellos viven entre humanos y no puedo preguntarle a cada habitante de aquí si es una sirena. Si hubiera hecho eso no hubiera podido entregarte a tiempo el manuscrito. Además, ¿desde cuando eres experto en sirenas?
-De hecho si soy experto porque soy uno.
Junkichi lo miró sorprendido.
-¿Y por qué no lo dijiste antes? Me hubieras ahorrado mucho tiempo y esfuerzo.
Shigeru se masajeó las cienes aunque tenía que reconocer que se aliviaba que Junkichi no hubiera reaccionado con aversión o asco como muchas persona lo hacían.
-Sabes, dejando de lado la escena imposible de sexo el resto del manuscrito no esta nada mal. De hecho, tengo que felicitarte porque has mejorado y si mejoraras esa parte podría incluso decir que es tu mejor trabajo hasta la fecha y tu público estaría muy satisfecho.
Junkichi sonrió muy contento por la crítica positiva que recibió, era extraño que le dijeran algo bueno.
-Si estas dispuesto podría enseñarte como es en realidad.
Junkichi se quedó callado. No entendía porque Shigeru le hizo una pregunta tan inofensiva con tanta timidez. Su rostro estaba enrojecido y el movimiento de sus manos delataba su nerviosismo.
-Si no estas dispuesto esta bien, olvidaremos que hice esta pregunta y continuaremos con nuestra relación profesional.
Con eso Junkichi entendió a que se refería realmente. No le estaba ofreciendo enseñarle la teoría, le ofreció mostrarle todo. Junkichi lo pensó un rato antes de responder.
-Conozco un hotel.